Abril

Eran las calidas tardes de verano.

¿Qué es lo que pienso cuando llega Abril, con su calida brisa y su sofocante sol?, Pienso, sin duda alguna, en aquella época en la que mi alma estaba sellada en las islas del destino...

Creo que jamás me di cuenta de que quería ser libre, no había nada más allá de lo que tenía.

Amor, Felicidad, Tranquilidad...

Ahora, que he pasado por tanto, vivido tantas cosas lejos de lo que yo había esperado para mi vida, esas palabras son completamente diferentes.

Tranquilidad, ¿qué tan lejos esta?, tal vez esta más cerca de lo que creo, esta a la vuelta de la esquina, tomada de la mano con la muerte...Pero por alguna extraña razón no quiero morir, aun quiero hacer tantas cosas...

...Riku... ¿Dónde estas?, me pregunto si seguirás persiguiendo una respuesta en la oscuridad, y más aun, ¿de verdad están ahí?, a veces me gustaría ser capaz de seguirte.

Pero no puedo, Riku.

Felicidad, Imagino que puedo llamar felicidad a como estoy ahora, he peleado contra la tristeza y descubierto que no todo es perfecto, que aun falta mucho para que este completo, pero en momentos como este, en que no tengo nada en que pensar más que en Abril, Son en los que soy únicamente yo mismo, no hay maldad en este mundo, menos aun bondad.

Amor...Creo que he amado a alguien, alguna vez...pero es ahora, que estoy tan lejos de el que me doy cuenta de que lo amo.

Riku, Te amo.

Tu lo sabias, ¿verdad?, que nuestros sueños no se cumplirían a menos que buscásemos una forma de hacerlos reales, que no lograríamos nada quedándonos sentados en aquella isla.

Siempre decías lo mismo, "Sora, Hay un mundo halla afuera, lo sé. Quiero encontrar todo lo que no sabemos que existe, nos esta esperando, ¿vendrás conmigo, Sora?"

Tú fuiste el inicio de mis sueños, fuiste lo primero que quise en este mundo, y te sigo deseando, aunque aun eres muy lejano.

Te buscare en lugares que para mi no existen, seguro estas ahí. Cuando te encuentre, te diré la verdad, que no me importa ni la luz ni la oscuridad, y que lo único que realmente se es que te quiero.

Te encontrare seguramente en un mes de Abril, cuando los calidos rayos de sol nos abrasen y el viento acaricie nuestra piel.

Tan solo espérame.