一失足成千古恨 : "Un error momentáneo llega a ser un remordimiento enterno." (proverbio chino)
Hola a todos, les traigo esta historia que ha estado rondando en mi cabeza por mucho tiempo, espero la disfruten.
Kung Fu Panda y sus personajes no me pertenecen.
Prólogo
No lo soportaba, no soportaba pensar en que Shifu estuviera en paz, sonriendo y feliz mientras él estaba infeliz y rechazado, sin nadie a su lado, mientras Shifu se encontraba rodeado de muchos que lo admiraban. Él había sacrificado lo mismo que Shifu para convertirse en un maestro de Kung Fu: a su familia, sus amigos, las dolorosas horas entrenando bajo el ardiente sol y las tormentosas lluvias con tal de perfeccionar su técnica y aprender a sobrellevar el dolor físico.
¿y todo eso para qué? Para que al final no fuera lo suficientemente bueno y perfecto para ese par de presumidos y egocéntricos de Oogway y Shifu, para ser rechazado como maestro del palacio de jade, para ser ridiculizado y rechazado por todas las demás academias de Kung Fu.
Todo por un simple error, un accidente. Pero los accidentes no existen ¿verdad? Eso fue lo que Oogway le dijo cuando él fue a tratar de explicarle el por qué de su fallo en su presentación.
La noche anterior a las pruebas de habilidades para ser aceptado en el palacio y debido a la importancia del evento, decidió ir a comprarse un nuevo traje de entrenamiento para su presentación pues el que tenía ya estaba muy viejo y desgastado y quería dar una muy buena impresión a los maestros, por lo que gastó los pocos ahorros que tenía para poder comprárselo, y aunque le preocupaba un poco el gastarse casi todo de una sola vez se dijo a sí mismo que no debía preocuparse, pues al día siguiente después de pasar la prueba y ser aceptado en el palacio, ya no se preocuparía por pagar la renta de algún lugar en donde pasar la noche.
Lo que no se esperaba era que el dichoso traje resultara ser algo caluroso bajo la luz del sol y que no tan elástico al momento de ejecutar un movimiento que requiriera abrir las piernas o dar piruetas en el aire, uno de esos movimientos fue necesario cuando en medio de la presentación Shifu intentó pegarle en los pies con la vara de madera, y él al intentar dar una pirueta hacia atrás para evitarlo, fallo; cayendo de espaldas y muy acalorado por el incómodo traje. Le dieron otra oportunidad, pero con el dichoso traje era imposible realizar los movimientos más complicados, tanta frustración provocaba que se desesperara y sus ataques fueran cada vez menos precisos y él se pusiera de un humor algo eufórico, cuando le avisaron que la prueba había terminado intentó explicarles a Oogway y Shifu, pero le dijeron que los esperara en el patio y ellos saldrían del salón de los héroes con su decisión.
Espero durante media hora sentado afuera del salón cuando por fin escuchó las puertas abrirse y ver a los maestros salir. Entonces Oogway hablo:
- Hemos hablado y lo primero que quiero decirte es que sin duda se nota el esfuerzo con el que has entrenado, tu técnica es buena; sin embargo, tu nivel de concentración no es el adecuado para que puedas ser aceptado. Tienes mucho talento, pero aun te queda un largo camino que recorrer. No desesperes, todo árbol tarda mucho en crecer, y sólo cuando de verdad está fuerte y con los nutrientes necesarios, dará frutos.
-Pero maestro, con todo respeto, me preparé demasiado para este día, no puedo volver a mi pueblo diciéndoles a todos que falle, ¡no puedo decepcionarlos de esa manera!- Su voz subía de tono con cada palabra que decía hasta terminar gritando.
- ¡Ese no es el modo de hablarle a un maestro de Kung Fu, así que muestra más respeto Huigai! - Shifu no soportaría que le faltaran al respeto a Ooway delante de él.
-Tranquilo Shifu, deja que hable con él a solas por favor. Sígueme Huigai. - Y comenzó a caminar hacia el árbol de la sabiduría. Huigai lo siguió no sin antes dedicarle una furiosa mirada a Shifu.
Llegaron al árbol y Oogway le indicó que tomara asiento junto a él, mirando hacia el valle.
-Sabes joven maestro, tal vez en este momento pienses que estamos siendo injustos por la decisión que tomamos, pero créeme cuando te digo que aún no estás listo para tomar una responsabilidad tan grande como lo es el ser maestro en el palacio de jade.
-¡Pero maestro! no fue por causa de una falta de entrenamiento o meditación que haya obtenido ese resultado en mi presentación, sino un simple accidente que nada tiene que ver con el Kung Fu, ayer cometí el error de...
-Los accidentes no existen mi amigo, todo ocurre por una razón. Tal vez no es el resultado que deseabas, pero sí lo que debía ocurrir. Recuerda que esta no es tu última oportunidad, el año siguiente puedes volver, y tal vez sea diferente, o tal vez obtengas el mismo resultado, pero lo que aprendas durante el camino es lo que verdaderamente tiene importancia, no lo olvides.
Después de esas palabras Huigai se fue muy enojado, claro que regresaría, y entonces les demostraría de lo que era capaz, así que dejo el valle de la paz y juró en sus adentros que pronto volvería. Pero eso no fue posible, porque apenas y tenía dinero para comprar alimentos durante ese y el siguiente día, se quedaba en las calles a dormir y cuando llegó al siguiente templo de Kung Fu en la aldea contigua se encontraba demasiado débil y sus demostraciones de Kung Fu eran deplorables, además de que todas las academias se habían enterado del rechazo por parte del palacio de jade y de la discusión que tuvo con los maestros Oogway y Shifu, por lo que nadie quería tener de maestro en su templo a alguien que hubiera tenido problemas con los maestros de Kung Fu más respetados y capaces de China.
Mientras más pasaba el tiempo más débil y viejo se ponía Huigai, no tenía energía para practicar Kung Fu, ni siquiera un lugar donde dormir, así que se dedicaba a trabajar en lo que podía y comer de lo que los aldeanos le llegaban a regalar, llego a trabajar en los campos que encontraba de paso o ayudando a quién fuera en lo que fuera, incluso llego a pelear en peleas de kung fu sin honor callejeras. Hasta que un día en un pueblo lejano una vieja cabra llamada Wu le pidió ser su asistente, ella era bien conocida en el pueblo por dedicarse a realizar favores con la ayuda de magia negra, ella le ofrecía un cuarto en donde quedarse y las tres comidas del día, así que Huigai no dudo en aceptar la oferta.
Con el tiempo ella le enseño la magia básica: como hacer que alguien se enamorará de quién deseara, como enfermar o matar con una simple pócima o un simple conjuro, como hacer que de una semilla creciera un frondoso árbol en menos de una semana. Se volvieron muy buenos amigos y se contaron la historia de sus vidas, ella le confesó que fue gracias al pacto con un demonio que ella había obtenido tanto conocimiento sobre magia, y sólo porque quería vengarse de su ex marido, que había pasado años golpeándola y tratándola mal. Huigai le contó su historia de rechazo por parte del palacio de jade y cómo ese rechazo le había costado todo lo demás, su vida entera se había arruinado, entonces le pidió que le enseñara todo lo que sabía, la magia más avanzada que conociera, pues él también quería venganza contra aquellos que habían destruido su vida. Y así fue. Wu le enseño todo lo que sabía y falleció poco tiempo después, no sin antes obsequiarle a Huigai un báculo muy poderoso para que lograra su cometido, además de todo el dinero que tenía, después de todo, él había sido el único que había tenido una amistad con ella sabiendo lo que ella era: una hechicera, y él que cuido de ella en sus últimos días.
Después de eso Huigai se dedicó a investigar la vida de Shifu y de quienes lo rodeaban, no tendría que preocuparse por Oogway, pues la viaja tortuga se enteró, había fallecido tres años atrás, pero en su lugar Shifu había adoptado a una tigresa y también aceptado a otros cinco estudiantes más, entre ellos al ahora famoso guerrero dragón, del que sin duda había escuchado Huigai debido a sus grandes hazañas contra el mal. Envío espías al valle para enterarse de todo lo que pudiera sobre ellos, en qué eran buenos, cuáles eran sus debilidades, incluso enviaba a alguien a seguirlos para ver cuál era su forma de batalla.
Cuando tuvo a su propio equipo y el plan perfecto para vencerlos, se dirigió al valle de la paz para de una vez por todas vengarse de aquel que había ayudado a arruinar su vida, Shifu y sus alumnos iban a pagar las consecuencias de un pequeño accidente, una simple mala decisión, una paso mal dado, que ahora tendría consecuencias en el destino de todos...
Bueno ese fue el prólogo, quería darle al villano una razón para serlo. Su nombre Huigai (悔改) en chino significa "arrepentimiento", el de la hechicera Wu (巫) significa bruja.
Si les gusto el capítulo háganmelo saber dejando un comentario, digan qué esperan de la historia y si quieren seguirla no olviden darle follow. Saludos y nos vemos en el siguiente capítulo.
