"VOLVER A VIVIR"

CAP I

Perdida en sus pensamientos estaba ella, sentada en el jardín mirando con nostalgia las rosas que llevan su nombre, es mayo y en el interior de la mansión Andrey se prepara todo para la fiesta de esa noche, hoy cumple 18 años y se ha convertido en una mujer hermosa y elegante, querida por la sociedad de Chicago que no pudo resistir caer rendida ante su sencillez, espontaneidad y la dulzura que emanaba de ella.

Aún se le hacía "raro" estar viviendo nuevamente con ellos, la Tía Abuela había sido la responsable de su regreso, la enfermedad que mellaba su salud de a pocos fue la causa de su regreso, la matriarca de su familia tenía problemas cardíacos; después de que Alberth rompiera el compromiso entre ella y Neal, los problemas no se habían hecho esperar, la reacción de los Leegan ante la afrenta sufrida por el escándalo que eso trajo fue peor de lo que había podido imaginar, aún la misma Elroy Andrey fue presa de los ataques de su sobrina y sus hijos, ya que ella al enterarse por su querido William todo lo que Candy hizo por él, no pudo menos que reconocer el gran corazón que ella tenía, así que apoyo la decisión del jefe del clan Andrey; no espero ser injuriada por aquellos a quienes había dado muchas veces preferencia sobre sus nietos como ella llamaba a Anthony, Archi y Stear, y aunque se había preparado para los comentarios que circularían en la alta sociedad de Chicago, no pudo resistir que miembros de su propia familia los atacaran insultando el ilustre nombre del clan.

Aunque en un principio todavía se resistía a Candy, al ver como la atendía con verdadero cariño y preocupación, dejando su carrera para dedicarse a cuidarla personalmente durante el tiempo que se debatía entre la vida y la muerte, dejó salir todo el cariño que tenía guardado muy dentro por esa pequeña que aprendió a querer poco a poco cuando vivían en Lakewood, las circunstancias y la repentina muerte de Anthony hicieron que encerrara esos sentimientos, pero ahora un verdadero cariño y una unión especial se había formado entre ellas; al pasar tanto tiempo cuidando de ella, sin darse cuenta empezó a refinar todos su gestos, la Tía Abuela se daba cuenta del cambio que se estaba operando en ella y veía con satisfacción a la mujer hermosa que florecía sin ella darse cuenta, el roce diario con la matriarca y las amigas de esta que venían a saludarla fueron la causa del cambio, claro que Elroy se encargo de darle clases disimuladas.

Candy misma notó un cambio en ella, lo cual parecía ser innato en ella, se desenvolvía con gracia y elegancia, como si siempre lo hubiera hecho; después de la recuperación de la Tía, volvió a trabajar en el hospital Santa Juana, pero de manera altruista, dividía su tiempo entre el hospital y acompañar a su querida tía en las reuniones a las que ella asistía, en las cuales coincidía con Annie y Paty que había regresado de Florida para establecerse con su abuela en la ciudad.

Señorita Candy- escuchó detrás suyo, desviando sus pensamientos.

Dime Dorothy

La Señora Elroy pregunta por usted – la miro sonriendo, al ver que la chiquilla inquieta, se había convertido en toda una dama.

En un momento voy - respondió acercándose al rosal para aspirar el perfume de sus rosas.

Entró a la casa que estaba llena de sirvientes cargados con manteles, jarrones, copas y otras cosas más, terminando de preparar todo para la gran noche, no pudo evitar sonreír al ver a la tía tan feliz dando instrucciones para que todo saliera perfecto.

Tía, Dorothy me dijo que me llamabas - dijo depositado un beso en su mejilla

Si querida - respondió con dulzura – tu vestido acaba de llegar, ve a probártelo, por si hay algún arreglo que hacer, la modista espera en tu habitación.

Está bien Tía, enseguida vuelvo

Nada de eso, es mejor que descances un poco, está noche debes estar radiante - le dijo en tono de reproche – anoche tuviste guardia, así que obedéceme.

Está bien - le dijo un poco divertida ante ese reproche, aún no aceptaba del todo su trabajo y la pasión con que lo hacía.

Las horas pasaron volando, y los primeros invitados empezaban a llegar a al salón que despedía un delicado aroma a rosas, la familia Britter junto con Martha y Paty O' Brian fueron los primeros en llegar, debido a que las jóvenes querían saludar primero a su querida amiga, muy pronto el salón quedó inundado de las familias más prestigiosas de Chicago y por supuesto de miembros del clan Andrey llegados de diferentes ciudades del país así como del extranjero; después de todo el cumpleaños de la heredera del clan no era cualquier cosa, los Leegan se vieron obligados a asistir, ya que su posición delante de toda la familia pendía de un hilo debido a su anterior proceder.

Los más jóvenes no tardaron en congeniar con sus primos, y eran un grupo bastante unido, muchos de ellos llegaron por la guerra en Europa, pero hasta sólo pocos meses antes habían tenido contacto con Archie y Candy, debido a que estaban establecidos fuera de Chicago terminando sus estudios.

Cuando el salón estuvo repleto, Elroy Andrey acompañada de Archibald pedía la atención de los ahí reunidos, para presentar a la heredera

Es para mi un placer - empezó a decir con visible emoción en la voz – recibirlos en mi casa en esta magna ocasión, en la que celebramos el cumpleaños de mi querida nieta.

Los aplausos se dejaron escuchar en el salón, interrumpiendo sus palabras.

Señoras , Señores y miembros del Clan, con ustedes, Sir William Alberth Andrey y Candice White Andrey – terminó sus palabras dirigiendo su mirada a lo alto de las escaleras por donde descendían sus sobrinos.

Las exclamaciones y aplausos no se dejaron esperar llenando toda la casa, Candy se sentía nerviosa y un ligero rubor cubrió su rostro dándole a su rostro una belleza casi angelical, estaba radiante enfundada en un vestido verde con un discreto escote y que caía graciosamente alrededor suyo, su cabello iba recogido en un moño con unos rizos colgando, una delicada tiara de diamantes, una cadena y un par de aretes en forma de rosa completaban su atuendo, a cada paso que daba destilaba sensualidad, todos los ojos estaban puestos en ella, al llegar al final de la escalera, Archie se acercó colocando alrededor de ella una banda tejida con los colores del clan al mismo tiempo la Tía abuela lo sujetaba con el broche distintivo de la familia; los aplausos se incrementaban al tiempo que una melodía escocesa inundaba el salón, era el saludo de los miembros del clan que ataviados con sus Kilts daban su saludo a la homenajeada.

Eliza y su madre no podían más con la envidia y la cólera que tenían en ese momento, no podían soportar la deferencia con que era tratada la "hospiciana", como seguían llamándola, así que el señor Leegan al ver los rostros transfigurados de su esposa e hija las sacó discretamente del salón para evitar cualquier incidente que pudiera perjudicarlos, en cuanto a Neal, se había quedado petrificado en su sitio admirando a la mujer que aún amaba y que jamás había podido alcanzar; pero hacía un tiempo un cambio se había operado en él, en su afán de lograr que Candy le correspondiera se alejo poco a poco de la influencia de su madre y su hermana, lo cual lo llevo a empezar a madurar, se dio cuenta de lo mimado y corrompido que estaba y al ver a sus primos llegados de Francia, Escocia, Italia e Inglaterra escapando de la guerra que estaban forjando un futuro para ellos mismos, se sintió poca cosa y decidió estudiar leyes siguiendo los pasos de Archie que estaba a punto de graduarse con honores en la universidad, así que hacía mucho que no pensaba igual que ellas, pero aún no podía acercarse a ella a pedirle perdón, el temor a un nuevo rechazo era lo que lo detenía; y ahora estaba ella más hermosa que nunca deslumbrándolo con su presencia, unas palabras lo sacaron de su ensoñación.

Gracias a todos por estar presentes en esta ocasión tan importante para mi familia, hoy cumple 18 años la joya de la familia Andrey, una mujer que llegó para llenar nuestras vidas de dicha con su sonrisa y sus inagotables ganas de vivir - Candy escuchaba conmovida las palabras de su querido hermano porque eso era Alberth para ella - sé que seguirá siendo una digna representante del clan como lo ha sido hasta ahora; no puedo estar más orgulloso como jefe de la familia y como hermano de ella de los logros que ha alcanzado en su vida personal y profesional; así que les pido que me acompañen esta noche con un brindis en su honor - tomando la copa que le alcanzaron la levantó y mirando a Candy dijo - querida Candy, brindo por ti y por tu felicidad, Feliz Cumpleaños.

Salud - dijeron todos a una sola voz .

Salud y gracias a todos - fue la respuesta de una conmovida Candy.

Después del brindis de dio inició al baile el cual fue abierto por Candy y Alberth, y Archie acompañado de su prometida Annie, era un típico baile escocés que las dos tuvieron que aprender en la últimas dos semanas, a ellos se les unieron el resto del clan siendo un deleite para los demás invitados que nunca antes lo habían visto.

Gracias Alberth

¿Porque pequeña?- le decía

Por haberme adoptado, y por haberme dado esta familia - estaba conmovida intentando controlar unas pequeñas lágrimas que atentaban con salir.

Vamos Candy, recuerda que eres más bonita cuando ríes – los dos se transportaron a aquella primera vez que se vieron

Jajaja , si es cierto - le dijo haciendo un gracioso y coqueto gesto

No tienes nada que agradecer, al contrario nosotros somos los que estamos agradecidos porque Dios te trajo a nuestras vidas - él también estaba conmovido, porque en verdad era una bendición poder darle todo el amor que no pudo brindar a su hermana Pauna y a su sobrino Anthony, esa pequeña como la llamaba, vino a llenar el vació que ellos dejaron, tuvo que soltarla porque venía el cambió de figura.

Espero que esta vez no me pises – le decía un divertido Archie recordado aquel primer baile - o si no le diré a la tía que te inscriba en clases de baile.

Eres un impertinente - le dijo aparentando enojo - sé bailar muy bien y si me sigues molestado te pisaré de verdad

Jajaja, está bien gatita, no dije nada.

Jajaja, más te vale sino me quejaré con Annie.

Huy, no por favor - dijo con fingido temor a lo que los dos empezaron a reír – feliz cumpleaños Candy - al mismo tiempo le dio un beso en cada mejilla diciendo con un ligero temblor en la voz - uno por Anthony y otro por Stear.

Archie - no pudo evitar dejar rodar un lágrima recordándolos.

Ellos está también aquí, estoy seguro de ello, cierra los ojos y siente su saludo en la melodía y en el aroma de las Dulce Candy – también una lágrima rodó por la mejilla del apuesto joven Cornwell, al recordar cuanto habían soñado juntos en que ella se quedara para siempre, al igual que Candy cerró los ojos y se dejo acariciar por la melodía y el aroma que parecía confirmar lo que le dijo a su prima momentos antes.

La fiesta siguió su curso y al día siguiente se podía ver una fotografía de cuerpo entero de la bella joven Andrey con el vestido lucido la noche anterior en todos los periódicos de Chicago, la noticia también fue publicada en el New York Times:

Bella heredera celebra sus 18 años

La noche de ayer, la cuidad de Chicago se dio cita

en la mansión de la familia Andrey,

para celebrar el cumpleaños de la heredera de la familia más

importante del país, fue una fiesta donde el glamour y.....

No podía dar crédito a lo que veía, siempre se sintió superior a ella y ahora resultaba que no era una simple enfermera sino que era una persona importante y estaba realmente hermosa, sólo pronunció una palabra pero cargada de odio – Candy - si era ella su eterna rival.

En un café situado en una zona exclusiva se encontraba él, haciendo tiempo por no querer llegar a la casa de su prometida, sabía que los reproches no se harían esperar porque no fue el día anterior a verla, pero no podía, sabía que era su cumpleaños y se quedó encerrado en su departamento tocando su armónica y recordando a la dueña de su corazón.

Miraba el periódico para ver lo que la crítica decía sobre la próxima puesta en escena de Otelo, cuando su ojos se quedaron clavados en la fotografía de ella, no lo podía creer nunca se imaginó verla así de hermosa.

Candy - fue apenas un susurro, sintiendo un profundo dolor en su corazón - estás hermosa pecosa – acarició el retrato como si fuera ella misma delante suyo - su voz se quebró al decir - Feliz cumpleaños mi amor.

Salió del lugar rápidamente porque las lágrimas amenazaban con salir al verla tan hermosa y saberla tan lejana, el tiempo no había logrado apagar lo que sentía por ella su amor, su eterno amor, Terruce Grandchester, exitoso actor, laureado y aclamado por todos, pero con una vida vacía por dentro,¿ donde quedó aquel Terry lleno de ganas de vivir enfrentándose a todos y a todo por lo que quería?, ni el mismo lo sabía con certeza, pero ahí estaba viviendo simplemente porque aún respiraba.

Hola a todas las que se tomen un tiempo para leer este fic, es una idea que me venía rondando pero no me animaba, espero sea de su agrado, creo que al igual que muchas me quedé desilusionada con el final de Candy, y bueno me uno a aquellas que intenta darle un final diferente a esta historia que nos cautivo desde la primera vez que la vimos, un abrazo y espero haya sido de su agrado, con cariño Katherim.