Los personajes de Naruto no me pertenecen si no a Masashi-Sama...
Transtorno de Identidad Disociativo
Prólogo
¿Qué harías si tuvieras varias personalidades?
¿Más específicamente, una totalmente contraría a la tuya?
¿Si tu otra personalidad anda por ahi, con tu cuerpo y tu cara?
¿Qué haces cosas que tú nunca te habías imaginado hacer?
¿Que habla con gente desconocida y se hace amigos, que tú ni siquiera recuerdas?
¿Qué harías si no recordarás nada lo que hace tu otra persalidad?
Y lo peor... ¿Que tu otra personalidad tiene una vida mucho más sociable que la tuya?
¿Qué harías?...
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-Hina a conseguido un nuevo trabajo.
-¿Y de qué es Hinata-Chan?
La muchacha de largo pelo negro azulado se sonrojó furiosamente y se tapó la cara con manos temblorosas. Estaba semi acostada en el sillón de su psicóloga.
-D.. de.. s... stripter..
-Interesante..- Murmura su psicóloga Kurenai al anotar algo en su cuaderno de notas.-¿Y cómo te has dado cuenta de ello Hinata-Chan?
La chica bajó las manos para jugar con sus índices, con los ojos escondidos en su flequillo.
-Me...ha dejad...o una n..nota, con mu... mucho di...nero.
-Ah sido muy considerada..
-No... lo creó.- Le interrumpió Hinata al fin levantando la vista, mostrando unos ojos grandes y grises con tintas lilas. Su mirada apenas se conectó con los ojos rojos de su Psicóloga, con un destello de enojo en ellos, para bajarlos nuevamente.
- Pareciera que sí, ya que ella no se tomaba esas atribuciones.- Contestó tranquila Kurenai.
Hinata por toda respuesta, buscó en su bolso y sacó un papel doblado prolijamente y se lo extendió. La mujer mayor de pelo negro lo tomó sin cambiar su semblante tranquilo.
Lee bien perra! E conseguido un buen laburo. Mas te vale que no la freges!!! Esas miserias que te dan en tu trabajillo de meserita de cuarta no me sirve. Además es más divertido ser striptease, los hombre viéndote con la baba corriendo por su boca... Es lo mejor!! Y la paga es muuuuy buena!!
No toques mi dinero perra!! Eso lo usaré yo!!
Hina.
Kurenai carraspeó y le devolvió la nota a Hinata, mientras ella lo guardaba, habló.
- Definitivamente es un avancé.
Hinata sólo suspiró cansada y decaída. Desde que empezó con la terapia hace ya dos años, esta era la primera vez que su otra personalidad le dejaba señales de lo que había hecho.
De repente todo se volvió negro, como si se hubiera dormido.
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-Hola Hina, que bueno que has podido venir.
-¿Cómo va Doc?- Contestó la misma chica, pero algo había cambiado. Su mirada tímida se cambió a una más brillante y atrevida, una sonrisa altiva se dibujó en los labios. Mientras se cruzaba de piernas y se habría la campera, para sacarsela y quedarse con la ajustada y escotada musculosa negra. Mientras se recogía el pelo, miro a su Psicóloga.- ¿No tiene calor esa frigida?
- Sólo creo que esta cómoda con ello.
- ¡Tenemos un gran cuerpo!- Gritó ofendida, para después bufar molesta.-¡Qué fastidio!
Kurenai sólo escribió un poco más.