Sentado en una banca en el centro de Konoha se encontraba Asuma Sarutobi, con un cigarrillo a medio fumar en la mano izquierda y la mirada perdida en el infinito. El shinobi más atractivo de toda la aldea, de admirable fuerza, con una personalidad un tanto anigmática que deja el deseo de querer conocer más a fondo de él, con un cuerpo envidiado para hombres y deseado para las mujeres; se hallaba ahí sentado mirando al azul cielo sin más, cuando algo lo interrumpió de su estado de pensamiento profundo, su amada: Kurenai Yuhi, la mujer más bella de la aldea.
—Hola guapo, llevo un rato viéndote aquí sentado—le dijo Kurenai a Asuma posando una mano sobre el hombro del ninja— ¿Por qué tan pensativo?
— ¿Eh?...¿Qué?...Ah, hola hermosa—respondió Asuma al estar, su mente, regresando al mundo real— No es nada, solo…pienso un rato. Todo mundo lo hace una vez al menos.
—Tal vez, pero tú no eres de esos que "sólo piensa", amor— replicó Kurenai.
—Cariño…—dijo Asuma en un tono serio—estoy quebrado, totalmente. El día que te dije que iría unos momentos al bar, me pasé de copas y, gasté lo poco que me quedaba. No ha habido misiones últimamente y no puedo obtener nada de eso, me siento desesperado, cariño.
—Amor, no sé cómo fue que empezó todo esto pero, juntos vamos a salir de esto, eso lo puedes asegurar. No desistas aún. —dijo Kurenai queriendo consolar al pobre hombre.
—Muchas gracias, cielo. Creo que….será mejor si comienzo a buscar algún trabajo, donde pueda usar mis habilidades —dijo Asuma levantándose de la banca y estirando los brazos sobre su cabeza.
—Pues con ese cuerpazo que tienes deberías considerar cobrar por tenerlo un momentito siquiera! Hahaha—exclamó Kurenai dando una nalgada a Asuma que ya se encontraba de pie.
En ese momento, algo en la mente de Asuma hizo "click", dejándolo pensante acerca de esa posibilidad; toda la aldea y él eran conscientes de lo bien ejercitado del cuerpo de Asuma, el sabía muy bien que pocos se resistirían ante una propuesta así, pues a pesar de las típicas ropas oscuras y chaleco verde que debía usar en todo momento, no se podía ocultar sus fuertes brazos, sus bien marcados pectorales, su ancha espalda que descendía hasta una definida y algo estrecha cintura, la cual daba lugar a sus nalgas: firmes, de redondez perfecta y de un estupendo volumen; concluyendo en sus musculosas piernas y pantorrillas.
Después de haber estado un par de horas más con su amada, ya de noche, había acordado reunirse con sus compañeros Kakashi y Guy, con los cuales se reunía cada semana para jugar cartas solo por diversión.
En casa de Asuma, que es donde era turno de hacer la reunión, los tres compañeros pasaron horas jugando y conversando, pláticas iban y venían acerca de cosas que habían hecho, misiones, por mencionar algunos, y, aunque Asuma también daba uno que otro aporte a la conversación, su mente seguía distrayéndolo pensando en lo que Kurenai, quizá bromeando, le había propuesto.
Cuando Asuma volvió en sí, los otros dos ninjas se encontraban conversando de otra cosa.
—Ahhh…mi última vez fue hace meses, en unos de esos burdeles a las afueras de la villa, y créanme cuando les digo que, esas chicas si saben cómo se ordeña una verga—dijo Kakashi de forma nostálgica.
—Yo, por otro lado—comentó Guy—la última vez que me cogí a una fémina fue hace un par de semanas, pero, desafortunadamente nunca he sido tan bueno para elegir acompañante —añadió Guy con lágrimas brotando de sus ojos a montones.
—Somos quienes protegemos la aldea de todo peligro, deberíamos tener dinero y mujeres a nuestra disposición, que nos quiten las ganas cuando lo queramos—dijo Kakashi—excepto por ti Asuma, tú ya tienes a ese monumento Kurenai ehh…seguro sabe cómo satisfacerte ¿verdad?
—Ah, sí…Kurenai, es….muy buena—respondió Asuma a la pregunta que Kakashi le había hecho, de una manera algo distraída.
—¿Qué es lo que te ocurre Asuma? ¿La falta de sexo ya también te afectó? —replicó Kakashi.
Se formó un momento de silencio después de esa pregunta, Asuma clavó la mirada al suelo mientras que Kakashi y Guy veían de reojo a Asuma y se veían entre ellos. Después de unos minutos Asuma levantó la cara, primero volteó a ver a Guy, después a Kakashi y a continuación hizo una pregunta que ninguno de los dos ninjas se esperaban.
— ¿Cuánto estarían dispuesto a pagarme por calmar sus ganas conmigo?
Kakashi y Guy no podían creer lo que habían escuchado de la boca de Asuma. El ninja más macho y ejemplo a seguir de cualquier hombre de la aldea, les estaba ofreciendo ser algo así como una puta que calmaría los deseos de los dos ninjas.
Aún sorprendidos y sin poder articular palabra, los ninjas volteaban a verse atónitos y a Asuma extrañados; cuando de repente Asuma interrumpió:
— ¿Y bien? ¿Cuánto dan?
—A-A-Asuma… ¿estás consiente de lo que nos estás diciendo? —le dijo Kakashi aún sorprendido.
— ¡Sí! Estoy totalmente consciente y estoy hablando muy en serio acerca de todo esto, así que… ¿cuánto ofrecen? —exclamaba Asuma seguro de sí.
—Emm… este…pues, yo…—Kakashi decía sin poder dar una respuesta concreta—no lo sé, mejor tu dinos.
—Sí, d-dinos cuanto quieres—le siguió Guy.
—Mmmmm…—se mantuvo pensante Asuma un momento tratando de decidir el precio por el que se vendería—por ahora sólo quiero 500, por cada uno.
—O-Ok…m-me parece bien—respondió Kakashi
—Sí, sí—siguió Guy
—Uff…muy bien—suspiró fuertemente Asuma, preparándose mentalmente para lo que estaba a punto de hacer.
Después de una rápida pero profunda meditación, Asuma caminó hacia donde estaba Kakashi, y al estar a sólo unos centímetros de él, se agachó y se hincó para quedar justo a la altura del, ahora tímido, miembro de Kakashi. Asuma, después, comenzó a desabrochar el pantalón de Kakashi, haciéndolo un tanto lento pues él también se encontraba nervioso; Asuma, el hombre más hombre de toda Konoha nunca se había visto en la humillante necesidad de hacer lo que estaba a punto de hacer, dar sexo oral al miembro de otro hombre. Una vez abierto el pantalón, Asuma deslizó tanto el pantalón como el bóxer holgado que Kakashi usaba hacia abajo hasta dejar a ambos a la mitad de los muslos, sólo para encontrarse con el miembro de Kakashi.
Al tener justo frente a su rostro el miembro de su colega que, aunque aún se hallaba flácido, se podía ver como comenzaba a dar signos de una erección. Asuma sintió como su boca y garganta comenzaban a secarse por completo en un instante, pero un trato era un trato y, además, en verdad necesitaba dinero, así que ya no podía arrepentirse. Asuma se decidió por fin a tomar el semiflácido miembro, lo apuntó hacia él y, ahí quedó pasmado un momento; su mente daba vueltas como nunca antes en toda su vida, no podía quitar la mirada del miembro que ahora sostenía en su mano derecha y su respiración poco a poco se agitaba…
hasta que por fin, dirigió el miembro a su boca muy lentamente como no queriendo hacer eso, Kakashi no podía quitar la mirada de cada acción que Asuma realizaba, con el corazón a mil por hora y sin siquiera dar un solo parpadeo; Guy se hallaba a un lado mirando todo lo que ocurría, atento a todo y nervioso.
Al estar el miembro a unos centímetros de Asuma, comenzó a abrir su boca, esto puso aún más nerviosos a Kakashi y Guy. Y, cuando Asuma supo que la cabeza del miembro ya se hallaba dentro de su boca, por fin cerró sus labios alrededor de aquél trozo de carne. La reacción de Kakashi fue levantar sus manos y cubrirse los ojos, y Guy inconscientemente prestaba cada vez más atención. Al sentir Asuma que sus labios ya estaban alrededor del miembro, comenzó a hacer un ligero movimiento de vaivén hacia adelante y hacia atrás con la cabeza para empezar a darle placer al miembro. Kakashi, al sentir que Asuma ya había iniciado la acción movió un dedo y asomar su ojo para ver por sí mismo el proceso, al ver a Asuma ahí, hincado, sumiso, mamando su miembro, comenzó poco a poco a descubrirse el rostro totalmente, comenzaba a agradarle lo que Asuma hacía con la boca.
Por un buen rato Asuma había estado trabajando solamente la cabeza del miembro, así que, centímetro a centímetro, comenzó a introducir más del pene en su boca, el cual ya se encontraba totalmente erecto; fue extremadamente difícil para Asuma haber podido llegar hasta la mitad del miembro de Kakashi, pues debía soportar el asco de sentir ese trozo de carne tan dentro de su boca casi rosando con la garganta y ese mínimo sabor a orina que el miembro tenía.
Todo estaba ocurriendo como debía, hasta que Kakashi abrió la boca:
—Ahhhhh…..…Asuma…Oohhh….en toda mi vida ninguna mujer me ha mamado la verga tan rico como tú—dijo Kakashi bastante excitado, interrumpiendo el largo silencio que llevaba reinando en el cuarto.
Asuma sacó el pene de Kakashi de su boca por un momento para responder a lo que había dicho.
—Deja de decir estupideces…no hago esto porque quiera precisamente—le contestó Asuma en un tono algo molesto y avergonzado, con el rostro algo rojo debido al comentario que Kakashi le había hecho.
Después de dejarle eso en claro, Asuma cerró los ojos y volvió a introducir el miembro de Kakashi en su boca, pero esta vez se lo introdujo hasta la base del pene y comenzó a hacer el movimiento de vaivén, desde la base hasta la punta del miembro.
Kakashi sintió como el placer recorría todo su cuerpo, ni él y ni siquiera el mismo Asuma esperaba hacer eso así sin más, tan de repente. Soportando el asco y esas ganas de vomitar que estaba sintiendo desde que inició, Asuma siguió trabajando el pene de Kakashi, aumentando la velocidad poco a poco e incluso succionando un poco el miembro hasta que sin previo aviso, Kakashi se vino dentro de la boca de Asuma. Asuma no quería que eso pasara, por lo que al sentir el extraño sabor y lo viscoso del semen, rápidamente sacó el miembro de su boca para evitar que Kakashi terminara de vaciarse dentro; pero lo que no pudo evitar, fue recibir el resto de la corrida de Kakashi en todo su rostro, otro poco en el pecho y cuello y otro poco más en el cabello.
—Ahh…ahh…ah…Asuma…..ha sido la mejor…corrida que he tenido—exclamó Kakashi más que satisfecho mientras su agitada respiración intentaba controlarse—¡Eres la mejor puta que me la ha mamado! Definitivamente volveré a solicitar tus servicios.
Asuma, que seguía hincado, se levantó y lo primero que hizo fue escupir lo que había quedado en su boca del semen de Kakashi.
—Ya cállate, idiota. ¿Cómo puede salir tanta estupidez de tu boca? Ya hiciste mucho con tratar de ahogarme y bañarme en tu asqueroso semen—reclamó Asuma mientras, con asco, retiraba el semen que llegó a su rostro y limpiándolo en el chaleco verde que aún llevaba puesto—En fin, terminé contigo, hazme el favor de guardara tu "amiguito" y hazte a un lado que debo encargarme del imbécil de tu amigo Guy.
La cosa con Guy comenzó parecido a como fue con Kakashi, aunque Guy no se sentía tan nervioso como lo estaba Kakashi cuando Asuma comenzó a hacerle sexo oral; de hecho, Guy se sentía extraño, pues ya esperaba que Asuma empezara con él lo más pronto posible.
Cuando Asuma empezó a trabajar el miembro de Guy, el disfrute de este fue igual si no es que mayor al que Kakashi demostró; pero Guy era más escandaloso, gemía y se retorcía como si nunca nadie anteriormente le hubiera hecho algo así, a Asuma comenzaba a irritarle el comportamiento de Guy, ya era bastante difícil encontrarse en esa posición por conseguir dinero.
— ¡A-AH-AHH-ASUMA! ¡M-M-M-ME VENGOOOO! —gritó Guy sin previo aviso, tomando por sorpresa a Asuma quien seguía ocupado succionando el miembro del excitado ninja.
Asuma se sacó de la boca el miembro de Guy de inmediato al oír el grito que este dio y quizo moverse rápidamente a un lado, no quería repetir el "incidente" sucedido con Kakashi. Pero justo antes de poder hacerse a un lado, Guy lo sostuvo de la cabeza con las dos manos y puso a Asuma justo frente a su miembro a punto de estallar, Asuma no pudo hacer más que cerrar fuertemente ojos y boca.
— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAGGGHHHH! —Guy dejó salir un fuerte grito con todo el aire que contenía en sus pulmones, a su vez, su miembro se venía a chorros en el rostro de Asuma. Para Asuma le fue mucho más desagradable esta vez, pues la cantidad de semen que Guy expulsaba podía ser demasiada para un hombre normal, le llevó varios minutos descargar toda su excitación en Asuma.
Cuando por fin, Guy se vació, soltó la cabeza de Asuma y se dejó caer sobre el sofá que se encontraba detrás de él dando respiros grandes y largos para reponerse de semejante esfuerzo. Asuma, por otro lado, quedó ahí, hincado, con todo el rostro y cabello cubierto por lo blanco del semen. Asuma retiró el exceso de semen de ojos y boca, cuando finalmente pudo abrir los ojos, dirigió una mirada molesta hacia Guy, que estaba sentado en el sofá verde de Asuma recostado a lo largo del respaldo.
—Asuma…que bocaza que tienes ehh…—le dijo Guy a Asuma con un tono de reconocimiento—Necesitaré de varios días para recuperarme de esto y rellenar mis bolas, Hahahahaha.
—Ha-ha…—Asuma lanzó una risa irónica—Ya estarán satisfechos los dos, supongo.
—Más que satisfechos me atrevo a decir—dijo Kakashi mostrando su gran contento.
—Si necesitamos de tu ayuda de nuevo, mi amigazo, no dudaremos en contactarte—aclaró Guy guardando su miembro de vuelta en su pantalón y preparándose para irse, no sin antes ambos dejaran los 500 en la mesa de centro.
—Volveremos a vernos Asuma. Bye-bye! —Le siguió Kakashi mientras abría la puerta acompañado de Guy.
Al cerrarse la puerta detrás de los dos ninjas, Asuma también se despidió hablando para sí mismo. Se puso de pie de la misma posición en la que permaneció mayor parte de la noche, aún con el rostro y cabello pintados de blanco, y otras más manchas de semen en el resto de la ropa, del uniforme, iba a ser un problema lavar eso. Regresó a ver el reloj que colgaba de la pared, la 1:30 de la madrugada, agitó la cabeza en señal de cansancio pues había estado "trabajando" cerca de 4 horas; pero al ver el dinero en la mesa, parte de él se sentía bien al saber que, para su buena o mala suerte, todo salió bien. Asuma se dirigía a la regadera y durante su camino iba quitándose prenda por prenda, dejándolas caer por donde iba caminando; al llegar a su destino ya se encontraba totalmente desnudo, se introdujo a la regadera y giró las dos perillas, le esperaba una larga y agradable ducha.
