Hace ya mucho que no sabia de mis amigos del instituto, me había alejado mucho de ellos en los meses atrás. No sabia nada de Mike Newton, uno de mis primeros amigos en Forks, sin embargo me alegraba saber de que ya había desaparecido su inexplicable interés en mi, empezaron a rumorear que yo era una enferma mental, que me habían visto cambiar mucho durante la ausencia de Edward Cullen, bueno Edward se había convertido en parte de mi vida, parte de mi ser, ¿Cómo no desquiciarme cuando no lo tenia conmigo y no podía sentir ni sus besos ni abrazos ni siquiera sus reconfortantes palabras de alivio?

Las cosas no habían cambiado mucho, Edward ahora estaba a mi lado y eso era lo único que por el momento me importaba, Charlie estaba en su habitación soñando con matar a Edward después de haberme dejado, era tan sencillo escuchar sus sueño, casi lo gritaba.

"¿Cómo es posible amar tanto a una pequeña humana?" Sus palabras susurraron por mi oído y su aliento acaricio mis mejillas, su cuerpo me rodeo por unos instantes y me dio un beso en la mejilla.

"¿Cómo puedo no amarte?" sus ojos topacio se iluminaron con mis palabras, era costumbre de que Edward me dijera cosas tan lindas, pero yo había estado un poco desorientada después de su ida a Italia y había estado recuperando un poco la razón mientras estuve internada en la clínica mental.

Lo único que sabia seque no podía dejar de mencionar el nombre de Edward por todas partes, y que por mi bien Charlie dejaba que Edward viniera a visitarme.

"Bella siempre te dije que cuando era humano nunca amé a alguien, y por eso decidí ir a la Guerra., lo que nunca te dije fue de que yo había estado planeando casarme a mi retorno…" No podía comprender sus palabras mi cerebro estaba atrofiado.

"¿Casarte?" Edward casado, woow la mujer que algún día se case con el seria la mas dichosa, yo hasta ahora tenia la suerte de poder haberlo enamorado.

"Si, pero no pude encontrar a la mujer perfecta nunca y luego, después de tantos años me enamore de ti, tu eres la mujer que amo Bella" Tantas veces me lo había dicho y podría escucharlo aun mucho mas sin aburridme de sus palabras, me gustaba sentirme querida, amada por el.

Antes de que yo pudiera siquiera abrir mis labios para pronunciar las palabras que tenia que decir el los cerro con un suave tacto de sus dedos, bajo de la cama y se arrodillo en el suelo, saco una pequeña caja de cristal de su bolsillo, pude ver algo brillante.

"Isabella Swan, se que es muy pronto para poder decirte esto, y que te e lastimado mucho, pero me harías el "hombre" mas feliz si me dijeras que si, ¿Quieres ser mi esposa?"

¿Edward Cullen el "hombre" mas perfecto, el mas tierno me acababa pedir matrimonio? No estoy lo suficientemente prepara mentalmente para esto,

¿Es que acaso esperas matarme de un infarto?

"Edward, eres tan lindo pero el día a sido muy largo con todo eso de las comprad de Alice y bueno todo lo demás y tengo un poco de sueño, mejor hablamos mañana…"

"Bella, esto es muy importante para mi…"

"lo siento, el cerebro de Bella se a desconectado, por favor deje su mensaje a la espera del tono: ZzZzZ."

Bueno pues ahora Charlie tendría algo con que mas soñar, tratar de matar a Edward por querer casarse conmigo.