HOLA! =)
Para las lectoras(es) que han leido mi historia anterior, encontrarán algunas similitudes... y es porque las cosas de Bella o lugares, los hago de acuerdo a mis gustos... =) Esta historia se me ocurrió de repente, Espero que sea de su agrado, Tengo muchas historias mas por subir... =) Disfruten el Cap
Bella POV
-Nessie no te vayas muy lejos- le advertí
-Estaré aquí junto, mami- me dijo apuntando al pasillo de los juguetes antes de irse corriendo.
Me llamo Bella, tengo 28 años y vivo sola con mi hija en una casa mas bien pequeña. Ness ahora acaba de cumplir 4 años, tiene la mentalidad de uno de 6 en cosas comunes porque aun no sabe leer ni escribir. A mis 24 años tuve que lidiar con un embarazo yo sola, ya que me había mudado de la casa de mis padres. Tenía ya mi titulo en Educadora de Párvulos pero como esta profesión no era de ganar mucho, Nessie y yo vivíamos de lo justo y necesario, además de algunos juguetes que lograba comprarle.
Busqué atentamente en el pasillo lo que necesitaba para todo este mes. Por supuesto las marcas que llevaba eran las del mismo supermercado.
Cuando iba a llamar a Ness ella se acercaba a mi desde el extremo del pasillo con la cabeza gacha. Me arrodille a su altura.
-¿Qué te pasa pequeña?- le dije levantándole el rostro.
- Había una muñeca muy linda…- Ness continuamente sufría por deseos que tenía y que yo no le podía cumplir.
Trague en seco. Odiaba ver que a mi hija le afectaba todo eso. Una pequeña lágrima recorrió su mejilla.
- Te prometo que te la compraré ¿si? Pero ahora no puedo- le dije mientras le quitaba la lágrima solitaria que tenía en su cara.
Ness era muy madura en cuanto a dinero, ella sabía lo que me costaba hacer rendir mi sueldo en el mes y trataba de no pedir muchas cosas, por eso supe que esa muñeca realmente le gustaba.
- Ven aquí- le dije mientras la tomaba en mis brazos y ella aferraba sus brazos a mi cuello.
- ¿Vamos a ve' a Tia Ali hoy?- me preguntó un poco mas animada.
- Quizás si, quizás no- dije, realmente porque era difícil saber que pasaba por la mente de esa duende.
- Mami podo ir a ver las posas de aminales- me dijo apuntando el pasillo de en frente.
- Si Ness anda, pero cuidado y no te vayas para ninguna parte mas- le dije mientras la paraba en el piso.
- Si, mami -
En ese momento comenzó a sonar mi celular, me di la vuelta para abrir mi mochila (prefería las mochilas porque se me hacia más fácil con Ness y las bolsas) pero todo lo que había dentro (mi libreta, los papeles dentro y mi billetera) cayeron al suelo. Me agaché a recogerlo todo pero me di cuenta que no era la única que lo hacía. Al frente podía ver una figura de negro que me ayudaba. Cuando recogí todo, miré hacia la figura que tomó características propias de un hombre.
Tenia el pelo de un color cobrizo y unos ojos de color gris. Me sonrió.
- Ten - me pasó los papeles que se habían caído de mi libreta.
- Gracias - dije tomándolos.
Se levantó y me ayudó a pararme.
- De nada- me dijo.
No parecía de mas de 25 y vestía un terno de color negro con camisa y corbata del mismo color. Se veía como un empresario importante.
- Mami, mami, ¿Podemos tener un perito?- Ness estaba a mi lado. Me arrodillé a su altura.
- ¿De dónde quieres que saque un cachorro?-
Comenzó a pensar.
- Jimmy tiene uno y dice que es muy gande - me dijo simulando con sus manos el tamaño del animal – y que en la noche sava a las peritas que necesitan ayura- Sonreí.
-No creas todo lo que dice Jimmy-
Jeremy o Jimmy como todos le decían era un niño de el jardín donde Ness iba, que era el mismo donde yo trabajaba. Jimmy y Ness eran amigos, junto con Seth y Leah(los mellizos) y también el hijo de Alice y Jasper, Aiden.
- Pelo Aiden tambem tene uno, Boby-
- A boby lo ves todas las semanas - argumenté.
- Yo quero uno para mí- me dijo cruzando sus brasitos.
- Ness, amor- le dije tocándole el pelo –Los cachorros necesitan muchas cosas… ¿tu sabes que implican tantas cosas?-
- ¿Billetes?- dijo con tristeza. Asentí.
- Lo lamento Ness -
- Aún así eres la mejor mama de todo el mundo- dijo mientras se acercaba y me daba un beso en la mejilla.
- Y tu eres la mejor niña de todo el mundo- le dije al momento en que comenzaba a sonar mi celular otra vez. Lo tomé a tiempo y contesté sin ver el identificador.
- ¿Hola?-
- ¡Bellita! -
- Emmett no me digas así- comenzó a reir – Emmy – automáticamente paró, no le gustaba porque decía que parecía mas sobrenombre de Emily que de Emmett.
- ¿Es un trato?- supe que se refería a no decir nunca los sobrenombres
- Hecho. ¿Qué pasa gran oso?-
- ¿Es tio Emmett?- me dijo Ness animada. Asentí -¿Podo hablar con él?-
- Sólo espera un momento ¿si, bebé?- le dije, esperó un rato y se fue a ver las cosas de la esquina, desde mi lugar la miraba. - ¿Y bien Emmett?-
- ¿Dónde estas Bellita?- rodee los ojos.
- En el supermercado Emmy-
- Puedes venirte ¿ya? Estamos afuera de tu casa Rose y yo y no tenemos llaves –
Supe exactamente lo que tenia que hacer.
- Emmet, mira para tu derecha ahora-
- ¿Que? ¿Qué hay?-
"Listo Emmett" escuché que le decía Rose.
- Bueno Adios Bella, Rose ya abrió -
Rose, Alice y Jasper sabían donde estaban mis llaves de emergencia pero Emmett no porque me haría fiestas sorpresas cada 2 días.
- Adiós oso- Colgué y miré hacia donde hace un momento atrás estaba Ness.
Pero ya no estaba allí. Me agité. Mire hacia el otro lado (no estaba en el pasillo de los animales), le di la vuelta al carrito y me dirigí al pasillo de juguetes.
-…y mamá me dijo que me la pomparía, ahora no, pero me la pompará ¿no es genial?- Un suspiro de alivio escapo de mis labios al escuchar su voz. Cuando pude verla me di cuenta de su compañía, era aquel chico de pelo cobrizo.
- Nessie, ¿Qué te he dicho de salir sin decirme?-
- Perdón mami, le enseñaba a Ed…E…- trató de decir con dificultad.
- Edward- completó el chico.
- Si, eso, la muñeca que me había gustado -
- No es ese el punto ¿no es cierto?- le dije.
- Si, lo siento, pometo no volve´ a hacerlo-
- Bien - mire al chico – Lo lamento…-
- Oh, no te preocupes, de todos modos fue mi culpa, yo le pedí que me la mostrara. Si hay alguien que tiene que disculparse, soy yo.-
- No importa sólo que nunca se va así como así y me asusté-
- Mami ¿le colgaste a Em?-
- Si, lo lamento Ness- tomé mi celular y marqué el número de Emmett para colgar al instante. Enseguida me devolvió el llamado.
- Alguien quiere hablarte - le dije sin esperar respuesta y se lo pasé a Ness, quién lo tomó con ambas manos.
- ¿Tio oso?, bem, sí… mamá me dijo que me pomparía una muñeca, no, no se cuando. Si, ella me lo dijo. –hablaba mientras sujetaba el teléfono en la oreja- Mamá, tio oso esta en la casa ¿nos vamos ya? –me dijo mirándome. Asentí- Adiós tio oso, nos vemos en la casa.
Me pasó el celular y yo colgué.
- Yupi, vamos, vamos- me tomó de la mano y me guió a los cajeros. Me di media vuelta y le hice un gesto con la mano a Edward, él me lo devolvió.
- Mami, Tio oso dijo que había llevado a Toña.-
Toña era la hija de Emmett y Rose, que tenia sólo 1 año y medio de edad. A Ness le encantaba.
- ¿De verdad?- dije en tono fingido, era absolutamente obvio que la había llevado.
- Si mami, rápido, vamos.-
Pagué y tome las bolsas en una mano mientras Ness me guiaba tirando mi otra mano.
- ¡Ness! - escuché un grito, yo y Nessie volteamos, era Edward. Ness me miró suplicante.
- Ve, estaré dejando las bolsas -
Ness corrió hacia su nuevo amigo y yo me fui hasta la maleta de mi auto sin perderle mucho de vista.
Mi auto, un regalo de mis padres. Dios, el sólo imaginar cuanto invirtieron en él. Era un Volvo c30 de color cobrizo. Debo admitir que me encantaba mi auto, pero no me gustaba que gastaran dinero en mi.
Cuando cerré la maleta, giré hacia Ness. Ambos me miraban(Edward estaba agachado). Ness me hizo gestos de "ven", se veía indecisa.
Me acerqué, debo admitir que no sabia que hacer en el camino hacia allá. Ambos me miraban y el camino era bastante largo. No sabia que gestos hacer, ni que cara poner.
Cuando estuve a su lado me hizo otro gesto para que me agachara, y me dijo al oído:
- Quere darme un regalo- Miré hacia Edward y vi el paquete en sus manos con una sonrisa en el rostro - ¿Qué hago mami?-
- ¿Es para ti no?- le dije.
Se acercó otra vez a mi oído.
- No recibas nada de un extraño - me dijo
- Bueno sí, pero yo estoy aquí contigo -
Pareció meditarlo por un segundo.
- ¿Aún me queres dar el regalo?- le preguntó con la cabeza gacha y balanceándose entre sus pies.
- Claro, ¿para que querría yo una muñeca?-
Ness levantó la vista ilusionada y recibió el paquete. Lo abrió rápidamente (sin hacer tira el papel) y sacó la muñeca.
- Mami, es la muñeca- me dijo.
- Ness, que vergüenza para mi ¿Cómo se dice cuando se recibe un regalo?-
- Gracias Eddy- le dijo y lo abrazó. -¿Podo decirte así? Tu nombre es raro-
Edward rió.
- Claro Nessie-
Cuando Ness se separó de Edward, abrió la caja y comenzó a tratar de sacar la muñeca.
Yo y Edward nos paramos.
- No debiste hacerlo, de verdad- le dije un poco apenada.
- No fue nada, te ahorre el no beber té por un mes- me dijo a modo de broma.
- Sí, probablemente sí- le dije riendo - Gracias- le dije mirándolo.
Me devolvió la mirada y sonrió de forma torcida.
Ahora que lo miraba bien, era un chico muy apuesto, tenia facciones de super modelo pero su ropa era claramente de un empresario. Probablemente ganaba el quintuple que yo al mes, no debería sentirme mal… eso creo.
-Solo espero que puedas beber algo mas que agua en estos días- le dije devolviéndole un poco la broma y en parte porque ya no soportaba su mirada.
- Tu tranquila, tés y cafés me sobran-
- Que suerte-
- Mami, podemos irnos ¿ya? Quiero enseñarle la muñeca a Toña-
Edward frunció el ceño
- Lo lamento, esta ansiosa por ver a Antonia-
- ¿Quién es Antonia?- me preguntó con real interés.
- Es mi prima… bueno, casi. Tio oso y mama son como hermanos así que… Toña sería mi prima ¿es así mami?- me preguntó.
- Si cariño-
- Eddy ¿vienes al supermercado mucho?- le pregunto Ness.
- No mucho ¿Por qué?- Edward se agachó otra vez.
- ¿No te volveré a ver?- le pregunto Ness con cierta tristeza. Se encariñaba rápido con la gente.
- Puede que algún día nos topemos- le dijo tratando de tranquilizarla.
- Mi jardín se llama "los tres girasoles"- le dijo con una cierta esperanza.
- Lo tendré en cuenta pequeña -
Ness pasó los brazos por su cuello, aún con la muñeca en mano.
- Gracias Eddy- le dió un beso en la mejilla y se acercó a mi.
Le tomé la mano y nos fuimos camino hacia el auto.
En todo el camino Ness no dijo nada, sólo veía su muñeca.
- ¿Por qué estas tan callada Ness? Tienes tu muñeca-
- Debí haberle dado las gracias- dijo apenada.
- Lo hiciste amor -
- Pero no mucho -
- Estoy segura que apreció tu abrazo - dije tratando de tranquilizarla.
- ¿Mami? -
- ¿si? -
- ¿Qué es Apee…?- dijo con una mueca de concentración.
- ¿Apreciar?- Asintió – Valorar…- me miró un poco confundida – Que él sabe que estuviste muy agradecida -
- Oh… De todos modos, nunca más podremos hablar con él-
- De seguro nos encontramos con él algún otro día bebé -
- Ojalá…-
- ¿Te agrada Edward?- Asintió.
Parece que de verdad le agradaba, usualmente Ness no le hablaba a los extraños, se volvía muy tímida con ellos y se aferraba a mi pierna. Seguramente el rostro de Edward le debe haber dado confianza o estaba muy emocionada por el regalo que le daría.
Me estacioné y Ness bajó de su asiento.
Me dolía verla deprimida, la próxima vez que me encuentre con Edward le pediré el numero o algo.
-¡Llegaron!- Gritó Emmett abriendo la puerta. -¿Qué le pasa a la princesa?-
- Nunca más veré a Edward-
Emmett se arrodilló.
- Oh, ¿es otro amiguito? O ¿un novio?- sus facciones se endurecieron un poco, lo que hizo que Ness se riera.
- No tio Em, es muy mayor para mí, es del porte de mamá-
Emmett me miró y me sonrojé sólo de imaginarme lo que estaba pensando. Tomó a Renesmee en sus brazos y se levantó.
- Es amigo de Ness no mío -
- Pero también habló con mamá-
- Sí, pero de seguro a ti te quiere más- dije dejando las bolsas en la isla de la cocina.
- ¿Y esa muñeca? ¿No la comprarían después?-
- Me la compró Eddy - le contestó Ness mientras yo entraba y Emmett tomaba a Ness entrando detrás de mi.
- ¿Se llama Eddy? Lo tendré en cuenta –
- Su nombre es raro… y le perunté si podía decirle así-
- ¿Él aceptó?… debe quererte mucho Ness -
- Su nombre es Edward- le dije a Emmett
- Oh… Bellita sabe mucho- me dijo alzando las cejas.
- ¿Por qué alzas las cejas, tio Em?- le preguntó Ness.
- Sí, respóndele Emmy- le dije.
- Hola Bella- Rose me saludó.
- Hola Rose… Ow ¿Me dejas cargarla?- le dije después de ver a Antonia en sus brazos.
- Claro-
Dejé inmediatamente lo que estaba haciendo y recibí a Antonia en mis brazos.
HOLA!
Primer capitulo de este fic, ahora ven de que viene el titulo, aún no vemos ningun sentimiento por parte de Bella... pero eso lo veremos después, (para las que me conocen saben que a veces soplo cosas sin querer:c)
Espero les haya gustado, regalenme un Review para saber que tal.
El capitulo 2 viene pronto. Nos leemos luego.
Las quiero lectoras de mi corashon.
Atte: The life is not easy ^^
