Hola aquí dando lata con esta loca idea XD

Basado en un manga que leí hace mucho que se llama Oyaji Hiroimashita les recomiendo ese manga si no lo han leído XD.

La idea surgió al imaginarme a Kanda en la misma situación pero como saben Kanda x allen son especiales así que tratare de hacerlo diferente en cuanto a la mayoría de las escenas espero no cometer plagio si no ya me llevo -.-U

owo me tome el atrevimiento de incluir a otra parejita será primera vez que escribiré de esa pareja espero tener suerte con esa XD

Este fic es a modo de disculpa ya que no he actualizado muy seguido pero no he podido avanzar en los otros fic las ideas no surgen como quisiera =.=U, y en medio de la frustración se me ocurrió esta loca idea y no quise desaprovecharla XD las ideas son nulas así que hay que sacarles provecho en caso extremo de que aparezca una XDD

~ Recogí a un bastardo ~

Capitulo 01. Bastardo a la entrada

Son las 8:40 de la noche y yo aquí de vil esclavo en la maldita oficina, llevo aquí más de 12 horas trabajando como pendejo para el bien de mi jefe que se la pasa haciéndose el imbécil por doquier, se mete en lo que no le importa pero cuando más se le necesita para que ponga su estúpida firma el imbécil desaparece o bien su asistente personal lo tiene que amarrar a la silla.

-Hug quizá debo de aprovechar la próxima vez para aventarlo de la ventana tal vez así con la caída se le salga tanta mierda que tiene por cerebro- dijo de manera baja pero enfadada- cualquiera que viera al estúpido ese pensaría que es la persona calificada para el puesto, pero no es más que una simple fachada porque después de que entrar aquí en los primeros cinco minutos esa imagen cayó en un abismo del cual no hay salida, che maldito lunático me vino a tocar de jefe- espetó mientras tomada un bonche de hojas y las alineaba para colocarlas dentro de un folder en color crema- bah no debo desperdiciar mi tiempo pensando en ese pedazo de inútil.

Con la mirada cansada busco el reloj que posaba en su muñeca en cual marcaba las 8:45.

-Bien eso es todo por hoy- dijo mientras se ponía en píe empujando la silla con la parte trasera de sus piernas alejándolo lo suficiente para poder empezar a recoger su escritorio, dejando en completo orden cada documento que estuviera ahí.

Terminando de acomodar todo sobre su escritorio dio una vista rápida hacia la oficina de su jefe que se encontraba en sombras mirando con recelo cada rincón, se estiro un poco sintiendo un dolor punzante en la espalda.

-¡Joder! Maldita silla incomoda-dijo mientras pateaba a la silla que salió disparada a un lado, miro de nuevo a la oficina de su jefe y sus ojos miraron la cómoda silla que estaba tras el escritorio- che- dijo mientras pensaba que él se merecía una silla cómoda y no su jefe, por que el si hacia su trabajo y no se andaba haciendo el pendejo en cada rincón y mucho menos ponía estúpidas excusas para escaquearse del trabajo que de por si era una montaña interminable, tomo su maletín en el cual metió uno que otro documento, lo cerro y lo tomo con una mano, apago las luces y cerro .

Saliendo de la oficina escucho en tintineo del reloj anunciando las 9:00 de la noche, genial otro día atrapado en la oficina estaba por terminar, normalmente su horario era de las 8 a las 4 de la tarde pero debido a que un imbécil se le olvido avisar de que este mes habría inventario ahora estos últimos días había estado prácticamente todo el día llegaba desde las 7 hasta las 9 de la noche que era la usual hora en la que estaba saliendo.

-che maldito inútil al que se ocurrió avisar al último momento- dijo de manera enfadada un ruido sonó desde su interior avisándole que ya era hora de comer algo- mierda- dijo recordando que por culpa del maldito aviso de última hora no había comido bien, estaba pensando que cuando todo ese relajo de mierda que era la inspección terminara el mismo se encargaría de dejar irreconocible al imbécil que se la había ocurrido dejar el aviso a último minuto. Por que quien en su sano juicio se le ocurría avisar de un inventario a tan solo escasos tres días, como podían tener listo el basurero que tenían por oficina en tal solo tres días si esa oficina estaba llena de inútiles como su jefe, si definitivamente aquel idiota que se la haya ocurrido semejante estupidez probaría el sabor de los puños de Kanda.

El ruido de su estomago hace de nuevo una orquesta en su interior.

-che maldita sea la hora en que acepte trabajar en este basurero de oficina repleto de idiotas.

Con el enfado claro en su rostro salió de ahí tomando rumbo hacia su casa la cual quedaba lejos, tenía la costumbre de caminar pero ahora el no haber comido y estar trabajando seguido sin parar por días estaba pasándole factura a su cuerpo que a cada paso que daba sentía como las piernas le flaqueaban dando la impresión de ser de fideos cocidos, la cabeza le empezaba a dar vueltas y sentía que una oscuridad lo invadía, sintiéndose pesado como el plomo que le daba la impresión que si caía haría un agujero en el suelo al impacto.

-mierda- dijo al momento de que daba pasos como zombi recién salido de una película de terror- solo falta poco- se dijo a si mismo al divisar que solo le faltaba un tramo para llegar a su casa.

El entorno pesado se volvió más y sentía que la oscuridad se acercaba cada vez más a él tratándolo de devorar, sudando un poco sus cabellos lacios y negros como la noche se pegaron a su frente, agarrándose de las paredes siguió tambaleándose hacia su casa arrastrando el maletín que se encontraba sucio.

-maldita sea- dijo de nuevo en un chasquido mientras su mirada encontraba todo en penumbras, su cuerpo cayo como piedra al suelo.

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Se encontraba de los más aburrido mirando por la ventana de su cuarto, era miércoles por la tarde y ya había terminado con todos su deberes escolares, así que no tenía más remedio que perder el tiempo en algo. Decidido tomo su celular y cartera para salir de su cuarto, se aseguro de salir sigilosamente ya que no quería que lo siguieran, camino hasta llegar a la sala y después a la puerta de su casa, quito el seguro para después teclear rápidamente los números de la alarma par que esta no sonara y empezara a sonar creando un caos y lo peor que delatara que se estaba escapando.

Al salir cerro de la misma manera, tomo camino escondiéndose entre los árboles y arbustos que habían desde la entraba de la calle hasta la de su casa, se asomo entre el árbol que utilizaba de camuflaje para ver que no estuviera nadie por entrar ni tampoco que hubiera alguien dando la ronda de seguridad.

-Bien- se dijo a si mismo saliendo de ahí para correr un poco hasta el portón de su casa, el cual estaba cerrado con llave, saco un papelito para de nuevo teclear un numero de seguridad que le permitiera salir, cuando la puerta estuvo abierta salió con un gran paso, pero no contaba con que algo estuviera tirado en la entrada de su casa impidiéndole pasar libremente y por consecuencia al no verlo lo mandara directo al piso cayendo encima del bulto.

-Pero qué demonios!- dijo en un grito de sorpresa mirando al bulto que se encontraba debajo suyo- he!- expreso con cierto asombro interrogativo, mirando atentamente el bulto en el piso- ¿pero que hace un tipo tirado en la entrada de mi casa?- se empezó a poner en pie cuando de pronto sintió como alguien lo miraba por la espalda, con temor se volteo lentamente con los nervios a flor de piel.

-"genial por culpa del tipo este me han atrapado en mi escapada"- pensó el chico.

-Joven Walker- dijo una voz fuerte con un tono de reprimenda

-…- no contesto solo se volteo para poder mirar al que estaba atrás de él.

-Joven Walker cuantas veces le he dicho que no debe de escarparse de esa manera, si quiere salir debe de decírmelo.- dijo el hombre.

-como si me dejaran salir- dijo el- como sea Ticky será mejor que regrese a m i cuarto por lo visto la escapada de hoy se echo a perder.

-Como diga joven, por cierto que es eso que está ahí tirado- señalo el bulto inconsciente del suelo.

-hug?- volteo a ver al bulto y pudo ver claramente que se trataba de un hombre, un hombre que parecía mayor que él pero no más que Ticky su mayordomo- al parecer es un tipo- dijo simplemente- como sea será mejor que lo llevemos adentro.

-como!- expreso sorprendido el mayordomo.

-si lo que oíste hay que llevarlo a dentro no pienso dejar a un hombre ahí tirado en la puerta de mi casa además por el semblante que se le ve y la ropa que trae no parece ser un mal tipo, además me conoces y sabes que no dejaría a una persona ahí tirada a merced en la calle.

-Como quiera joven pero después si lo regañan sus padres no hare nada para ayudarlo.

-ja no importa, bien llévalo a mi cuarto.

El mayordomo suspiro, se agacho un poco para tomar al bulto desconocido y empezar acomodarlo en sus brazos para meterlo a rastras a la casa, subió las escaleras que lo dejaron un poco cansado, entro al cuarto del joven y deposito al extraño en la cama que no daba señal alguna de despertarse enseguida.

-mira- señalo el joven el mayordomo volteo y vio que el joven tenía en su mano una identificación con la fotografía del extraño que estaba en la cama.

-pero cuando fue que tomaste la cartera- dijo el mayordomo con mucha sorpresa.

-eso es lo de menos aquí dice que se llama Yu Kanda, Yu Kanda- repitió de manera lenta y en tono bajo, levanto su vista para mirar más claramente al que se encontraba en su cama, pudiendo ver más los detalles de la cara, recorriendo su vista en el extraño se perdió en sus facciones que eran delicadas pero sin dejar de ser masculinas, recorrió el cabello que era de un color negro con destellos azules de un lacio impresionante.

Ticky se quedo observando como su pequeño amo se perdía mirando al extraño, sonrió para sí.

-Bueno Ticky será mejor que tengamos algo de comer cuando despierte, por la pinta que trae se ve que no ha comido en días y tampoco dormido.

-Está bien regresare con la comida lista- dijo para salir de ese cuarto dejando a su amo a solas con ese extraño sujeto.

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-Perece que ya esta por despertar- dijo el joven

-Hum parece que si- le respondió su mayordomo.

-"que mierda pasa, escucho voces a lo lejos, será acaso los escandalosos de mis vecinos, no, no lo creo ellos suenan diferente, pero logre llegar a mi casa"- se dijo con alivio mientras trataba por recuperar la conciencia.

Trato de abrir los ojos pero sus parpados parecían estar cocidos por que no querían ceder sus impulsos para ser abiertos, un dolor le recorría el cráneo.

-Mira parece ser que ya está por abrir los ojos- escucho a lo lejos que lo decía una voz completamente extraña para él.

Perezosamente abrió los ojos mirando todo en entorno borroso, parpadeo varias veces para tratar de aclarar su vista, cuando de nuevo escucho la extraña voz seguida por otra. Se pregunto cómo diablos unos extraños habían entrado a su casa, cuando se recuperara se encargaría de sacarlos a patadas.

-che- se dijo mientras posaba su mano en la cabeza y por fin su vista estaba lo suficientemente clara.

-vaya al fin despiertas- le dijo la extraña voz que había escuchado antes.

Levanto su vista para ver a un joven mucho menor que él con el cabello blanco y de figura delgada que lo miraba fijamente con dos enormes ojos de color plata con un brillo único en ellos.

-qué alivio- le escucho decir- ya me empezaba a preocupar por qué no despertabas.

-Pero que mierda!- dijo en un grito

El joven solo lo miro sorprendido.

-tú! ¡Como mierda entraste a mi casa!- lo señalo acusadoramente.

-No hable de esa manera- dijo una segunda voz que se trataba de un hombre mayor que él.

-descuida Ticky- dijo el peliblanco

-pero Allen como puede dejar que hable de esa manera en su cuarto.

Momento se dijo el japonés, su cuarto acaso había escuchado mal.

De pronto el recuero vino de manera fugaz a su mente, el tambaleándose en la calle arrastrando su maletín, divisando su casa a lo lejos sintiendo como la oscuridad lo acogía, mierda se dijo al parecer se había quedado inconsciente en el suelo. Mirando rápidamente todo lo que estaba a su alrededor de un lado a otro se dio cuenta de que efectivamente no estaba en su casa. Con la sorpresa marcada en su cara miro a los dos que estaban frente a él.

-………- las palabras no salían estaba demasiado sorprendido por haber quedado tirado en la calle inconsciente debido a la falta de sueño y alimento sin contar las indeterminables horas de trabajo que había tenido, sumándole que había despertado en un lugar extraño ajeno a su cómoda casa, si n definitiva haría picadillo al idiota que había dicho lo del inventario a última hora.

-Te encuentras bien- le dio el joven peliblanco que se había sentado a un lado de el en la amplia cama.

-Che- dijo como respuesta.

-Creo que eso quiere decir que sí.

-Tienes hambre?

-No- dijo secamente pero un ruido fuerte sonó proveniente de su estomago, se maldijo mentalmente por semejante bochorno.

-me parece que tu estomago dice lo contrario- dijo de manera divertida el peliblanco- me tome la libertad de pedirle a ticky que te preparara algo de sopa, eso te haría bien.

-che no te pedí nada

-se que no lo hiciste

-no me gusta la sopa

-bien entonces que es lo que te gusta, ticky lo preparara y si el no puede lo compramos y ya que dices Kanda

Acaso había escuchado bien, el pequeñajo ese lo había llamado por su nombre.

-Como mierda sabes mi nombre?

-Eh pues revise tu cartera

-que! Como te atreviste hacer eso

-me atreví porque estabas tirado en el suelo en la entrada de mi casa me tome la molestia de meterte a mi casa sin conocerte, y si tome tu cartera fue para saber tu nombre y si encontraba algún teléfono en donde pudiera avisar

-che

-así que es lo que te gusta comer Kanda o debería decirte Yu

-de ninguna manera me llames Yu

-por que

-por qué no

-y por qué no

-Por que odio ese nombre

-por que

-ah~ - grito exasperado- lo odio y punto

Suspiro- está bien te diré Kanda a secas

-che- volteo el rostro a la derecha vio su maletín que estaba en la silla cerca del escritorio- espero que no hayas revisado – dijo señalando con la mirada hacia el maletín.

-eh que te pasa no soy un figón- el japonés solo guardo silencio- ya te dije que solo revise tu cartera para saber quien eras

-debería de agradecerle al joven Walker por haberte recogido- escucho como lo decía el mayordomo que repondría al nombre de ticky- además es natural que hayamos revisado su cartera encontrarnos una persona tirada en la entrada ya es algo sospechoso no lo cree joven Kanda.

-ya cállate Ticky- le dijo el peliblanco

-che

El peliblanco se acerco más al japonés para mirarlo más.

-che que tanto me vez

-es que realmente eres lindo

La quijada se le cayó a la cama y los ojos se le abrieron enormemente al igual que a ticky.

-joven Walker como se atreve a decir eso- expreso el mayordomo

-es la verdad Kanda es muy lindo

"Pero que mierda!"- yo no soy lindo!- como se atrevía un mocoso como esa a llamarlo lindo.

-pero es la verdad- dijo sin preocupación en el tono más normal.

-che

-eso no es verdad joven Walker

El peliblanco solo miro a su mayordomo con un puchero en el rostro.

-bueno el médico dijo que no tienes nada grave que solo te desplomaste por el exceso de trabajo y a la nula comida que has llevado sin contar que no has dormido lo suficiente.

-medico!

-si el medico

Como mierda se atrevía ese a llamar a un medico sin su consentimiento.

-quita esa cara es normal estabas tirado en la entrada de mi casa me preocupe por ti así que decidí que lo mejor sería que te revisara un medico, afortunadamente no era nada grave con un descanso merecido estarás bien, pero ya no deberías de fatigarte demasiado en el trabajo- le dijo en modo de reprimenda

-che "pero que se cree ese mocoso"- como sea será mejor que me vaya a mi casa- estaba poniéndose en pie cuando una mano lo detuvo.

-estás seguro que te encuentras bien?-

-che

-estás seguro?

-joven Walker no se acerque tanto a el

-y por que

-quien sabe si tenga alguna enfermedad contagiosa

-nani! Yo no tengo un una puta enfermedad!

-es verdad el médico dijo que él no estaba enfermo

-quien sabe si el médico no se dio cuenta de eso

-tu maldito mayordomo de mierda- dijo al ponerse de pie de un salto sobre la cama dispuesto a lanzarse al mayordomo para darle la paliza de su vida.

-vamos Kanda cálmate- dijo el peliblanco tratando de calmarlo para que no lo dejara sin mayordomo.

-che- recobro la compostura- será mejor que me largue de aquí.

-pero antes de eso debería de agradecer al joven no lo cree?

-che ni de coña

-que es lo que dijo- ahora el mayordomo era el que estaba dispuesto a sacarle la lengua al japonés.

-calma ticky.

-pero joven

-no hay problema – dijo mostrando una sonrisa aunque en el fondo estaba algo decepcionado.

-che-volteo buscando su saco cuando de pronto cayó en cuenta de que no estaba vestido con su ropa, traía puesto un pijama de color azul celeste mirando estupefacto al pijama no se dio cuenta de que el peliblanco se había acercad de nuevo a él.

-cuál es la prisa de irte a casa ¿acaso alguien te espera allá?

-no

-entonces por qué quieres irte tan pronto

-a ti que te importa moyashi

-moyashi?

-como se atreve a ponerle mote al joven Walker!

-che me atrevo porque quiero

El mayordomo de nuevo quiso lanzarse contra él.

-basta- dijo el peliblanco quien estallo a carcajadas después de decir eso.

-che y porque mierda te ríes moyashi

-si joven por que se ríe

-por nada

-che, en donde esta mi ropa

-está ahí- señalo hacia un pequeño mueble en el cual estaba la ropa lavada y perfectamente planchada.

El japonés solo la miro. Se puso en pie dispuesto a ponerse su ropa cuando volteo a verles.

-che que piensan quedarse ahí para verme desnudo

-si- dijo el peliblanco- pero ticky no asi que sal- le dijo al mayordomo.

-Que!- fue lo que expresaron los dos.

-hora sal de aquí ticky- el joven movió su mano para hacer que el mayordomo saliera del cuarto, este salió a regañadientes diciendo que no hiciera algo indecente, se fue a su cuarto después de todo el extraño parecía que iba a irse en cualquier momento.

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Termino por cambiarse de ropa rápidamente con la incomodidad de que el peliblanco lo estaba mirando.

-che que no tienes algo más que mirar.

-no

-che

-tienes novia?

-"¡pero que le pasa al mocoso ese al preguntarle semejante cosa!"

-dime la tienes?

-no tengo

-qué edad tienes?

-che que te importa maldita sea

-si me importa

-pero que jodidos te pasa!

-nada solo quiero saber tu edad eso es todo pero si no me la quieres decir es porque te da vergüenza admitir que ya estas viejo.

-que no estoy viejo

-entonces cuántos años tienes

-che, 25

-vaya si eres mucho mayor que yo, yo tengo 17 y mi nombre es Allen Walker te lo digo porque no has tenido la educación de preguntármelo.

-che ni lo tenía pensado moyashi

Con un puchero en el rostro el peliblanco se le quedo mirando, viendo que estaba finalmente vestido y listo para marcharse.

-Che que tanto me miras moyashi

-nada en especial, solo que te ves bien

-che

-entonces ya te vas

-no estoy por enterrarme en tu cama

-…- con un nuevo puchero en el rostro- bien pero sabes una cosa Yu~

-que no me llames Yu maldita sea

-no estoy dispuesto a dejarte ir fácilmente.

-pero que mier…

-porque me he dado cuenta de una cosa

-……

-al parecer me atraes

-"que!"- dijo al borde del shock

-me atraes y no pienso dejarte escapar

-estas demente- dijo al momento de tomar su maletín dirigiéndose a la puerta del cuarto- si piensas que voy a agradecerte eres un idiota.

-tú me debes una por recogerte

-yo no te pedí que lo hicieras

-ya lo sé pero has oído el dicho del que el que se lo encuentra se lo queda

-y que mierda tiene que ver eso

-que yo te encontré tirado en la entrada de mi casa yo te recogí así que yo me quedo contigo y serás mío.- dijo mostrando una sonrisa.

Continuara…

Notas: bueno espero y les guste está loca historia que no pienso hacerla larga cuando mucho 5 o 6 capítulos si no es que menos dependiendo de cómo aflore mientras la escriba.

Si quieren continuación háganlo saber a través de un valioso review.