CHICO
El prompt es de I-Am-Momo, que me pidió un Trans!lock y yo escribí un Inter!lock (el intercomunicador de la nave no funciona, Momo).
Johnlock. Parent!lock. Inter!lock.
Hamish, demasiado pequeño para sentirse ya defraudado por el mundo, corría por toda la casa con una sábana como capa. Ver superhéroes televisivos era un entretenimiento muy factible, sobre todo cuando sus padres realizaban "experimentos" en su habitación. O eso le decían a él.
Curioso, obvió la norma de: no entres al dormitorio hasta que no salgamos nosotros, y abrió la puerta de golpe. Lo que encontró fue... nuevo.
—¡Hamish! ¿No te he dicho que no entres? ¡Sherlock! ¿No echaste el pestillo? —John tapaba la desnudez de ambos como podía mientras Sherlock se encogía de hombros. Demasiado tarde.
—¿Qué estabais haciendo? —se acercó curioso.
—Nada —dijo John con avidez. —Cosas de mayores, muy aburrido. Ve a jugar, enseguida salimos, cielo.
—Pero...
—John, Hamish quiere saber —intervino Sherlock.
—Es muy pequeño.
—¡No lo soy!
—Sí lo eres, seamos realistas —afirmó el detective— pero no importa, el saber no tiene edad.
Hamish infló el pecho orgulloso. John no. No era un tema que quisiera contar a su hijo en ese preciso momento ni en ningún otro, aunque tuviera derecho y él no se sintiese preparado, nunca. Por eso pensó en delegar en Sherlock. Esa propuesta, por supuesto, no llegó ni a sus labios. Falta de confianza, decía su psicóloga.
—¿Qué quieres saber? —preguntó John en un suspiro. —¿Por qué estamos desnudos?
—No.
—¿Qué es el sexo? —dijo Sherlock. —O hacer el amor... —rodó los ojos ante el codazo de John.
—No.
—¿Entonces qué? —exclamaron a coro.
—¿Por qué papá John no tiene colita? ¿La perdió bajo la cama como los calcetines? Soy bueno encontrando cosas... —sonrió cándido el pequeño.
—¿Perdido? —miró John su entrepierna por encima de la sábana. —No, no, hijo. Esto fue...
John se quedó pensando en una explicación que no traumatizara, según él, a su, de momento, único hijo. Demasiado lento. Su marido intentó solventar la situación, dejando claro a John que no le dejara hacerlo nunca más.
—Una operación —intervino Sherlock. Hace muy tiempo... en un lejano lugar...
—Qué dices, si fue en Londres —le escrutó John sin entender.
Sherlock le miró como si le hubiesen explotado un globo. Se estaba esforzando y quería un refuerzo inmediato, como un beso, un abrazo... situaciones que si le hubieran preguntado hace unos años, habría rehusado de buen grado. Ahora estaba lo que llamaban enamorado.
—¿Tiene historia? ¡Quiero una historia! —saltó Hamish en el sitio de alegría, cortando su pensamiento.
—¡No! ¡No! No voy a contarle a mi hijo que ni siquiera va a primaria cómo me cambié de sexo —espetó John agitando la cabeza de un lado a otro. Hamish, como buen Holmes-Watson, siguió preguntando.
—¿Pero eres chico o chica? Porque eso lo tienen las chicas...
—¡Chico! —exclamaron a la vez, como si ya lo hubieran repetido cientos de veces. Sherlock vio entonces oportuno volver a intervenir.
—John, los niños tienen derecho a saber.
Su mirada y la del pequeño se clavaron en el doctor. Presión, presión, un poquito más y...
—Poneos cómodos. Es una historia adaptada muy larga —inclinó la cabeza por vencido.
—John, podemos pedir pizza y nos la cuentas más tarde —ayudó Sherlock a la ansiedad de su esposo, que se lo agradeció eternamente con una sonrisa, aun sabiendo que el día llegaría.
Hamish olvidó el tema en cuanto vio la pizza entrar por la puerta. Como era de esperar, esa conversación volvería a salir y John, con la compañía de Sherlock, tendría que contarla. Pero no ese día.
—Papá —dijo Hamish acurrucándose entre sus dos padres, refiriéndose a ambos. Ellos le miraron con el amor que le profesaban. —Encontraremos la colita —ni Sherlock ni John pudieron aguantar la risa. Hamish, en cambio, no entendía nada. Cerró los ojos en un bostezo y se quedó dormido.
Una suerte que hubiese heredado la facilidad para dormirse de John.
o.o.o
Nota: John había pasado por una operación que no había pedido. No dejaría que a ningún niño o niña más le pasase lo mismo. John era intersexual.
La historia sigue en el siguiente capítulo...
o.o.o
Si llegaste hasta aquí, gracias por leer.
¡Buen día!
El resto de fics están en ello.