Los personajes de Gakuen Alice y Sakura Card Captor, pertenecen a Tachibana Higuchi y CLAMP respectivamente.
[Notas] AU/NatsumexMikan/Lemmon
Una vez más
Prólogo.
Como siempre,es una tarde calurosa en Hong Kong y en una de las tantas cafeterías de aquel lugar, un muchacho pelinegro de aproximadamente 22 años se encuentra comiendo un delicioso pastel de chocolate en compañía de una hermosa mujer de cabellos rubios de su misma edad.
—Luna —Llamo el muchacho a su acompañante—. ¿Sabes? Ya tenemos tres años de novios así que… pues yo… quería preguntarte si… —decía, tratando de armarse de valor ya que no estaba seguro de que si aquel era un buen lugar para lo que tenía planeado pedir—. ¿Te gustaría casarte conmigo?
Sus ojos carmín no se despegaron ni un momento de la chica, esperando impaciente por la respuesta, aun cuando sólo habían pasado unos segundos para que ésta hablara.
—Claro que si, Natsume —dijo Luna con una sonrisa dibujada en sus labios, abalanzándose a su novio para abrazarlo—. Nada me haría más feliz.
—Gracias Luna. —Susurró el chico correspondiendo el abrazo al saberse correspondido, para después unir sus labios con su prometida.
. . .
— ¿Y cuándo es la boda? —Preguntó un muchacho de cabello castaño por teléfono, mientras comía en un restaurante de lujo en otra parte de Hong Kong con su novia.
—En tres meses Shaoran —Contesto Natsume emocionado del otro lado de la línea. No pudo aguantar el contarle a su amigo de tal noticia, por tal razón lo primero que hizo al llegar a su casa fue hablar con Shaoran—. Dile a Sakura que también la esperamos, aunque sé que Luna jamás le agrado. ¡Por cierto! También espero que asista tu tío, el profesor Yukihira.
—No te preocupes Natsume, Sakura también está feliz con la noticia —dijo Shaoran viendo a su novia de cabello castaño y ojos verdes, quien no estaba muy contenta con la noticia —. Y en cuanto a mi tío… pues no sabría decirte, hace tiempo que no me comunico con él, desde que regreso a Japón con su familia. Pero Natsume… ¿Qué dice Luna sobre tú situación actual?
—Ella me apoya Shaoran —Contesto aún más feliz—. Dice que ambos saldremos adelante. La amo demasiado Shao. Bueno nos vemos, tengo unos pendientes. Adiós.
—Adiós Nat. Nos vemos y felicidades. —Se despidió el muchacho de ojos color chocolate finalizando la llamada.
— ¿Crees qué sea buena idea Shao? —Pregunto una muchacha castaña un tanto preocupada por la conversación.
—Es decisión de esos dos… —Fue la respuesta del muchacho para después cambiar de tema, teniendo en cuenta que a él tampoco le agradaba la noticia.
. . .
Las cosas seguían su curso en aquel caluroso lugar mientras transcurrían las semanas y los meses; inquietudes atormentaban a cierto chico castaño, quien temeroso aguardaba por la celebración que se llevaría a cabo en tan sólo unas semanas.
Y así, en una oficina de la Corporación Li, Natsume Hyuga un chico que acababa de terminar sus estudios universitarios en Hong Kong, platicaba amenamente con su amigo Shaoran Li, futuro heredero de Corporación Li.
—Entonces. ¿No la has visto? —preguntaba Shaoran al futuro esposo.
—No. Y me preocupa. Mi hermana Aoi dice que tal vez sean los nervios por la boda pero… —Contesto el pelinegro preocupado— La última vez estaba un poco distante.
—Ya veo. —le dijo su amigo, quien desde hace unos días tenía un mal presentimiento, más no quería preocupar a Hyuga.
—Bueno, me tengo que ir, todavía faltan algunos preparativos y con todo esto, dudo que ella quiera atenderlos. Nos vemos. —Comento Natsume mientras partía por la puerta de la oficina de su amigo.
—Nos vemos Nat. —Se despidió el castaño algo pensativo, por las palabras del pelinegro.
Los minutos pasaron, sin embargo Li no se percato de aquello, ya que una pila de documentos por firmar lo distraía, más no lo suficiente para dejar de pensar en el asunto que aquejaba a su mejor amigo. Shaoran pensaba que en vez de estar felices por la próxima unión, era todo lo contrario. ¿Por qué tenía un mal presentimiento? Conocía a Luna, él mismo la presento a Natsume durante sus años de universidad, sin embargo la actitud de la rubia era muy extraña, Sakura ya se lo había comentado meses antes.
Perdido en sus pensamientos, logro salir de ellos gracias al tono de su móvil y tal fue su sorpresa al ver que, quien llamaba era Luna.
— ¿Si?
— ¿Shao? Lo siento, no sé cómo decirlo, además, no se a quien más recurrir, sé que es tarde para esto, pero… no me casare con Natsume —dijo Luna del otro lado de la línea sin permitir que Shaoran hablara—. Por favor, dile a Natsume que lo siento por no tener el valor de decírselo en persona. ¡Lo siento mucho! — Y la llamada se corto.
Shaoran se quedo perplejo, no sabía qué hacer. ¿Cómo que Luna no se casaría con Natsume? ¿Por qué lo dijo a tan poco tiempo para la boda? Esto debería ser una broma. Así que sin pensarlo mucho, Shaoran tomo su abrigo y salió corriendo de su oficina, tratando de localizar a Natsume por su celular, sin embargo este no lo contestaba.
Después de algunos minutos llego al departamento de Luna, pero fue recibido por el encargado, quien le dijo que la chica ya había abandonado el lugar desde el inicio del día, dejando una carta para que fuera entregada a Natsume. Shaoran tomo la carta y salió del lugar, directo a la casa que Natsume compartía con su madre y hermana.
— ¿Qué sucede? —dijo Natsume recibiendo a su amigo castaño.
—Natsume no sé cómo decirlo pero Luna… —contestó su amigo más no tuvo el valor de seguir, así que le entregó el sobre blanco.
Natsume con miedo tomo lo que su amigo le ofrecía, cuando abrió y leyó no sabía si estar triste o enojado. Abrió los ojos sorprendido cuando fue informado por aquel papel que Luna estaría saliendo de Hong Kong esa misma tarde, así que ante la sorpresa de su amigo que no pudo detenerlo, Natsume salió corriendo rumbo al aeropuerto.
Pensaba que tal vez sería un mal entendido, un sueño convirtiéndose en pesadilla, deseaba que al llegar al aeropuerto no encontrar a Luna. Trato de llamarla a su celular pero jamás contesto. «Tal vez se abra descompuesto o apagado» Pensó el azabache con un poco de ilusión, sin embargo, al llegar al aeropuerto, todas sus ilusiones de una familia feliz, se rompieron… al ver a la persona con quien compartía esas ilusiones besándose con un hombre pelirrojo.
Estaba perplejo. « ¡Que estúpido fui!», repetía mentalmente y decidió enfrentarlos pero sintió como alguien lo sostenía firmemente del brazo.
— ¡Natsume, cálmate! —Pidió Shaoran deteniendo a su amigo, pero eso no dejaba de lado que el también tuviera ganas de ir y gritarle a Luna sus verdades.
El pelinegro forcejeo, quería ir y enfrentar a la rubia. ¿Como pudo haberlo traicionado?, si su amor no era tan fuerte, por que dejo que las cosas avanzaran tanto. « ¿Por qué demonios me ilusiono?» se pregunto el pelinegro sin quitar la vista de la feliz pareja, que al parecer se dirigía a tomar su vuelo. Pero lo que más rabia le dio fue ver el vientre abultado de su "prometida", esa fue la gota que derramo el vaso.
Su cuerpo se tenso, dejando el forcejeo con su amigo, al parecer las fuerzas lo habían abandonado, eso fue lo que pensó Li liberándolo, al ver los hombros del chico caer derrotados. Natsume se quedo parado en medio del aeropuerto de Hong Kong, observando como ambos se iban felices, al parecer el vuelo iba a Inglaterra. Shaoran no sabía qué hacer, que decir. «No vale la pena un mujer así» pensó decir el castaño, pero sabía que eso no lo ayudaría.
Después de unos minutos, Natsume se fue del aeropuerto, sin decirle nada a su amigo, quien sólo lo vio partir, respetando la necesidad del pelinegro de querer estar solo.
. . .
Pasaron los días y Natsume no había hablado con nadie a excepción de su familia, nadie supo qué hacer y no se sabía nada de Luna.
—Hola, buenas tardes. ¿Se encuentra Natsume? —dijo Shaoran a la madre del pelinegro, una mujer hermosa, de cabello negro y con unos hermosos ojos rubí, que su amigo y la hermana de esté habían heredado.
—Shaoran. ¡Qué bueno que vienes! Mi Natsy se fue. Dijo que él llamaría cuando estuviera acomodado en Japón, pero hasta ahora no se ha comunicado con nadie —contestó la mujer triste, sorprendiendo al muchacho, quien no comprendía. ¿Cómo se había ido su amigo dejando a su madre y hermana? Y lo peor. ¿Por qué no le dijo nada?
— Yo… —Una ira lo invadió, más se tranquilizo—, está bien, pero cualquier noticia de Natsume, avíseme por favor… —comentó Shaoran derrotado, para después despidiéndose de Kaoru y mientras subía a su coche pensaba que tal vez su amigo se comunicaría con él en unos días y cuando pasara eso ellos hablarían…
Sin embargo con lo que no contaba Shaoran era que pasarían por lo menos tres años para volver a ver a su amigo Natsume.
Continuará.
. . .
[N/A]
¡Hola! ¡Mátenme! Bueno, ya hace tiempo que subí esta historia, sin embargo a pesar de que la amo, se me fue de las manos, así que para terminarla como Dios manda –y estaba planeado–, hare una re-edición, también mejorare algunas cosas, todo para entregarles algo de calidad. Así que estos meses subiré capitulo por capitulo nuevamente, con muchos cambios, por supuesto y si no quieren leerlo nuevamente, pues avisare cuando venga el próximo capítulo.
¡Gracias por leer! ¡Prometo que me apurare!
¡Cuídense!
