Los personajes de Saint Seiya Soul of Gold no me pertenecen. Pertenecen a Masami Kurumada y a la Toie.
Sentires.
Dolor…
Eso sentí cuando vi como tu cuerpo se desvanecía lentamente en brazos de aquel que consideraba mi enemigo.
Furia…
Hacia la persona que había arrebatado cruelmente tu preciosa vida.
Rabia…
Hacia la persona que recibió tú última mirada y escucho tus últimas palabras.
Hacia la persona que había dado la orden y hacia quien la había ejecutado.
Traicionado…
Por quien había sido mi líder, por la persona en la que tenía confianza ciega.
Por las emociones que me dominaban en ese preciso momento.
Nostalgia…
Por lo que vivimos juntos. Por nuestra bella vida tenia antes de todo esto.
Desilusión…
Por no haberlo evitado, por haber fracasado en mi cometido, y por lo que no viviríamos.
Amor...
Eso era lo que sentía hacia ti, pero jamás me permití sentir.
Tantas emociones había en mi corazón en ese momento, que al principio me sentí confundido... Aunque solo dos podían predominar sobre todas ellas.
La Furia y el Amor...
Me habían arrebatado eso que más amaba, eso que a pesar de todo no estaba dispuesto a demostrar. Le haría pagar al responsable de extinguir una vida tan bella y sensible como la tuya.
Lyfia.
Yo jamás le hubiera hecho daño, Lyfia en secreto siempre había sido todo para mí... Entre mis motivos estaba ella, ahora que lo pienso en silencio. Ella siempre estuvo en mi mente, escondida en un rincón... Junto al sentir que despertaba en mí cada vez que te tenía en frente.
Ella era la dueña de mis pasos, de todo lo que para mí era importante.
Qué pena que recién ahora me doy cuenta de ello.
Ahora que ya no está a mi lado. Me doy cuenta que te amo.
Fin.
