Las estrellas titilaban sobre nosotros aquella noche en Littleroot, después de haber tenido el día más divertido de mi vida en el Centro Espacial de Mossdeep contigo.

Las fotos que nos tomamos antes del evento y los souvenirs que compramos los tendré siempre guardados en el cajón de mi cuarto y en mi corazón, y así siempre, siempre recordar el día más memorable de mi vida.

Tendré que buscar la forma adecuada de agradecerle a tu viejo – perdón, al Sr. Norman por habernos dado los pases, aunque en el fondo me sentí mal cuando me contaste que tu madre estaba muy emocionada por ir. Pero según recuerdo, me contaste que habían visto las litleonidas hace años. ¿Crees que la próxima veas las podamos ver de nuevo? Ya sabes, sólo tú y yo. Si así fuera, sería el día más esperado de mi vida.

-Bueno… adiós…

Perdido entre el mar de palabras que quise decir, fue lo único que salió de mi. Fue el momento más estresante de mi vida. Querer decir tantas cosas y al final no decir nada.

-¡May!

Seguías ahí, no te habías movido ni un centímetro. Y te quedaste quieta, mirándome. Pero no pude decir más.

-¡Te veo mañana!

Creo que asentiste, o no sé, porque me di la vuelta lo más rápido que pude y entré a casa.

En realidad quería gritar y correr como loco y abrazarte y agradecerte por esta noche. Hoy fue el mejor cumpleaños de mi vida.