Disclaimer: Todos los personajes y lugares pertenecen a la autora JK rowling, solo esta retorcida historia sale de mi imaginación.

...

—Míralo, Hermione —dice la voz ronca del chico en su oído, la está abrazando por la espalda mientras con una de sus manos toma su barbilla para dirigir su mirada al otro chico que tienen al frente—. Di su nombre, Hermione... ¿Ves sus ojos? Están oscurecidos por el deseo, él te desea... desea hacerte todo lo que te estoy haciendo en estos momentos... Dilo...

—Harry... —logra decir Hermione entre gemidos de placer, el jóven la tiene presa entre sus brazos mientras la penetra con movimientos lentos y desquiciantes. Le encanta, le encanta que ese hombre la haga suya mientras Harry los mira.

—Dile lo mucho que te gusta, dile lo que sientes... ¿Te gusta?

—Me encanta... no pares, por favor —suplica Hermione con voz ahogada.

—Dícelo, dícelo a Harry.

—Me encanta, Harry. No quiero que pare.

Harry humedece sus labios, quiere probarla, quiere estar dentro de ella también, pero sabe que debe controlarse. Su erección palpita dolorosamente dentro de sus pantalones, ella se ve sencillamente hermosa, ¿Quién diría que eso le gustaría y lo excitaría tanto? Verla desnuda frente a él siendo poseida por otro hombre, ella luce salvajemente hermosa con su pelo desordenado y su piel perlada por el sudor. Su amante miraba a Harry mientras la besa por el cuello y los hombros robándole suspiros a la chica.

—¿Quiéres que Harry se una, Hermione?

—S-sí —susurró la chica.

—Dile lo que quieres que haga...

—Bésame, Harry...

El chico no lo pensó dos veces y se levantó de la cama que estaba ocupando para abalanzarse sobre los labios de su amiga, el pelirrojo salió de dentro de ella y comenzó a desnudar a Harry.

—Besa sus senos, Harry —murmuró Ron en su oído, Harry se inclinó obediente mientras Ron desataba su cinturón—, Hermione es tan deliciosamente estrecha, Harry. No puedo esperar para que la tomes.

—Ron —jadeó Harry cuando una de las manos del pelirrojo tomó su sexo por sobre el bóxer.

—Hermione, Harry está muy excitado. ¿Por qué no le das un beso justo aquí? Quizás eso lo relaje —dijo Ron sonriendo con malicia, bajó rápidamente el bóxer de su amigo liberando su gran erección.

Hermione se arrodilló de inmediato y metió el pene de Harry en su boca, mientras Ron lo acariciaba suavemente al ritmo que marcaba la jóven con la boca, Hermione succionaba y lamía el pene de Harry con una exactitud desquiciante. Quería penetrarla cuanto antes, sin esperar permiso la tomó de la mano para que se pusiera de pie, la guió con delicadeza a la cama y poniéndola a gatas sobre el colchón la penetró con fuerza. Ron tenía razón: su estrechez era deliciosa; Ron siguió sonriendo con una sonrisa coqueta que podía derretir a cualquiera, se fue hacía el otro lado de la cama y besó a Hermione con tal pasión y ternura que la chica solo pudo excitarse más de ser posible.

—Chupa, Hermione —ordenó Ron acercándo si pene a su boca, Hermione volvió a obedecer muerta del placer, era extraño, pero escuchar a Ron dándole ordenes de esa manera la hacía sentir tal excitación que solo podía pensar en complacerlo.

Ron jadeo cuando la chica se lo metió en la boca y comenzó a succionar con delicadeza, mientras Harry la penetraba con fuerza. Hermione podía sentir el poderoso orgasmo formándose en su vientre, ¿Cuántos había tenido ya? No podía recordarlo y en ese preciso instante no le importaba en lo más mínimo, solo quería seguir sintiendo eso que sus amigos la hacían sentir.

—Hermione, quiero penetrarte también —suplicó Ron con voz ronca—, ¿Me dejas?

Hermione asintió con la cabeza, en ese extraño juego que tenían Ron no pedía permiso para nada, él solo ordenaba y tanto Harry como Hermione obedecían, pero él tenía un límite y sabía que lo que pedía era doloroso, pero de verdad quería hacerlo.

—Harry, acuéstate en la cama —volvió a ordenar Ron con su sonrisa que ya para ellos era habitual, Ron resultó ser un jugador sexual innato y le encantaba tener todo el control.

Harry obedeció acostándose boca arriba en la cama y penetrando a Hermione desde esa nueva posición; Ron buscó el lubricante y puso una gran cantidad en la entrada trasera de la chica, a Hermione la recorrió un escalofrío al sentir el frio contra su piel caliente. Ron untó sus dedos con la sustancia, comenzó a acariciar la entrada de la chica con suavidad para luego introducir uno de sus dedos, Hermione se tensó sintiendo una leve incomodidad.

—Relájate, Hermione —susurró roncamente Ron dándole pequeños besos en la espalda de la castaña mientras Harry besaba su cuello con pasión.

Una vez que Hermione se acostumbró a la extraña sensación y Ron comenzó a mover su dedo con lentitud hasta que Hermione comenzó a marcarle el ritmo exitada, el pelirrojo introdujo otro dedo en su interior provocando un gemido de dolor, Ron volvió a besarla de nuevo en la espalda mientras con su mano libre acariciaba el trasero de la chica que pronto se relajó dándole permiso para continuar estimulandola. Ron sabía que ella no estaba lista, sabía que él era mucho más grande que eso, pero no podía esperar más, su erección palpitaba dolorosamente exigiendo sentirla cuanto antes. Cubrió su pene totalmente con el lubricante, sacó sus dedos de su entrada y acercó su erección; con toda la lentitud que pudo lograr comenzó a introducirse en ella, incluso Harry paró sus movimientos para no lastimar a la chica.

Ron gimió con fuerza cuando comenzó a adentrarse; Hermione chilló de dolor por lo que Ron se detuvo dejándola acostumbrarse a él, una vez que se relajó Ron continuó entrando en ella. Dolía, le dolía mucho; no pudo evitar soltar un alarido a lo que los chicos la acariciaron haciendo lo posible porque el dolor pasara de prisa, una vez que Hermione se acostrumbró ambos chicos se movieron dentro de ella, Harry y Ron podían sentirse el uno al otro dentro de Hermione, apenas separados por un fino pedazo de piel.

—Delicioso —gimieron Ron y Harry al unísono, los tres cerraron los ojos concentrándose en las maravillosas sensaciones del momento.

—Ron... Harry... No... No paren... Estoy tan cerca... —logró decir Hermione entre fuertes gemidos.

—Aún no, Hermione —ordenó duramente Ron—. No puedes venirte hasta que yo te lo permita, ¿Entiendes?

—Pero... Pero, Ron... —Hermione no quería desobedecerlo, pero no sabía cuánto tiempo aguantaría.

—Lo mismo va para ti, Harry —ordenó el chico con furia.

—Ron, no puedo... voy a... voy a... —Ron le dio una fuerte nalgada a Hermione que la hizo estremecer.

—Si me desobedeces tendrás un castigo —dijo penetrandola con más fuerza mientras Harry hacía lo mismo.

—Ron, cuando hablas asi...

—¿Te excita? —preguntó Ron con sorna.

—Si...

—A mí me excita este pequeño juego... Besa a Harry, Hermione. ¿Te gusta como él te penetra?

—Si, me gusta... Más fuerte, Harry —Hermione se inclinó hacia Harry para besarlo con pasión—. Ron, por favor... por favor...

Suplicaba la chica, lo que excitó a ambos hombres, quienes con movimientos mas enloquecidos acabaron en su interior llenandola de placer al mismo tiempo que el orgasmo más fuerte que había sentido hasta el momento estallaba en el vientre de ella.

Los tres cayeron exhaustos en la cama con la respiración entrecortada y temblando sin control.

—Eso fue... —dijo Harry sonriendo.

—Perfecto —completó Hermione.

—Delicioso —dijo Ron. Los tres chicos tenían sonrisas satisfechas en sus rostros.

Tanto Ron como Harry se acercaron a Hermione y la abrazaron aprisionandola contra ambos cuerpos jadeantes y sudorosos. ¿Cómo había comenzado aquello? Como había comenzado todo entre ellos siempre: con una pelea...

...

Tengo un fic que escribir y miles de historias que continuar en mi cuenta de wattpad, entonces, ¿Qué demonios hago aquí con un nuevo fic? No tengo la menor idea!!! Pero la escena surgió en mi mente y tuve que escribirla.. en qué demonios estaba pensando? ni idea... No siquiera tengo una idea concreta de lo que se tratará el fic, pero espero que sea una buena locura.. tendrá mucho, mucho Lemmon (lo cual es obvio después de este primer capítulo). Espero les guste y nos leemos pronto.