Hola este es mi primer fanfic, los personajes de Kung fu Panda no me pertecen, esperó que les guste. Dejen sus comentarios que son bien recibidas.

Editado: Hola de nuevo. Después de cuatro años actualizó, mejoró, los capítulos de este fic. Esto lo decidí por qué veo que todavía tiene muchas visitas, y no considere que fuera justo el que leyeran un fic con capítulos escritos así. No me mal entiendan, amo este fic, pero hay que reconocer que tiene sus fallas. Perdónenme era joven e inexperimentada XD. Volviendo a lo del fic, va haber cosas que agregue por lo que los capítulos van a incrementar o serán extras. Eso lo sabrán en la barra, no sé cómo se llame, en la que están todos los capítulos disponibles. Y a los antiguos ynuevos lectores, yo les recomiendo que sólo lean este capi, a menos de que quieran spoiler XD, porqué como ya mencioné va haber cosas que voy a agregar o modificar, poquito casi nada no se preocupen... Vaya, me alargue demasiado.

Muchas gracias por seguirlo, y a los nuevos lectores espero les gusté. Disfrútenlo. Ya saben comenten.


Capítulo 1.

Pelea por comida.

El ocaso iluminaba los territorios del Valle de la Paz, anunciando la llegada de la noche y la de los héroes de la Ciudad de Gongmen, exceptuando al Guerrero Dragón; quien se adelantó para arreglar los asuntos que dejó pendientes antes de partir a dicha ciudad.

—¡Vaya! Ya hemos llegado... Sólo falta subir todo esto. —dijo Mono señalando las escaleras.

—Descansen un momento en lo que... —Shifu volteó a ver algo.

—¡Chicos! —se escuchó el grito de Po a lo lejos mientras corría con poca velocidad.

—Sigan, ya llegó. —repitió y comenzó a subir las escaleras apoyándose en su bastón.

—Gracias por esperarme, chicos. —jaló aire. —Me muero de hambre, ¿Qué hay de comer, Shifu?

—Estoy de cuerdo contigo, Po. Tiene días que nos comemos ni solo bocado. —siguió Mantis, quien se encontraba en el sombrero de Grulla.

—Yo sólo quiero una de mis galletas con una buena taza de té. —constestó Mono.

—Lamento mucho el arruinar esos planes. Pero desgraciadamente tienen que entrenar. Dirijámonos al Salón de Entrenamiento. —agregó el maestro del Palacio de Jade.

—¡¿Qué?! —exclamaron todos, con excepción de Tigresa.

—Sí, van a trabajar en parejas, las cuales son: Tigresa y Po, formarán el primer equipo; Mono, Víbora el segundo; Grulla y Mantis el tercero. —dijo Shifu.

—Pero no hemos comido en días —se quejó Po

—Estoy al tanto de ello, panda. Todavía no he dicho todo. Los que ganen comerán todo lo que quieran de la cocina, y los que no tendrán que aguantar otro día sin bocado. Y saben que un verdadero maestro resiste días sin comer y sin una sola gota de agua, mientras cumpla con su deber. ¿Entendido? –dijo el maestro Shifu. —O acaso, ¿quieren qué yo entré en este entrenamiento?

—No, Shifu. Así está bien... Vamos rápido, para comer pronto. –exclamó Po animando a sus amigos.

Ya estando en el salón de entrenamiento. Listos para ganar la cena.

—Recuerden que aquí lo importante no es trabajar individualmente, es hacerlo en equipo para lograr su objetivo. –dijo el maestro Shifu - Po, Tigresa son los primeros, sus contrincantes serán Mono y Víbora. Comiencen – dijo mientras tronaba los dedos.

Al hacer esto, el combate había dado inicio. Primero Víbora se enrrolló en la mano de Po, haciendo que se golpeara el mismo; Mono trató de atacar a Tigresa, aunque no lo logró, Tigresa lo sujetó de la cola, lo lanzó al aire y lo pateó, haciendo que se estrellara con la tortuga de jade. Víbora se distrajo al ver esto, Po la agarró de la cabeza haciendo un nudo con su cuerpo, dejándola tirada en el suelo. A pesar de esto los dos lograron ponerse de pie. Po al ver esto dijo:

—¡Tigresa, ataque combinado!

Ella saltó hacia donde se encontraba Po, lo sujetó de la mano, le dio una vuelta y lo soltó, al hacer esto Po cayó encima de los dos.

—No puedo respirar —dijo Mono tratando de salir.

—Po, suficiente. Ponte de pie. —exclamó Shifu.

El panda se levantó enseguida.

—Po, Tigresa, bien hecho. Eso es trabajo en equipo. Aunque, Po, debes moverte más rápido, si hubiese sido un combate real estarías muerto. Tigresa, muy bien. —dijo Shifu —Grulla Mantis, son los siguientes contrincantes de Po y Tigresa. ¡Ahora! —volvió a decir Shifu.

Esta vez el ataque fue mucho mas rápido, Po y Tigresa hicieron la misma táctica, así logrando vencer a Grulla y Mantis, aunque esta vez Po no cayó encima de los dos.

—Bien alumnos, los que van a comer hoy son: el Guerrero Dragón y Tigresa. —felicitó Sihfu. —Pueden ir a la cocina.

—¡Si! ¿Quién ganó? Po lo hizo… —presumió Po.

—Panda, la humildad es la verdadera marca de un héroe, no las victorias, ni las estatuas en tu honor. ¿Entendido? —preguntó Shifu.

—Sí, Shifu. ¿Ya puedo ir a la cocina? —respondió Po ansioso.

—Sí, panda, ya pueden retirarse. —Shifu estiró su mano señalando la puerta.

—¡Genial! Vamos, Tigresa. —dijo el panda.

Estaban caminando dirigiéndose a la cocina, todo estaba en silencio, Tigresa había retomado su actitud fría y distante. A Po le pareció extraño ese cambio tan repentino en su amiga. Para acabar con ese silencio el panda decidió hablar:

—Primero comeré unos fideos, después fideos en salsa agridulce, sopa gondom con helado y por último las galletas de Mono; pero no le digas a Mono. —rió un poco.

—Espero que tengas otro plan —-agregó la maestra, mientras abría la puerta de la cocina.

—¿Por qué dice eso?... ¡No! –gritó Po al ver que la cocina estaba vacía. —No puede ser. Con razón Shifu dijo que podíamos comer todo lo que había en la cocina… ¡Por que no hay nada! … ¿Lo es?... ¡Sí, lo es! Comida. —exclamó emocionado cuando notó la presencia de un dumpling. —Genial, ven acá. —dijo Po mientras dirigía el dumpling a su boca, pero vio a Tigresa, se detuvo y volvió a ver esa pequeña bola de masa. —Ten, lo mereces más que yo. —dijo estirando la mano para dárselo a la maestra.

—No gracias, Po, es tuyo. —dijo Tigresa.

Continuará…


Gracias por leer, comenten. Nos leemos luego n.n