Bajo el árbol de Oliva

Nadie sabía cómo sucedió, honestamente, habrías pensado que por estar en la mafia, ya habrías visto todo, pero al parecer Gokudera aun podía ser sorprendido.

Fue a medidas de Junio cuando vio a los dos juntos caminando de la mano hacia el enorme jardín de la sede Vongola, él la estaba guiando. Esa escena hizo sentir un poco sorprendido a Gokudera.

"Espera un segundo … ¿Eso era ..?"

Así que continúo siguiéndolos por los jardines luminosos de la mansión. Desde la esquina detrás de los pilares, los vio de la mano y aparentemente felices mirándose el uno al otro bajo el árbol de Olivo

"Hibari? Feliz? Y con la mujer estúpida?" bueno, no es exactamente una estúpida, una chica que estuvo en una de las más prestigiosas escuela de Japón, ciertamente no sería un tonto en absoluto. Sin embargo, la visión de ver a los dos juntos hizo que el corazón de Gokudera latiera un poco más rápido.

Miura Haru se había convertido en una mujer hermosa con el pelo corto que se rizaba en las puntas, su sonrisa era capaz de alegrar a cualquier habitante y su profundo sentido de la compresión hizo que todos la amaran incontablemente. Gokudera tenía que admitir que se había vuelto muy cerca a los corazones de todos, así como esencial para la famiglia del Juudaime.

Ahora, Hibari estaba sonriendo mientras le susurraba algo, dulce tal vez, en sus oídos. Una suave risa campana salió de sus pequeños labios rosas. Se apartó de ella y la miro a los ojos, y se inclinó en el gran Olivo. Las suaves sombras del árbol los ocultaban de su vista. Sin embargo, Gokudera sabía lo que paso después.

Aparto la vista de ellos y corrió tan lejos como pudo de la escena recién vista. Su corazón latía más fuerte con cada paso que daba. Cuando llego a salvo a su habitación, se apoyó en las puertas de roble y se sentó en el suelo.

Hibari estaba enamorado de Haru. Y Haru amaba a Hibari también.

¿Cómo no se había dado cuenta de que él también estaba enamorado de ella?