LOS PERSONAJES PERTENECEN A STEPHENIE MEYER, LA HISTORIA ES COMPLETAMENTE MÍA
Prólogo
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Entré por la puerta principal sintiendo la paz que me producía estar nuevamente en casa, aunque esta no era la casa que yo recordaba. Se parecía en nada al lugar en donde viví por más de dieciséis años, pero esto no lo hace menos especial. Allí estaban todas las personas que me hacían sentir protegida y amada, es más de lo que puedo pedir.
Por primera vez en meses me sentí aliviada, me sentí bien, como si finalmente estuviera en el lugar adecuado.
Deambulé por el largo pasillo hasta la habitación azul completamente iluminada por los rayos del sol. Mis ojos recorrieron cada centímetro del lugar, familiarizándome con la habitación. Caminé con paso lento hacia la cama blanca y me recosté cerrando los ojos por un momento, imaginando que los últimos meses de mi vida jamás sucedieron, que de un momento a otro despertaría en Forks dándome cuenta de que esto no fue más que una horrible pesadilla. Pero finalmente los abrí a la realidad, no podía seguir fingiendo que nada sucedió.
Vivir una mentira no cambiará mi presente, pero me alejará del futuro.
Si algo aprendí en el último año es que la vida puede cambiar en cualquier momento, un segundo estamos aquí y al siguiente ya no. Nada es fácil y con frecuencia tendremos que enfrentar obstáculos para salir adelante, pero también sé que vale la pena hacerlo, luchar por lo que quieres y vivir cada segundo disfrutando lo que tienes y de quienes te rodean.
No hay mejor manera de vivir que esa.
Como mi abuela continuamente decía, las cosas suceden por una razón y que sin importar que tan malo parezca el destino tiene siempre algo bueno reservado para nosotros. Eso es algo que me gustaba pensar, quería creer que todo lo que nos sucedió fue por algún motivo y que pronto tendremos la recompensa que merecemos.
¡Hola! He vuelto para corregir algunos errores, no pienso cambiar la trama sino algunos detalles y esas cosas... gracias por todo y hasta pronto.