Nota 1: Fairy Tail es propiedad de Hiro Mashima. Y participa este Oneshot en el Reto: "Mata pasiones" del Foro Grandes Juegos mágicos

Nota 2: Este Oneshot participa en el Reto: "Mata pasiones" del Foro GJM.

LA ÚLTIMA EXTENSIÓN DE MI ALMA

La nieve caía, los pequeños copos cubrían de blanco todo el panorama. Era un día demasiado frío, caminaba lentamente hacia el andén, pues tenía que esperar a su compañero quien solo de imaginarse el viaje se había vuelto a marear intensamente.

—Vamos Natsu…— Happy estaba suspendido en el aire animando a su mejor amigo.

—Happyyyyyy…— el pelirosa se encontraba sumamente pálido, sus movimientos eran mecánicos, si caminaba era por la simple razón que debía hacerlo, había sugerido varias veces emprender el viaje a pie… pero la situación climática no colaboraba en absoluto para que su sugerencia sea acatada.

—Vamos Natsu, aún no has subido y ya te encuentras mareado…— Lucy se encontraba pensativa, ¿Habría tomado una decisión correcta al haber aceptado hacer ese trabajo un día tan malo como este?

Su respiración chocaba con el frío ambiente, haciendo que su aliento se evapore, al menos el calor de la locomotora la había golpeado con agrado al acercarse al tren.

—Todos a bordo…— El controlador del tren gritaba, haciendo el último llamado a los pasajeros, un largo viaje los aguardaba.

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Había pasado alrededor de media hora desde que subieron, Natsu se encontraba inconsciente tirado en uno de los asientos, el movimiento del tren era suave, Lucy observaba por la ventana, mientras más se alejaban más fuerte era la tormenta.

Una suave melodía llegó a sus oídos, sus párpados se volvieron pesados, amenazaba con quedarse dormida cuando en ello, un fuerte sacudón la alertó.

Natsu se puso de pie, completamente morado, aquel brusco movimiento hizo que las náuseas volvieran a él, rápidamente se acercó a la ventana, abriendola de un tirón, el frio viento entró violentamente, obligándolos a caer.

—NATSU...— Lucy se puso de pie, corriendo hacia la ventana, intentandola cerrar.

—Yo te ayudo Lucy— Happy rapidamente se acercó ayudandola, pero por mas fuerza que aplicaron no sirvió de nada, aquella ventana no cedía.

De pronto la puerta del vagón se abrió, era el controlador, quien rápidamente se sumó para ayudar.

—Señorita ¿Se encuentra bien?— Preguntó amablemente.

—Si... gracia-a-achú...— Lucy estornudó, el frio la habia golpeado.

—Señor... ¿Por qué se detuvo el tren?— Happy preguntó curioso.

—Pido disculpas...debido a la tormenta, nos hemos visto obligados a detenernos, en un par de horas continuaremos el viaje— El controlador sacó unas mantas del baúl dentro del vagón, —Sugiero visiten el vagón-comedor de nuestro tren, debería tomar algo caliente para su resfriado—

—¡Ahhhhh!— solo en ese momento la voz de Natsu se hizo presente, su aspecto era terrible.

—Pobre Natsu... tendras que esperar un par de hora-a-¡achu!— Lucy no se sentía nada bien. —¿Vienes conmigo Happy?—

Happy negó con la cabeza, —Ve tu, Lucy... yo me quedaré con Natsu...—

Lucy le regaló una sonrisa y caminó hacia la cafetería.

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—¡Achu!— fue solo un par de minutos a los cuales se expuso al viento, pero solo eso bastó para que agarrara un resfriado.

—Señorita... ¿Que le puedo servir?— una de las meseras se le acercó

—Un té por favo-o-oachu— Lucy se sentía terrible.

La mesera negó levemente con su cabeza, —¿Desea algo para el resfriado? Tenemos un excelente elixir que la hará sentir mejor—

—¿Es en serio?—

La mesera afirmó, —En un momento se lo traigo—

Lucy se abrazo de su manta, esperando que la cura a su resfriado llegase, cuando en ello, observó como un hombre maduro se sentó en una de las mesas mientras fumaba su pipa.

Aquel humo suavemente viajaba por el aire, disipandose en el ambiente. Sus orbes azules se prendieron en las formas que se dibujaban.

—Aqui tiene señorita.. — La mesera le sirvió la pequeña tasita, Lucy observó su contenido color verde claro.

—Gracias...— Lucy lo bebió, aquel sabor amargo era opacado por la dulce miel de su interior, pero algo no andaba bien, —Yo...—

Aquella taza entre sus manos cayó pecipitosamente en el suelo, Lucy subió sus manos a la altura de su cuello, su respiración se volvía cada vez mas herrada.

La mesera pegó un pequeño grito, —Señorita... ¡señorita!—

Lucy cayó lentamente al suelo, su mirada distinguió el rostro de aquella mujer que le sirvió esa tarde, el rostro del controlador que llegaba corriendo al escuchar los gritos de la mujer, y el rostro del hombre maduro que fumaba la pipa—

La pipa y el humo...

El humo denso y pesado...

El humo que bailaba divertido al verla en agonía...

El humo asechando entre los espectadores, aplaudiendo, pues la función estaba a punto de comenzar.

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—Lucy...—

Aquella voz distorsionada y vaga la llamaba.

—¿Lucy?—

Los roces fríos de unos finos dedos paseaban por la piel de su rostro.

—¡LUCY!—

Y aquel grito la obligó a levantarse de su letargo.

—Qui-quien es...— Lucy estaba completamente aterrada, —Quien anda allí— se enfrentó a sus fantasmas con mas coraje.

—Lucy... ¿no me recuerdas?—

Sus ojos miraron con miedo aquella ultima imagen que su conciente captó.

Humo...

Humo danzaba lento suave, con gracia a su alrededor.

Humo cuerpo la abrazaba, transmitiendole calor.

Humo madre, con un suave beso se despide de su hija.

Humo y viento se abrazan, dejándola sola... sin nada.

—¿Mama?— Los ojos de Lucy se llenaron de lagrimas, se sentia perdida, sofocada, intentaba gritar, respirar con fuerza, pero aquellos intentos por vivir en nada ayudaban en su estado.

—Natsu...— debía tranquilizarse y recordar el lugar donde estaba, —Solo es una pesadilla... no es real, NO ES REAL— intentaba convencerse a si misma.

—Lucy...— Aquella voz nuevamente la atormentaba.

La rubia cayó de rodillas, tomándose la cabeza, temblaba, por mas intentos que hacia para volver mayor eran sus crisis de nervios.

—Lucy... ¿A que le temes?—

Nuevamente el espeso humo la perseguía, los fantasmas de su conciencia la asechaban.

—Basta... ¡deténganse!— suplicó desesperada, poniéndose de pie, hechandose a correr.

Humo suave viajaba a toda prisa.

Humo juega haciéndola tropezar.

Humo hombre juega divertido, tomándola entre brazos.

—Lucy…—

Humo hombre la aprieta fuerte, ahogándola, sofocándola.

—Luuucy…—

Lucy intentaba alejarse, se movía fuertemente con la entera intensión de escapar.

Una fuerte carcajada retumbaba en sus oídos, —Sabes, querida, mis labios no se besaran a si mismos... —

—¡Kyaaaaaa!— Lucy gritó con fuerza, aquel pesado humo la envolvía, se la tragaba…

Y sus miedo hacía presa de ella, pero debía recordar… debía volver a ella, volteó con fuerza, cayendo al piso… moviéndose con toda la fuerza que sus piernas le permitían.

Miedo humo la perseguía.

Lucy miraba hacia atrás… mientras intentaba correr con más fuerza.

Humo miedo la estaba por alcanzar.

—Aléjate… ¡ALÉJATE! —

Rogaba y suplicaba, sus lágrimas pesadas pronto cayeron por sus mejillas, se sentía débil, abatida… sus piernas pronto no le respondían.

Humo miedo la alcanzó.

Humo miedo la estaba absorbiendo…

Pronto su alma se obscureció, suspiró aceptando el final…

Su conciencia la había engañado por completo…

Su ser interno la había hecho caer en sus pequeños juegos…

Cansancio... aquellas ganas de seguir adelante se habían desvanecido, ya... ya no quería mas...

Sus miedos la consumían… Encerrándola, volviéndola esclava de la obscuridad, debilitando su espíritu.

Y ese triste estado de confort la había obligado a rendirse, sintió como lentamente su corazón se detenía

—Lucy…— Aquella voz…

Sus parpados pesados intentarios abrirse, pero... ¿Por qué hacerlo? ella ya no quería mas...

—Lucy… por favor…— Esa voz le sonaba familiar... No… no era como la de sus fantasmas.

—Lucy, despierta…—

Sus ojos obedecieron, aquel obscuro lugar pronto se llenó de luz, los fantasmas que la consumían se desvanecieron, liberándola de su prisión.

—Qui-quien me habla…— Su garganta aún estaba seca, intentaba avanzar… volver…

Pronto unos gritos de júbilo retumbaron en sus oídos, haciéndola despertar.

—Donde estoy…— Su mirada por fin logró enfocar a los presentes, Mirajane sonreía, junto a ella se encontraba Wendy, Natsu y Happy. Al fondo se encontraba Kana y los demás miembros del gremio brindando.

—Pe-pero que hago aquí…— Lucy plantó la mirada en Natsu.

—Creo que el indicado para decírtelo soy yo…— Makarov se pronunció, pronto todos guardaron silencio.


Flash Back

Mirajane, Lisanna y Elfman corrían desesperados al andén donde solo hace unas horas había partido Natsu, Happy y Lucy.

¿Dónde están? — Lissana miraba por doquier buscándolos.

Allí…— Mirajane corrió hacia el tumulto de gente, el tren tuvo que volver ya que el paso fue cortado por la tormenta.

Cuando llegaron, encontraron a Natsu recuperado de su mareo, quien reclamaba a un par de médicos quienes se encontraban revisando el estado de Lucy.

Natsu y Happy solo querían llevársela de vuelta al gremio.

Cómo se encuentra…— La pregunta salió suave de los labios de Lissana.

El médico negó, —Sufrió una reacción comatosa producto de una fuerte alergia a las malvas de Isvan…— El médico guardó su estetoscopio, —Si no despierta esta noche…—

Nosotros nos encargaremos de la señorita…— Mirajane no lo dejó continuar.

Ella estará bien…— Natsu agregó, la firmeza en su voz era muy notoria.

Fin flash back


Lucy aún se sentía débil, sus párpados aún se encontraban pesados.

—Pero ¿En donde estamos?Su corazón aún dolía... ella no, no estaba lista.

Quizá un pedacito de la obscuridad de aquel lugar aún seguía en su alma

—Suponíamos que te sentirías mejor en tu casa…

—¿Queee?Lucy tragó pesado, To-todo el gremo e-está…

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Hola a todos…

Woooo… que nervios… este es mi primer fic Fairy Tail, espero sea de su agrado.

Comentarios, sugerencias, peticiones… un review por favor.