Neblina

La neblina se extendía cada vez más y dificultaba la visión de la alta montaña que se erigía en la parte final de la Aldea Oculta entre las Hojas. Los orgullosos rostros de los 5 Hokages apenas se podían ver, sin embargo ésta no evitaba que se escuchara una conversación en la sala del actual Hokage.

-Por favor Lady Tsunade, yo también soy un Jounin y ni siquiera he intentado postular a los cazadores ANBU, como lo va a poner a él de líder, ¿si tan sólo lleva 3 días como un Jounin?

-Cálmate, Iruka. Sé que aún es muy joven, pero ha demostrado ser mucho más fuerte que como eras tú a su edad, y además él tiene méritos, sabes que asesinó al traidor de Sao, y sólo cuando era aún un Chunin.

-Pero él es tan sólo…

-Ya no es un niño Iruka. Ya han pasado los tiempos en que lo perseguías cuando hacía una de sus travesuras. Además, él es el portador del Zorro de las Nueve Colas… ¿no es así?

-Pero poner a Naruto al cuidado de la aldea…

-Como te dije Iruka, él ya no es un niño, y ha pasado por incluso más cosas que las que pasaría un Jounin de la edad de Kakashi.

-Por favor, no mencione a Kakashi.

Lady-Hokage abrió los ojos y miró a Iruka directamente a los ojos.

-Kakashi fue un gran ninja, y ahora es considerado un Sannin. No veo por que no tuviera que hablar de él.

-Usted no entiende, Lady-Hokage, Kakashi era uno de mis mejores amigos, y yo no pude estar a su lado cuando él murió.

-Sin embargo, su legado ha quedado en Naruto.

-Era eso lo que más lo caracterizaba. Naruto lo debe llevar con orgullo. Después de todo, él fue su maestro.

-Espero que te quede claro Iruka, que yo creo que Naruto es muy capaz para el puesto que le estoy dando en la aldea. Deberías confiar más en él.

Iruka se paró de la silla y enrumbó hacia la ventana.

-¿Dónde está él, ahora?

-Me dijo que iría al bosque un momento, creo que se fue con Hinata Hyugga.

-Aún recuerdo cuando ambos estaban en la academia. Ella estaba a todas luces perdidamente enamorada de Naruto, aunque él nunca se dio cuenta hasta ahora. Pero me da gusto verlo tan feliz como aquel día en que le di mi protector. Estaba tan emocionado…

-Aunque ya es casi un hombre… sigue con sus mismas costumbres.

-Sí, aún le gusta mucho ir al Ichiraku Ramen, sin embargo está mucho más feliz cuando va acompañado.

-He pasado varias veces por ahí, nunca se le ve sin Hinata-chan.

-Por cierto, que sabe del otro miembro de su equipo… Sakura Haruno.

-Se supone que regresaría esta semana. Ya ha pasado fuera casi seis meses. A Naruto le gustará verla otra vez.

-Creo que me ha quedado claro, Lady-Hokage. Usted tenía razón, debo confiar más en Naruto, pues él es como si fuera mi hijo.

Lady-Hokage asintió con la cabeza y le sonrió. Iruka se despidió con la mano y salió de la habitación. Luego se sentó en su escritorio y siguió trabajando.

La neblina se hacía densa en la entrada. Los guardias estaban alertas y constantes por si ocurriera algo. Una sombra apareció en el camino, vistiendo un traje largo con nubes rojas bañado en sangre. Los guardias se aprestaron con las armas a punto, pero entonces sintieron cada uno un sueño terrible, y no pudieron resistir el llamado de sus cuerpos, quedándose dormidos en poco tiempo. La figura prestó poca atención a los guardias y siguió caminando envuelta en un halo de soledad y poder.

Cerca de ahí había dos personas enmascaradas, una de ellas vestida de naranja y negro, y la otra, una chica, vestía una especie de uniforme de batalla

Negro. La figura de naranja estaba apoyada contra un árbol mientras observaba como la otra tenía un globo en la mano, que se le rompía a cada rato. Mientras él observaba, la figura de negro cayó de rodillas debido al cansancio que se debía a la poderosa técnica del Rasengan (Bola Espiral).

Cuando ella cayó de rodillas, él se levantó perezosamente y fue hacia la chica.

-Deberías tener un poco más de concentración, Hinata-chan. Dentro del globo debería estar así. Le mostró la mano donde un poderoso chakra azul se espiralaba como un pequeño tifón.

Ella le miró, e intentó pararse, pero estaba demasiado cansada. Él, se quitó la máscara revelando a un joven de 17 años con el pelo rubio enmarañado y los ojos de un vívido azul, que le sonreía. En un acto de caballerosidad él la cargó con los dos brazos.

-Deberíamos volver a la aldea.-Ella sonrió y se acurrucó más en el pecho del joven.

Él comenzó a saltar de rama en rama de los gigantescos árboles del bosque de Konoha, y la neblina empezó a hacerse más densa. Fue entonces que Naruto sintió la poderosa presencia de aquel que fuera su mejor amigo, y su más poderoso rival. Él sabía que Hinata no la podía sentir, pero él sintió escalofríos al sentir tal poder. Paró en una de las ramas, y Hinata se mostró sorprendida.

-¿Qué pasa, Naruto-kun?

-Hinata-respondió- Quiero que vayas a Konoha y le avises a Lady-Hokage, de que Sasuke Uchiha ha vuelto a la aldea.

-¿Sasuke Uchiha? No es…

-Sí, es él. Hinata por favor debes salir de aquí lo más pronto posible.

Ella se bajó de sus brazos, y él, sorpresivamente la tomó del brazo, la acercó a su rostro y la besó en los labios. Ella no lo rechazó y puso los brazos alrededor de su cuello, mientras disfrutaban de la dulce sensación del cálido beso. Él se separó, le tomó las manos, y le dijo:

-Hinata, es muy posible… que no salga vivo de esto.

Ella sintió un profundo terror y lo abrazó, y aunque quería decirle que no fuera, y que huyera con ella, sabía que Naruto nunca viviría tranquilo si es que no consumaba la rivalidad que tenía con el último descendiente de los Uchiha.

-Esto es para que sepas lo que siento por ti. Ahora ve Hinata… y no me esperes.

Entonces ella se separó, y se sacó del cuello un guardapelo, y se lo entregó a Naruto en la mano. Sin decir nada más, se alejó. Naruto observo donde desaparecía la figura de Hinata y luego enrumbó en sentido contrario.

Reproducir: Sasuke´s Theme

Mientras la sombra se hacía mas oscura entre la neblina, el paso lento era cada vez más audible con la respiración acompasada y fría.

-Sabía que regresarías.-dijo una voz en medio de la niebla.

-Esa voz…, por qué no la recuerdo….

-¿Qué vienes a hacer aquí, Sasuke?

-¿Quién eres tú?

-Sabes quién soy…

-No no lo sé… ¿por qué habría de conocer a un insignificante ninja?

-No soy el insignificante ninja que crees. Soy un Jounin y el líder de los Cazadores ANBU, soy Naruto Uzumaki.

-Naruto…

Reproducir: Sadness and Sorrow

Naruto bajó del árbol, y se encararon mutuamente. Ambos recordaron la promesa, y se vieron con muchos cambios. Ambos mayores, con el pelo más largo, y Sasuke con una gran cicatriz en el ojo izquierdo, así como la tenía Naruto en el derecho. Sin embargo, Naruto lentamente abrió su ojo derecho, revelando el Sharingan que alguna vez perteneció a Kakashi. Sasuke no se mostró sorprendido, o al menos lo ocultaba.

El viento corrió a través de los dos amigos, que se miraban fijamente, sin estar seguro ninguno de dar el primer paso, que terminaría con la muerte de ambos, o con un abrazo de verdadera amistad.

Dejen rewies, y que opinan de esta historia.

Nos vemos-dattebayo!

Lord Karyatoz