Candace Flyyn: El origen

Introducción

Phineas y Ferb es una serie que pertenece a Disney Channel y a Dan Ponvenmire.

Este documento presenta un punto de vista sobre el origen de la personalidad paranoide de Candace Flynn con respecto a sus hermanos. Sólo recordar dos cosas antes de empezar: Phineas y Ferb tuvieron una mascota antes de Perry y esta historia se contará entre "realidad" y descripción de un caso clínico.

Preámbulo

"Guau guau guau"

- Oh Señor… sólo tuya es la venganza… el Señor es mi pastor…

Una voz que iba diciendo un rezo lastimero caminaba por el patio de Phineas y Ferb. En ese patio, en el cual la oscuridad de la noche no dejaba ver nada, las pisadas y la luz de una ténue linterna nos hacían saber que alguien caminaba por el patio donde antes en la mañana habían estado jugando unos niños. Pelotas, juguetes y cosas de niños pequeños podían ser vistas. Caían unas lágrimas entre la luz que dejaba ver la linterna…

- ¿Porqué… tiene que ser así? Era irremplazable… era irremplazable para mí…

La linterna nos dejó ver luego una navaja que iba asida fuertemente de la mano de la persona, a la cual no podíamos ver por la oscuridad. La navaja brillaba con el reflejo de la linterna… estaba filuda. Los pasos nos hacían ver que llegábamos a un extremo de ese patio, a juzgar por la valla. En un lado se podía ver una caseta de perro con las palabras "Bucky" escritas en ella.

La navaja se levantó… la mano que la cogía no podía estarse quieta… haciéndonos saber el propósito verdadero de esa navaja… una navaja usada para el vil acto de la matanza.

- No puedo… pero esto es necesario…

El perro salió ladrando de la caseta por los susurros y mirando aunque sin poder ver el rostro de su agresor, ladró como intentando alertar a la casa que alguien se había inmiscuido entre ellos. La navaja se enderezó y el perro dejó de ladrar agresivamente empezó a aullar de pena. De repente, se oyó un aullido final y la navaja cayó al suelo, iluminada por la linterna, de un color carmesí. El reflejo de la luz nos hacía ver que el carmesí estaba en la caseta del perro y en el suelo, absolviéndose por el pasto que nadaba en ese carmesí de algo tan atroz como el crimen.

La mano trémula recogió la navaja, y la pasó de nuevo por el cuerpo del perro que ahora nos permitía ver la luz… oyéndose de nuevo como el vil instrumento deshonraba a un cadáver, aunque sea de un animal, cortándolo. De pronto la linterna cayó al suelo y el foco se partió en dos, dejando todo en la más total oscuridad.

Capítulo I

(El Inicio)

Al día siguiente gran revuelo se vio en casa de la familia Flynn. Phineas Flynn, un infante de tan sólo 6 años estaba armando un tremendo escándalo.

- ¡Mamá! – decía gritando – Bucky a desaparecido… ¡Candace! ¡Ha desaparecido!

- Puedes callarte por favor – dijo Candace – Estará dormido. No tiene porqué necesariamente venir a despertarte todos los días…

- Siempre lo hace – dijo Ferb – Tenemos que encontrarlo…

- Los llevaré a los juegos de la tienda… pero por favor… no griten tan temprano…

- ¡Bucky! – se quejó Phineas - ¡Quiero a mi perro!

- Te digo… que lo dejes… - dijo Candace – Estoy cansada… me han despertado muy pronto…

- ¡Mi mascota! ¡Búsquenla!

- ¡Que lo dejes ya! – dijo ella tomando la caja de cereales y lanzándola contra su hermano. El golpe hizo que el pequeño Phineas cayera al suelo sentado y los cereales se regaran por el suelo. El pequeño estuvo unos segundos en silencio… pero luego empezó a llorar.

"Mujer… cuando llegan a la adolescencia… su cuerpo experimenta ciertos cambios, tanto físicos como psicológicos. Y aunque de ambos sexos, el femenino sea el más fuerte, psicológicamente hablando… por el hecho de criar hijos. Hay una etapa de la vida donde se vuelven vulnerables… una especie de debilitamiento de su fuerza mental. Algunas mujeres pueden desarrollar una leve… paranoia… siendo demasiado impulsiva… sin medirse sobre sus actos con su entorno, ya sea de amigos o entorno familiar…"

- ¿Qué ha pasado aquí? –dijo Linda Flynn entrando - ¡Phineas! ¿Estás bien?

- Candace le ha tirado los cereales a Phineas – respondió Ferb.

- ¿Porqué tratas así a tu hermano? ¡Lo has hecho llorar! Tranquilo Phineas…

"Sin tratamiento… la paranoia se vuelve más intensa, dando lugar a un comportamiento errático, lo cual llevan al paranoico a cometer actos irracionales… producto de aumentar la desesperación y la confusión…"

- Sólo buscaba a su perrito. ¿Han visto a Bucky? ¿Saben dónde está…?

- Sólo se preocupan por ese perro… ¿Y que hay de mí? ¡Phineas y Ferb rompieron mi casa de muñecas… la que recibí al acabar la primaria! ¿Crees que no me molesta lo que han hecho?

- Pero querida… son sólo niños…

- ¡Son niños que no saben comportarse! Roto mi casa de muñecas… para hacer esas cosas… del patio… que no quieres creer…

- Ah querida… es tema del médico. El Dr. Johann me informó de que esto podía pasar…

- Dime mamá… ¿Es que no me crees? ¿Nunca vez lo que Phineas y Ferb están haciendo?

- Has actuado muy peculiar desde Mayo... así que me he tomado la molestia de consultar al Dr. Johann… piensa que es algo sobre tu menstruación…

Candace miró a su madre mortificada. ¿Decir eso delante de los niños?

- Está todo bien Candace… he aprendido de ese tipo de cuestiones con el Doctor. Tu cuerpo… está experimentando ciertos cambios… una transformación de todo tu ser, lo cual podría desencadenar histeria, que requiere atención médica… está todo bien. Ya está conversado con el Dr. Johann, así que iré a llamarlo ahora. Todo saldrá bien…

- ¿Qué dices…? ¡No haz oído que Phineas y Ferb rompieron mi casa de muñecas! ¡Debí haberle tirado algo más que los cereales! No lo entiendes no… ¡No entiendes nada!

La chica tomó la caja de cereales y vacio el resto sobre Ferb. Luego tomó la taza de los cereales y la lanzó cerca de Phineas, asustándolo.

- ¡Esto es lo que les pasa por romper algo que estuvo conmigo desde hace 6 años! ¿Quién los ayudaría a buscar a su perro si no estoy yo? ¡Su condenado perro, que se mete a mi cuarto por las mañanas! ¡Qué bien que no haya aparecido ahora!

"En el caso más agudo de la enfermedad… un tratamiento agresivo puede ser la única forma de remover las influencias externas que agravan la condición. Y esto consiste en reubicar al paciente en el lugar donde pueda estar más cómodo…"

- No te preocupes hija – dijo Linda Flynn conduciendo a su hija a un auto de color verde. El Dr. Johann es un excelente hombre y un intachable médico. Te ayudará a entender por esto que estás pasando… te iré a visitar tan pronto me lo indique el doctor.

- Pero mamá… ellos realmente rompieron mi casa de muñecas… y hacen todas esas cosas en el patio. No los has visto… no los has visto… pero me creerás… algún día…

Candace abordó el vehículo, conducido por un hombre vestido de bata blanca, barba prominente y poco pelo: El Dr. Johann.

- ¿Usted me cree no? Mis hermanos… tengo que atraparlos… demostrarles… que…

- Claro que te creo Candace… y veremos qué es lo que te impide ser feliz – respondió el mé