Se necesita asesora del hogar

ArokuRaita

Disclaimer: One Punch Man es de ONE y Yuusuke Murata y este fanfic no tiene fines de lucro.


1. La primera (y única) opción

- Necesitamos alguien que haga el aseo- dijo Saitama apenas abrió los ojos. Su departamento era un desastre, con ropa y platos usados en el suelo, restos de comida sobre la mesa y una fina capa de polvo sobre los muebles.

- Sensei, ¡lo lamento mucho! No había podido últimamente, debido a la gran presencia de kaijins, pero me pondré al día de inmediato- exclamó Genos, analizando el recinto con sus cámaras oculares.

- Pero... ¡Eres un héroe clase S!

Luego de unos segundos, Genos sacó su libreta y comenzó a escribir.

- ¿Qué haces?

- Sensei, no entiendo su razonamiento, así que trataré de analizarlo...

- Mejor escribe un anuncio que diga "Se necesita asesora del hogar"- Saitama recordó los 'maid café' y no pudo evitar agregar - "Uniforme de criada requerido".

Genos lo miró, extrañado.

- Si coloco eso, muchas candidatas pueden sentirse intimidadas u ofendidas, sensei.

- En ese caso, que sea opcional- suspiró el héroe calvo.


"He entrenado durante varios meses para ser más veloz que Saitama. Creo que, por fin, estoy listo para retarlo una vez más", se dijo Sonic mientras se dirigía al apartamento de su némesis. De pronto, se detuvo ante un poste. En él, habían pegado un papel que decía:

"Se necesita asesora del hogar puertas adentro(tachado) afuera. Uniforme de criada opcional. Debe saber cocinar, limpiar con rapidez, lavar y planchar. Sueldo conversable. La dirección es... [en la Zona Abandonada]. Llamar a Saitama al celular..."

El mismo anuncio estaba alrededor del edificio de Saitama, pero no más allá. "Este tipo es un idiota, ¿no sabe que él y su robot son los únicos habitantes de este sector?", pensó el ninja, sonriendo con desprecio. ¿Valía la pena esforzarse tanto por ser más veloz que Saitama, si en inteligencia lo superaba con creces?

De todos modos, sería interesante conocer la vida diaria del tipo ése, sus entrenamientos, alimentación y filosofía de vida. Una asesora ambiciosa podría sonsacar su secreto mejor guardado, ¡el de su fuerza y velocidad extraordinarias!

Siguió caminando hacia el apartamento del pelado, cada vez más lento, hasta que se detuvo... Y salió corriendo hacia los distritos más céntricos de ciudad Z. Tenía una idea.


- Hace una semana pusimos los anuncios y aún no viene nadie - se quejó Saitama.

- Yo recorrí toda la ciudad pegando carteles. Tal vez hubiese sido mejor no mencionar la dirección, pues la gente sabe que queda en la Zona Abandonada de Ciudad Z, sensei - respondió Genos.

- No seas tonto, tienen que saber dónde queda el departamento.

En eso, llamaron a la puerta. Cuando Genos abrió, encontró a una 'mujer' de cabello negro, ojos azul claro, complexión delgada, poco busto... y estaba vestida como una criada.

- Buenas tardes. Vengo por el aviso, me llamo Velocidad de... de Limpieza... Sonia. Mucho gusto.

Genos entrecerró los ojos.

- ¿"Velocidad de Limpieza Sonia"? ¿Qué clase de nombre es ese?

- Tengo una microempresa de aseo, ¿vale?

- Disculpe, señorita, pero usted me recuerda mucho a una persona muy molesta y pervertida que siempre acosa a mi sensei...

El joven disfrazado se sonrojó y, de pronto, Genos sintió que su mejilla izquierda ardía. Le habían dado una cachetada muy rápida.

- ¡Usted es un insolente! ¿Cómo puede hablarle así a una dama?

- ¡Hey! ¿Qué pasa afuera? ¿Quién es, Genos? - exclamó Saitama, acercándose a la entrada.

- Estoy aquí por el aviso de asesora, señor - respondió Sonic. Cuando Saitama le vio, una amplia sonrisa apareció en su rostro.

- ¡Ah, buenas tardes! Me alegro que haya venido... ¡Y viene vestida de criada! Está contratada. Pase, pase.

El apartamento seguía siendo un desastre y Sonic tuvo que reprimir una arcada cuando vio los restos de comida desparramados por la mesa y el suelo. "¿Cómo pude pensar que esta era una buena idea? Además, no parece que tenga dinero", se reprochó.

- Genos le explicará cómo funciona nuestro hogar - dijo Saitama, mientras dedicaba su atención a un manga.

- ¿Está bien contratarla sin hacerle una entrevista, sensei? - consultó el cyborg, bajando la voz.

- No tenemos más opciones, ¿no?

Genos asintió y, dirigiéndose a 'la joven', empezó:

- A las 10 de la mañana, Saitama-sensei se levanta. A las 10.15 toma desayuno y entre las 10.30 y las 11.00 realiza una investigación a través de los medios de comunicación. Luego sale y, a las 14 horas, almuerza. Después de las 16 horas, sale nuevamente a combatir el mal y vuelve a las 20 horas, para cenar y revisar las noticias de la televisión. Todas las semanas, cuando hay venta especial, va a comprar al konbini más cercano y trae frutas, verduras, arroz, huevos, carne, leche...

- Creo que es suficiente, Genos.

- Como diga, sensei. Respecto del dinero... - Genos sacó un fajo de billetes de 10.000 yenes de su bolsillo. Sonic sonrió.

- Podemos llegar a un acuerdo, no hay problema - exclamó el ninja alegremente. Luego, se puso serio y agregó: - No tengo dónde ir, ¿puedo quedarme acá? ¿O en el departamento del lado?

- Al lado está bien - dijo Genos, mientras que Saitama respondió, al mismo tiempo que su discípulo: - Acá está bien.

Los dos se miraron, extrañados. Con un gesto, Sonic le restó importancia al tema y decidió quedarse en el departamento contiguo. Eso haría una mujer. Además, le daba asco compartir un espacio tan sucio y reducido con sus adversarios.

- Entonces, mañana empiezas con tu trabajo. ¡Un gusto conocerte, Sonia-chan! - se despidió Saitama, feliz. Genos sólo asintió. Sonic falseó una sonrisa, que desapareció apenas salió del apartamento. "'Sonia-chan'... Ya verás cuando te supere, maldito Saitama", pensó el ninja.