Bien.. esto se me vino a la cabeza al recordar un Viernes Tranquilo con mis amigas... y después de conseguir permiso de mi histéricamente loca Parabatai lo termine rápido..!=D y ahora tengo el gusto de publicar mi primer Fic de Cazadores de Sombras..! Espero les guste y les saque unas cuantas risas..!=D

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Un Viernes tranquilo con Magnus Bane..!

-No creo que funcione- decía Alec mientras él, Jace e Isabelle caminaban por uno de los enormes corredores del Instituto buscando a sus padres.

-Ya no seas tan negativo, Alec- le dijo Jace dándole un suave golpe en el hombro- nada perdemos con preguntar.

-Y si no funciona siempre podemos pedirle a Magnus que nos ayude a escapar- dijo Isabelle adelantándose para abrir la puerta de la biblioteca.

-Nada de escapar, si estamos pidiendo permiso es por que la vez pasada...

-Ya, shhh, no eches la sal- calló Jace a Alec mientras Isabelle abría la enorme puerta de la biblioteca.

-Hola, mamá- dijo Isabelle entrando en la biblioteca, donde sus padres leían en silencio, su padre sentado en un sillón en una esquina y su madre sentada detrás del enorme escritorio que solía pertenecer a Hodge.

-Hola, chicos- respondió Maryse sin levantar la mirada del libro. Robert levanto la mirada un segundo y se fijo que no era solo Isabelle la que había entrado, Jace y Alec estaban detrás de ella. Le tomo menos de medio segundo deducir lo que pasaba. Algo querían esos tres y habían unido fuerzas para convencer a mamá gallina.

-Madre, queríamos pedirte algo...- siguió Isabelle echando una mirada sobre su hombro buscando apoyo moral con Jace y Alec. Ambos chicos asintieron dándole ánimos, pero Maryse no dejo que la chica continuara.

-No- fue todo lo que dijo la mujer antes de dar la vuelta a la pagina del libro que leía.

-Pero no hemos preguntado nada- dijo Jace.

-Oh, ya se que preguntaran, y no, nada de salir en un "Viernes Tranquilo" con Magnus Bane- dijo Maryse mirándolos al fin.

-Pero mamá...

-No me hagas recordarte el estado en el que llegaste de ese "Viernes Tranquilo", jovencita- interrumpió Maryse a Isabelle, la chica bajo la mirada, no por que se sintiera mal por haber llegado sin un tacón e intentando caminar cual modelo en pasarela por la entrada como si nada pasara, no, bajo la mirada para ocultar la sonrisa que se le había formado al recordar como jodidos había terminado rompiendo sus tacones de plata.

-Pero Magnus solo nos invito a tomar una cerveza- dijo Alec dando un paso al frente.

-El viernes pasado fueron a las seis de la tarde a tomar "un café", un café, Alexander, y regresaron al Instituto la mañana del sábado! Y aun no me respondes en que arbusto te metiste que traías una rama enorme saliendo por la parte trasera de tus pantalones!- exclamo Maryse, los tres jóvenes se miraron entre si bajando la mirada ocultando las sonrisas al recordar al "Pavo Real Lightwood".

-Pero llegamos al Instituto a salvo- dijo Jace.

-Arrastrándote, Jonathan! Tengo que recordarte que duraste 7 minutos en subir los diez escalones del vestíbulo a rastras?!- exclamo Maryse.

-Haha! No recordaba eso- murmuró Robert sin poder contener una risa. Maryse lo miro con ojos entrecerrados y los tres adolescentes soltaron risitas también. Robert se apresuro a aclararse la garganta y volver a esconder el rostro detrás del libro.

-Quiero verte cargando a estos dos de nuevo a sus habitaciones, Robert- dijo Maryse señalando a Jace y Alec, los chicos se miraron, no recordaban que su padre los hubiera llevado a dormir.

-Oh no, esa aventura solo se hace una vez en la vida- dijo Robert negando efusivamente con la cabeza.

-Entonces deja de apoyarlos!- le dijo Maryse antes de volver a sus hijos- no salen hoy.

-Mamá!- se quejo Isabelle dando una patada en el suelo tal cual niña pequeña.

-Nos comportaremos, lo prometemos- dijo Jace poniendo carita de ángel indefenso.

-Nos quedaremos en el loft de Magnus a dormir esta vez- dijo Alec casi haciendo un puchero.

-Quieres decirme que la vez pasada que llegaron a las nueve de la mañana no durmieron en el departamento de Bane?!- exclamó Maryse alzando las cejas. Alec miro a ambos lados implorando ayuda a Jace e Izzy, pero ambos miraron hacia otro lugar. La verdad era, que la vez pasada ni siquiera habían dormido- es todo, no van.

Los tres adolescentes Lightwood suspiraron derrotados y emprendieron su camino arrastrando los pies hacia sus habitaciones. Maryse negó con la cabeza mirando a Jace hasta que cerro la puerta tras él. No podía creer a sus hijos. Sabía que Magnus Bane era de confianza, los había ayudado bastante durante esa batalla contra Valentine, había ayudado a Alec cuando lo había mordido aquel demonio, incluso le había dado asilo a Jace un par de días. Pero aun así no se arriesgaría a que sus cachorros llegaran en tan deplorable estado nuevamente.

-Y tu, no me apoyes tanto- dijo Maryse mirando sarcásticamente a su marido, quien se limitó a soltar una risita.

-Son jóvenes, déjalos que se diviertan- dijo pasando la pagina, pero en realidad ya había dejado de prestar atención a la lectura desde que sus hijos habían entrado en la biblioteca.

-Los dejo nada! Los viste como llegaron el sábado pasado- Robert no pudo evitar una carcajada, vaya que los había visto, oído y hasta olido. Los tres jóvenes Lightwood habían llegado hechos un desastre, en especial los dos varones.

-.-.-.-.- Flash-Back -.-.-.-.-.-

-No han llegado, Robert!- dijo Maryse entrando nuevamente en su habitación, eran las siete de la mañana y su marido apenas estaba despertando. Ella ya llevaba su ropa formal de siempre y había recorrido las habitaciones de sus hijos una por una para asegurarse de que habían regresado sanos y salvos a casa, cosa que no había pasado.

-Estoy seguro que se quedaron en el departamento de ese brujo, tranquila- dijo Robert estirándose en la cama. Maryse negó con la cabeza y se dirigió a la ventana, casi podía ver la entrada principal.

-Llevan toda la noche fuera- siguió Maryse.

-Creo que están mas seguros toda la noche fuera con Magnus Bane que toda la noche fuera cazando demonios- dijo Robert levantándose de la cama y dirigiéndose al baño.

-Haz escuchado lo que se dice de ese brujo, Robert- lo regañó Maryse, Robert ya había entrado al baño y cerrado la puerta, pero seguía escuchando a su esposa.

-Aun así ha sido de mucha ayuda y sabemos que cuida bien- respondió Robert con la voz amortiguada por la puerta. Maryse se acerco a la puerta del baño de dos grandes zancadas.

-Estoy segura de que él no se considera responsable por nuestros hijos- siguió Maryse cruzándose de brazos recargada en la pared junto a la puerta.

-Ya se que no es una niñera, pero si no quisiera pasar tiempo con ellos, no los hubiera invitado en primer lugar- dijo Robert antes de abrir la puerta y salir del baño. Seguía vistiendo solo su pantalón negro de pijama, pero ya traía el rostro lavado y se había medio acomodado el cabello.

-Aun así, quien dice que pasaron toda la noche con...

-Aaaaahhhh!- el grito de ayuda de Max los hizo dar un brinco y salir corriendo de la habitación.

-Max?!

-Max!- gritaban ambos padres corriendo hacia el origen de todo el ruido, se escuchaban objetos caerse, risas tontas y a su hijo pequeño forcejear contra alguien.

-Suéltame! Déjame!- al girar para llegar a las escaleras del vestíbulo, ambos patriarcas Lightwood se detuvieron en seco al ver la escena.

-Esto no puede ser cierto- dijo Maryse cubriéndose el rostro con una mano, frustrada. Robert simplemente se cruzo de brazos y alzo una ceja.

-Mamá! Papá! Ayuda!- gritó Max mirando a sus padres en lo alto de la escalera. El pequeño Lightwood, aun en pijama, había bajado por un par de galletas antes de que su madre preparara el desayuno, pero en el camino había escuchado el desastre de metal que había hecho su hermano mayor en el vestíbulo y había ido hacia ahí. Gran error. Ahora se encontraba aprisionado por los brazos de Jace, recibiendo ebrios abrazos y besos por parte de su hermano adoptivo.

-Que lindo eres! Lo sabes, verdad? Y hasta hueles a bebé- decía Jace mientras abrazaba a Max y besaba su cabeza oliendo su cabello.

-No soy un bebe!- se quejó Max empujando lo mas fuerte que podía a Jace.

-Tu sabes que eres mi Parabatai miniatura- decía Jace mientras apretaba a Max contra el pecho. El niño manoteaba y pataleaba, pero no había modo de poder contra la fuerza del mayor.

-Mamá! No puedo... respirar...

-Ya basta, Jonathan, deja a tu hermano!- exclamó Maryse bajando dos escalones con paso firme.

-Mamá!- exclamó Jace mirando a Maryse, de la sorpresa medio soltó a Max, quien corrió inmediatamente a esconderse detrás de su padre- no! Espera, no huyas! Déjame amarte!

-Amar es destruir- le recordó Isabelle, al parecer reaccionando de su mini estado de inconsciencia sentada en un sillón.

-Demonios!- dijo Jace asumiendo posición fetal al pie de la escalera.

-Buenos días, mamá, buenos días, papá- dijo Isabelle en un tono ebriamente educado, lo que provoco que sus padres alzaran una ceja en su dirección.

-Buenos días, hija- dijo Robert mirando como Isabelle, con uno de sus altísimos tacones roto, intentaba caminar con toda normalidad hacia la escalera junto a Jace. La chica tenía la espalda derecha, si, pero estaba de punta en el pie sin tacón y caminaba con un extraño sube y baja cada que cambiaba la altura de sus pisadas. Robert hacia muecas intentando no reír, Izzy de veras se tomaba su papel de sobria en serio, a pesar del despeinado cabello y los ojos medio cerrados.

-Sigues ebria- aclaró al fin Maryse con ojos entrecerrados.

-De acuerdo me descubrieron- rió tontamente Isabelle encorbandose al fin.

-Créeme, no fue difícil- le dijo Robert aguantando la risa. Izzy se inclinó hacia Jace para ver si estaba bien, no debió de haberle dicho eso.

-Se puede saber... *sonido de metal cayendo* en que diablos... *sonido de metal cayendo* estaban pensan... *sonido de metal cayendo* Alexander! Por el Ángel!- exclamó Maryse mirando a su primogénito. Alec intentaba poner las espadas, hachas y lanzas que decoraban una de las paredes del vestíbulo, en su lugar, pero cada que volvía a poner una en donde iba, otras dos se caían. Él parecía no notarlo y simplemente seguía agachándose y levantando cosas para después tirar mas. Robert corrió hasta su hijo para evitar que se lastimara. Max cambió hacia la protección de su madre.

-Ven acá, Alec- dijo Robert quitándole la espada y la lanza que sostenía en sus brazos, y cuando los brazos de su hijo mayor quedaron libres pudo ver lo que había debajo de la chamarra negra gastada típica de Alec- que demonios traes puesto?!

-Magnus, te gusta?- fue la respuesta de Alec mientras se quitaba la chamarra. Robert dejo a un lado las armas mientras cerraba los ojos negando con la cabeza. Maryse se dio una palmada en la frente y Max soltó una risita, ganándose una severa mirada por parte de su madre. Alec traía puesta una camiseta de lycra sin mangas y color azul cielo. La camiseta se le pegaba al cuerpo y le llegaba hasta el ombligo, y justo en medio del pecho, hecho con lentejuelas amarillas y brillantes, estaba el diseño de un pato. Un patito feliz con el pico abierto y enormes ojos azules.

-Se puede saber que hechizo te lanzó para que te dejaras poner eso?- preguntó Robert sobándose la frente con la mano.

-Es que Jace quemó mi camisa negra, y no tenia nada mas que ponerme- explicó Alec tambaleándose hacia un lado, Robert se movió rápido para detenerlo y que no cayera sobre la pila de armas.

-Como que la quemó?!- exclamó Maryse volviendo su mirada hacia su hijo rubio... que ahora luchaba con Isabelle- niños!

-Déjame!- exclamaba Jace cubriéndose la cabeza con los brazos, quería seguir en posición fetal sumido en su fingida miseria, pero Izzy lo había tomado de un pie y tiraba de él intentando que se parara.

-Ya basta! No seas simple!- decía Isabelle tirando fuertemente de la bota de Jace.

-Isabelle, suelta a tu hermano!- la regaño Maryse soltando un largo y profundo suspiro, esto era demasiado.

-Párate, Jace! No puedes seguir miserable por siempre por culpa de un pájaro!

-No era un simple pájaro! Era un halcón!- respondió Jace al fin quitando sus brazos y tirando su pierna para que Izzy lo soltara. Entonces todo pasó rápido, la bota de Jace cedió y se salió del pie. Isabelle salió disparada hacia atrás con todo y bota, Jace también se tambaleó hacia atrás y se dio en la cabeza contra un escalón.

-Jace!- exclamó Maryse acercándose a él y arrodillándose a su lado, aparentemente no le había pasado nada, el alcohol era buen anestésico. Jace le sonrió.

-Izzy, arriba- dijo Robert ayudando a su hija a ponerse de pie. La chica se mantuvo en pie, aun con la bota de Jace en la mano, se la había traído con todo y calcetín. El sonido de metal cayendo estrepitosamente hizo que Robert se girara- Alexander, por Raziel! Ya te había quitado de ahí!

-Jace, estas bien?- preguntó Maryse ayudando a su hijo a sentarse.

-Estoy perrrrfecto- dijo Jace sonriendo bobamente.

-Isabelle, dame la bota, se la pondr... Isabelle!- exclamó Maryse al ver que Izzy había logrado atrapar a Max.

-Dobby! Sabía que Simon mentía! No estas muerto!- Maryse se levantó para ayudar a su hijo menor, Izzy lo apretaba contra su pecho fuertemente, el chico se retorcía en busca de aire.

-Isabelle, tu hermano...

-Dobby! Toma! Eres libre!- dijo Isabelle entregándole el calcetín de Jace a Max.

-Asco!- gritó el niño lanzando la apestosa pieza de ropa lejos de él.

-Isabelle, ven aquí- dijo Maryse tomando a Isabelle por el brazo, sería mejor dormirlos a todos y que el caos terminara. Escuchó mas metal cayendo y no quiso ni voltear a ver a Alec, solo escuchó quejidos y a Robert maldiciendo por lo bajo.

-Eso dolió- dijo Max mirando a su padre y a Alec, quienes ya se acercaban a la escalera.

-Que diablos...

-Sentía que algo me picaba- dijo Alec, Maryse alzo una ceja cuando vio que Robert sacaba una enorme rama de la parte trasera de los pantalones de Alec, causando que un ataque de cosquillas le recorriera la espalda al ojiazul y casi cayera al suelo al retorcerse involuntariamente por la sensación. Robert rodó los ojos y pasó un brazo de Alec por sus hombros, ayudandolo a sostenerse.

-Max, a tu habitación- ordenó Maryse, no quería que siguiera el mal ejemplo de sus hermanos algún día.

-Pero mamá!- se quejó el chico, se estaba divirtiendo de lo lindo mirando a sus hermanos así.

-Huye antes de que vuelvan a atraparte, Dobby- le dijo Robert y el pequeño pareció pensarlo mejor. Salió corriendo cuando Isabelle giraba la cabeza para mirarlo.

-Tengo a Isabelle, encárgate de ese par- dijo Maryse, entonces Isabelle se cruzo de piernas.

-Necesito hacer chiz- dijo respirando profundamente.

-Chiz- repitió Robert con una risita.

-No le sigas la corriente. Llevatelos, y asegúrate de quitarle eso a Alec antes de que reaccione y se de cuenta de lo que lleva puesto- le dijo Maryse a Robert mientras tomaba a Isabelle por el brazo, el hombre se limitó a asentir.

-Baño- dijo Izzy y Maryse se apresuró a ayudarla a subir los escalones.

-Vamos Jace, arriba- dijo Robert haciendo equilibrio para ayudar a Alec y levantar a Jace también- te ayudo a subir las escaleras.

-No, no, yo puedo solo- dijo Jace intentando ponerse de pie, Maryse se giró al recordar que Jace no se había parado en ningún momento, cuando lo habían visto estaba en el suelo, hincado junto a Max, luego se había hecho bolita al pie de la escalera, y después sentado sobre el escalón. En definitiva, Jace estaba demasiado ebrio como para levantarse.

-Jace...

-Yo puedo, yo puedo- repitió el rubio apartando la mirada de su padre adoptivo. Alec, por otro lado, se semi colgó de su papá y comenzó a subir los escalones. Maryse se olvidó de las necesidades de su hija y miro a Jace, Robert también lo miraba fijamente.

-Por el Ángel- murmuraron los dos. Jace ni siquiera intentaba ponerse en pie, sabia que no lo lograría, se arrastraba ligeramente subiendo escalón por escalón, descansando después de dos largos minutos de maniobrar. Robert y Maryse se miraron y después negaron con la cabeza.

-Jace, déjame ayudar...

-No! Yo llego arriba!- interrumpió el chico haciendo a Robert suspirar.

-Llévate a Isabelle, yo lo espero, esto llevara un rato- le dijo a su esposa, Maryse negó con la cabeza antes de girarse y dirigirse al baño mas cercano. Robert subió a Alec y lo sentó en el ultimo escalón para esperar a Jace. Siete largos y aburridos minutos después, Jace llegó junto a ellos y se sentó.

-Te dije que podía- dijo Jace arrogantemente. Robert rodó los ojos y se puso de pie para ayudar a los dos chicos. Después de batallar unos minutos intentando coordinar con los dos chicos, Alec a su derecha y Jace a su izquierda, al fin logro medio mantenerlos en pie, si no se colgaba uno se colgaba el otro. Caminó lentamente por los pasillos rumbo a las habitaciones. Alec iba casi dormido, caminando por simple instinto dejándose llevar por Robert. Jace iba tarareando una canción mirando hacia todos lados, tocando aquí y allá, tirando cosas mas que nada, a pesar de los regaños de Robert. De pronto, Jace pareció darse cuenta de algo.

-Que es eso?- exclamó Jace separándose de golpe, pero tuvo que recargarse en la pared para poder mantener el equilibrio.

-Jace, que...

-Que traes puesto?!- gritó Jace interrumpiendo a Robert, señalando con un tembloroso dedo el pecho de Alec. Robert miro la horrenda camiseta de Alec y sonrió.

-Ya se que es una camiseta espantosa que solo Magnus Bane se atrevería a comprar, pero...

-Es un pato!- lo interrumpió Jace nuevamente, Robert alzo una ceja confundido y entonces comprendió. Jace no soportaba los patos.

-Jace, tranquilo, no es real- dijo Robert soltando una risa.

-Alec! No te muevas, yo te salvo!- exclamó Jace sin prestar atención a lo que su padre decía.

-Es un dibujo, Jace- intento razonar con él, Robert. Alec estaba absorto de la situación, solo se dejaba llevar a donde fuera. Robert llevo a su hijo mayor hacia la pared y lo dejo ahí parado antes de ir e intentar calmar a Jace.

-No! Deja a mi Parabatai, maldita bestia asquerosa!- gritó Jace corriendo hacia la pared lo mas derecho que pudo. Robert soltó una risa mirando lo asustado que lucía Jace con el simple dibujo de un pato, era demasiado gracioso como... Jace tomaba una de las espadas que decoraban la pared, ya no era gracioso!

-Jace, baja esa espada!- exclamó Robert lanzándose hacia el rubio, Alec seguía distraído pegado a la pared- Alec! Alec muévete!

-Que?- preguntó el ojiazul mirando a su padre y hermano en una danza por el control de la espada. Robert forcejeaba, pero Jace había sacado una fuerza antinatural en su estado de ebriedad y no dejaba de avanzar hacia Alec.

-Jace! Dame... acá... suéltala!- Robert tomo las manos de Jace intentando hacer que soltara la espada.

-No! Déjame... tengo que... acabarlo!- Jace seguía forcejeando, Alec bostezó y se giró para admirar un tapiz con expresión aburrida, sin darse cuenta de que su demente hermano intentaba atravesarlo con una espada oxidada. Robert estaba solo protegiendo a Alec de un ebrio Jace. Forcejearon un rato mas, el odio por los patos de Jace era sabido por toda la familia, pero Robert nunca imaginó que se fuera a esos extremos. Al fin, Robert logro quitarle la espada a Jace y la lanzó por la ventana mas cercana, ya luego se preocuparía por...

-Alec!- gritó al ver que Jace sacaba una navaja de su pantalón y se lanzaba contra su primogénito. Alec se giró a tiempo para echarse hacia atrás y que la navaja de Jace solo alcanzara a cortar un poco la camisa de un lado. Y entonces Alec apreció reaccionar.

-Que demonios?! Ya cálmate! Quieres esto! Tómalo! Maldito degenerado, solo quieres verme desnudo!- gritó Alec quitándose la camiseta y lanzándosela a Jace, quien la tomó, lanzó al suelo y procedió a acuchillarla repetidas veces con su navaja. Robert y Alec, ahora ambos con el torso descubierto, se quedaron de pie viendo como Jace asesinaba la camiseta.

-Listo- murmuró Jace levantando la mirada hacia su padre y su hermano.

-Ya estas feliz?- preguntó Robert, Jace se limito a asentir- bien, ahora vámonos.

Caminaron otro tramo de pasillos en dirección a la habitación de Jace, era mas difícil controlarlo a él que a Alec, así que lo dejaría primero.

-A donde vamos?- preguntó Alec con voz pastosa.

-A dormir- respondió Robert sin detenerse, caminaba en zigzag él también debido al peso de sus dos hijos.

-No! Vamos a la cocina, seguro hay unas cervezas- dijo Jace cambiando el rumbo repentinamente haciendo que Robert y Alec casi perdieran el equilibrio.

-Jace, nada de alcohol, estoy seguro que tienes el suficiente en la sangre como para esterilizar un hospital mundano- le dijo Robert intentando modificar la trayectoria.

-Solo una mas, no hace nada- dijo el rubio, Robert intento detenerlo, pero Jace tiró una vez mas, haciendo que Alec se balanceara peligrosamente y se estampara contra la pared tirando una de las luces mágicas que iluminaban el pasillo.

-Jace, ya basta! Coopera un poco, quieres?- lo regaño Robert tirando fuertemente del chico para que no se fuera por su lado, con trabajo lograba balancearlos a los dos.

-P... papá- murmuró Alec, Robert lo miró.

-Vamos a la habitación de Jace- le dijo Robert moviéndose y arrastrando a los dos chicos con él. En ese momento Alec tuvo una arcada haciendo que Robert pegara un brinco- no, no, no, espera a tu habitación, el baño, Alec!

-No íbamos a mi habitación?- pregunto Jace confundido, tropezando con sus propios pies.

-Alec tiene una emergencia- le explico Robert caminando rápidamente hacia la habitación de Alec, Jace lo siguió. Robert estaba perdiendo la paciencia, todo hubiese sido mas sencillo si los chicos dejaran de caminar chueco y metieran sus piernas entre medio de las de él.

-No quiero vomitar, estoy bien, no quiero vomitar, estoy bien- murmuraba Alec en voz baja, Robert no le creía nada, ya estaba medio verdoso, Jace se dejaba llevar mirando soñadoramente en todas direcciones, al menos ya se habían tranquilizado y la operación se aceleraba.

Al llegar frente a la habitación de Alec, el chico reconoció el lugar y se lanzó hacia adelante, Robert lo detuvo rápidamente para que no se diera contra la puerta. Al maniobrar para abrir la puerta, Robert quito la mano de la cintura de Alec provocando que este se fuera hacia adelante y se recargara en la puerta, pero Robert ya había girado la perilla y Alec se fue hacia adelante con todo y puerta.

-Alec!- Robert se lanzo hacia adelante y atrapó al chico, pero no recordó que Jace estaba a su lado y se movía junto con él, y no calculó que Jace no cabría por la puerta.

-Que pas...- y Jace se dio de cara contra el marco de la puerta.

-Jace!- exclamó Robert girándose para revisarle la nariz, que ahora sangraba, provocando que Alec se soltara y cayera de sentón- arg! Maldita sea!

-Ow- se quejo Alec pero se giro para intentar ponerse de pie. Robert seguía mirando la nariz sangrante de Jace.

-Levanta la cabeza, eso es Jace, cabeza arriba- decía Robert mientras tiraba de Jace para meterlo en la habitación y ponerle un pedazo de papel, no llevaba la estela con él.

-Estoy bien, todo bien- murmuraba Jace, haciendo ademanes con las manos.

-Alec?- dijo Robert al darse cuenta de que su hijo ya no estaba en el suelo donde lo había dejado- Alexander?

-Papel!- exclamó Jace señalando la mesita de noche de Alec, donde había una caja de pañuelos. Robert escuchó un golpe, a Alec quejarse e intentar tomar su pie, que se había golpeado con la pata de la cama.

-Alec, no...- Robert no pudo terminar de decirle que no intentara hacer equilibrio en una pierna cuando no podía ni mantenerse en dos, pero Alec ya se había ido hacia adelante y había caído sobre la cama.

-Mmmaaggnnn...- murmuró el chico terminando de subir a la cama mientras abrazaba su almohada.

-Quédate aquí, abraza esto- le dijo Robert tranquilamente a Jace poniendo los brazos del chico al rededor de uno de los postes de la cama.

-Hola- murmuró Jace mirando el poste. Robert lo ignoró y fue hacia Alec para asegurarse de que estuviera bien, había caído en peso muerto boca abajo sobre la cama.

-Alec? Estas bien, quieres vomitar?- le preguntó apartándole el cabello de los ojos, Alec se removió y enterró aun mas el rostro en la almohada. Robert lo pensó un segundo antes de tomar el bote de basura y ponerlo al lado de la cama junto a Alec.

-Ya no sangro- dijo Jace mostrándole una ensangrentada mano a Robert.

-De haber sabido que esto era ser padre...- murmuró Robert poniéndose de pie y yendo hacia la mesita de Alec por unos pañuelos- ven acá, te limpiaré antes de ir a tu habitación.

-Ya estoy bien, no tengo nada- dijo Jace intentando quitarle importancia con un ademan de la mano, ademan demasiado brusco, ya que perdió el equilibrio, pero tenia el poste de cama de madera para detenerse, bueno no que la madera fuera tan fuerte. El poste de la cama cedió ante el peso de Jace mandándolo al suelo.

-Jace!- Robert corrió para ayudar a su hijo, quien reía tontamente aun con el pedazo de madera en la mano- por el Ángel.

-Ya... no puedo...- murmuró Jace y, a mitad de camino, se dejó caer en peso muerto provocando que Robert, que lo tenía sostenido por debajo de los brazos, casi cayera junto con él.

-Maldita sea, Jonathan!- dijo tirando mas fuerte para que no se golpeara, en ese momento Alec se retorció en la cama con otra arcada- no, Alec!

El sonido de Alec queriendo vomitar provoco asco a Jace haciendo que también tuviera una arcada, Robert, sin pensarlo, lo alejó de si haciendo que se golpeara el hombro con la base de la cama. El padre murmuró una disculpa antes de volver a tirar de su hijo adoptivo para levantarlo y al menos sentarlo en la cama, pero Jace estaba mas aguado que la gelatina en ese momento. Después de 5 minutos de corajes, Robert al fin pudo levantar a Jace del suelo.

-Saben que, me rindo, quédense aquí los dos- dijo Robert lanzando a Jace a la cama de Alec también. Ambos chicos se removieron tomando una almohada cada uno y luchando por espacio, Robert negó con la cabeza y fue por una manta para cubrirlos. Cuando al fin les hecho la sabana encima, ambos chicos ya estaban roncando fuertemente. Con un ultimo suspiro, Robert se dirigió hacia la puerta para salir de la habitación y comenzar a arreglar el desastre que habían dejado en el vestíbulo y pasillos.

-.-.-.-.- Fin Flash-Back -.-.-.-.-

-Me sigo preguntando quien es Dobby- dijo pensativamente Robert.

-Eso es lo que te preguntas?- pregunto Maryse rodando los ojos- no te preguntas a donde diablos llevo a nuestros hijos ese brujo loco?

-Saben cuidarse solos, incluso ebrio, Jace puede acabar con una multitud enardecida de demonios, creo que pelea mejor así- comenzó Robert pensando en el incidente con la espada.

-Basta, ya no quiero seguir escuchando tus absurdas deducciones- dijo Maryse yendo hacia una estantería.

-Nadie molesta a los Nefilim, Maryse, debes tranquilizarte- dijo Robert volviendo a su libro, solo escucho a su esposa suspirar mientras sacaba otro libro.

-Ahora no puedo dejar de preguntarme como hizo Bane para ponerle a Alec esa camiseta- Robert soltó otra risa.

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-Aaawww, de verdad quería salir con Magnus este día- dijo Isabelle tomando una de las almohadas de Alec y abrazándola fuertemente contra su pecho. Ella y Alec estaban sentados sobre la cama del chico, quejándose de no haber conseguido permiso de salir.

-Lo se, necesitamos otra noche Lightwood- dijo Jace jugando con una daga entre sus manos mientras se mecía en las patas traseras de la silla del escritorio de Alec.

-Esa noche fue lo mejor que hemos hecho en años- dijo Alec sonriendo al recordar tanta estupidez que habían hecho. Bueno, lo que podía recordar.

-Si, nunca pensé que podíamos divertirnos tanto sin necesidad de asesinar algo- dijo Jace sacándole una carcajada a Izzy y una rodada de ojos a Alec.

-Lo se- suspiró la chica apoyando la cabeza sobre la almohada aun contra su pecho.

Entonces Max entro en la habitación haciendo el menor ruido posible, cosa inútil, ya que los tres adolescentes miraban de frente a la puerta y se habían fijado en ella desde que la perilla había comenzado a girar con cuidado. Max entro en la habitación y se apoyo contra la puerta pero no la cerró del todo, dejó un espacio abierto para poder asomarse hacia afuera. El pequeño iba vestido todo de negro, con un gorro también negro y un pañuelo negro amarrado sobre la boca y nariz.

-Erm... Max?- dijo Alec después de unos segundos en los que ninguno de los cuatro se movió o hablo.

-Me manda papá- susurró Max, se tomaba su papel de ninja incógnito muy en serio. Los tres mayores lo miraron con una ceja alzada- traigo un mensaje.

-Por que susurras?- pregunto Isabelle dejando a un lado la almohada y bajando las piernas de la cama.

-Shhh, mamá puede oírte- dijo Max echando un vistazo por la puerta medio abierta.

-Mamá esta en la biblioteca, Max, no creo que...

-Shhh, baja la voz- calló Max a su hermano mayor haciendo ademanes con la mano- déjenme hacer mi trabajo.

-Puedes hacer tu "trabajo" sin necesidad de probar nuestro oído.

-Shh, no pueden hablar mas bajo?- le dijo Max a Jace subiendo solo un poco mas el tono de su susurro.

-Pero, Max, no es posible que...

-Ya! Quieren salir hoy o no?!- exclamó Max, ahora fueron los tres adolescentes los que callaron a Max.

-Salir? Con Magnus?- pregunto Alec ahora si susurrando, Max rodó los ojos.

-Claro que salir con Magnus, no fue eso lo que pidieron?- le susurró Max acercándose a la cama y sentándose en la orilla, Jace se levanto de la silla y se arrodillo junto al niño, Isabelle y Alec se arrastraron hasta quedar muy pegados a los otros dos.

-Papá nos ayudara a salir, y mamá?- pregunto Isabelle. Max se aclaró la garganta.

-Papá dice que puede dejar "accidentalmente" abierta la puerta del santuario para que puedan salir en la noche, y llevar a mamá al iHop por el desayuno en la mañana para que ustedes puedan entrar, pero todo con una condición- explico Max, los tres mayores estaban inclinados hacia él poniendo toda la atención del mundo. Aparentemente, Max disfrutaba la atención, ya que sonrió altivamente haciendo una pausa dramática. Pero fue demasiado pausa y demasiado dramática para los otros tres.

-Cual!?

-Que condición?!

-Habla ya!- gritaron Jace, Alec e Izzy. Max manoteó en dirección a sus hermanos mayores para que se callaran.

-Dice que quiere un resumen detallado de lo que paso el viernes pasado que salieron a beber "café"- explicó el mas pequeño de los Lightwood gesticulando las comillas con los dedos.

-Dile a papá que trato hecho, pero que tendrá que esperar a mañana en la mañana para tener el resumen- le dijo Alec, los otros dos lo miraron con una ceja alzada- acaso ustedes recuerdan como diablos llegamos Salem para buscar a las "hermanas perdidas" de Magnus?

-Los brujos pueden tener hermanos?- preguntó Max, los tres adolescentes lo miraron, vaya ejemplos a seguir que eran.

-Magnus recordará todo y se lo escribirá a papá, problema resuelto- dijo Alec pasando por alto la pregunta de Max.

-Si, bien pensado, dile eso a papá, Max- dijo Jace. El niño asintió y corrió hacia la puerta- oye! Recuerda que mamá no debe darse cuenta.

-Soy un ninja!- susurró Max antes de salir espectacularmente con un giro de la habitación, a los cinco segundos tuvo que volver y disculparse por no cerrar la puerta, cosa que siempre le reprendía Alec.

-Pónganse guapos, chicos, nos vamos de fiesta!- exclamó Isabelle, Jace chocó su mano con la de ella y salió de la habitación para dirigirse a la propia, pero Isabelle no lo siguió, se giró dirigiéndose al closet de Alec.

-Erm... esta es mi habitación, tus vestidos están a dos habitaciones de aquí- le dijo Alec señalando la puerta.

-No seas tonto, primero elegiré tu atuendo- dijo Isabelle removiendo los montones de sueters viejos- quiero que Magnus te vea y quede con la boca abierta!

Alec se puso completamente rojo, pero la dejó, si le gustaría sorprender a Magnus. Últimamente sentía que el brujo lo estaba tratando diferente, no era como antes que respondía cada uno de sus mensajes o que lo llamaba al menos una vez al día para ver como estaba. Aunque aun no quería que sus padres se enteraran, no quería perder su relación con Magnus tampoco.

-No hay forma de que me hagas usar eso- dijo Alec al ver la camisa que Isabelle le había regalado la navidad pasada. Una camisa negra que se le pegaba al cuerpo como una segunda piel- esa la compraste una talla equivocada, es demasiado pequeña.

-Tonterías, te veras perfecto! Magnus te comerá vivo!- Alec siguió negando con la cabeza sonrojándose aun mas.

-Te recuerdo que Jace estará presente- le dijo a Isabelle alzando las cejas.

-Eso que tiene que ver? Ya sabes que él sabe lo que sabe y no le importa saber, vamos Alec, tienes que verte sexy algunas veces!- dijo Isabelle lanzando la camisa a la cama y emprendiendo la búsqueda de los pantalones. Alec suspiró mirando el pedazo de tela a su lado. Sexy. Él era todo menos sexy. Jace era sexy. Izzy era sexy. Pero él...

-Crees que Magnus piense que soy sexy?- le preguntó a su hermana. Izzy asomó la cabeza por la puerta del closet y miró a su hermano. Siempre habían sido muy abiertos el uno con el otro, no le importaba que le hiciera ningún tipo de pregunta, pero sabia cuando algo de verdad le preocupaba a Alec, y no podía creer lo preocupado que su hermano se escuchaba con algo que le resultaba tan... anti-Alec.

-Bueno, si no lo piensa, en cuanto te vea con esto puesto cambiara de opinión- le dijo poniendo un pantalón de mezclilla clara junto a la camisa. Isabelle le sonreía ampliamente y Alec le devolvió la sonrisa. Si, por que no tratar algo diferente alguna vez?

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

-Ten cuidado...

-Shhh

-Me pisas!

-Cállense!

-Años de entrenamiento en ser sigilosos y esto es lo mejor que tenemos?- preguntó Alec. Él y sus hermanos caminaban lentamente por los oscuros pasillos del Instituto. Iban con mucho mas cuidado que cuando iban cazando demonios, y es que Maryse podía llegar a ser peor que ellos. Lentamente caminaron entre empujones, susurros y miradas preocupadas hacia todas direcciones.

-Magnus nos estará esperando afuera, cierto?- pregunto Isabelle mirando a su hermano. La chica llevaba una falda negra y bastante corta, combinada con unas altísimas botas con tacón de plata que le llegaban arriba de la rodilla, también llevaba una blusa plateada y brillante que dejaba la espalda al descubierto y un escote que lucia muy bien sus encantos, encima de esta llevaba una chamarra de piel ceñida al cuerpo. El cabello lo llevaba suelto y en leves ondas y su típico collar en el cuello y el látigo plateado enredado en el brazo.

-Claro que si, lo llame desde la tarde- respondió Alec. Había dado luz verde a Izzy para que lo vistiera, su camisa negra con cuello V que marcaba sus músculos a la perfección, unos pantalones de mezclilla que levantaban su, en palabras de Izzy, "respingado y lindo traserito", y unas botas cortas de combate puestas por fuera de los pantalones terminaban el atuendo. Izzy había jugueteado con el cabello de Alec y lo había dejado desordenadamente presentable. Y por ultimo, después de muchos ruegos, Isabelle le había permitido llevar, mas no puesta, una chamarra color azul marino para sentirse un poco mas cómodo.

-Le dijiste que en la puerta del santuario, cierto? No quiero que mamá vaya y lo vea de pie en la puerta principal- dijo Jace. Como siempre, se veía extremadamente bien. Camisa blanca con chaleco de piel negro, pantalones de mezclilla oscuros y unas botas de combate negras por encima de los pantalones. Combinado con su dorado cabello medio despeinado y una cadena de plata en el cuello.

-Claro que se lo dije, no soy tonto- se quejó Alec, con cuidado, se inclinó para abrir la puerta del santuario, Izzy y Jace miraban hacia atrás para asegurarse de que no los viera nadie. Cruzaron el lugar rápidamente y salieron del Instituto respirando aliviados.

-Vaya, pensé que me habían dejado plan...- tres segundos exactos en los que la mirada de Magnus estudió fijamente la figura de Alec- tado.

-Pequeñas complicaciones- dijo Izzy sacudiendo la mano para quitarle importancia mientras intentaba ocultar su sonrisa. Había hecho un buen trabajo y como resultado tenia un Alec sonrojado a mas no poder y con sonrisa boba en los labios, y un Magnus destellando deseo por los ojos y una media sonrisa de satisfacción- entonces que? Nos vamos.

-Esta vez me tome la libertad de traer transporte- dijo Magnus haciendo una señal con su mano y de pronto, una van color morado oscuro con destellos y cristales retumbando por la música en el interior, se detuvo frente a ellos- bienvenidos a nuestro PartyBus personalizado.

Magnus abrió la puerta de la van dejando ver el interior forrado en gamuza morada, alfombra morada, luces de colores, un tubo en medio de todo y una buena dotación de alcohol en una pequeña cava junto al enorme asiento pegado a la puerta. Sip, definitivamente sería otro "Viernes Tranquilo" estilo Magnus Bane.

-o-o-o-o-o-o-o-

Después de ir en la van, hablando, riendo y bebiendo, por unos 25 minutos. El conductor se detuvo frente a un club mundano del centro. Había una larga fila esperando entrar, pero Magnus se dirigió a la entrada en cuanto bajó de la van. Magnus tronó los dedos justo frente a los ojos del guardia que vigilaba la entrada y los dejaron entrar al instante.

-No nos dijiste que vendríamos a un club mundano- dijo Jace acercándose a Magnus.

-Pensé que era mejor comenzar la fiesta en un lugar fijo y no andar deambulando por las calles de Nueva York como la vez pasada- le respondió Magnus, subieron un par de escaleras y llegaron a una pequeña mesa con un letrero de "Reservado M.B." y cuatro sillas altas. Magnus hizo una mueca, no le gustaban esas sillas incomodas de los clubes mundanos. Eran incomodas a propósito para que la gente se parara a bailar. Podría hacer algunas modificaciones. Miro a ambos lados estudiando la cantidad de mundanos que podrían verlo, Alec, Jace e Isabelle ya estaban sentados sobre sus sillas, pero él no se rendiría tan fácil. Tronó los dedos y varias chispas de colores se dejaron ver desde el otro lado del club, la multitud gritó y aplaudió dirigiendo su atención hacia las chispas y Magnus volvió a tronar los dedos convirtiendo su incomoda silla en un sillón reclinable con porta vasos.

-Debes estar bromeando- dijo Jace mirándolo cuando Magnus se lanzaba hacia su silla mejorada.

-Beneficios de ser el Gran Brujo de Brooklyn- dijo Magnus encogiéndose de hombros.

-Por que no puedo tener un sillón yo también?- preguntó Izzy frunciendo el ceño.

-Dos ya seria mucho, llamaría la atención- dijo Magnus tomando la bebida que la mesera le tendía, la chica miro el sillón confundida por un segundo y después se giró hacia Jace para entregarle un vaso también.

-Que nos pediste?- pregunto Alec tomando su bebida y dándole un sorbo, era dulce, no en exceso pero camuflaba muy bien el sabor del vodka.

-Es solo un pequeño aperitivo para empezar- le respondió Magnus dándole un sorbo a su bebida.

-Que no empezamos en la van?- preguntó Izzy recordando los tres shots que se habían bebido cada uno.

-Tonterías, eso era solo para entrar en calor- dijo Magnus. Sabía que las bebidas dulces eran las mas ricas pero las que pegaban mas fuerte, pero eso a los Nefilim no parecía importarles, bueno si, no lo sabían, pero de todos modos no les importaría, estaba seguro. Y si tenía razón, los tres Lightwood terminaron sus bebidas en menos de diez minutos y él le pidió otra ronda a la mesera.

-No estábamos bebiendo whiskey en la van?- preguntó Alec dejando su vaso vacío en la mesa.

-Creo que si, por que?- preguntó Izzy.

-Según tengo entendido, si mezclas diferentes tipos de alcohol...

-Alec! No seas cobarde! Deja de ser tan negativo y bebe!- dijo Jace dejando su vaso también.

-Estoy bebiendo!- replicó Alec tomando su vaso vacío y agitándolo frente a los ojos de Jace. Magnus soltó una risita.

-Saben? Nunca pensé que saldría de fiesta y me divertiría con miembros de la familia Lightwood- dijo Magnus haciéndole seña a la mesera para que dejara las bebidas en la mesa.

-Aaaawww, me siento especial- dijo Isabelle poniendo una mano en su pecho fingiendo estar conmovida.

-No te emociones mucho, Izzy, el especial es Alec, no tu- le dijo Jace burlonamente. Isabelle le golpeo juguetonamente el hombro.

-Como todo esto de emborracharnos se esa viendo atrasado por la caciquez de los bartenders de este club- dijo Magnus sacando un frasquito de su chaqueta. Los tres Nefilim asintieron, sus bebidas no sabían nada a alcohol- démosle un poco de aceleración a la noche.

-Que es eso?- preguntó Alec mirando como Magnus se inclinaba y echaba el contenido del frasquito en los cuatro vasos en la mesa.

-Solo un pequeño regalo de mi para ustedes- dijo tomando su vaso e indicándoles que hicieran lo mismo.

-No correremos desnudos, verdad?- preguntó Jace.

-No lo creo, o al menos no los dejaré, no se preocupen- respondió Magnus alzando su bebida, los otros tres lo imitaron con enormes sonrisas en el rostro- bueno, sin mas que decir y esperando otra noche loc... quiero decir, "Viernes Tranquilo", salud, Lightwoods!

-Salud!- dijeron los tres jóvenes y chocaron sus vasos con el del brujo. Una hora después y sus vasos con el misterioso liquido, ahora vacíos, en la mesa. Los cuatro estaban riendo bobamente por como se sentían extremadamente mareados pero sin ningún cansancio aparente.

-Chicos, espérenme aquí, traeré mas bebidas- dijo Magnus poniéndose de pie. Alec se apresuró a sentarse en el sillón de Magnus y sacar su celular, tenía un mensaje de Max diciéndole que su padre llevaría a mamá al iHop a las 9 de la mañana y podría distraerla como máximo hora y media, se apresuró a responderle de entendido. Mientras tanto, Jace e Isabelle estaban sentados en sus dos sillas altas hablando con las cabezas juntas hasta que Isabelle notó algo, o mejor dicho a alguien.

-Ese chico de allá me esta sonriendo- dijo Isabelle sonriendo coquetamente mientras saludaba en dirección al desconocido. Un guapo chico en la barra, rubio con corte militar y una sonrisa de comercial de dentífrico.

-Nunca pensé que te vería coqueteando con un mundano.

-Simon...

-No cuenta, ya es vampiro- interrumpió rápidamente Jace a Izzy.

-Que ven?- llegó Alec al lado de sus hermanos mientras guardaba el celular.

-Tu hermana coquetea con un idiota- respondió Jace. Alec siguió la mirada de ambos, la de Isabelle coqueta, la de Jace amenazante.

-Con un hombre así, hasta yo abro las piernas- dijo Alec echándole un vistazo al tipo, Jace rió cubriéndose el rostro con las manos e Izzy soltó una carcajada.

-Ese es mi hermano, tanta clase como siempre!- exclamo la chica levantando su vaso a modo de brindis.

-Hombre, tendré pesadillas!- se quejo Jace sin dejar de reír. Alec se terminó su bebida de un trago dejando el vaso vacío sobre la mesa sin prestar atención a los otros dos.

Magnus regreso en ese momento con otra ronda flotando tras él. Ninguno de los Lightwood se molestaba en preguntarle si no le preocupaba que los Mundanos vieran eso, la verdad era que a esas alturas poco les importaba. Todos se volvieron hacia la mesa a inspeccionar las bebidas, las elecciones de Magnus usualmente eran deliciosas, pero peligrosas. Justo en ese momento una mesera se acerco y puso una bebida frente a Alec.

-Yo no...

-La manda el joven de la barra para usted- le explico señalando a un tipo que sonreía levantando su cerveza a modo de saludo. Alec miro al tipo un segundo antes de volverse hacia Magnus, que miraba divertido la situación esperando la reacción de Alec.

-Pero...

-Gratis!- exclamó Jace tomando el vaso y empinándose el liquido.

-Jace!- lo regaño Isabelle- esa bebida era de Alec.

-Él ya tiene novio, no puede aceptarla- dijo Jace con un ademán de su mano.

-Novio?!- exclamó Alec medio asustado, Magnus frunció el ceño.

-Allá- sonrió Jace señalando a Magnus. El rubio terminó la bebida y la dejo sobre la mesa antes de tomar la bebida que le había traído Magnus. Isabelle miraba de Magnus a Alec sintiendo la incomodidad en el aire, se limitó a tomar su bebida y empinársela mientras se hundía en su silla.

Siguieron bebiendo y hablando alegremente, sin que los Nefilim se dieran cuenta Magnus rellenaba los vasos cuando estaban por terminarse, claro que no lo podía hacer por mucho tiempo, tenía que comprar bebidas cada cierto rato, si no Alec se daría cuenta que aparecía el liquido y lo regañaría por "robar" mágicamente. Después de una media hora de chistes y bebidas alguien se acerco a la mesa.

-Hola- dijo el chico que le había enviado la bebida a Alec. Todos lo miraron sorprendidos, Alec no había tocado la bebida, Jace se la había terminado de un trago, pensaron que el chico asumiría que Alec no estaba interesado.

-Hola- dijo Isabelle mirando detenidamente al chico. Nada mal, a decir verdad, era muy lindo, cabello castaño, ojos verdes, alto, tal vez de la altura de Magnus, pero mas musculoso.

-No se si se confundieron, pero la bebida se la envié a él- dijo el chico señalando a Alec.

-Ouch- fue todo lo que dijo Jace empinándose el resto de su bebida, antes de levantarse e irse al baño.

-Sabíamos que era para Alec, pero Jace estaba bastante sediento- explicó Izzy mirando a su hermano, tenía esa tonta mirada en los ojos, le había gustado el chico, claro que a quien no.

-Alec? Ese es tu nombre?- le pregunto el chico a Alec, quien sonrió inocentemente.

-En realidad es Alexander- respondió Alec antes de darle un trago a su bebida.

-Alexander, es un nombre genial- dijo el chico sonriendo encantadoramente al Cazador de Sombras.

-Te gustó? Deberías escuchar mi numero de teléfono- soltó Alec sin pensárselo provocando que Isabelle abriera los ojos a mas no poder, sorprendida.

-Ya basta, ven acá- dijo Magnus tirando bruscamente del brazo de Alec, provocando que se le cayera la bebida, pero poco le importo, ya que rápidamente se encontró sentado a horcajadas sobre el regazo de Magnus y recibiendo un profundo y sensual beso por parte del brujo.

-Lo siento, mi hermano esta un poco ocupado por el momento- le dijo Isabelle al chico al ver que Alec metía sus manos entre el cabello de Magnus tirando de el levemente. El chico se quedo con la boca abierta un segundo antes de negar con la cabeza decepcionado y retirarse del lugar. Isabelle se giro rápidamente para dejarles un poco de privacidad cuando las manos de Magnus bajaron por la espalda de Alec y se posaron en el mencionado "respingado y lindo traserito".

-Hola- le dijo Izzy al chico que estaba sentado en la mesa de al lado con una cerveza en la mano.

-Hola. Lindos tatuajes- le dijo el muchacho. Isabelle levantó sus brazos encantada.

-Gracias- fue todo lo que dijo sonriendo alegremente.

-Por el Ángel, ya basta!- exclamó Jace llegando a la mesa nuevamente- se que dije que no me importaba pero tampoco quiero que se estén comiendo el uno al otro frente a mi!

-Envidioso- dijo Magnus separándose de Alec, quien no parecía dispuesto a detenerse y siguió besándole la oreja hasta que Jace tiró de la camisa de su Parabatai y lo lanzó a una silla enseguida de Magnus.

-Oye!

-Salud!- dijo Jace poniéndole un shot en la mano a Alec y tomando uno para él mismo. Pronto el tema se olvido y la noche siguió llena de tragos, música y chistes. Personas iban y venían echando miradas interesadas en su dirección.

A Izzy le encantaba responder las miradas con un guiño y provocar a los chicos que la miraban, cosa de la que Jace y Alec se encargaban a detener antes de que llegara a mayores. Jace simplemente sonreía y evitaba la mirada de las chicas que le sonreían, claro que había chicos también, pero él se limitaba a beber un enorme trago de alcohol. Magnus ni siquiera se dignaba a mirarlos de vuelta, cada que se daba cuenta de que algún chico o chica lo miraba, se limitaba a echar una mirada a Alec antes de seguir con lo que estaba haciendo. Alec... Alec era caso perdido, no se daba cuenta de cuantas personas pasaban a su lado y lo miraban con el mismo deseo que le dedicaban a sus hermanos. Eso enternecía a Magnus a mas no poder y se alegraba por haber llegado antes que cualquier otro idiota que tuviese los ojos puestos en su Cazador de Sombras.

-Por Raziel!- exclamó Jace por novena vez saltando de la silla.

-Honestamente, tu trasero no va a salir virgen de aquí- dijo Magnus negando con la cabeza. Ya iban nueve veces que alguien, chico o chica, pasaba por detrás de donde estaba sentado Jace y le pellizcaba un cachete trasero.

-Jace, siéntate sobre la mesa- dijo Izzy quitandole importancia con un movimiento de la mano.

-No puedo creer lo descarada que es la gente- dijo Jace y los otros tres lo miraron con ojos entrecerrados- que?

-Por ese comentario mereces ponerte de rodillas con las nalgas al aire apuntando hacia la pista de baile para que todos de nalgueen al gusto- dijo Magnus señalándolo acusadoramente. Alec asintió en acuerdo.

-Yo creo que tu amigo tiene razón- dijo la voz de una chica desde detrás de Jace, los cuatro se giraron y vieron a una pequeña castaña con un vestido aun mas corto que la falta de Izzy de pie detrás del rubio- seria agradable poder tocar libremente.

-Aléjate de mi mango!- gritó Jace saltando hacia los brazos de Isabelle, quien lo atrapó en el aire y casi se va para atrás con todo y silla de no ser que Alec la ayuda a detenerse. Magnus soltó una carcajada casi cayendo de su propia silla también.

-Jace! Que demonios?!- dijo Isabelle poniéndose de pie y mandando a Jace hasta el suelo. Alec le dio la espalda a la chica no sin antes enviarle una mirada envenenada, la castaña entendió el mensaje y se alejo en silencio.

-Quería tocar mi mango- dijo Jace poniéndose de pie y sacudiéndose el pantalón.

-Nadie quiere tocar tu jodido mango! No me saltes encima de nuevo!- dijo Isabelle acomodándose la blusa. Alec ayudo a Jace a ponerse de pie.

-Quería tocarlo! Básicamente lo dijo- dijo Jace volviendo a su silla junto a Alec.

-Quiero dejar en claro la definición de mango- dijo Magnus pero Jace lo ignoró.

-Las mujeres son incluso mas peligrosas que los hombres!- exclamo Jace mirando en todas direcciones buscando a la castaña acosadora.

-Esta noche es para disfrutar, Jace- dijo Magnus acomodándose mejor en su sillón y haciendo una seña a Alec para que se sentara junto a él, el aludido no espero que le dijera dos veces y se lanzó a su lado.

-Si, lo que pase esta noche no saldrá de aquí- dijo Isabelle alzando las cejas.

-Claro que no- dijo Jace negando con la cabeza rápidamente.

-Nunca creí que llegara el día en el que te vería tonta y perdidamente enamorado como idiota- dijo Alec riendo burlonamente mientras se acomodaba al lado de Magnus.

-Mira quien habla!- dijo Jace rodando los ojos antes de darle un enorme trago a su bebida.

Después de media bebida mas, Isabelle se levanto a bailar tirando de Alec para que la acompañara, no fueron a la pista, simplemente se quedaron junto a la mesa moviéndose al ritmo de la música, Jace se movía junto con ellos pero sin levantarse. Isabelle saltó y cayó sentada sobre las piernas de Jace, quien movió las rodillas haciendo que la chica saltara al ritmo de la música, los tres Lightwood reían ampliamente y ninguno de los tres se dio cuenta del chico que se acercaba por detrás a Alec. Pero Magnus si que lo vio, mejor dicho, vio como el chico miraba fija y lujuriosamente el respingado y lindo traserito de Alec. El chico levantó una mano para tocar el hombro del Cazador de Sombras y Magnus entrecerró los ojos.

-Oy...- y entonces Magnus bajó su glamour y dejó que el recién llegado mirara como brillaban sus ojos de gato. El chico palideció al instante y salió literalmente corriendo del lugar.

-Que fue eso?- preguntó Alec. Magnus se levantó y fue hacia los hermanos Lightwood, tirando de la mano de Isabelle para que se levantara y seguir bailando.

-Que importa, me encanta esa canción!- dijo y los cuatro comenzaron a bailar. Después de tres canciones y una escases de bebidas, Magnus ordenó mas y los cuatro tomaron asiento. Alec e Isabelle comenzaron a tomarse fotos juntos con el celular de la chica. Jace negaba alegremente a dos chicas que se habían parado a su lado y aparentemente lo invitaban a bailar, y Magnus se giraba para mirar al chico que tocaba su brazo con demasiada determinación.

-Hola, cosa hermosa- dijo el chico en un tono que gritaba a los cuatro vientos y mas: "gay". Era bajito y muy, muy delgado, el cabello rubio en un corte disparejo y con brillo en los labios. Vestía una blusa lila sin mangas y que le llegaba al ombligo y traía pantalones de cuero tan pegados como los de Magnus- sabes que hay una habitación allá atrás donde podemos ir juntos?

-Gracias, pero no gracias- dijo Magnus tomando su bebida de la mesa.

-No seas malo, vine desde el otro lado del club solo por ti- dijo el chico encimándose en el apoya brazos del sillón de Magnus y pegando su cuerpo al hombro del brujo. A esas alturas Alec e Izzy ya habían dejado el celular y miraban con atención.

-Lamento que hayas tenido que forzar esas delgaditas piernas que tienes para cruzar el enorme espacio que nos separaba, y se que pasaste muchos peligros en la pista de baile, con tanto degenerado por ahí, pero no estoy interesado- dijo Magnus sonriendo como disculpa.

-Por favor, te prometo que te divertirás de lo lindo- dijo el chico pegando su cuerpo aun mas al de Magnus y acariciándole la mejilla. Magnus se limitó a levantar una ceja y justo entonces Alec se hecho hacia en frente y lanzó una cachetada en dirección al chico, gracias a Jace, que lo detuvo de la camiseta, no le dio de lleno en el rostro.

-Piérdete! Maldito Mundano sin chiste!- exclamó Alec causando que Izzy y Jace soltaran una carcajada. Magnus lo tomó por la cintura para evitar que se lanzara sobre el chico flacucho otra vez, que salió huyendo al instante- ya me harte que venga gente e intenten algo! Vámonos.

-Yo pienso igual, mejor irnos antes de que Alec mate a alguien o que alguien viole a Jace- dijo Isabelle poniéndose de pie. Todos la siguieron, Alec casi colgado del cuello de Magnus, no que a este le molestara, y se encaminaron hacia la salida. Después de salir del club se dirigieron a la van que los esperaba afuera. Se subieron rápidamente y cerraron la puerta cuando dos chicas, de aspecto nada respetable, se acercaban para pedirle a Jace si podían subir con él. Isabelle casi les aplasta sus enormes implantes con la puerta al cerrarla.

-Vámonos!- exclamó y la van se puso en marcha con la música retumbando nuevamente. Magnus les preparo bebidas mágicamente y se las tendió, Isabelle abrió la ventana que separaba la sección del conductor con la sección de la fiesta.

-Isabelle, ni se te ocurra intentar conducir- le dijo Alec subiendo las piernas al asiento y acomodándose mejor junto a Magnus. Izzy lo ignoró por completo

-Conductor! Como te llamas?- gritó Izzy por encima de la música. El conductor Mundano se giró un segundo y le sonrió, era joven, unos 27 años y parecía del medio oriente.

-Mi nombre es Vickram, señorita- le respondió el conductor.

-Hahaha! Te dijo señorita!- rió Jace, Isabelle se giró y dejó caer su puño justo en la entrepierna de Jace, provocando que el rubio cayera de rodillas en el piso de la van y se diera un golpe en la cabeza con el tubo. Magnus y Alec soltaron una carcajada.

-Te llamare Vick- dijo Isabelle tendiéndole un trago- quieres un poco?

-Oh no, señorita, no se me permite beber en horarios de trabajo- le respondió Vick con la vista fija en el camino.

-Vamos! Únete a la fiesta o no hay propina- dijo Magnus pasando un brazo por los hombros de Alec y acercándolo hacia si.

-No, no puedo hacerlo...

-Quieres terminar como Jace?- preguntó Isabelle señalando al rubio que seguía en el piso con las manos en sus "asuntos". El conductor miró a Isabelle con miedo y después tomó el vaso- de eso estoy hablando!

Siguieron bebiendo y bailando, Jace, después de recuperarse del golpe que le había dado Isabelle, se había colgado del tubo y hacia muy buenos movimientos colgándose de el. Se ganó un par de billetes en sus boxers por parte de Magnus. Isabelle lo apartó de un golpe y también se colgó del tubo poniéndose de cabeza, Magnus soltó una exclamación aplaudiendo la habilidad de la chica.

-Oh, no quiero ver a mi hermana hacer eso- se quejó Alec escondiendo el rostro en el pecho de Magnus.

-Mejor dicho, no quieres ver a una mujer haciendo eso- lo corrigió Jace provocando que Magnus soltara una carcajada- Izzy, muévete!

Jace quitó a Isabelle y comenzó a moverse sensualmente al ritmo de la música mientras se agarraba del tubo. Izzy y Magnus gritaban y silbaban mirando a Jace, Alec lo veía de reojo riendo bobamente. Isabelle y Jace comenzaron a pelear por ver quien bailaba mejor en el tubo, Alec no podía evitar soltar carcajadas, incluso Vick, quien miraba por el retrovisor, estaba muerto de risa.

-A ver, háganse a un lado, principiantes, déjenle esto a un profesional- dijo Magnus poniéndose de pie y, con un tronido de sus dedos, lanzando a Isabelle y Jace hacia sus asientos. Alec se enderezó en su lugar mirando como Magnus comenzaba a dar vueltas al ritmo de la música. Izzy gritaba emocionada y le lanzaba billetes cada que Magnus hacia una pirueta especialmente fantástica. Jace no dejaba de reír y aplaudir. Alec... Alec estaba embobado.

-Muevelo, muevelo, eso Magnus, wohoo!- gritaba Isabelle sin dejar de aplaudir. Jace ya silbaba. Magnus dejó de bailar y se acercó a Alec.

-Y bien?- le preguntó sentándose a su lado, Alec se sonrojó a mas no poder sin dejar de sonreír- quieres intentarlo?

-Nah, Alec no puede hacer estas cosas- dijo Jace poniéndose de pie tomando el tubo y contoneándose intentando imitar a Magnus.

-Quien dice que no puedo?- preguntó Alec entrecerrando los ojos.

-Acéptalo, esto simplemente no se te da, te pondrás rojo de pies a cabeza antes de poder menearte así- dijo Jace sacudiendo el trasero frente a Alec y Magnus. Izzy soltó una risa lanzando otro billete y Magnus silbó aplaudiendo. Alec miró con el ceño fruncido a Magnus antes de ponerse de pie y dirigirse al tubo.

-Vamos hermano, no te vestí sexy para que lo desaprovecharas!- Alec llegó junto a Jace, quien lo miraba con una ceja alzada, y tomó el tubo. Los hermanos Lightwood comenzaron una pelea de baile sensual. Isabelle les lanzaba billetes gritando y aplaudiendo, incluso Vick gritaba desde el asiento delantero, Magnus los miraba divertido, divertido hasta que Alec lanzó a Jace a un asiento y se apoderó del tubo y se transformó completamente- ese es mi hermano!

-Tan calladito!- exclamó Vick mirando por el retrovisor. Magnus estaba perdido mirando como Alec se movía al ritmo de la canción, "Epic" de "Quintino y Sandro Silva", quedaba perfecto con el "Épico" baile que hacía Alec mirándolo fijamente, bailaba solo para él.

-Oh, no, no me ganaras en el baile!- dijo Jace poniéndose de pie nuevamente y dándole a Alec con la cadera lanzandolo a otro asiento. Jace tomó el tubo y bailo nuevamente sacándose las botas de dos patadas y lanzandolas por la ventanilla que los separaba de Vick, la van dio un grito brusco cuando una de las botas de Jace le dio en la cabeza.

-Oye! Ten cuidado!- lo regañó Izzy. Alec, después de recuperar el equilibrio, volvió a intentar apoderarse del tubo- mucha ropa! Mucha ropa!

Haciendo caso al grito de su hermana, ambos chicos, con movimientos sensuales pero toscos, comenzaron a sacarse la camiseta. Magnus e Isabelle silbaban y lanzaban billetes. Entre empujones y perdidas de equilibrio momentáneas por el movimiento de la van, los dos chicos bailaban intentando ganar su concurso personal. Alec comenzó a quitarse el cinturón, miraba fijamente a Magnus todo el tiempo y el brujo no podía dejar de relamerse los labios inconscientemente.

-Vamos! Usen lo que tienen!- les dijo Izzy aplaudiéndoles, Jace también se había quitado el cinturón y ahora se colgaba del tubo dando vueltas a toda velocidad. Alec se cruzó de brazos molesto antes de atacar a Jace y lanzarlo hacia el asiento mas cercano para después colgarse del tubo. Jace, molesto por la interrupción de su baile, jaló las piernas de Alec para bajarlo del tubo pero solo consiguió quitarle los pantalones.

Isabelle se recostó sobre el asiento riendo a carcajadas y Jace fue a dar al piso con los pantalones de Alec enredándose en su cabeza. Alec perdió el equilibrio y cayó de rodillas quedando en cuatro patas. Magnus abrió los ojos a mas no poder cuando el respingado y lindo traserito de Alec quedó justo frente a él con sus boxers negros que ponían "You can't touch this" cayendo levemente mostrando el inicio de las nalguitas de Alec.

-Esa es una buena vista- dijo Magnus enderezándose en su lugar y estirándose para poner sus manos en la cadera de Alec, pero el chico se movió mas rápido.

-No, no, no- le dijo Alec alejándose gateando, después giró la cabeza para mirar a Magnus, levantando el trasero y señalandole las letras en sus boxers con un dedo- que no lees? You-Can't-Touch-This!

-Como que no?- le dijo Magnus tronando los dedos, Alec salió disparado justo al asiento en el que se encontraba Magnus y el brujo rápidamente se lanzó sobre él, besándolo. Alec enredó sus piernas en la cintura de Magnus por puro instinto y le rodeó el cuello con los brazos. Magnus recorría libremente el cuerpo del Cazador de Sombras estudiando cada musculo. Estaban sumidos en su asunto, con Isabelle intentando huir de la escena íntima con medio cuerpo pasado por la ventanita en la cabina de Vick y Jace luchando por recobrar el equilibrio hasta darse cuenta de que Magnus estaba devorando a su Parabatai.

-Deja a mi hermano! Brujo imprudente! Aléjate de él!- exclamó Jace lanzándose hacia Magnus y Alec para "salvar" a su hermano del "abuso" del brujo. Jace chocó contra los otros dos chicos y tomó a Alec como pudo tirando de él para alejarlo del agarre de Magnus.

-Oye!- se quejó Magnus cuando sintió que Alec desaparecía. Alec cayó al suelo de la van con Jace encima de él abrazándolo y cubriéndolo con su cuerpo para que Magnus no tuviera oportunidad de tocarlo, pero la mente borracha de Alec lo tomó a mal sintiéndose acosado.

-Déjame! No me toques! Magnus!- gritaba Alec intentando safarse del agarre de Jace. Isabelle regresó a la parte trasera de la van al escuchar los gritos de su hermano.

-Ya, quédate quieto! Déjame salvarte!- decía Jace batallando por hacer que Alec se quedara quieto.

-Suéltame! Suéltame, no!- decía Alec dándole manotazos a Jace.

-Deja de golpearme, idiota! Te estoy defendiendo!- exclamaba Jace intentando detener los manotazos que le lanzaba Alec. Isabelle no dejaba de reír y Magnus soltó un suspiro decepcionado.

-Por lo menos sabe con quien dejarse manosear- susurró Isabelle al oído de Magnus haciéndolo sonreír.

Al rato, cuando Jace y Alec habían recuperado su ropa, Magnus le indicó al conductor la dirección a la que quería ir. Siguieron bebiendo, con Magnus preparando bebidas mágicamente y todos riendo y moviéndose al ritmo de la música, incluso Vick. El conductor ya era parte de la fiesta y, por lo borrachos que estaban todos, era fácil olvidarse que Vick era Mundano y que las cosas que hacia Magnus con tanta normalidad frente a los Nefilim le provocaba admiración.

-Eso fue genial!- escucharon a Vick cuando Magnus, sin darse cuenta, movió su mano y la botella sirvió 5 shots de tequila flotando en el aire- como lo hiciste?

-La magia del alcohol, amigo- le dijo Magnus tomando un shot y tendiéndoselo a Vick. El conductor rió tontamente sin dejar de conducir.

-Te harías rico presentando un espectáculo de magia frente a Mundanos, Magnus- le dijo Jace soltando una risa mientras tomaba su shot.

-Si, creo que hasta ganarías mas dinero- siguió Isabelle imitando a Jace.

-Claro que si tengo un espectáculo!- les dijo Magnus poniéndose de pie junto al tubo y haciendo ademanes con las manos como un mago Mundano- y para mi siguiente truco, haré desaparecer a Magnus Jr.- dijo señalando su entrepierna- necesito un voluntario del público!

-Yo! Yo, quiero! Yo!- exclamó Alec saltando en su lugar con una mano alzada. Jace se apresuró a interponerse entre él y Magnus.

-No! Nada de eso! Aléjate!- le advirtió Jace abrazando a Alec y señalando amenazadoramente a Magnus- tócale un pelo a mi hermano y te lo arranco, Bane.

-Ya, ya, no hay que irnos a los extremos- dijo el brujo sentándose del otro lado de la van al ver que Jace se había pegado a Alec como garrapata, no lo soltaría a menos que lo distrajera con otra cosa. Después de unos quince minutos, llegaron a un pequeño bar cerca de la Universidad de Nueva York, a Magnus le gustaba por que siempre estaba repleta de jóvenes, lo que significaba escándalo y risas. Entraron al lugar arrastrando a Vickram con ellos. El conductor ya llevaba varios tragos encima. Llegaron hasta una mesa cerca de la pista de baile y se sentaron.

-Vick, trae bebidas!- le dijo Magnus dándole un billete de 100. El conductor asintió y voló hacia la barra tambaleándose.

-Acaso bebió de la cosa que nos diste?- preguntó Alec mirando como Vick se apoyaba de golpe en la barra.

-Claro que no, como crees que... erm...- Magnus busco en su chaqueta, pero no, no había nada- bueno, tal vez pudo confundirse con un trago.

-Genial, nos quedamos sin conductor resignado, y sin tragos!- dijo Jace.

-Tranquilo, deja que haga su... trabajo...- la voz de Alec se apago al ver que una multitud de chicas con pelucas y coronas que anunciaban una despedida de soltera, entraban por la puerta y le quitaban el lugar a Vick.

-Primera y última vez que mandas a ese por bebidas- dijo Izzy mirando como Vick, que ahora luchaba por ganar la atención de los que atendían.

-No es su culpa que nosotros seamos perfectos y nos tengan acostumbrados a ser atendidos a la primera, Iz- dijo Jace subiendo los pies a la mesa.

-Oh si, casi olvido que había salido con la modestia andante. Voy por bebidas- dijo Magnus poniéndose de pie y caminando hacia la barra, pero al pasar junto a una mesa llena de chicos, todos empezaron a chiflar y reír. Era la típica mesa repleta de jugadores de fútbol americano de la universidad, idiotas, todos. Magnus los ignoró y siguió su camino, pero los tipos no se rendirían tan fácil.

-Es la persona mas gay que he visto- dijo en voz alta y clara un chico rubio sentado a la cabeza de la mesa. Magnus detuvo su andar y se giró lentamente.

-Sabes, eso viniendo de alguien que corre por ahí usando medias, tacleando y echándosele encima a otros tipos y ocasionalmente dándose nalgadas mutuamente, no se me hace un insulto muy ofensivo- dijo Magnus cruzándose de brazos. Varios "Uhhhh" se dejaron escuchar entre los ocupantes de la mesa. Magnus fue hacia la barra y ordenó cuatro bebidas.

-Que sabes de fútbol, los gays no saben nada de deportes- le dijo un tipo enorme que estaba sentado junto a la barra.

-En realidad prefiero el termino bisexual- le explicó Magnus tranquilamente.

-Bisexual, si claro. Los que dicen eso son solo tipos que no pueden conseguir chicas y se conforman con lo que sea que les caiga- dijo el mismo tipo rubio que había iniciado y toda la mesa rió.

-Cierra la boca, idiota, no sabes lo que dices!- exclamó Alec avanzando y poniéndose entre Magnus y los enormes jugadores.

-Oh, llegó el novio al rescate?- preguntó un chico pelirrojo desde el otro lado de la mesa.

-Si, y será mejor que lo dejen en paz!- dijo Alec, todos abrieron los ojos sorprendidos y después echaron a reír. Magnus paso un brazo por la cintura de Alec e intento alejarlo.

-Déjalo, son Mundanos inútiles, no valen la pena- le susurró al oído, pero un chico rubio y enorme que estaba cerca lo escuchó.

-A quien le dices Mu... Mundi... lo que sea que dijiste?!- exclamó haciendo que todos sus compañeros se levantaran del asiento.

-Como sabes que te insulté si no sabes que dije?- preguntó Magnus alzando una ceja.

-Entonces son gays? Los dos?- preguntó burlonamente un chico, Magnus alzó la ceja sin creer la idiotez.

-No, yo soy gay, él no, por eso es mi novio- le respondió Alec sarcásticamente.

-Espera, espera, vimos esto en la clase de psicología- dijo el rubio que tenían mas cerca.

-Vaya, asiste a clases- dijo sorprendido Magnus. Había pensado que era el típico grandulón bueno para nada que solo iba a la universidad por jugar fútbol, la verdad no se equivocaba.

-Acaso eres gay... por que no tienes una fuerte figura masculina en tu vida?- le preguntó el chico filosóficamente, sus amigos soltaron risitas burlonas. Magnus rodó los ojos ignorándolos, pero Alec los miró sin darle mucha importancia antes de responderle.

-No, soy gay por que quiero una fuerte figura masculina en mi trasero...

-Alec!- gritó Izzy alarmada al tiempo que Jace y Magnus soltaban una enorme carcajada- ya basta, solo los estas provocando, no quiero que asesinen a ningún Mundano.

-Vaya, se invirtieron los papeles- dijo Jace mirando a Alec e Izzy. Usualmente era el chico el que andaba preocupándose por todo y a Izzy parecía valerle el mundo.

-Tenemos una pareja de enamorados, señoras y señores!- exclamó otro de los chicos de la mesa y todos comenzaron a gritar burlonamente- iluminennos, quien es el hombre de la relación?- Magnus y Alec entrecerraron los ojos.

-Otra palabra mas insultando a mi hermano y te la verás con mi puño, Mundano!- exclamó Jace. Magnus e Izzy se miraron, eso se estaba saliendo de control.

-Llego un tercero! Vaya esto se esta poniendo bueno- dijo un tipo de color antes de señalar a Magnus- estoy seguro de que entre los dos entretienen al señor Unicornio.

Y entonces Jace y Alec se lanzaron hacia los tipos y comenzaron a lanzar golpes a diestra y siniestra, no importaba si era el que había insultado o el que había reído, ellos mandaban al suelo a cuanto pobre diablo vieran frente a ellos. Izzy no pudo evitar admirar como se coordinaban tan perfectamente, aun estando ebrios. Jace sabía justamente donde estaba Alec y no lanzaba golpes en su dirección, y Alec cubría la espalda de Jace como si fuera parte de su mismo ser.

-Isabelle, un poco de ayuda!- escuchó a Magnus, que señalaba a Jace con la mano mientras él se dirigía hacia Alec.

-Oh, si, claro- dijo la chica lanzándose hacia su rubio hermano para detenerlo.

-Basta, Alec, detente!- forcejeaba Magnus intentando quitar a Alec de encima de uno de los chicos que los habían insultado.

-Que suced...- y Vick iba al suelo por culpa de un golpe en la quijada. Magnus rodó los ojos restandole importancia.

-Jace, vámonos!- Izzy utilizó su látigo para enredar los brazos de Jace para que no los pudiera mover mas y dejara de golpear al pobre chico de color que había osado ponersele en frente.

-Ven acá, Alexander- Magnus sujetaba a Alec por la cintura y tiraba de él para llevarlo a la salida, era mejor irse de ese lugar.

-Magnus, trae el auto, yo los detengo- le dijo Isabelle tomando a Alec del brazo. Magnus asintió y se lanzó corriendo por la van. Izzy tiró con todas sus fuerzas de sus hermanos para poder sacarlos. Los jugadores de americano se ponían de pie lentamente pero no se atrevían a atacarlos de nuevo, al menos no aún- vamonos, par de estúpidos!

Izzy casi corrió hacia afuera con Alec y Jace arrastrando detrás de ella. No quería que se volviera a armar un alboroto, no temía que sus hermanos resultaran heridos, no, que va. Temía que, en lo que Alec y Jace le pateaban el trasero a esos Mundanos, algún Subterráneo que pasara por ahí fuera y los acusara de maltratar Mundanos sin razón. Ese si que sería un problema.

-Vuelvan aquí, cobardes!- gritó el que parecía el capitán del equipo.

-Nos dijo cobardes?- preguntó Alec girándose rápidamente, Jace lo siguió en menos de un segundo.

-Vengan acá y repítanlo, idiotas!- gritó Jace y en efecto, los idiotas le hicieron caso y prácticamente todo el equipo de americano se lanzó contra Alec y Jace, quienes esperaban ansiosos a tirar el primer golpe.

-Isabelle, vámonos!- gritó Magnus frenando con un chirrido de las llantas frente al bar. Isabelle hizo gala de toda su fuerza de Cazadora de Sombras y lanzó a sus hermanos a la parte trasera de la van.

-Acelera, Magnus! Acelera!- gritó Isabelle y el brujo obedeció. Isabelle detuvo a sus dos hermanos para que no saltaran de la van en movimiento, ambos chicos seguían gritando e insultando a los hombres que habían dejado en el bar. Izzy los lanzó hacia un asiento de la van y cerró la puerta antes de que Magnus girara y alguien se saliera.

-Nos falta alguien- murmuró Isabelle una vez que la van bajo de velocidad y comenzó a detenerse, muchas, pero muchas cuadras lejos del bar.

-Y Vick?- preguntó Magnus contando cabezas. Su conductor se había ido. Izzy se encogió de hombros, Alec y Jace no lo habían escuchado, bebían un shot doble cada uno- genial, perdimos al conductor.

-Si Vick se fue, puedo conducir?- preguntó Jace.

-Claro que no!- le dijo Magnus pasándose a la parte trasera de la van para seguir bebiendo.

-Por favor! Solo unas calles!- rogó Jace subiéndose al asiento del conductor y moviendo el volante como niño pequeño.

-Que no, Jace, no sabes ni siquiera los pedales- le dijo Magnus haciendo flotar los vasos y botellas mientras preparaba mas tragos.

-Nunca jamas podre conducir- se quejó Jace enfurruñándose en el asiento del conductor. Magnus miró a su lado, Alec lo miraba con el ceño fruncido.

-Que?

-Déjalo conducir, pobrecito- le dijo Alec señalando a Jace con la cabeza.

-Pobrecito? De pobre no tiene nada, Alexander- dijo Magnus siguiendo con las bebidas, pero podía sentir la mirada de Alec clavada en él. Levantó el rostro nuevamente para mirar al Nefilim. Tenía una mirada implorante y señaló nuevamente a Jace con la cabeza- por que quieres que conduzca?

-Es mi Parabatai, lo quiero feliz- dijo Alec sonriéndole tiernamente a Magnus. El brujo suspiró profundamente y asintió.

-De acuerdo, Jace, puedes conducir- el rubio saltó feliz en su asiento y tomo el volante con ambas manos- pero espera a que yo te diga.

-Si!- dijo Jace asintiendo efusivamente.

-Ustedes dos, hasta atrás- les ordeno Magnus a Alec e Izzy. Los hermanos Lightwood obedecieron y se sentaron en el asiento que estaba pegado a la parte trasera de la van. Magnus tronó los dedos y unos fuertes seguros, parecidos a los de las montañas rusas, aparecieron sobre Izzy y Alec, deteniéndolos al asiento y asegurándolos. Fue entonces que el brujo se giró hacia Jace.

-Adelante, acelera- le dijo antes de tronar los dedos y que cinturones de auto todo terreno los aseguraran a él y a Jace. El rubio pisó el pedal hasta el fondo y las llantas de la van rechinaron y salieron disparados hacia en frente. Gracias a todos los Dioses las calles estaban desiertas y nadie resulto herido. Jace era un desastre para conducir. Magnus tronó los dedos nuevamente y aplicó una capa de magia esponjosa al rededor de la van, cada que estuviera a punto de chocar contra algo, la van simplemente revotaba y volvía al camino.

-Esto es genial!- gritó Jace sin dejar de acelerar, Magnus también reía, se divertía de lo lindo, miró hacia atrás y vio a Alec e Izzy, levantando piernas y brazos y moviéndose violentamente mientras gritaban emocionados, como si fueran realmente en una montaña rusa.

Pronto, Jace se dio cuenta de un letrero rojo en una de las esquinas de la calle, decía en letras mayúsculas "ALTO", así que obedeció. Pisó el otro pedal con todas sus fuerzas y los cuatro se fueron hacia adelante gritando. La van se paró por completo y todos se quedaron en silencio. Magnus vio la señal de alto y después miro hacia Jace, no venía ningún coche por la calle contraria, no que el chico hubiese respetado las mil señales de transito las calles pasadas, pero lo dejó.

-Jace, que esperas?- preguntó Magnus al ver que Jace seguía sin mover el auto después de medio minuto, revisó a los dos Lightwood en la parte trasera, reían fuertemente sin bajar los brazos.

-Esta en rojo y dice "ALTO"- explicó Jace señalando el letrero.

-Si- dijo Magnus alzando una ceja.

-Tengo que esperar a que se ponga verde y diga "SIGA"- le dijo Jace encogiéndose de hombros. Magnus parpadeo un par de veces.

-Nefilim- murmuró con frustración- eso se hace con los semáforos, ese letrero no cambia, acelera!

-Acelero!- exclamó Jace siguiendo la orden y acelero la camioneta provocando que todos soltaran un grito, pero la diversión les duró poco.

-Jace, gira! Gira!- gritó Magnus, pero ya era demasiado tarde. El auto se fue de frente, rompiendo una baranda de protección y se fue directito al rio, los cuatro ocupantes gritaron, Magnus no podía detener la caída, no ahora que estaba tan mareado, necesitaba demasiada magia, así que simplemente cerró los ojos y espero el impacto, que no se hizo esperar. La van cayó al rio y todos se quedaron en silencio unos segundos antes de reaccionar.

Magnus tronó los dedos y los cinturones y seguros de todos desaparecieron mientras el agua comenzaba a llenar la van, con otro chasquido de sus dedos todas las puertas se abrieron para que los Nefilim y él pudieran salir lo mas rápido posible, lo malo fue que la van comenzó a hundirse mas rápido. Como pudieron, los cuatro salieron del auto y nadaron por el agua congelada hasta llegar a la orilla.

Los cuatro temblaban de pies a cabeza, se sentaron a la orilla del rio respirando pesadamente por el esfuerzo y miraban la zona en la que la van había caído, seguían saliendo burbujas. Alec se arrastró hasta quedar al lado de Magnus y el brujo lo abrazó. Jace se arrastró y abrazó a Izzy para brindarse un poco de calor.

-Si la puedes sacar, cierto?- preguntó Izzy sin dejar de ver las burbujas que salían de la van. Magnus rodó los ojos.

-Sabia que no debía dejarte conducir- dijo Magnus mirando con ojos entrecerrados a Jace.

-o-o-o-o-o-o-o-

Después de batallar un buen rato sacando la van del agua, pudieron emprender el camino de regreso. El sol había salido hacia un buen rato ya. Debían ser cerca de las nueve o diez de la mañana. Alec dormía plácidamente sobre la alfombra de la van, Jace ocupaba el asiento del copiloto mientras Magnus había recuperado el volante. Isabelle vigilaba que Alec no se moviera mucho con las vueltas y se golpeara con el tubo.

-Están seguros?- preguntó Magnus, estaba a una vuelta de llegar al puente de Brooklyn, bien podía llevárselos a dormir y comer algo para bajarles la borrachera.

-Papá llevara a mamá a comprar el desayuno, correremos a nuestras habitaciones y listo- explico Jace, su voz tan pastosa y ebria que no le dio nada de confianza a Magnus.

-Creo que mejor los llevo a mi departamento y duermen un rato.

-No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no no, no, no, no, no, no, no...

-Ya!- grito Magnus exasperado.

-Es que si mamá no nos ve ahí cuando llegue con el desayuno, se va a enojar- explicó Izzy. Magnus suspiró y le echó una mirada a Alec, seguía dormido en el piso de la van, bueno, al menos ya había descansado una media hora y podría llegar a su habitación sano y salvo.

-De acuerdo, al Instituto- dijo Magnus girando hacia la izquierda. Ya se preocuparía mas tarde en donde habían dejado al pobre conductor. Tardaron unos diez minutos en llegar a la puerta delantera del Instituto, Jace e Isabelle hacían todo lo posible por aparentar sobriedad. Magnus rodó los ojos al ver el pésimo trabajo que hacían. Detuvo la van frente a la puerta y se pasó para atrás para despertar cuidadosamente a Alec.

-Alexander, despierta, ya llegamos- susurró acariciando la mejilla del chico. Izzy y Jace habían salido de la van y caminaban con la espalda recta pero haciendo un ligero zigzag hacia la puerta para abrirla. Alec abrió los ojos lentamente.

-No, quiero dormir- murmuro acurrucándose contra la mano de Magnus.

-Lo se, vamos, arriba, en tu cuarto puedes dormir- le dijo Magnus empujándolo suavemente para sentarlo. Alec gimió molesto pero cooperando.

-Me llevas a mi habitación?- le preguntó abriendo un poco los ojos azules.

-Oh, no sabes lo mucho que me gustaría, pero no, tendrás que llegar solo- le dijo Magnus, no podía arriesgarse a que los Lightwood lo miraran llegar con su primogénito semi inconsciente y oliendo alcohol. Lo ayudó a salir de la van y lo llevó con Jace e Izzy- ven, apóyate en Jace.

-No, no quiero a Jace, te quiero a ti- dijo Alec colgandosele del cuello, Magnus solo pudo sonreír y girar al chico hacia él para besarlo. Lenta pero firmemente.

-Vamos, rápido- dijo Isabelle gesticulando en dirección de los chicos para que entraran de una vez. Magnus se separó de Alec y lo empujó hasta que quedó junto a Jace, el rubio lo ayudo a mantenerse en pie.

-Me llamarás?- le dijo Alec cerrándole un ojo a Magnus, justo como él lo había hecho la primera vez que había visto a Alec. No pudo evitar besarlo nuevamente, solo separándose cuando Jace lo empujó hacia un lado.

-Ya basta! Basta! Basta! Déjalo!- dijo tomando a Alec por la cintura y metiéndolo por la reja.

-Envidia!

-No voy a dejar que robes la inocencia de mi hermano! Brujo degenerado!- gritó Jace haciendo que Magnus soltara una carcajada.

-Directo a las habitaciones- le advirtió Magnus a Isabelle, no creía que sus padres tardaran mucho en llegar.

-Directo!- dijo la chica entrando en el Instituto y cerrando la reja tras ellas, después se giró hacia Magnus para hablarle por entre los barrotes- y no le hagas caso a Jace, si quieres robarle la inocencia a mi hermano, yo te ayudo. Le hace falta una buena arrastrada, se lo que te digo.

-Adiós, Isabelle- dijo Magnus negando con la cabeza mientras sonreía.

Mientras Magnus emprendía su camino a dejar la van fuera de las oficinas de PartyBus, los tres adolescentes Lightwood luchaban por llegar a sus habitaciones. Jace y Alec se balanceaban de un lado al otro tarareando una canción. Isabelle se acababa de dar cuenta de las ganas terribles que tenia por ir al baño, debían darse prisa. Tal vez si llegaba rápido al baño del vestíbulo, no le tomaría mas de dos minutos en... el sonido de algo pesado cayéndose secamente interrumpió sus pensamientos, se giró hacia sus hermanos y vio a Alec en el piso y a Jace intentando alcanzar a Iglesia que estaba encima de una barda. Al escuchar el sonido Jace también se había girado y fijado su vista en Alec.

-Que paso?- preguntó Isabelle acercándose a su hermano, quien se giraba lentamente y dejaba ver un feo raspón en la mejilla izquierda.

-Te caíste?- preguntó Jace volviendo junto a Alec.

-No, vi una moneda y quise levantarla. Claro que me caí! Se supone que debes ayudarme! Parabatai inútil!- le gritó Alec provocando que Jace riera a carcajadas buscando apoyo en una de las bancas, Isabelle revisó la mejilla herida de Alec, pero luego comenzó a reír también.

Un concurso de risas idiotas se dio lugar, Alec seguía tirado en el suelo, Jace se había dejado caer sobre la banca e Izzy cruzaba las piernas para no orinarse. Ninguno de los tres podía dejar de reír, a Jace le daba risa la risa de Alec, a Alec le daba risa la risa de Izzy y a Izzy le daba risa la risa de Jace. Eso y el hecho de que no podían moverse el uno sin la ayuda del otro era una combinación para un desastre seguro. Y el desastre no se hizo esperar.

-Que demonios pasa aquí?!- escucharon los tres y la risa cesó al instante. Los tres chicos se giraron hacia la reja, donde Maryse estaba de pie con una bolsa de comida en una mano y la otra apoyada firmemente en la cadera. Robert estaba tras ella con una bolsa de iHop en cada mano- acaso salieron con Magnus Bane anoche?

Hubo un profundo silencio después de la pregunta de Maryse. Alec seguía en el suelo, Isabelle cambiaba el peso de un pie a otro intentando retener líquidos, y Jace luchaba con todas sus fuerzas por poder sentarse derecho en la banca, cosa que no lograba. Después Alec pareció reaccionar, se removió en el piso y sacó de su chamarra el papel que le había dado Magnus.

-Trajimos la tarea, papá- dijo Alec estirando el papel enrollado hacia Robert, quien abrió los ojos a mas no poder intentando con todas sus fuerzas hacerse invisible.

-No es cierto- dijo Maryse incrédulamente mirando a su esposo- tu los ayudaste a irse!

-Nos sobornó!- exclamó Jace, aun recostado sobre la banca.

-Amenazó!- siguió Izzy.

-No es verdad!- se excuso Robert cuando Maryse lo miro con la boca abierta- como les crees?!

-Ya no se a quien creerle- dijo Maryse mirando a sus tres ebrios hijos y a su marido.

-Necesito un baño, de emergencia- dijo Izzy sentándose en el suelo con las piernas cruzadas.

-Pues te vas levantando, jovencita, no te voy a cargar- dijo Robert acercándose y tomando el papel que le tendía Alec antes de que Maryse lo tomara y lo quemara.

-Pues yo creo que si, por que no quiero desastres en los pasillos, Robert. A ver como le haces para llevártelos a los tres- dijo Maryse caminando firmemente y saltando a Alec para poder entrar hacia los elevadores.

-Vamos! Por lo menos ayúdame con Isabelle!- fue lo ultimo que escuchó Maryse entre las risas de sus hijos antes de entrar en el elevador. No sentiría lastima por su esposo, no esta vez, él se había provocado eso y él asumiría las consecuencias.

-Que es el ruido de afuera, mamá?- preguntó Max bajando lentamente las escaleras del vestíbulo hacia los elevadores.

-No es nada, no te preocupes, te traje un waffle- le dijo Maryse acariciándole la cabeza a su pequeño.

-Mmm, waffle!- exclamo Max brincando de alegría, Maryse sonrió mirando a su pequeño "bebe".

-Ay, por favor nunca crezcas y te conviertas en un adolescente desobediente y estúpido- le dijo entregándole el paquete que traía su waffle. Max la miro confundido unos segundos pero después salió corriendo hacia el comedor para comenzar a comer.

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La fiesta me quedo un poco mas larga de lo que había pensado..xD pero valió la pena..! y por supuesto que tengo el Resumen que Magnus le hizo a Robert..xD pero su publicación dependerá de que tantos reviews tenga el primer Viernes Tranquilo a la Magnus Bane..! dejen reviews..=D