Capítulo 1. Arrastrada

¿No te ha pasado alguna vez que estás muy feliz de la vida y todo se arruina? Pues bienvenido a mi mundo... Me explico... Pasa que en mi vida tenía todo lo que una chica de mi edad podría desear...

Una carrera universitaria, una mansión, mi propia empresa y en fin... Todo lo deseado por una chica a los 21 años, pero (siempre tiene que haber uno)... Todo se acabó...

Bella POV

Como todos los días, después de alistarme me fui a mi trabajo: la empresa Swan's corporation... Hasta allí todo muy bien... cuando llegue, me adentré en mi oficina y comencé a escribir en la computadora, de repente me llegó un correo electrónico a mi bandeja de entrada... inmediatamente lo abrí...

"CULLEN'S CORPORATION LA INVITA A LA GALA DE CELEBRACIÓN DEL CUMPLEAÑOS DEL DUEÑO DE LA MISMA CELEBRANDO SUS 22 AÑOS

DÍA: 13/05/2015

HORA: 7:00 PM

ROPA: FORMAL DE GALA."

Bufé... Cullen... En teoría él no me conocía solo habíamos pasado una gran parte de nuestra infancia juntos (En la cual siempre me gustó) y desde allí no nos vimos más al cabo de un tiempo, hablábamos por teléfono cuando había conferencias pero él siempre manda a su agente... Entonces ¿Por qué me invita? Que yo sepa fue él el que sin darme explicaciones desapareció de mi vida causándome mucho dolor (Bueno en teoría su explicación fue que sus padres comenzaron a prepararlo para mandar en la empresa). Nuestras empresas son "Rivales" porque son las mejores en el país, obviamente nunca fue intencional... ¡Pero es que no lo soporto! ¡Es un engreído, petulante, arrogante y odioso! Además siempre quiere estar echándome los perros, lo que me confunde... Y ¡Quiere quitarme mi empresa!

En ese momento percaté algo en la computadora... Un correo que, aunque nunca lo había visto aparecía abierto...

Mi curiosidad ganó y lo abrí... Casi me desmayo al ver que eran las estadísticas de los últimos 3 meses... Había un montón de huecos en las ganancias, entonces caí en cuenta:

Se estaban robando todo... El dinero, los productos y se metieron en mi computadora... Me lancé hacia atrás en la silla y me tapé la cara...

-¿Qué demonios voy a hacer? -susurré... Esto va a ser serio...

Y en ese momento sonó mi teléfono: "Numero privado"... Contesté sin pensarlo.

-Swan -dije secamente

-Hola, querida -escuché su arrogante y (Aunque me niego a decirlo en voz alta) sexy voz

-¿Qué quieres Cullen? No estoy de humor -gruñí

-Solo quería preguntarte si... -pareció extrañamente apenado -Si vas a ir a mi fiesta mañana -me sonroje repentinamente (Debo admitir que aunque no lo soporto me gusta el tipo)

-Estoy ocupada Cullen -me sentí mal, pues mañana es domingo -Además no compré ningún regalo -me excuse patéticamente.

-Sabes que no me importa -lo sentí sonreír -Aunque puedes regalarme un beso

-Cullen...

-Es broma -me interrumpió rápidamente

-Está bien Cullen tu ganas, iré -suspire

-Genial, bueno... Adiós -y colgó

Tuve la sensación de que colgó para que no cambiara de parecer sobre ir por cualquier estupidez que se le hubiera salido... Inconscientemente Sonreí pero la sonrisa se fue cuando recordé algo

¡Necesito urgentemente un vestido!

Tome el teléfono y le marqué a mi salvadora

-Soy Alice -contestó aburrida

-¿Tu puedes aburrirte? -bromeé sarcástica

-¡Bella! Bueno la verdad es que si... ¿Tienes algo para mí? -dijo emocionada

-Sí y me dirás loca Al pero... Necesito el vestido más sexy que tengas diseñado -me sonroje.

-Ohhh, está bien me gusta, ¿ocasión?

-El cumpleaños de Edward muérete Cullen -reí

-¡Sabía que te gusta! -chilló

-Solo cállate y consigue algo rápido, me lo llevas en la noche ¿va?

-¡Hecho!

Me reí sola de la locura de mi amiga y el resto del día me dispuse a arreglar bien todo a ver si mi compañía tenía solución... Lo que dudo completamente teniendo en cuenta cómo va todo... Tendré que empezar a buscar a quien venderle la empresa, lo que me duele en el alma, esta compañía ha estado desde su fundación en mi familia por demasiadas décadas... Y por culpa de no sé quién, se vendrá abajo... La verdad con tantas cosas por hacer no sé por qué voy a la fulana fiesta...

En eso de las 8:00 pm terminé mi trabajo, recogí mi chaqueta, me la coloque y salí de la oficina para ir a mi casa Félix, mi chofer me vino a buscar en mi lindo Audi negro...

-Gracias por esto Félix -le Sonreí

-Tranquila, cuando guste -se apenó.

El viaje en auto fue de lo más agradable con Félix... Veníamos escuchando música y despeje mi mente por unos momentos...

Cuando llegamos a la mansión Félix dijo su nombre y el detector de voz lo reconoció... Me dejó frente la puerta de roble y fue a guardar a mi bebe... Suspire frente esta antes de entrar y ser abordada por un duende lanzándoseme encima...

-Alice...

-¡Bella! ¡Tienes que ver mi creación! -obviamente todo lo dijo chillando, colgando de mi cuello.

-Me asfixias enana -me quejé

-Está bien -dijo algo decepcionada.

-¿Dónde está el vestido? -quería terminar con esto de una vez

-En tu alcoba, Hey, me preguntaba si podía quedarme a dormir... -preguntó bajando la mirada.

-Claro Al, sabes que a veces me siento mal estando sola en esta enorme casa -respondí tristemente -Deberías venirte a vivir conmigo -comenté por trigésima vez (Quiero que Alice viva conmigo para que salga del infierno que es su casa)

-Tal vez pueda venirme... Mañana si no te importa -volteé a ver a mi amiga sorprendida ya que ella nunca estaba de acuerdo.

-¿Qué pasó esta vez Alice Brandon? -sentí como la furia crecía en mi

-Nada, lo de siempre... Llegó borracho... -dejó la oración al aire.

-Volvió a hacerlo -completé llena de ira

(Alice sufre de abuso sexual por parte de su papá, lo que me hierve la sangre ya que solo tiene 18 años y él es un maldito)

Asintió en silencio mientras las lágrimas se deslizaban por sus ojos verdes, la abracé con el corazón roto y bese su cabeza.

-Shh, tranquila ya pasó -susurré en su oído para calmarla

-Gracias por recibirme en tu casa Bella, eres un ángel -sollozó

-Tranquila, nena -volví a besar su cabeza -¡Aro! -levanté la voz para llamar a mi jefe de seguridad que apareció enseguida

-Si señorita -dijo respetuosamente

-Ella es Alice, una nueva persona en esta casa y por consiguiente una nueva jefa, quiero que la CUIDES hasta que consigas un guardaespaldas para ella, hagas todo lo que te pida al igual que el resto -dije firme

-Si señorita -respondió sonriéndole a Alice, la cual aún lloraba

-Otra cosa -agregué -Hazme un favor

-Lo que guste, señorita

-No estaré aquí parte del día de mañana ni en la noche, quiero que la cuides, que Sue le muestre la casa y que vayas mínimo con tres hombres a su casa a recoger sus cosas ¿está bien?

-Sí, señorita -inclinó la cabeza

-Es todo -lo despedí con una sonrisa

Alice había dejado de llorar y me abrazó muy fuerte

-Te considero mi madre aunque solo tengas tres años más que yo -me sonrió -¡Vamos a ver el vestido! -chilló riendo

Lo que más admiro de ella es que pese a todas las cosas malas que pasan en su vida sigue con su hermosa sonrisa que me llena de luz... Ella es muy importante para mí... Su madre desde que murió nos dejó a todos un enorme vacío... Quizás mayor que cuando murió la mía... Y desde allí su padre se volvió un monstruo...

Quise matar a Alice en el mismo momento en el que vi el vestido rojo pasión que estaba tendido en la casa

-Alice te dije sexy pero con algo de imaginación en el escote -rodé los ojos

-Cállate, se te verá divino -rio

Lo observé bien, era muy lindo... Escote de corazón, algunas mini flores negras, estilo corsé en la parte de atrás, suelto, hasta los pies con pedrería... En fin es hermoso... Encima tenía un gancho para el tocado del cabello de flores rojas y negras muy hermoso y unas plataformas rojas con cintas negras...

-De verdad te esmeraste enana -comenté sorprendida.

-Porque es para ti -respondió sonrojada -Matarás al tipo -sonrió

La abrace, después bajamos a cenar y fuimos a dormir en eso de las 1:30 am... Alice se acostó a dormir conmigo porque yo no quería que tuviera pesadillas...

Me desperté en eso de las 6:30 de la mañana, me bañe, me coloqué un vestido beige algo corto, unos tacones del mismo color, una chaqueta que llegaba hasta mis rodillas y dejé mi cabello suelto... Salí de la casa procurando no hacer ruido para despertar a Alice púes estuvo muy inquieta...

Llegué a la oficina luego de que Félix me trajera y empecé a chequear unos papeles, esto iba de mal en peor... Pronto tendría que empezar a despedir personal y eso era terrible... El sonido del intercomunicador me distrajo

-¿Pasa algo Ángela? -dije extrañada ya que tenía unos días sin usar el intercomunicador

-Disculpe que la moleste señorita Swan, pero hay dos caballeros aquí que insisten en verla, les dije que está ocupada pero insisten en verla -murmuró apenada

-No te preocupes, ¿son personas que hayas visto antes?

-Aquí no, señorita...

-Qué más da, déjelos pasar -corte comunicación...

A los 2 minutos más o menos escuché que tocaron la puerta de mi oficina, me volteé dándole la espalda a esta, estando de frente al ventanal.

-Adelante -grité

Escuché el crujido de la puerta y a continuación un par de pasos

-Buenos días señorita Swan, lamento molestarla pero el asunto a tratar es algo confidencial -escuché la voz de la persona en la que pienso diariamente, la que vive taladrándome los sueños y haciéndome recordar mi infancia...

La voz de Edward Cullen

-¿Y no podía esperar a la noche señor Cullen? -objeté

-No, por favor ¿podría darse vuelta? -escuché otra voz algo irritada

Lentamente fui dándome vuelta y allí fue cuando me di cuenta de porque, me gustaba y siempre me gustó el tipo.

Me dediqué a estudiarlos, el primero tenía un traje azul oscuro y una camisa negra, cargaba un portafolio negro, su cabello era rojo, sus ojos azules... Y... Edward Cullen, su traje era impecablemente negro, con una camisa blanca, su cabello cobrizo y sus ojos verde esmeralda, no había cambiado mucho, me miraban con un brillo que no supe descifrar, él también me estudiaba, después de todo no me había visto en persona por muchos años... Su cara era de sorpresa...

Carraspeé algo ruborizada...

-Buenos días, ¿A qué se debe su visita?

-Bueno, primero que todo, como ya sabes mi nombre es Edward Cullen y él es el señor James, mi abogado -abrí mucho los ojos, sorprendida -Bueno es que se cómo han estado yendo últimamente las finanzas de su empresa y tengo una propuesta para usted...

-No está en venta...

-No vengo a comprarla -me cortó

-¿Entonces? -este tipo me pone demasiado nerviosa

-La empresa podrá levantarse y ser toda suya pero para eso tendrá que hacer algo -comenzó el abogado

-Como por ejemplo... -lo incité a continuar

-Tienes que casarte conmigo -completó Edward...

Aguanté la respiración y solté todo de golpe

-¿¡QUÉ!? -grité y acto seguido me eché a reír -Este estuvo bueno Cullen y entonces, ¿Cuál es el plan? -mi risa se congeló cuando vi que nadie se reía -¿Es en serio? -asintieron

-Puedes pensarlo si quieres -intervino Edward -Pero tendrás que empezar a despedir gente -es listo el imbécil

-Pero eso es ridículo, ¿Por qué querrías ayudarme? -levanté una ceja cuando se sonrojó

-Los ayudaría a los dos, Edward necesita una esposa y tu una empresa, tu eres una chica y él tiene todo para levantarla -ayudó el abogado

-Pero sin opción de divorcio hasta los tres años porque si no pasa a mía la empresa -continuó Edward

-A ver si entendí, me tengo que casar contigo, estar a tu lado tres años, vivir contigo y salir en público contigo para tener mi empresa ¿No?

Asintió

-A veces soy insoportable ¿sabes? -dije para asustarlo

-Podré vivir con ello -me deslumbró su sonrisa -Además hablas como si no lo supiera ya -se burló, rodé los ojos.

Lo pensé por un momento... No podía perder la empresa pero, ¿estaba dispuesta a sacrificarme por ello? La respuesta es sí... Bueno, al menos él es amable... Y es Edward...

-Está bien, firmaré pero... Hay un problema -lo vi torcer su sonrisa y luego fruncir el ceño

-¿Cual?

-Vivo con una hermana de cariño -comenté

-No hay problema, puede vivir con nosotros -me ahogué

-Vivir, ¿dices?

-Por supuesto, apenas nos casemos por la iglesia nos vamos a vivir juntos, es decir en 3 semanas -sonrió

¿En qué maldito problema me acabo de meter?

-Como sea -dije mientras firmaba

-Esta noche, te presentaré como mi prometida frente todos -me sonroje

-Está bien -susurré

-Ya debemos irnos, nos vemos -se levantaron, el abogado me dio la mano y salió luego de decirle a Edward que lo esperaba afuera... Salió... Dejándome sola con el... Y muy nerviosa

-Ten -dicho esto me colocó un anillo con 3 diamantes... -Gracias por aceptar...

-Feliz Cumpleaños -susurré

-El mejor -estaba demasiado cerca de mí... Sentía su aliento en mi cara y era exquisito...

-Nos vemos, ¿en la noche? -susurré, no entiendo, ¿por qué demonios quiero besarlo?

-Sí, futura señora Cullen... Nos vemos -me beso la mejilla en un lindo contacto

Y se fue... Dejándome confundida... Y aturdida... El hombre me pone los nervios a mil...

Seguí con mi labor hasta que todos los papeles estuvieron en orden y me incline en mi silla... Voy a casarme... Con una persona con la cual no he convivido en años... Que por cierto me carga loca... Y me pone nerviosa...

El sonido de mi teléfono llamo mi atención... Sonreí al ver el identificador "Osito"

-¿Qué hay Em.? -saludé feliz

-Hey Bells, todo bien de verdad... Oye ¿vas a la fiesta de Edward Cullen hermanita? -respondió burlón

-Sí, allí daremos un aviso ¿Y tú? -necesitaba ir metiendo esto por debajo...

-¿Cómo perdérmela? Es mi mejor amigo -dijo como si fuera obvio

-Si claro pues, supongo que nos vemos allá

-Sí, te quiero mucho hermanita -me sonrojé

-Yo también Emmett...

Mi lindo Hermano mayor Emmett

Las horas pasaron totalmente rápido y cuando percaté ya me estaba alistando para ir... Le comente apenas llegué a Alice sobre el fulano trato y me dijo lo mismo que mis pensamientos decían "Es una completa locura, hasta se podría denominar suicidio" pero... ¿Qué puedo hacer? perder la empresa no es una opción... Lo único bueno es que después de un rato dejo de preguntar cómo mil veces si era verdad que nos iríamos a vivir con el...

-¡Wow! ¡Bella estas divina! -chilló aplaudiendo desde la cama

-¿Segura que estarás bien? Creo que llegare muy tarde así que no me esperes -comenté con preocupación

-Me dejas con diez mil guaruras, creo que sobreviviré -respondió con sarcasmo... -Ese es muy afortunado por casarte contigo -noté la nota de celos

La abracé y luego de salir de la habitación el espejo del pasillo me hizo observarme sorprendida, tengo entendido que no soy fea, pero en este vestido debo admitir que me veo muy bonita, se pegaba a mis curvas, resaltaba mis pechos, el peinado se veía muy hermoso y elegante igual que el maquillaje, y todo con los tacones se combinaba demasiado bien... Suspire... Esta sería una larga noche...

Me molesté muchísimo cuando me di cuenta de que había una limusina frente la mansión, el chofer alegando que fue enviado por Edward Muérete Cullen a buscarme... Entré sin chistar guardando todo el veneno acumulado en mi boca... Como a los 25 minutos aproximadamente llegamos al salón de fiestas más costoso de la ciudad, se notaba que el tipo estaba forrado, suspire cuando afuera de este vi un montón de paparazis fotografiando a los recién llegados... Me sorprendió que alguien abriera mi puerta...

Y allí estaba él, sonriéndome a mí, solo a mí... y pidiendo mi mano, la tome sin dudar olvidando completamente que estaba molesta con él, cuando me inspeccionó su mirada se oscureció un poco, me mordí el labio y luego le Sonreí, el me devolvió la sonrisa…

-Estas absolutamente hermosa, no deberías salir así, tendré que espantar a muchos -su voz era ronca

-Y yo tendré que espantarte a ti -le guiñe el ojo. Se río descaradamente y me dio un beso en la comisura de la boca... Suspire

-Sonríe -susurró haciéndole el gesto a las cámaras, seguido por mí...

Tomé su brazo y nos adentramos al salón... Según yo tenía entendido todo el mundo sabía de mi "compromiso" con él, así que todos nos miraban, yo solo sabía sonreír al igual que el...

-Tienes más de una mirada encima -escupió ácidamente

-Es porque estoy con el cumpleañero -le Sonreí.

-O porque estas demasiado provocativa -dijo roncamente

-No sé a lo que te refieres, soy una chica... Es normal –rodé los ojos.

-Como digas Swan

-Bella, se supone que estamos comprometidos repite B-E-L-L-A –lo trate como quien trata a niño con retraso mental

-Ya entendí –refunfuño

La fiesta continuo y todos estábamos disfrutándola mucho, en un momento logre quitarme a Cullen de encima y camine hacia lo más alejado del club... cuando iba llegando alguien tapo mis ojos impidiéndome continuar...

-Cullen no es gracioso –susurre tratando de alejar el pánico de mi voz... En respuesta solo escuche una risa totalmente desconocida

-Hola mi amor, estas hermosísima –me susurro esa voz en el oído y me recorrió un escalofrío... Yo no conocía a este hombre

-¡Suélteme! ¡O voy a gritar! –forcejeé con aquel sujeto, llena de pánico

-Creo que el otro día no decías eso –rio más fuerte

-¡Suélteme! –dije más fuerte

-Shh, amor tranquila –me susurró y me llene de asco

-¡SUÉLTAME! –ahora si grite con pánico. "Edward por favor ven" -pensé

-Pero tranquila –apretó su agarre, lastimándome... Cuando estaba a punto de entrar en completo pánico escuche su voz, y muy molesta para variar

-¡Suelta a mi prometida ahora imbécil! –escuche a Edward susurrar con una voz muy amenazadora.

Y por primera vez, necesite a Cullen y me sentí agradecida...

¡Hola a todos! (Ni siquiera sé si alguien lee esto) bueno el punto es que aquí está mi primera historia en fanfiction, espero de verdad que les guste mucho y espero que no sean tan malos conmigo…

Aviso que también estoy subiendo esta historia a Wattpad y que está registrada en SafeCreative por lo que está completamente prohibida cualquier adaptación y/o copia de la misma ya que se traerán problemas legales, ¡Un besote!

No olviden hacerme saber si les gusta…

Atte.: V.L.