Perdón por estar inactivo por tanto tiempo, pero mi contratista(esclavista) deseaba que sacase este proyecto si o si...y como ya esta se los presento, en si es algo asi como un evento que afecta varios fic, pero espero les guste.
creo que llamare a los fic que entren en este universo ¿oscuric? (no me aperen por el chiste improvisado)
Coautor-kaiserofdarkness
Capítulo 1: Unas negociaciones turbias
Sentada en su lujosa oficina de la fundación Aether se encontraba la líder de esta organización Lusamine quien no pudo evitar realizar una mueca de desagrado mientras estaba hablando con su hijo Gladion, este furico hablaba con su progenitora mientras que tenía un cabestrillo sosteniendo su brazo derecho, el cual había sido roto recientemente por un altercado del que no sabía nada la mujer, aunque le demostraba lo débil que era su estirpe, pero también le llenaba de curiosidad el saber cómo había quedado en tal estado.
-Hijo, está bien hablarle a tu madre sobre lo que sucedió. El hecho de que no estuviera allí cuando sucedió no significa que no esté aquí ahora, ¿No? - La rubia se lamió los labios al oír a su hijo quejándose silenciosamente, pese a que había optado por una actitud dura y oscura su hijo seguía siendo el mismo blandengue que ella recordaba, por lo que el oír como había sido sometido y humillado era de cierta manera delirante e interesante para la mujer que disfrutaba de estar por encima de todos, incluida su familia.
-Dime ¿Acaso fue un pokemon cariño? ¿Acaso él Le pidió usase un poderoso movimiento en contra tuya?
- No.-Dijo tajantemente el chico.
Una curiosa sensación burbujeo dentro de la mujer de ojos azules mientras saboreaba el dolor que su hijo estaba sintiendo en ese momento, era algo absolutamente retorcido y enfermizo.
- ¿Entonces? ¿Cómo te dejo en ese estado?
- Ash…el, uso sus propias manos.
Cuando su hijo mencionó al chico, su instinto maternal se apoderó de ella por un momento, y le exigió que tratase de recordar quien era el poseedor de ese curioso nombre ya que era más que inusual que uno optase por usar sus propias manos para un acto como ese...
-¿Quién fue cariño?-dijo ella con cierta insistencia…
-Fue Ash Ketchum el chico que vino de kanto madre…
- ¿Ash ketchum? ¿El compañero de tu hermana? ¿El dueño del eterno pikachu? –Lusamine sintió una inmensa decepción por su hijo por haber quedado en tal estado por un chico como ese, pero… algo no cuadraba. -Es extraño, no pareciese ser un chico violento. – Su hijo no solo había sido superado por un chico, sino que este no era precisamente uno de apariencia desafiante. –Bueno, me aseguraré de tener algunas palabras con el más tarde ¿De acuerdo? -Dijo mientras que regresaba a leer uno de las múltiples hojas de datos que tenía en su escritorio.
Lusamine no estaba preocupada por su hijo, ni siquiera un poco, había aceptado esa reunión para guardar las apariencias nada más. Aun así, la discusión había tomado un curioso giro.
- Es verdad ¿Puedes darme los detalles de lo que sucedió Gladion? -Pregunto antes de que su hijo saliese de la habitación. - Necesito saber qué decir cuando hable con él. De lo contrario, esto no irá a ninguna parte, podría mentirme incluso, y sin tu perspectiva podría salirse el con la suya.
El corazón de Lusamine comenzó a latir con fuerza cuando su hijo finalmente le contó entre sollozos de dolor cada detalle de lo sucedido. Hizo señales con un dedo a alguien que se encontraba fuera de su habitación antes de preguntar.
- Entonces el de la nada le arranco el vestido a tu hermana y dejo al descubierto sus pequeños y delicados pechos a los demás ¿Cuándo, ella solamente trato de consolarle? –Lusamine se lamio rápidamente los labios. - ¿Seguro realizo tal acto realmente aberrante?
-Sí, no sé si fue porque le empujo con fuerza o fuese su intención, pero el…-Gadion dijo eso mientras que ponía su mano en su rostro. –Si no hubiese intervenido temo intentase sobrepasarse con mi hermana. - Mientras que lagrimas cubrían sus ojos. –Pero no pude evitar tal humillación hacia ella…
- ¿Te hizo llorar querido? - Al escuchar a su pequeño llorar, sus ojos azules se precipitaron hacia su hijo por un momento, brillando de pura emoción y anticipación. -Está bien, cariño desahógate.
-Sé que perdió a su pikachu, pero está usando eso como excusa para comportarse como un cerdo mama, no tiene perdón lo que le hizo a Lillie...-exclamo este sollozando- no pude defender a mi hermana aun cuando se lo prometi…
Las lamentables quejas de su hijo continuaron, pero Lusamine no estaba escuchándolo en absoluto, se limitaba a disfrutar de sus lamentables sollozos con una cara neutra. Finalmente, cuando comenzó a moquear supo que su hijo ya no le produciría más entretenimiento.
-Adiós, Gladion. - Lusamine le empujo para después cerrarle la puerta en la cara a su hijo, sin preocuparse por escuchar lo que este tenía que decir... una cosa era disfrutar de las desgracias ajenas, y otra el sentir vergüenza ajena por su hijo.
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Ash no tenía idea de qué esperar con su estancia en alola tras lo sucedido y realmente tampoco le importaba realmente lo que sucediera tras haber sido invitado a la casa de su víctima, especialmente cuando la madre de Gladion lo recibió personalmente en aquella lujosa mansión.
Sin embargo, lejos de sentirse amenazado por la presencia de la mujer, sus ojos se enfocaban en su gloriosa parte trasera, la cual parecía permanecer en su rostro sin importar donde mirase mientras caminaba dentro de la sala, sin duda era algo que disfrutaba. Con una sonrisa que hubiese enorgullecido a su antiguo compañero de viajes Brook, siguió aquel culo bien proporcionado de la mujer, mientras esta lo movía como si de una diosa de la lujuria se tratase.
Brook en alguna ocasión le había dicho que llegaría el día donde le importarían otras cosas además de las batallas Pokemon. Y pues resulta que tuvo razón. ¿Quién lo diría?
Desde hace algún tiempo el joven había empezado a notar más el cuerpo femenino de sus compañeras, un ejemplo simple seria su nueva protectora en casa, La morena de cabello castaño, la esposa del profesor le llamaba mucho más la atención, a ratos parecía como si el tono su piel fuese más blanquecina debajo de lo que su ropa demostraba, y se preguntaba si eso afectaba el color de sus pechos o entrepierna. Pero la situación no se limitaba a su protectora, también se sentía mucho más atraído por los inmensos pechos de la madre de Lana, pechos que sin duda alguna resaltaban a la vista de cualquiera, eran como una especie de trampa, mientras más se balanceasen él se sentía más atraído de alguna manera. Sus anteriores compañeras también tenían sus respectivos atractivos. ¿Por qué nunca lo había notado? Él estaba seguro de haber conocido a chicas muy lindas en el pasado. ¿Tan metido había estado en su meta de convertirse en maestro pokemon que lo había pasado por alto? ¿Acaso tenía una visión de túnel o algo parecido?
-No te retrases chico. -Anuncio Lusamine mientras meneaba su culo frente a Ash.
Normalmente Ash ignoraría los detalles de aquella mujer tan despampanante y sexy frente a él… Sin embargo, el dolor, la impotencia, y la frustración que sentía desde hace tiempo, parecían haber despertado algo dentro de él, algo primitivo y poderoso. Ya no podía hacer de la vista gorda ante los encantos femeninos a su alrededor. Claro que eso no le impidió esperar lo peor de la mujer frente a él, después de todo incluso tras el incidente de las ultra bestias ella mantenía firme su posición como presidenta de una poderosa compañía. Y él le había roto el brazo a su hijo mayor, además de haber humillado a su hija frente a varias personas, por lo que esperaba ella buscase algún tipo de venganza contra él.
Por otra parte, esa sensación de peligro solo lo excitaba, mientras la seguía alrededor de su casa, su mente recordó todas las aventuras que había vivido con su amarillo compañero, y una oscura sonrisa se dibujó en su rostro… aquella sensación de peligro de alguna manera le parecía familiar.
-Este es mi despacho, aquí nadie nos molestara. - La rubia no pudo evitar sonreír al sentir los ojos de su joven invitado en su culo, estremeciéndose al imaginar el chico babeando sobre ella. –Entra.
Lusamine entro primero y se paró detrás de un muy lujoso escritorio. –Gladion solo me ha dado quejas sobre ti.
-Alguien debería enseñarle a ese idiota cuando callarse. –Ash piso fuertemente el suelo en respuesta asustando a Gladion, quien lo había estado espiando desde que entro en la mansión. –No siempre serán tan dulce con él.
Lusamine sintió asco cuando escucho como su hijo salía corriendo tras esas palabras… ¿Por qué era tan cobarde? Se preguntó mentalmente.
-Planeo hablar con él después, y va a tener que aprender cómo defenderse. - La Presidenta de Aether podía oír a Ash gruñir maldiciones a su hijo. Algo acerca de esa fortaleza y esa capacidad de infundir miedo en alguien le llamo la atención mucho más de lo que debería, sobre todo porque el chico frente de ella había peleado y ganado contra las ultra bestias en el pasado. ¿Cómo un chico como Ash ahora era el matón de su hijo? Esa pregunta era exactamente la razón por la que lo trajo a su mansión de alguna manera igualmente parecía ciertamente más maduro, tal vez la perdida de ese roedor había sido para bien del muchacho.
Claro que eso no impidió a Lusamine mirar por encima del hombro al joven, mirándolo de arriba abajo como si fuera un caramelo para que ella. Se inclinó sin motivo para darle una clara visión tan clara como pudo de su gordo culo al chico. Una sonrisa desviada llegó al labio de la mujer mayor cuando notó el bulto en los pantalones de Ash, en el fondo, sabía que el bulto estaba allí por su trasero y su figura bien formada, la cual aún conservaba esperanzada en encontrar el amor de nuevo.
-Chico. - Su voz era tranquila y serena mientras captaba su atención, casi como si estuviese acariciando su ego. -Como estoy seguro de que ya sabes, soy la madre del niño que rompiste un brazo. Más que importarme el daño que le has ocasionado a él, lo que me duele es la humillación que eso le causa a mi persona, a mí; Lusamine líder de la fundación Aerther.
-Ah, por un momento supuse que estaba aquí directamente por el amor que le tiene a ese idiota. –Comento Ash sarcásticamente.
-Digamos que soy una mujer muy poderosa, y no me gusta que mi orgullo sea pisoteado de esa manera, aunque sea indirectamente. –Dando media vuelta, la mujer rubia comenzó a pavonearse por toda la habitación, balanceando sus caderas con cada paso que daba.
-Esa actitud ya le jugo malas pasadas en el pasado señora. - Ash enfatizo lo último –Si mal no recuerdo me toco salvarle el culo.
La rubia no se molestó por la fría respuesta, en su lugar solo sonrió mientras sus ojos recorrían al chico rudo y de vil comportamiento, amaba la forma en que su lenguaje corporal demostraba que no le importaba demasiado la amenaza que ella había dado. Más importante, tenía los ojos fijos en el exagerado paquete que Ash cargaba imprudentemente, lo único que atravesaba la mente de la mujer mayor era lo maravilloso que sería tenerlo dentro de ella.
-No negare eso. -Cerro la pesada puerta de madera de un portazo. - Aunque tiene sus ventajas el tener algunos años de experiencia tras de mí.
Ella era una mujer que amaba la belleza, y en muchos casos en su vida, lo más hermoso que había encontrado era el sonido de sus propios gemidos cuando estaba llena de una enorme polla en su interior mientras era follada como si no fuese más que una perra.
-Si usted lo dice... –Dijo Ash desviando su mirada hacia el pecho de la mujer. –Aunque.
-Silencio, chico. No he venido aquí para hablar del pasado. Solo tengo unas pocas preguntas para ti. -Dando un paso más cerca de Ash, la mujer mayor se inclinó para mirarlo a los ojos, dándole una mirada seria para asegurarse de que ella era quien tenía el control. -Me responderás con sinceridad o serás castigado. Puedo decir fácilmente si tratas de mentirme.
-Cuidado con lo que pida "señora", puede se le cumpla.
Lusamine se lamio los labios cuando se enderezó de nuevo, mantuvo sus ojos azules fijos en los de Ash. De inmediato quedó claro que ella tenía el control de lo que estaba a punto de suceder (al menos de momento) moviendo su mano derecha desde sus caderas y hasta la parte superior de sus pechos. - ¿Disfrutaste golpear a mi hijo hasta que te dolieron los puños?
-Sí. - La respuesta de Ash fue inmediata y clara, con una honesta sonrisa en su rostro, ni siquiera busco ocultar sus emociones mientras miraba a Lusamine a los ojos. -Me encanto quitarle esa careta de chico rudo con cada golpe que le daba. Ver esa expresión de miedo en sus ojos fue de lo más agradable que me ha pasado en mucho tiempo.
Ash no tenía nada que ocultar, había disfrutado golpear al mal intento de aborto que no sabía cuándo callarse, y disfruto mucho más cuando la sangre cubrió sus puños. Le sonrió a la rubia haciéndolo saber que ella podía estar en el control ahora, pero eso era solo porque él así se lo permitía.
La expresión de Lusamine no cambió cuando su pregunta fue respondida, sin preocuparse por cómo se sentía el joven matón. Sin embargo, la alegría que encontró en Ash al responder la pregunta definitivamente marcó algunos puntos extra a su favor, trayendo una suave sonrisa a sus labios.
- ¿Tienes algo de vergüenza por lo que hiciste? - Sin embargo, en lugar de dejar que el joven le respondiera, la madre al ver aquellos ojos del chico no hizo más que sonreír. - Sé que no lo sientes. –Exclamo poniendo su dedo sobre su labio para sellarlos y bajando otro a lo largo de su pecho sobre la tela blanca, viendo como Ash seguía con su mirada este segundo, cosa que hizo que la mujer relamiese sus labios una vez más mientras continuaba bajando su dedo por su cuerpo. -Ahora, para mi última pregunta ...
Enganchando su dedo en sus pantalones, la mujer mayor se agachó al mismo tiempo que ella tiraba, exponiendo su polla dura en el acto. No pudo evitar soltar un jadeo eufórico por su gran tamaño que superaba con creces sus expectativas, gimiendo y estremeciéndose cuando la punta presionó su mejilla. Mirando a Ash más allá de su polla que, en el fondo, podría haber jurado que era la longitud de su antebrazo, Lusamine lamió la parte inferior de su eje.
- ¿Por qué crees que es una buena idea mantener una polla tan perfecta y deliciosa lejos de la madre de tu víctima? ¿No es el sueño del matón follar a la madre de su víctima todo el día? Siempre creí que era la mejor de las torturas para el afectado - Con la polla simplemente apoyada en su cara, los ojos azules claros de la mujer parecían simplemente gravitar hacia ella, una sonrisa crecía en su rostro, mientras gentilmente empujaba su mejilla en contra.
Ash quiso decir algo, o a menos preguntar qué demonios estaba sucediéndole, sin embargo, no pudo articular palabra alguna al sentir tal placer nuevo para el en esos momentos.
Arrastrando su lengua a lo largo de la parte inferior del enorme eje, la mujer mayor se acercó a la punta y simplemente babeó sobre ella para que su saliva lubricase aquel miembro ya erecto, dejando que su saliva le cubriera el miembro grueso a lo largo del falo y deteniéndose sobre las bolas del chico mientras su mano agarraba suavemente la base de la misma y sus dedos agitaban el escroto de este.
- ¿Tienes algo que decir por ti mismo? ¿Intentar y corregir el error de antes? ¿O la pelea que tuviste con mi hijo fue suficiente para llamar a esto una noche? - La rubia vio cómo su saliva goteaba a lo largo del impresionante pene, incluso yendo tan lejos como para gotear fuera de ella antes de llegar a su mano. Por supuesto, Lusamine no dejó que el joven le respondiera, envolviendo sus labios alrededor de la cabeza de su pene e inmediatamente comenzando a sacudir la cabeza para calmarlo. El sonido de él gimiendo solo por el movimiento de su cabeza hacia adelante y hacia atrás era música para sus oídos,
Cada movimiento de su cabeza hacia adelante y hacia atrás a lo largo del grueso eje causó que las gotas de su saliva cayeran sobre su pecho, empapando su traje blanco y comenzando a mostrar sus pechos. A Lusamine no le importó el hecho de que ella comenzó a ahogarse con la polla cuando esta tocaba su campanilla y se introducía por su garganta cuando todavía le quedaban unos centímetros antes de llegar al fondo para que su nariz se hundiese en el vello púbico del chico y el glande de este bajase hacia su estómago, su corazón estaba acelerado por aquella sensación que había añorado desde hace tanto tiempo atrás, su mente estaba completamente absorta mientras retorcía su lengua a lo largo de la longitud carnosa y venosa del pene de Ash. Combinado con el hecho de que este era el matón de su propio hijo y no un extraño al azar que recogió en la calle, una chispa encendió en el interior de la rubia, una que no quería apagar. Empujándose a sí misma mucho más rápido y más duro que ella finalmente llegó a la base de la polla de Ash. Descansando allí por un momento sin decir una palabra mientras que disfrutaba de aquella sensación.
-Indudablemente posee una boca privilegiada. –Dijo mientras que sentía como la mujer devoraba su miembro con gran maestría. - Espero que su hija la haya heredado, al menos con eso tendría un buen merito que pueda presumir.
Lusamine rápidamente se retiró y colocó un beso feliz en su punta, dejando una ligera mancha de lápiz labial cuando su mano se envolvió alrededor de su polla una vez más y comenzó a acariciar su longitud.
- ¿Esa inútil? Dudo pueda siquiera hacer una quinta parte de lo que yo puedo hacerte chico, aunque supongo que verla ahogarse con este amiguito sería un espectáculo digno de ver. –Exclamo Inclinándose y envolviendo sus labios alrededor de las pelotas pesadas del matón de su hijo, la mujer estaba en el cielo mientras saboreaba lo que él tenía para ofrecer. Sintiendo que continuaba palpitando y contrayéndose al contacto de ella, la rubia rápidamente le quito su pesado saco y le dio otro beso en la punta, esta vez dejando que sus labios permanecieran allí mientras sus dedos acariciaban suavemente el fondo.
- ¿Este monstruo gordo y palpitante, quiere estallar en la garganta de mamá?
Por supuesto, no le importaba lo que Ash pudiese responderle, ella tenía el control de su enorme polla, amando y adorando cada centímetro de esta. Esto fue mucho mejor de lo que podría haberse imaginado, haciendo algo tan depravado como esto podría ser, su corazón casi saltó un latido cuando escuchó otro gemido dejar los labios de Ash. Sin embargo, en lugar de presionarlo para que se corriera de inmediato, la mujer quería tomar las cosas con calma, Ash rogaría por el placer de correrse en su boca.
-Sí, deseo descargar toda mi carga en su estómago señora.
Lusamine envolvió ambas manos alrededor del enorme eje y lentamente las movió hacia atrás y adelante, usando sus dedos para masajear su longitud mientras se movía. Mirando su cara, la mujer de ojos azules pudo ver la mirada de placer torcido y necesitado que acribillaba sus facciones, la mirada solo acariciaba más su ego, saco el miembro y viendo directamente al chico hizo la pregunta que este esperaba.
- ¿Esa es tu respuesta? Demuéstralo…
Ash rápidamente empujó la cabeza de esa puta rubia hacia abajo, tomando cada pulgada de su garganta con su pene, ignorando completamente el bulto se formó en el cuello de Lusamine por eso. No le importaba la falta de oxígeno que le estaba provocando en esos momentos, sus ojos se clavaron en los suyos mientras se sentaba allí y la obligaba a tragar su longitud como la puta hambrienta que era. Casi de inmediato, pudo sentir a sus bolas bombeando esperma en su boca y llenando su garganta.
Una y otra vez, la mujer mayor forzó su garganta para que se apretara alrededor de la longitud impresionante de aquel pene, tragando cada gota de semen que posiblemente podría lograr. Aquel sabor amargo con un toque salado era absolutamente perfecto contra su lengua, ya que aunque era capaz de sentir que esas pesadas bolas se drenaban en su estómago, algo llego a salir de su nariz, ya que la cantidad era mucho más de lo que ella creía posible. Después de lo que se sintió como una feliz eternidad, la mujer comenzó a alejarse, y un momento después sonrió cuando finalmente rompió su mirada con él antes de regresarla sobre su polla, amando la forma en que brillaba en su semen y su saliva, incluso después de ella hizo todo lo posible para tenerlo todo bajo su garganta.
-Me alegra ver que eres un chico de palabra. -Exclamo la Presidente Aether comenzó a acariciar su polla con la misma rapidez con que movía la cabeza un momento antes, una sonrisa se formó rápidamente en sus labios mientras los lamía. -A partir de ahora vamos a vernos mucho. Con una cosa como esta hermosura, no hay forma de que te deje demasiado lejos de mí. ¡Esta polla es mía, después de todo!
Una y otra vez, la mujer rubia mayor movía su mano hacia adelante y hacia atrás a lo largo del grueso eje que estaba en su cara, haciendo todo lo posible para ganar más semen del miembro masivo.
- ¿Quieres correrte de nuevo, ¿no? Apuesto a que quieres explotar en mi cara y ...- Lusamine detuvo su discurso el tiempo suficiente para lamer la pequeña cantidad de semen que goteaba de su nariz en sus labios, gimiendo silenciosamente por el sabor. -... Maquillarme con tu blanco esperma. No te contengas. - Una risita suave salió de sus labios cuando sintió que él comenzaba a palpitar contra sus dedos como lo hizo contra su lengua, una muy pequeña cantidad de esperma goteando de su punta cuando comenzó a mover sus manos más rápido. -Hazlo, muchacho. Nada te detiene, después de todo.
La mujer no pestañea mientras obliga al joven a un feliz orgasmo, solo deja escapar un alegre grito de asombro mientras siente una cuerda tras otra tras una cuerda de esperma espeso que pinta sus rasgos prístinos, algunos de ellos incluso entran en su cabello y en sus labios y pecho mientras su mano continuaba moviéndose. Sin embargo, después de un momento, Lusamine sacó su mano del eje del joven y se la llevó a la cara, limpiándola de algo de su semen antes de llevársela a la boca. Sin perder el ritmo, la mujer de ojos azules sacó la lengua de su boca y lamió cada gota de leche que había reunido en sus dedos, gimiendo como una puta mientras mantenía contacto visual con Ash.
-No puedo creer que llegarías tan lejos como para marcarme como tu propiedad. Es casi como si quisieras estar en mi vida para siempre.
Mientras Lusamine llevaba su otra mano a través de su cara para recoger el resto del semen que no estaba manchando su ropa o su cabello, repitiendo el proceso de lamer sus senos sin semen mientras miraba a Ash a la cara.
Una suave risa dejó los labios de Ash.
-No me molestaría tener una puta como tu limpiándome los huevos, lo admito, pero tu edad. Estas un poco por encima de mis estándares.
Esa fría declaración de Ash hizo que el corazón de Lusamine corazón se acelerara y que su coño se estremeciera dulcemente, en especial cuando vio una mirada hambrienta en la cara del joven.
-Tal vez sea al revés... Tal vez te estás convirtiendo en mi propiedad más rápido de lo que sabes y hasta olvides el cómo salir. - La madre se dio vuelta y se dirigió a una mesa cercana, haciendo un gesto para que la siguiera. - Pero concuerdo contigo no sería fácil justificar que estés a mi lado fácilmente ante la sociedad, por ello te tengo una propuesta…
-Te escucho.
- ¿Qué te parece si usamos tu pequeño incidente con mi inútil hijo para justificar tu mudanza a esta casa? Podemos declarar que te he obligado a tomar la responsabilidad por tus actos aberrantes contra este o en su caso lo de mi hija de ser necesario….
Ash la interrumpió un poco apresurado. -Suena cliché, por decir algo. En todo caso eso no justificaría que me quedase por más de unos pocos meses.
-Tiempo suficiente como para que te enamores perdidamente de mi hija y la tomes como tu pareja. -Lusamine sonrió al ver la cara de desconcierto de Ash. - Por supuesto que en realidad puedes considerarla un simple juguete al cual puedes destrozar y usar como desees-Con uno de sus pies acaricia descaradamente el miembro de Ash. - Siempre y cuando esta cosa esté lista para ser usada por mi persona. Claro está. Podrás hacer uso de Lilie como si fuese tu muñeca personal, a modo de pantalla.
-Así que me estás ofreciendo a su propia hija como dote para tener mi pene cerca de ti.
-Sé que no es mucho para tan buen mimbro que tienes, pero al menos puedo darle alguna utilidad a mi hija. Úsala como tu vertedero de semen, yo me asegurare de que nada de lo que ella pudiese llegar a quejarse salga de esta casa… a no ser que tu así lo desees.
-…
Mientras esperaba una respuesta positiva a su indecorosa proposición, jugueteó con sus polainas, debatiendo en silencio si debería abrirles un agujero ahora o si debería esperar y dejar que esa gruesa polla lo hiciera por ella. Sin embargo, en el momento en que Ash dio un paso, ese pensamiento abandonó su mente y rápidamente se dio la vuelta, con toda la intención de colocar esa inmensa polla entre sus nalgas.
-Si te soy sincera me prende mucho la idea de que mi hija se entere de cómo me haces gritar de placer con esa inmensa polla tuya, creo le agradas un poco. -Lusamine empezó a mover sus caderas hacia arriba y abajo. - La imagino espiando detrás de una puerta con un grito ahogado de placer, dolor, y agonía cada vez que te tome para mí.
Ash solo gruño, esa imagen le prendía mucho, aun así, no estaba muy contento con la idea de que sea Lusamine quien le dé órdenes, por lo que no se movió.
-No me digas que una polla monstruosa como la tuya no tiene la energía para seguir más de una vuelta ... Espero que puedas demostrar que estoy equivocada.
-Estoy analizando tu propuesta, hay muchas cosas que me gustaría hacerle a tu hija. - Por supuesto que la mente de Ash no estaba limitada a Lilie, en sus viajes había tenido una inmensa cantidad de compañeras que el ahora deseaba de otra forma. - Hay mucho que analizar.
-Todavía no he terminado contigo chico. -Exclamo molesta la rubia. - Así que mejor se siéntate cómodo y acepta todo lo que estoy pensando en hacer contigo ya después podrás pensar en que hacerle a mi hija.
Ash se sintió tentado a preguntar: "¿Dónde o como se podía sentar?" pero considerando un poco mejor la situación donde estaba decidió dejarlo pasar.
Lusamine comenzando a mover sus caderas más rápido mientras se agarraba fuertemente a la mesa, la mujer mayor miró detrás de ella por encima de su hombro y mantuvo sus ojos firmemente fijos en la cara del joven.
-Sabes ... no creo que haya tenido una polla tan gruesa y magníficamente grande como la tuya antes. -Comento mientras sentía la circunferencia de Ash entre sus nalgas. - Sera toda una experiencia el anal.
Pero antes de que Lusamine pudiese continuar Ash la nalgueo fuertemente. -Hablas mucho, pero tienes miedo de que destroce tu coño. - Ash envistió fuertemente metiéndole hasta la mitad su falo de una sola estocada. - ¿Cómo una mujer con dos hijos puede estar tan apretada?
Algo sobre eso hizo que el corazón de la mujer mayor se detuviese. Ya fuera por miedo o por alegría, no quería saber. No le importaba, ya que esta mujerzuela hermosa, poderosa, retorcida, y desagradable seguiría rebotando sus caderas.
-Se siente bien, ¿no? Hacer que una mujer mayor como yo venga por ti, en su propia casa ... Anhelando su polla gorda en ella como si fuera solo otro hombre en su vida. No me sorprendería si quisieras volver a marcarme y hacer un desastre total de mi culo. -Mientras rebotaba, la Presidente Aether comenzó a balancear sus caderas de un lado a otro, girando su mitad inferior alrededor de la polla que palpitaba dentro de su suave coño. -Bueno, nada te impide hacerlo. Vuélvete el hombre de esta casa y reclama para ti este culo, el de mi hija, y si tú lo deseas el de mi inútil hijo de paso.
-Hablas mucho. - Con un poderoso empujón, la polla de Ash se clavó hasta la empuñadura dentro del apretado coño de Lusamine quien se derrumbó sobre la mesa con un grito de placer.
-Hiciste un buen trabajo al convertirme en esto. Como recompensa, puedes follarme tan duro y tan rápido como quieras. Destruye mi coño por todo lo que me importa. Mientras consiga esa gruesa ... jugosa ... polla perfecta dentro de mí. - La rubia se rio alegremente mientras sentía al enorme miembro endurecerse una vez más, claramente listo para más de lo que ella podía manejar. -Fóllame. Demuéstrame cuán intimidante eres para mi hijo en realidad. -No hubo dudas entre sus palabras y la sensación de su polla presionando contra su coño.
-Ya te dije que tengas cuidado con lo que pides puta.
La sensación de tener sus paredes internas de su coño estiradas y separadas para encajar una enorme polla de un solo golpe era casi suficiente para hacer añicos la mente de la madre, el miembro estaba abriéndose paso hacia su útero por lo que la baba comenzó a gotear por su barbilla al sentir las manos del chico sobre su cuerpo. No fue hasta que comenzó a empujar dentro de ella a un ritmo brutalmente rápido que pudo hablar de nuevo, el dolor y el placer le dieron algo en lo que enfocarse.
- ¡Sí! ¡Mierda! ¡Incluso mi esposo no era tan grande! –Usando sus brazos como soporte arqueo su espalda tanto como podía, deseaba darle un beso, pero ese pensamiento se esfumo de su cabeza cuando sintió los dientes de Ash hundirse en su ropa y apretarse alrededor de su suave piel. -Mmm. Realmente eres un pagano si estás dispuesto a ser así de brusco con una pobre viuda. -Por supuesto eso no le importaba, ya que el eje de Ash seguía bombeando dentro y fuera de ella con el mismo ritmo brutal, como si estuviera tratando de escucharla y demostrar cuánto disfrutaba arruinando a su interior. - ¡Más! ¡Dale más a mamá! ¡Si esta maravillosa polla! ¡No te vas a acabar hasta que acomodes cada pulgada de ella a mi interior!
Los ojos de Ash se ensancharon cuando le llegó un momento de lucidez, preguntándose; "Cuán alocada podría llegar a ser una relación con esta mujer". -Nunca pensé que estaría follando a la madre de Gladio. Definitivamente nunca pensé que serías una zorra tan rogada por una polla como esta. -El joven miró a los ojos de la mujer, una sonrisa apareció en sus labios. - ¿Quieres cada pulgada? ¡Bien te la daré, es más puede que hasta te de un tercer hijo!
Lusamine solo podía sonreír y estremecerse ante las palabras que estaba escuchando, sabiendo que era verdad, y amaba la idea de ser preñada por un hombre mucho menor que ella. No importaba que fuese el matón que le rompió el brazo a su hijo ahora quien estuviera enterrado dentro de ella mientras la follaban contra una mesa, solo el hecho de que tenía una gran polla, la cual adoraría y amaría por el resto de todos los días de su vida. Cogiendo su labio inferior entre sus dientes, la mujer mayor gimió de pura felicidad cuando el joven comenzó a entrar aún más rápido dentro de ella sintiendo como estaba golpeando directamente su utero. Sin embargo, algo faltaba en su amor, algo que ella desesperadamente necesitaba y ansiaba más que nada. -Todavía no estás completamente dentro de mí, ¿o sí? - La mujer de ojos azules fulminó con la mirada su nuevo juguete, con una mirada siniestra en los ojos mientras se lamía los labios. - ¿Qué esperas?
Ash envolvió sus brazos alrededor de las piernas de Lusamine y la levanto por completo.
La Presidente del Eter casi pidió perdón mientras el forzaba todo su eje dentro de ella. Un grito de dolor y placer abandonó su garganta cuando pensó que podía sentir al niño penetrando finalmente su útero, sin importarle si realmente podía o no embarazarla en el proceso.
Nada le importaba, ahora que su lujuria y placer comenzaban a dominar su mente. - ¡Eso es! ¡Eso es justo lo que mamá quería! ¡A la mierda mi útero! ¡márcalo de blanco semen! ¡Fóllame y arróllame! - Lusamine miró a Ash justo a tiempo para verlo levantarla y golpearla contra una pared cercana, inmovilizándola y empujando en ella tan rápido como pudiese.
No hubo vergüenza en su acto, ni amor el uno por el otro. Solo lujuria por el cuerpo y la brutalidad del otro, mientras se miraban a los ojos, sabiendo y reconociendo silenciosamente ese hecho, pero sin importarle ni una cosa ni la otra. - ¡Hazlo! - La voz de Lusamine rompio el silencio entre ellos mientras echa la cabeza hacia atrás una vez más, perdiéndose por completo. - ¡Arroja cada gota de semen que tienes dentro de mí! ¡Préñame como los animales que somos! ¡Mami lo necesita! -No le importaba nadie más que ella en este momento, ni siquiera para el joven que la estaba follando. Todo lo que la madre quería era exactamente lo que decía, quería que dejaran su vagina destrozada y criar un hijo como si no se tratase de nada más que un animal.
Afortunadamente, ella consiguió justo lo que quería un momento después, un gruñido se fue, dijo el joven como una cuerda tras una cuerda de semen espeso y potente inundó su útero. La sensación de estar llena de esperma fue suficiente para enviar a la mujer al borde y entrar en su propio orgasmo, un agudo jadeo que la dejó mientras sus paredes internas se cerraban alrededor de la gruesa polla que continuaba bombeando hacia adentro y hacia atrás dentro de ella como más y más más escupitajo pareció escupir y pintar sus paredes interiores. -Eso es todo, cariño … Eso es justo lo que mamá quería. Voy a usarte para reemplazar ese inútil hijo mío. Estás cumpliendo mi más oscuro y perverso sueño. –Su voz pareció ponerse un poco débil, estaba cansada por el impacto inicial de su orgasmo, el abrumador placer la consumió un poco. Sin embargo, eso terminó rápidamente cuando sintió que su cuerpo abandonaba la pared, sintiendo que Ash la llevaba de vuelta a la misma mesa en la que habían comenzado. Otro jadeo la dejó cuando la golpearon contra los muebles, dándose cuenta inmediatamente de lo que estaba pasando. Ash estaba lejos de terminar con ella.
-Espero que no creas que esto ha terminado solo así, me has hecho venir todo el camino hasta aquí en un día tan caluroso, pienso cobrarme incluso los intereses.
-Bueno. Eres un joven inteligente después de todo, ¿verdad? Asegúrate de que estoy embarazada antes de que termines conmigo. -La mujer rubia se llevó una mano al estómago y la bajó por su cuerpo hasta que estuvo sobre su útero, con una sonrisa brillante y retorcida en su rostro. Miró al niño arriba y abajo por última vez. -Hazlo. No te atrevas a parar hasta que estés seguro de que estoy embarazada. -A la mujer mayor no le importaba que sus piernas y brazos estuvieran flácidos como espárragos, su mente estaba completamente centrada en el hecho de que las bolas del chico seguían llenas, él todavía estaba increíblemente duro, y ella aun lo deseaba dentro de ella. Casi como si ahora solo estuviera moviéndose por pura lujuria.
Una vez que Ash comenzó a moverse dentro de ella otra vez, un agradable jadeo dejó los labios de la mujer, sus dos manos acariciaron suavemente las mejillas del joven mientras lo miraba a los ojos. Una vez más, ella tenía esa mirada retorcida y deliciosamente retorcida en sus ojos. -Eres mío ahora, chico. No me importa cómo te sientas al respecto. Tu eres mi amante. Sin peros que valgan.
Ash solo gruño en negación, el asunto de la pertenencia no acababa de gustarle, pero le dolían demasiado las bolas como para que se pudiese a discutir seriamente el asunto en ese momento.
-Tu solo eres una puta, mi puta. No te atrevas a creerte mi dueña.
Los ojos verdes de Lusamine se abrieron un poco mientras sentía una nueva bomba de esperma en su necesitado útero. No había forma de que al chico le quedasen fuerzas tras descargar con semejante fuerza dentro de ella ¿Verdad?
-Eso debería ser suficiente, joven ... Has hecho un trabajo maravilloso hoy. Hacer que una mujer mayor se enamore de ti… Debe sentirse aún mejor ya que es la madre de su víctima. El exigirte que seas mi amante es una pequeña compensación a lo que me has hecho. -Una suave risa dejó los labios del Presidente Aether mientras se desenvolvía del cuerpo del joven y lentamente lo alejó de ella. -Eres libre de seguir Enseñándole a mi hijo tanto y tan brutalmente como quieras. No me importa si él termina en el hospital, tampoco lo de mi hija, puedes hacer lo que te plazca con ella, si deseas preñarla o darle otro uso será cosa tuya. Solo tengo una condición. -Lusamine levantó un dedo y lo mantuvo en la cara de Ash mientras se acomodaba para sentarse correctamente sobre la mesa.
El joven miró a la mujer mayor con prepotencia. – ¿Realmente crees que te dejare mandarme solo por poder enviar a Gladion al hospital o dejar futuro de su hija en la palma de mis manos?
-Confía en mí cuando digo que tu pene es mucho más importante para mí que alguno de mis hijos. Me estás ayudando a reemplazarlos después de todo. -Mirando directamente a los ojos de Ash, la mujer dejó escapar un suave aliento, mientras sus ojos se sumían en su locura natural. -Te convertirás en mi esposo tras bambalinas. Me preñaras sin quejas ni reservas, vendrás aquí todos los días para satisfacerme. Incluso tendré una habitación preparada para ti en mi oficina y estarás durmiendo en mi habitación cuando caiga la noche. -Dejando caer su dedo y llevándolo a sus caderas, Lusamine se lamió los labios y saltó de la cama/mesa, acercándose al joven que iba a ser su futuro marido. -Quiero que quede muy claro para ti. Necesito un hombre con una polla gorda en mi vida que pueda seguir por más de una oportunidad. Has demostrado claramente que puedes hacer eso, si bien para el resto de la isla serás el prometido de mi hija, tus funciones solamente será el complacerme ¿lo has entendido?
Ash se quedó sin aliento mientras veía esa locura consumir los ojos de Lusamine, casi era como cuando fue poseída por las ultra bestias. Era algo hermoso y terrorífico a la vez.
-Todos los días por el resto de nuestras vidas, me vas a follar a mí como tu mayor prioridad si deseas tener alguna vagina o culito adicional eres libre de intentarlo, pero si descubro quienes son…- Lusamine atrajo al joven contra su cuerpo y sonrió cuando se inclinó lo suficiente para susurrarle al oído, arrastrando su lengua sobre su oreja. -…Digamos que me encargaré de que nunca las vuelvas a poder ver a otra vez…Eres mío. ¿Lo entiendes? Mi propiedad. Eres un marido trofeo y disfrutarás de nuestra vida juntos.
El joven sintió un escalofrío recorrer su espina dorsal, al saber que cada palabra que salía de sus labios era verdad. Pero. ¿Porque debía rendirse tan fácilmente? Había recorrido regiones enteras, peleado contra pokemones que se creían solo existían en las leyendas, y desmantelado organizaciones malvadas con nada más que su presencia.
–No seas tan presumida. - Tomando una respiración profunda cuando sintió que su agarre sobre él solo se hacía más fuerte. -Tú no eres más que mi juguete, una puta ruidosa que usare hasta que me aburras, usare tu culo y vagina hasta que no apriete más, luego usare el de tu hija, sus amigas, o alguna de tus empleadas, cualquiera me vale… No te atrevas a creerte más de lo que eres. Tú no eres mi dueña. Pero si no deseas que me deshaga de ti, será mejor que mantengas firmes y apretados esos orificios tuyos.
Eso fue todo lo que Lusamine necesitaba escuchar, el chico no se sometería fácilmente. Inmediatamente se desenvolvió del cuerpo de su joven amante y comenzó a alejarse de él.
-Haré que uno de los guardias te escolte de regreso al pueblo para que prepares tus cosas, mañana haremos el anuncio oficial, te mudaras a esta casa lo antes posible.
Ash se rio confiado. - ¿Acaso no puedes llevarme tu?
-La presidenta de Aeter no se puede ver caminando con un hombre joven tan campantemente. Al menos, todavía no. - La mujer puso su mano en el pomo de la puerta y sonrió cuando volteo para mirar la cara mal humorada de Ash. –Veremos cuanto puedes mantener esa actitud tuya. Por ahora me asegurare de sacar a Gladion de la casa mañana. Aunque quiero que estemos solos, de momento Lilie deberá estar presente como pantalla, aunque si deseas destrozarla puedes hacerlo…-Lusamine sonríe de medio lado. - Es más prepárate para romperle el coño mañana. Hay mucho de que tratar sobre mi embarazo, pero creo que uno de ella podría "justificar" el mío para la sociedad, incluso podría hacer pasar mi hijo como un hijo de mi hija. Sí, eso funcionaria realmente bien, aunque deberíamos de manejarlo sutilmente.
-Entendido entonces esperare ansioso el día de mañana. -Ash no pudo evitar sonreír ante la idea de que Lilie tendría que cuidar con los hijos que él pusiese dentro Lusamine. - Poder follarme a tu hija con tu ayuda es sin duda una tentadora propuesta.
-Así será chico… le hare tomar algo para la fertilidad, tu asegúrate de tener energía para cogértela hasta embarazarla como lo has hecho hoy conmigo…-Lusamine estaba punto de salir cuando la mano de Ash la detuvo. –¿Algo que objetar querido?
-Me gustaría retrasar los embarazos unos meses.
Lusamine gruño con enfado, ella quería llevar un bastardo de Ash dentro de su vientre lo antes posible.
- ¿Porque lo haríamos?
-Me gustaría que parieses los primeros días de enero.
Lusamine lo pensó unos segundos ¿Recibir el año nuevo con un nuevo hijo? Ciertamente no era una idea desagradable. Claro que ella no podía aceptarlo así porque si ¡Ella mandaba! Si ella decía algo, eso debía cumplirse. Lamentablemente Ash parecía no reconocer su lugar en esa relación de momento.
-Lo discutiré con la almohada. -Lusamine salió dando grandes y elegantes pasos. - Pero no esperes que cambie mi decisión.
Ash por su parte se quedó viendo la ventana, en las próximas 24 horas debía encontrar una manera de someter a la rubia desquiciada, o tendría que conformarse con las migajas que ella le dejase.
-Maldición ¿Por qué nunca escuche a Brook? -Ash se lamentó por su poca o nula experiencia con el sexo femenino, más él no se rendiría tan fácilmente. – Mañana debo …. ¡No! Mañana le enseñare su lugar a esa puta.
Como siempre agradezco a Kaiser por su ayuda en crear este fic.
Pásense por sus fics de lucha por ser en los cuales yo le ayudo un poco.
