Bueno espero les guste esta historia. Mas adelante tendra un poco de lemon. Tardare en subir el siguiente capitulo en esta pagina, pero en mi perfil les deje un link a mi pagina en devianArt ahi he subido hasta el capitulo 17. Ademas tengo mas historias alli! Los invito a que me visiten!
Abrió la lata de refresco y la llevo a su oído; amaba oír la efervescencia era uno de sus sonidos favoritos podía pasar largo rato escuchando las burbujas gaseosas dispersarse dentro de la lata. Camino hacia la ventana y abrió las cortinas, el aire se colaba por las rendijas alborotando su rosada cabellera dio un sorbo a su bebida. Las calles de parís eran hermosas y más en esa época del año en la que las hojas caían cubriendo por completo el asfalto, hojas que finalmente se perdían volando con el pasar de los autos, y que al mismo tiempo le traían tantos recuerdos… tantos recuerdos sobre el… ¿Quién lo hubiera pensado? ¿Cuántos años habían pasado?
Dos, no, tres años han pasado desde que se marcho a Paris –decía una voz fría – No entiendo que hace con ese idiota –se quejaba al contemplar las imágenes del televisor que mostraban a una pareja muy famosa en el mundo de la moda. Abruptamente apago el televisor, casi partiendo el control remoto en dos de la fuerte presión que ejerció en el botón para poder apagarlo –
¿Cuál es tu problema Sasuke? ¿creí que ya no te importaba? Vamos enciende el televisor estaba interesante el reportaje –
Suigetsu te invite a tomar un trago no a ver la televisión –
Siete años atrás…
¡Maldición voy a llegar tarde! –se quejaba una hermosa pelirosa, mientras corría a toda prisa. Estaba muy agitada, pero al ver las rejas del instituto sonrió aliviada y al mismo tiempo comenzó a correr con más fuerzas. Al pasar por las puertas habia un letrero que se leía así: "Instituto Académico Mizushima". Antes de entrar a uno de los edificios se detuvo y se llevo las manos a la cabeza. – ¡con un carajo olvide imprimir mi tarea! –se dio la media vuelta y comenzó a correr en dirección a la biblioteca, la cual para su suerte encontró rebosante de alumnos –Genial ahora ¿Qué diablos voy a hacer? –mientras se quejaba alcanzo a ver que una computadora se desocupaba, pero al tratar de llegar a ella antes de que alguien la ocupara su zapato se salió. Cuando se disponía a recogerlo una mano se encontró con la suya justo encima de su zapato. Volvió la vista hacia arriba y al ver de quien se trataba se sonrojo –Itachi eres tu … muchas gracias –apenas logro articular cuando Itachi tomo su pie para después colocarle el zapato –
No hay de que Sakura –contesto con una sonrisa – Me imagino que debes llevar prisa.
¡La tarea! –grito Sakura dándose cuenta de que al ver a Itachi habia olvidado a lo que iba – lo siento es que olvide imprimir mi tarea y ya sabes cómo es Kakashi-sensei.
Supongo que debe seguir siendo igual de exigente, a pesar que desde hace cuatro años deje de ser su alumno –
Sí, creo que se ha vuelto peor, pero es una suerte para ti ya no llevar clases con él.
En verdad lo es. Mira se ha desocupado aquella maquina, te acompaño no vaya a ser que esta vez tropieces –caminaron juntos y se sentaron frente a la maquina. Sakura inserto su USB y comenzó a buscar el archivo; el cual pronto tuvo en sus manos – ¿Qué harás hoy por la tarde?
Amm… aun no tengo planes, no es verdad si los tengo. Hare otra sesión fotográfica –contesto Sakura dándole un vistazo a su reloj el cual marcaba que la clase ya estaba casi por terminar – ¡Oh no! Lo siento Itachi debo irme si no, no alcanzare a entregarla – Mientras corría Itachi sonreía ampliamente esa niña le parecía adorable. Debía lograrlo esa maldita tarea valía la mitad de la calificación del curso y si no la entregaba no pasaría la materia. Y no pasar la materia significaba solo una cosa… dejar el modelaje. Al abrir la puerta del salón todos la observaron con una risita disimulada. Trato de no prestarles atención y se sentó junto a su mejor amiga –
Hey frentona, ¿Por qué tardaste tanto? –pregunto con un murmullo –
La sesión de fotos de anoche termino a las dos de la mañana.
¡Haruno! –diablos, sería mejor prepararse para el largo sermón sobre la puntualidad que Kakashi sensei estaba por darle –
¿Si, Kakashi-sensei?
¿Hiciste la tarea? –pregunto mientras se ponía de pie para escribir algo en el pizarrón –
Si… -contesto temerosa preparándose para lo peor, probablemente no se la aceptaría –
Bien, déjala sobre el escritorio –ante la expresión de sorpresa de sus compañeros e incluso la suya, se puso de pie; dejo las hojas sobre el escritorio y regreso a su lugar, pero justo antes de sentarse; un molesto timbre anuncio que la clase habia terminado. Tomo sus cosas y salió del salón junto con su amiga –
¿Puedes creerlo? No hubo sermón –dijo la pelirosa –
Y eso no es todo, ni siquiera encargo tarea. Y créeme que no hicimos nada en la clase, Kakashi-sensei se limito a leer un libro mientras cada quién hacia lo que quería. Dicen que por fin Shizune sensei acepto salir con el–
¿En verdad?
Si, lo juro. Supongo que eso lo tiene de buen humor ¡Mira allá esta Temari! recuerda que quedamos en almorzar juntas.
Chicas ¿Qué tal estuvo el día? –pregunto Temari –
Sin contar que no llegue a ninguna de mis clases, bueno solo a la ultima y que me tope con Itachi en la biblioteca. Creo que fue un buen día –contesto sonriendo la pelirosa –
¿Qué les parece si vamos por un café? –pregunto Ino –
Vamos –contesto Sakura –
Aquí tienes Temari, descafeinado para ti; mocha latte para Sakura y el delicioso cappuccino para mí –dijo Ino mientras se sentaba en la mesa –
Acaso ¿no es grandioso que la preparatoria y la universidad estén en el mismo campus? –decía Temari –Es lo mejor porque así podemos pasar más tiempo juntas.
Sí, eso es lo mejor –decía Sakura – Menos mal que el próximo año Ino y yo pasaremos a la universidad, aunque ninguna de las dos hemos decidido que estudiar –
Bueno aun nos quedan seis meses –aclaro Ino – Algo se nos ocurrirá, ah por cierto olvide decirles que me hablo Tsunade. Dice que una compañía quiere que las tres participemos en un comercial de uno de sus productos.
Yo insisto, jamás tendremos una mejor manager –comento Temari – pero en estos momentos no quiero hablar de ello. Sakura aun no nos has dicho como van las cosas con tu novio.
¿Novio? – rio nerviosamente mientras le daba un sorbo a su café –
No te hagas tonta tienes tiempo saliendo con Itachi técnicamente eso lo hace tu novio –dijo Ino burlonamente –
Solo hemos salido un par de veces al cine y al centro comercial. No hay nada entre nosotros somos amigos.
Haber Sakura ¿Cuánto tiempo llevas en esta preparatoria? –pregunto Temari –
Ummm…dos años, seis meses y cinco días.
Y ¿Cuánto tiempo llevas enamorada de Itachi? –cuestiono Ino –
Dos años, seis meses, cuatro días y supongo que tres minutos –contesto apenada –
¡Lo ves! Díselo de una vez. No pierdes nada, es obvio que él tiene interés en ti, después de todo ya han salido en algunas cuantas citas. –decía Temari cuando una multitud de sollozos se escucharon en la cafetería –
¿por que lloran como locas? ¿Quién murió? –pregunto Ino –
No puede ser me tienen harta, así han estado todo el día. Estoy segura que lloran por que Sasuke se va.
¿Sasuke? –pregunto Sakura – Y el ¿Quién es?
Sasuke Uchiha ¿no sabes quién es? –Sakura movió la cabeza de lado a lado en negación – Llevas tanto tiempo enamorada y embobada en Itachi que ni siquiera estabas enterada de que tenía un hermano menor–
¿hermano? –exclamaron sorprendidas Sakura e Ino –
Si, actualmente está cursando el segundo año en la universidad, pero al parecer se marcha a estudiar a Nueva York… algo de negocios financieros como saben sus padres eran dueños de uno de los bancos más importantes.
¡Espera! –la interrumpió Sakura – ¿no me digas que… Diablos ahora entiendo porque me insistes con lo de Itachi. cuando antes no le habías dado tanta importancia a que yo no confesara mis sentimientos. El también se va a ir ¿no es así? –pregunto en voz baja –
Me temo que sí, es por eso que debes confesar tus sentimientos. –le dijo Temari –
Supongo que tienes razón –decía Sakura con tristeza mientras rebuscaba algo en su bolso, cuando por fin sus dedos se toparon con la fotografía sonrió. Esa foto se la habían tomado semanas atrás cuando la feria habia llegado a la ciudad. La contempló por unos segundos y se puso de pie –se lo diré ahora mismo – Sus amigas la miraban sorprendida y acto seguido Ino corrió hacia el mostrador y tomo tres vasos para llevar se los dio a sus amigas quienes vaciaron sus bebidas dentro y salieron a toda prisa –
Por fin tomaste valor frentona –decía Ino emocionada mientras caminaban – bien y ¿Dónde lo buscamos?
Debe estar en la biblioteca siempre está allí hasta las cuatro de la tarde –respondió Sakura cuando de repente una corriente de aire le arrebato la foto que sostenía en la mano. Como desesperada comenzó a correr detrás de ella; odiaba que cuando estaba a punto de atraparla se escabullía de sus dedos como si no quisiese volver con ella. No iba prestando atención por donde caminaba y por seguir con atención los movimientos de la fotografía; no se dio cuenta de cómo paso, pero al sentir la fotografía entre sus dedos choco contra una persona vaciando en las ropas de este el café que estaba tomando.
Ten más cuidado niñata inepta –le reclamo un joven de aspecto frívolo y orgulloso –
¿inepta? Tú eres el inepto ¿Por qué si ves que alguien va a chocar contigo simplemente no te haces a un lado? – pero el joven ni siquiera la miro, pues estaba prestando atención a una fotografía que estaba justo bajo su pie.
¿Por qué tienes una foto de mi hermano? –pregunto con recelo –
