DEL COLOR DE LA ESPERANZA

Los personajes de Candy Candy no me pertenecen son propiedad de su autora Keiko Nagita y la ilustradora Yumiko Igarashi.

Este es mi primer fic, con mucho cariño mi aporte navideño.

INTRODUCCIÓN

En CCFS Candy inicia sus recuerdos el día en que su vida cambió, pues conoce al Príncipe en la Colina Justo el día en que ella y Annie están cumpliendo 6 años. Aunque el día inició triste pues Annie fue adoptada, se convirtió en una día maravilloso cuando Candy por esa razón, llorando desconsolada sube a la Colina y ahí conoce a este maravilloso muchacho que la deja cautivada y que le dice:

"Eres más linda cuando ríes que cuando lloras"

Palabras que Candy no olvida jamás, al contrario podría decirse que se convierten en el lema de su vida, además ella se siente unida al Príncipe por el broche que él deja olvidado y que ella conserva como prueba irrefutable de que el hermoso encuentro con su Príncipe, no fue un sueño, sino una realidad, según CCFS ese día nace en ella la esperanza de poder algún día volver a ver a su Príncipe de ojos azul claro como el cielo de aquella mañana.

Como sabemos más adelante Albert y Candy se vuelven a encontrar muchas veces, gracias en parte a las fechorías de Elisa y Neal Leagan…Candy aceptó ir a vivir a casa de Los Leagan como compañera de juegos de los hermanos, pues escuchó una conversación de la señorita Pony y la hermana Lane, en la que decían que el Hogar de Pony está en muy mala situación económica, además estaban preocupadas por ella ya que ha cumplido trece años y no ha sido adoptada…y aunque serían felices de que se quede para siempre con ellas, les gustaría que ella tuviera acceso a una mejor educación de la que puede recibir en El Hogar.

Candy no sabiendo que hacer, recurre a Annie, para que le pregunte a su padre si le puede conseguir un trabajo, pero Annie como respuesta le dice que no le volverá a escibir porque tiene muchos nuevos amigos todos de buena familia (entre ellos Archie, Stair, Anthony, Elisa y Neal) todos convencidos de que realmente ella es hija de los Brighton y le causa mucho temor que ellos se den cuenta de que fue abandonada, y que en realidad sus orígenes se desconocen. Por esa razón ni siquiera le ha dicho a su padre del trabajo para Candy…

¿Qué sucedería si Annie le hubiera contado a su papá de la situación de Candy y él hubiera accedido a ayudarla? ¿Cómo cambiaría el futuro de Candy si no se va a casa de Los Leagan? ¿Los hilos del destino podrán unir las vidas de Albert y Candy?¿El mañana podrá ser del color de la esperanza?

CHICAGO A FINALES DE NOVIEMBRE DE 1915

Candy observaba a través de la ventana los copos de nieve mientras caían lentamente, afuera todo se podía ver adornado de aquella hermosa escarcha blanca que brillaba ante los cálidos rayos de sol que parecían alegrarse de su presencia, y aunque faltaba casi un mes para la fecha oficial del invierno, como todos los años la nieve no esperaba para empezar a celebrar el Nacimiento del hijo de Dios decorando todo con el color de la pureza.

Candy sonrió ante esos pensamientos…

El día estaba muy frío, tomó con sus manos la taza de chocolate caliente, queriendo calentarse un poco, bebió con cuidado…se encontraba sola así podría leer tranquilamente la nota que le habían entregado, era de Annie, pero antes de siquiera empezar a leerla se transportó a más de cuatro años atrás, aunque el día era completamente diferente había recibido otra carta de su amiga trayéndole buenas noticias...

INICIO DE FLASH BACK

MICHIGAN MAYO DE 1911

Era un hermoso día de primavera, el cielo azul claro de la mañana parecía cantar de alegría junto a los pajaritos en completa sintonía con los vibrantes colores de las flores que tapizaban la Colina…casi igual que aquél día en que Candy había conocido a su Príncipe adorado, hace siete años ya…Candy había subido todos los días a la Colina de Pony, con la esperanza de volverlo a ver… pero ese día, aún no había llegado y solo aquél valioso broche de plata le confirmaba que no había sido un sueño…

Lo que sí había llegado al fin era la carta de Annie, realmente no habían pasado tantos días desde que Candy le había escrito pidiéndole auxilio para que los padres de Annie le ayudaran a encontrar un trabajo, pero a ella le habían parecido una eternidad, dado a la gravedad de la situación.

Aunque sería muy doloroso para ella tener que irse, era lo único que se le había ocurrido debido a la mala situación económica del Hogar, así la señorita Pony y le hermana Lane no tendrían que preocuparse por ella y podrían recibir a dos niños más en el Hogar.

Candy estaba tan feliz que empezó a saltar y abrazando la carta salió corriendo a la Colina de Pony para leerla con tranquilidad.

Querida Candy:

He hablado con mi papá, sobre el tema que me platicaste.

Papá es un buen hombre, soy afortunada pues me quiere como si fuera de su misma sangre…se le ha encogido el corazón de imaginar que fuera yo la que estuviera en tu lugar…

Él me ha dicho que eres muy joven para trabajar, que es mejor que esperes a crecer un poco más, y sigas estudiando en la escuela del pueblo, lo más que puedas. Me ha contado que hará una donación al Hogar de Pony con la condición de que no te vayas del Hogar a menos que alguien te adopte como su hija y que sigas estudiando.

Candy, le he contado a papá lo que me ha dicho mi madre…ella me había manifestado su temor de que a través de ti la gente pudiera saber qué soy adoptada y de origen desconocido…en el mundo adonde yo vivo, eso es muy mal visto…antes eso a mi no me importaba, pero…Candy, he conocido un chico que me gusta tanto, su familia le da mucha importancia al prestigio social y al origen de las personas, ellos saben quienes son sus antepasados desde hace cientos de años…y si el chico que me gusta se diera cuenta de mi origen, jamás me tomaría en cuenta…su familia no me aceptaría, eso me ha dicho mamá.

Candy, aquí todo el mundo está convencido de que realmente soy hija de los Brighton. Mis padres han dicho que es mejor así... y aunque estoy tan agradecida a la señorita Pony y a la Hermana Lane y siempre las tengo en mis oraciones y en mi corazón, también amo a mis padres, les estoy tan agradecida por amarme como su hija y no puedo desobedecerles e ir en contra de su voluntad.

Pero…papá ha podido comprender mis sentimientos y me ha dado una gran idea, me ha dicho:

"Querida Annie, hay tantas maneras en que Candy y tu pudieron haberse conocido…"

Es cierto Candy… hay tantas maneras en que nos pudimos haber conocido...nadie tiene que saber la verdadera razón, solo sabrán lo que nosotros decidamos decir.

Mis padres tenían una propiedad cercana al Hogar de Pony, por eso se dieron cuenta de su existencia y papá convenció a mamá de visitarlo y así fue como me encontraron, según dicen me parezco mucho a su hijita que tristemente se fue de este mundo…

Mamá estaba desolada, pero cuando me vió en El Hogar ella sintió en su corazón que ya me amaba, que yo también era su hija, aunque no de sangre pero si del corazón. Candy...he sido tan bendecida, ruego porque tú también puedas ser bendecida y seas feliz.

Papá dice que esa cercanía entre aquella propiedad y el Hogar nos da la coartada perfecta, una razón creíble por la que nos hayamos conocido y seamos amigas.

Se me ha ocurrido decir que un día que salí a jugar, sin querer me aleje tanto que me perdí, tú me encontrase llorando y me llevaste al Hogar de Pony, adonde conocí a la señorita Pony y la hermana Lane, quienes me consolaron, me ofrecieron un delicioso pastel de pollo, leche y unas deliciosas galletas recién horneadas hasta que afortunadamente papá me encontró cuando buscándome se acercó al Hogar a preguntar si me habían visto.

Desde entonces somos amigas y aunque hace años no nos vemos nos seguimos escribiendo.

¿Qué te parece mi historia Candy?

Si, lo sé...no me gusta mentir tampoco y sabes que para mí es tan dificil, me pongo tan nerviosa, y es más fácil decirlo por carta que tener que decirlo en verdad…Pero de esta forma mamá ya no se sentirá tan nerviosa por nuestra amistad...

Prefiero tener que decir esta historia a tener que renunciar a nuestra amistad…Candy mamá me ha dicho que permitirá que siga escribiéndote si tú, la señorita Pony y la hermana Lane están de acuerdo con apoyar esta historia…que en realidad es como otra manera de ver las cosas…la señorita Pony, la hermana Lane y tú me rescataron y cuidaron de mi hasta que mis padres llegaron por mi.

Gracias Candy, por tu amistad y todas tus cartas en estos siete años, aunque yo también te he escrito, para mi ha sido difícil a veces hacerlo por los temores de mi madre y los míos…pero espero ahora poder hacerlo con mas tranquilidad.

Por favor Candy escucha la petición de papá, él seguirá donando al Hogar de Pony, con la condición de que tú permanezcas ahí y sigas estudiando, a menos que seas adoptada como hija de una familia.

Espero tu respuesta.

Annie Brighton

Candy no sabía qué pensar de aquella carta, por un lado no entendía por qué la gente miraba mal a los niños abandonados, ellos no tenían la culpa de eso, ¿por qué tenían que pagar las consecuencias de los actos de sus padres? Le parecía completamente injusto.

Por otro lado, se alegraba que Annie quisiera seguir siendo su amiga a pesar de que sus padres adoptivos habían hecho creer que ella era verdaderamente su hija y su amistad representaba un peligro para ella, cuando le enseñó la carta a la señorita Pony y a la hermana Lane ellas la tranquilizaron :

— Candy es común que los padres adoptivos hagan pasar como propios a los niños que han adoptado— le dijo la hermana María mientras doblaba la carta de Annie

— Si Candy— le dijo la señorita Pony posando su mano cariñosamente sobre hombro de la joven — incluso los niños que han sido adoptados siendo bebés la mayoría de las veces ignoran que han sido adoptados y creen que verdaderamente han nacido en el seno de la familia que los acogió.

— Pero yo tengo una pregunta para ti señorita, ¿cómo es eso de irte del Hogar para ir a trabajar?

— Hermana Lane yo, sin querer escuché una conversación entre uds. Y…

— Candy no importa la situación económica, este es tu Hogar, donde comen dos comen tres — le interrumpió la señorita Pony.

— Debes entender que eres demasiado chica para trabajar y lo mejor es que sigas estudiando tal y como dice el padre de Annie — le dijo con ternura la hermana Lane.

— Pero, al menos el señor Brighton se ha ofrecido a colaborar con el sustento del Hogar de Pony, — dijo Candy haciendo una graciosa mueca, Las tres rieron al unísono.

— ¡Jajajajaj! Si Candy, Dios Bendiga a nuestra querida Annie y a sus padres.

— Amén — dijo con devoción la religiosa de más edad.

FIN DEL FLASH BACK

— Gracias a Annie y a los señores Brighton no tuve que irme del Hogar de Pony, al menos en ese momento. A ver qué noticias me tienes ahora Annie— Candy abrió la carta y leyó su contenido, por sus gestos se podría decir que eran buenas noticias—me encanta tu idea Annie…una Blanca Navidad…—la joven levantó la mirada de la carta volvió a ver a la ventana, los copos de nieve seguían su danza espolvoreando de blanco todo a su paso y ella se transportó nuevamente al pasado a un día muy frío y muy parecido a ese…

INICIO DE FLASH BACK

MICHIGAN VÍSPERA DE NAVIDAD DICIEMBRE DE 1912

Estaba nevando, y el frío calaba los huesos pero Candy venía de la Colina de Pony, a pesar de las bajas temperaturas había subido como todos los días con la esperanza de que ese sería el día en que volvería a ver a su Príncipe, a pesar de que no fue así, Candy no perdió la esperanza de volverlo a ver, se sentía unida a él por medio del broche de plata, mientras lo tuviera con ella, tenía la certeza de volverlo a ver…Candy iba tan distraída en sus pensamientos, que no se dió cuenta hasta que ya era demasiado tarde, había caminado sobre el río congelado, la capa de hielo era todavía muy delgada y no tardó en ceder bajo su peso, ¡Candy irremediablemente cayó en él!…se hundió bajo las heladas aguas, el grueso abrigo que llevaba puesto se llenó del agua fría haciéndola más pesada y sus movimientos más torpes, luchó por subir a la superficie pero topó con una capa de hielo, trató de no perder la calma buscando el agujero por el que había caído, cada vez se le hacía más difícil moverse, su cuerpo no le respondía, le faltaba aire, sentía que se iba desvaneciendo…