Flashback

-Vamos no hay nada que temer... –sus palabras eran cálidas, sus ojos tenían ese brillo intenso que lo distinguía de los demás- si sigues llorando Papá se despertara y se enojara mucho contigo

Lo abrace., Creo que mi hermano era la persona que más quería en el mundo, me cuidaba me abrazaba incluso en los momentos de ausencia de mi padre él estaba ahí para protegerme, sin él no sé qué haría

-Itachi... -Escondí mi cabeza en su pecho, quería que él me abrazara más fuerte- tengo miedo

-vasta de llorar Sasuke, no hay nada en la oscuridad que pueda hacerte daño, nosotros somos parte de ella ¿sabes?

-¿así? –Dije volteándolo a ver con toda la cara llena de lágrimas-

-sí… Mira tu cabello es negro como la oscuridad, es como el manto que nos protege, imagina que la oscuridad es mamá abrazándonos

-te... ¿te puedes quedar a dormir conmigo?- Sonrió-

-está bien Sasuke pero será la última vez

Flashback

En ese momento tan solo era un bebe, han pasado ya 8 años ahora tengo 16 aún sigo recordando ese momento, tomo su mano con fuerza las lágrimas son aún más intensas que aquella noche, no importa lo que él me diga en este momento mis ojos seguirán demostrando lo mucho que me duele, mi alma está rota en mil pedazos, ver su cara y tan demacrada me duele como si me apuñalaran 30 veces por todo el cuerpo… duele y duele mucho

-vasta Sasuke no es hora de llorar hoy más que nunca debes estar feliz al igual que yo – me dijo haciendo una sonrisa como aquella noche pero esta vez se veía que se estaba esforzando demasiado-

-Itachi… te lo suplico quédate conmigo – se lo había dicho más de 10 veces en el día realmente no quería que me dejara solo, siempre hemos estado juntos y quería que todos los días fuera igual-

-estoy feliz… -me dijo- estoy feliz de ser yo quien esta tirado en esta cama y no tu pequeño hermano, creo que si yo estuviera en tu lugar ya no estaría de pie, tal vez desde hace tanto me hubiera dado un tiro en la cabeza para no verte sufrir como yo sufro ahora… sabes el cuerpo ya no me duele pero lo que si me duele es tener que dejarte de esta manera, mamá se fue de la misma manera el día en que tu llegaste a este mundo, ese día me quitaron algo que siempre me iba a hacer falta pero… mamá se encargó de dejarme algo con lo que siempre la recordaría –volvió a sonreír pero esta vez las lágrimas comenzaron a recorrer sus mejillas- a ti…

Agache la mirada sin poder contenerme, cuando cumplí 12 a mi hermano le diagnosticaron la misma enfermedad que tenía mi madre antes de irse de este mundo, mi hermano dice que ella decidió morir para que el pudiera conocerme pues desde que mi mama estaba embarazada mi hermano jamás paraba de hablar de todo lo que haríamos juntos cuando yo naciera, decía que me iba a enseñar miles de cosas y se iba a esforzar para ser el mejor hermano del mundo, "yo pienso que lo logro" y aún más. Yo seguía apretando su manos pero la del comenzaba a debilitarse, sus ojos se cerraron lentamente hasta que se juntaron sus parpados la última gota que salió de sus ojos callo sobre mi otra mano que estaba apoyada en la cama, solté su mano, me levante de la silla, Salí de la habitación mire a los ojos a mi padre, el agacho la mirada y se cruzó de brazos como siempre lo hacía, camine a mi cuarto, entre sin prender la luz, me tire en la cama y sentía como los brazos de mi madre y de mi hermano me abrazaban con fuerza, me decían al oído que dejara de llorar, cerre mis ojos decena que esa sensación jamás terminase

-Sabes que hermano tenías razón… la oscuridad es parte de nosotros

Jamás volví a tenerle miedo a la oscuridad.