Se ha marchado...en verdad se fue

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Una lluvia irrumpió sonoramente sobre nuestra tienda en medio de una descabellada discusión, en los últimos días los sentimientos estaban a flor de piel, estábamos mas tensos de lo normal y no es para menos, en plena batalla y búsqueda de los Horcruxes, la tensión era algo comprensible.

Estaba un poco desanimada, el día anterior había conversado con Ron mientras Harry estaba perdido en sus memorias, le comente que me sentía decepcionada, que esperaba que el Profesor Dumbledore le hubiese dejado alguna pista o algo en lo que aferrarse, pero no... Ninguno sabía en donde buscar. Casi cada noche, me sentaba junto a Harry a barajar algunas posibilidades, sin saber que esta noche seria diferente, que algo más que energía perderíamos en esta tienda.

-Entonces !VETE¡ - rugió Harry - regresa con ellos, pretende que te recuperaste del spattergroit y tu madre podrá alimentarte bien y ...

Los dos hicieron un ademán de sacar sus varitas, pero antes que estas salieran de sus bolsillos, yo ya estaba blandiendo la mía.

- !Protego¡ - dije sin ánimos de seguir con la discusión, mi escudo protector se extendió de mi hacia ron y Harry, separándonos a los tres y haciéndonos retroceder unos pasos por la fuerza del hechizo.

Los chicos se veían como si fuese la primera vez, de hecho sus miradas de odio estaban patentadas y con exclusividad dirigida solo a Draco Malfoy y a el profesor Severus Snape; aunque en algunas ocasiones Ron me las dirigía a mi, pero en estos momentos se las dirigían mutuamente, y yo en medio, ya habíamos pasado por algo así antes, en cuarto año, pero esto es diferente, esto es la guerra, no podemos separarnos ahora, "No podemos disolver la amistad ahora chicos, no me hagan esto" pensé muy dolida por la situación.

- Deja el Horcrux - dijo Harry.

Ron sin delicadeza se quito el relicario de su cuello y lo tiro en una silla, volteo y me miro un tanto suplicante.

- ¿Que vas a hacer? - me preguntó

- ¿A que te refieres? - atine a preguntar, pero ya sabia a que venia eso, me daba a elegir, igual que en cuarto, igual que el día anterior donde me preguntó que con quien prefería estar, ¿Conmigo o con Harry? me había dicho y yo solo pude decirle "Con los dos Ron, los dos son parte de mi" . Cerré mis ojos y esperé lo que ya sabía que escucharía.

- ¿Te quedas o qué? - me disparó sin anestesia, se me quebró el corazón de inmediato, no quería dejar ni a ron ni a Harry, por que me hacen esto chicos ¿porque?

- Yo...- ¿que hago? - bueno...yo - "debes quedarte" me dijo una vocecilla "De que servirá todo lo que has dejado si desertas en momentos de presión" - si...si, me quedo. Ron, dijimos que iríamos con Harry. Dijimos que lo ayudaríamos.

- Lo entiendo - me miró dolido, sin saber que mas dolida me encontraba yo - Lo eliges a él. - pronuncio demasiado despacio para mi gusto. Fue como una daga en mi pecho, claro, la pregunta tenia un doble sentido, con eso, también conteste su pregunta de ayer.

- Ron...no, por favor...- dije apenas, viendo que se volteaba y salía corriendo de la tienda hacia el bosque - regresa, ¡Regresa!

Al intentar seguirlo, me vi obstruida por mi propio hechizo, "como se me ocurre dividirlos a ellos y ponerme a mi en medio" pensé golpeándome internamente por ello. Logré levantar el encantamiento y corrí en busca de ron. Ya afuera de la tienda, la lluvia golpeo furiosamente mi cabeza mientras avanzaba a tropezones por el espeso bosque, lloraba, lloré por todo lo que estaba pasando, por que sus peleas siempre me afectaban mas de la cuenta y terminaba mas mal de lo que ya estaba.

Grité, como nunca lo había hecho, y a cada exhalación sentía que se me desgarraba la garganta. !RON¡ repetía una y otra vez, sin obtener respuesta alguna.

Divise algo rojo y corrí endemoniada hacia ese lugar, los años de aventuras y peligros me aconsejaron no exponerme gratuitamente y me escondí detrás de un gran árbol. Asome mi cabeza y ahí estaba ron con la ropa completamente empapada igual que la mía, solo que su mirada era de odio y la mía de puro dolor. Salí de mi escondite y me enfrente a él, quería avanzar mas pero a dos pasos de donde estaba ron, se hallaba el limite de nuestros hechizos, si salía, jamás podría volver.

- Ron - susurré, él me miró y relajo un poco su ceño - volvamos a la tienda - dije extendiéndole la mano

- ¿Para que? ya no me necesitáis - me miro con odio - se pueden cuidar vosotros mismos, si hasta de mi se han olvidado.

- Ron...no digas eso - volví a derramar lagrimas, que se confundían con la lluvia - Te necesitamos...yo te necesito - le solté bajando la cabeza

- Mientes - me escupió las palabras frunciendo el ceño mas de lo técnicamente posible cuando levante la mirada - Quédate con él, tal vez puedan seguir dando opiniones sin importaros los demás, y algún día podrán casarse...uno nunca sabe

- OH dios Ron - así que eso era, una escena de celos - no digas tonterías, sabes que a Harry le gusta Ginny y a mi... a mi...

- ¿A ti que Hermione? - pronuncio despacio

- Yo...yo...solo soy la amiga de ustedes, la sabelotodo, tediosa, aburrida y poco interesante, Hermione Granger - lo mire a los ojos y le dedique una triste sonrisa.

- Que lastima que pienses eso Hermione, para nosotros, por lo menos para Hari y para mi, eres alguien importante en nuestras vidas, eres nuestro pilar, el cable a tierra, y aunque Harry este enamorado de Ginny, se que siente por ti algo mas que amistad. Y no me digas que es cariño de hermano - me atajo cuando quería replicar - sé que no es eso, porque...

- ¿Porque? - le insistí

- Por que, no seria el primer hombre que conoces que siente algo así por ti...- me respondió furioso

- Ron, vuelve, hablemos...pero vuelve...

- ! No, tu elegiste ya ¡- me gritó - ¡Adiós! - dio dos pasos y se Desapareció dejándome con el grito en medio de la garganta.

Comencé a caminar de regreso al minuto después de que Ron se marchara, la lluvia no cesaba y podía apostar que caía mas fuerte, no paraba de llorar, no entendía que sucedía con esos dos, lo peor es que yo estaba en medio de ellos, y no sabia como solucionar las cosas.

Mi corazón me empezó a doler, comenzó a palpitar con más fuerza de lo normal, mi garganta ardía y raspaba, mis ojos a penas podían divisar por donde transitaba. En unos minutos me encontré de frente con la tienda, sentía frío, me calaba los huesos y mi pelo se pegaba a mi cara dándome una imagen patética, ingrese y con lagrimas aún en los ojos observe que Harry no se había movido ni un centímetro, y ardí, no por fiebre, si no que por furia, como se le ocurría estar ahí, así, impávido y sin hacer mas que mirar perdidamente, mi rabia incremento y no sabia como desquitarla.

- ¡Se ha i-i-ido! - quise que sonará enojada pero no pude, mi voz se quebrajo en mitad de la oración - ¡Se ha Desaparecido!

Y no lo soporte más. Me tire sobre una silla, me recogí todo lo que pude y sozolle, y enmudecí por momentos, grite y me lastime internamente

Sentí unas mantas sobre mi cuerpo y supe que Harry las había traído para mí, en unas de las pocas inspiraciones que daba sentí un peculiar aroma, era el aroma de ron pero algo mas había...algo familiar.

- Mmm...- susurré - Huele a Harry - dije sin darme cuenta de que él me escuchaba.

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Espero que os guste, será de máximo dos o uno más capítulos.

Si os agrado, déjame un Review y seré feliz.

Aniiia.