Hola a todos! He regresado y les dejo la primera parte de este fic, perdón por retrasarme pero mis responsabilidades de tía aumentaron al doble y ni modo familia es familia. Dedicado a los pervs de LeviHanji fans de facebook y a la pagina de Hanji Zoe donde suelo dar mucha lata.

Shingeki no kyojin no me pertenece, es propiedad de Hajime Isayama de lo contrario Rivaille y Hanji serian felices por siempre como esposos.

Entre copas y pasiones

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La resaca se hizo presente en la joven que apenas despertaba, su cabeza dolía y daba vueltas. Jamás imagino que bebería tanto en su vida como en la fiesta que se realizo en el cuartel general, por más que intentaba recordar las imágenes de la noche anterior no se presentaban para nada.

Se coloca rápido los lentes y se da cuenta de que no estaba en su habitación, el lugar estaba demasiado limpio y ordenado para que fuera su pieza. Otro detalle llamo su atención: estaba desnuda con múltiples mordidas en sus senos, un ardor en su cuello se hizo presente y un hombre con las mismas condiciones que ella dormía plácidamente en la cama que compartían. Era un chico de cabellos negros, torso marcado y pequeño de estatura, tuvo que taparse la boca para no gritar. Pasó ahí la noche con Rivaille lo que significa una sola cosa, tuvieron sexo.

-Oh no ¿Qué fue lo que hice?-Dijo en un susurro la pobre Zoe mientras analizaba la situación, parecía que el sargento también había bebido ya que de lo contrario la habría despertado.

No pudo evitar verlo así, se veía tan adorable dormido. Su rostro enrojeció y le dio una leve caricia a sus labios, ella se preguntaba si los probo con besos pero nada no podía recordarlo. Tuvo su primera experiencia sexual, su primera vez con él; por ahora solo le quedaba esperar a que el francés despertara de su borrachera y que le explique todo lo que paso.

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Sábado, hora de la mañana...

Hanji Zoe redactaba sus reportes entre pilas de papeles en su oficina, el calor era de muerte y como nadie se atrevía a entrar a su lugar de trabajo decidió quedar en ropa interior para calmar la elevada temperatura. Estaba muy concentrada escribiendo que no escucho la entrada de un intruso a su santuario de conocimientos.

-Oye-Una voz la llamaba, la chica salto exaltada y una pila de hojas le caía encima.

-Maldito enano deja de asustarme de esa forma-Saca su cabeza de su prisión-Es de mala educación entrar sin permiso-

-Toque 3 veces a la puerta y como no contestaste entre-Le responde con su tono amargo de siempre-Irving me mando a decirte de la fiesta que van a hacer en la noche y más vale que llegues o tendré ir por ti a rastras-

-Ya te escuche pequeñín y dile al jefe que no voy a faltar-Entre burlas para su amigo sale de las hojas dándole después un ligero zape en su cabeza-Ahora ya te puedes ir a limpiar ventanas o fregar los pisos-No podía aguantar las risas.

-Loca hay algo que debo decirte antes de salir-Desde el lumbral de la puerta la observa-Te creía plana y el color negro te sienta bien en la piel-Sonríe de forma arrogante y se marcha de la oficina dejando a la científica sin habla.

Había olvidado que estaba semidesnuda y Rivaille la vio de pies a cabeza.

-Además de enano pervertido resulto ser-Dijo con un enorme sonrojo que la hacía parecer granada, bueno tenía que volver al trabajo o nunca terminaría sus informes.

Así pasó su tarde la joven en el departamento de investigaciones y por fin termino sus pendientes. Lo único que le quedaba era arreglarse para ir a esa reunión, fue a darse un baño largo ya que lo merecía. Después se coloco lencería fina, un hermoso vestido largo con estola de espalda descubierta color oscuro que acentuaba perfectamente su cuerpo incluidos sus hermosos senos. Se soltó el cabello dándole un peinado de rizos suaves y se coloco un ligero maquillaje donde el labial rojo destacaba en su rostro, por ultimo unas gafas elegantes no tenían que faltar.

Se veía hermosa, era una chica diferente a la de todos los días pero por favor una mujer quiere verse bonita y Hanji no era la excepción a la regla. Estaba dispuesta salir hasta que tocan a su puerta, abre y sonríe con dulzura.

-Buenas noches señorita Hanji-Saluda un chico sumamente impresionado por la belleza que sus ojos veían.

-Hola Armin que sorpresa verte aquí-El chico se veía muy elegante con ese traje negro de etiqueta, lo hacía ver muy guapo.

-Yo sol..o .ria-Hablaba muy nervioso y al mismo tiempo se sonrojaba-Quería saber si podía acompañarla a la fiesta de la milicia-Suelta rápidamente cerrando los ojos con mucha fuerza.

Ese gesto pareció ser lo más dulce del mundo, le toma las manos al joven Arlelt.

-Me encantaría ir contigo, Armin-Sonríe-Vamos de una vez antes de que el jefe se enoje por llegar tarde-Rápidamente salieron a su destino.

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La fiesta era sofisticada y con alegría en su ambiente, todo el mundo vestía con sus mejores ropas de gala. La legión del reconocimiento, tropas estacionarias y la policía militar se encontraban conviviendo entre sí como si las rivalidades no existieran, era digno para ser plasmado en un grabado.

La Zoe y el chico novato llegaron al salón del castillo Utgard, no obstante había un hombre que miraba atentamente a la pareja con infinito desprecio.

-Hay mama! ¿Con que esa es Hanji?-Exclama Auruo babeando por ella-Debo admitir que vestida así se ve muy apetitosa para una noche de pasión-De forma morbosa ronronea y por ello se lleva un golpe en la nariz cortesía del sargento.

-Cállate-Dijo furioso. Dejo a su pobre subordinado mal herido al cuidado de Petra y fue a dirigirse a la cuatro ojos.

Una voz en su interior lo llamaba celoso, ¿Celoso de quien? ¿De Zoe? Era una completa estupidez, jamás sentiría esas boberías aunque admitía que la mujer se veía radiante y bella pero al estar tomada del brazo de Armin le hacía hervir la sangre.

-Hola pequeñín!-Saluda agitando sus manos la francesa como era su costumbre.

-Buenas noches Hanji, Arlelt-Cortésmente responde haciendo una reverencia tragándose el enojo.

-Buenas noches, señor-Armin le regresa el saludo un tanto temeroso, la mirada del sargento eran como 1000 puñales para él y eso no lo soportaba.

-Loca podemos hablar, a solas-Recalca mirando al rubio nervioso, el chico se retira con un "disculpen" para ir con Eren y Mikasa.

-Oye no debiste ser grosero con el pobre, si pude notar que lo mirabas muy feo-Le regaña estando los dos alejados de todos, específicamente en un jardín de flores.

-No sé de qué demonios me estás hablando-Niega la acusación-Solo dije que tenía que hablar contigo y no quiero metiches al rededor-De nuevo su voz interna apareció y lo llamaba mentiroso, eran celos.

-Bien ya estoy aquí, dime qué quieres-Se acomoda las gafas.

-Pensándolo mejor te lo digo después, ya que nos están esperando dentro-Toma la delicada mano de Hanji y caminan. Esa acción tenía un leve tinte de romanticismo, mas por el hecho de estar bajo la luz de la luna; a la castaña le encanto eso.

-En marcha, bajito-Responde con timidez.

-No no y no-El sargento acorrala a su compañera en un enorme árbol-No quiero que me llames enano, ni pequeño, ni bajito. Soy Rivaille y quiero que lo repitas, anda dilo-Como respuesta el de cabellos oscuros obtuvo un zape por parte de ella.

-Eres un estúpido y por lo tanto un pervertido-Empuja su cuerpo alejándolo lejos-Aun no se me olvida que me viste semi desnuda-Enrojeció furiosa.

-Yo no tengo la culpa que te pongas a trabajar muy ligera de ropas-Hace pausa-Nadie te manda a estarte exhibiendo como si te estuvieras ofreciendo-Ese comentario hizo molestar a Hanji.

-¿Me estás diciendo cualquiera?-Aprieta sus puños muy enojada.

-No como crees-Suelta con sarcasmo.

-Eres el menos indicado para decirme ese tipo de cosas-El enojo se refleja en esos hermosos ojos cafés-Todo el mundo sabe que cuando tienes tiempo libre vas con prostitutas para quitarte lo calenturiento, enano mujeriego-Ese fue un golpe bajo para Rivaille.

-¿Eso es lo que tú crees de mi?-Estampa su frágil cuerpo hacia la dura corteza de árbol aprisionándola por sus muñecas, estaban tan cerca que se sentía emanar el calor de ambos-Ahorita mismo veras lo que este mujeriego es capaz de hacerte-Lame su cuello con deseo.

-Déjame ya...-Suplica la chica al ser presa del soldado. Su piel se erizaba por el contacto de la lengua masculina y el corazón le latía con fuerza.

-No quiero-Sigue con la piel de su pecho, era dulce y con una rica fragancia a menta suave. Comenzaba a volverse loco.

-Por favor déjame ir Levi-De nuevo rogo por su libertad.

Las manos del chico se colaron por debajo del vestido hasta que se encontró con un delicado trozo de encaje, complacido baja su cabeza hasta su objetivo y lame la zona intima por encima de sus bragas.

-Rivaille de.j..jame-Era inútil, entre mas pedía el hacia oídos sordos.

Minutos después sale de sus piernas con una sonrisa victoriosa hasta que descubre el semblante de una llorosa Hanji.

-Cuatro ojos yo..-No pudo terminar la oración por que la científica le propina una bofetada en la mejilla izquierda.

-Eres un estúpido Rivaille!-Grita durante sus sollozos-Jamás creí que llegaras tan lejos-hipo y temblaba todo su cuerpo, se sentía ultrajada por lo que el sargento acaba de hacerle-Jamás lo imagine de ti-Toma aire-TE DETESTO!-Escapa del jardín dejándolo solo.

Fue un imbécil por haberle hecho esa sucia caricia en contra de su voluntad, se sentía como un violador. Esas palabras no se comparaban con la marca que le fue dejada en su rostro, tenía que buscar una buena disculpa para la chica.

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Bueno hasta aquí llega, mañana subo la segunda parte y todo el mundo merece descansar. Aun tengo cosas pendientes, solo espero que mi musa se manifieste. Nos vemos, pásenla lindo, no olviden dejar sus Reviews y gracias por sus comentarios sobre los dos fics de Irving/Hanji que hice hace días.

Se despide de ustedes, ShoujoMadness.