¡Hola!, pues en una de mis locas ideas se me ocurrió hacer un fanfic alterno, utilizando la historia del libro de Harry Potter y adaptándola a Digimon. Habrá algunas cosas en común, pero no todas... sólo espero que les guste un poquito y me digan lo que piensan.
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Escuela para niños Elegidos.
Capítulo 1 "¿Qué es el Digimundo?"
Era una día normal en su patética vida, él le llamaba de esa manera porque sentía que vivía una mentira; hacía poco que había descubierto ser adoptado, lo peor era que sus padres no tenían la intención de decirle nada. No era que no le profesaran afecto, al contrario, Koushirouu era un chico muy querido, sólo que su actual realidad lo hacía sentir vacío.
Llegó a su casa con bastante pereza, el día de hoy había iniciado sus prácticas de fútbol que se impartían como curso de verano.
- Buenas tardes - saludó con cortesía, al ver a su padre y madre ver la televisión.
- ¡Hola, hijo! - dijo la Sra. Izumi con efusión.
Antes de entrar decidió revisar el correo, ya que era costumbre suya el hacerlo, aunque no recibía muchas cartas.
Caminó hacia el buzón y sacó la correspondencia, había en total 5 cartas, mientras retornaba al comedor, iba viendo lo que eran.
"El recibo de la luz y del agua, una carta de la abuela, cartas con promociones, y una para....¡Woow!, sí, es para mí"
Koushirouu miró el sobre con mucha emoción, no tenía remitente, pero claramente decía.
"Sr. Koushirou Izumi
Apartamento #553, sección B
Odaiba..." (etc.)
Entonces, con viva emoción, comenzó a abrir el sobre. Pero no pudo finalizar su acción, ya que su supuesto padre, le arrebató la carta.
- ¿Qué se supone que es esto, Izzy? - preguntó el hombre de manera fría y seca, el hijo jamás en su corta vida lo había oído hablar así
- Naturalmente que es una carta - respondió el muchacho con mucho asombro.
Claramente vio el pánico que expresaba la cara del señor Izumi al ver la constitución de la nota, ese pánico se volvió ira, y de forma inesperada, comenzó a romper el sobre con desfachatez.
- ¡¡¿Por qué lo rompes?!!, esa carta me pertenece - rezongó Koushirou.
- Son puras tonterías, ¿Me entiendes?, no debes leer estas fanfarronadas, podría ser una carta bomba - mintió.
- Pareciera que no querías que la leyera - dijo con ironía. Pero sus ojos estaban llenos de ira, lo mejor que pudo hacer fue marchaste iracundo hacia su habitación.
No sabía porqué le había molestado tanto la acción de su padre, probablemente era porque normalmente nadie se metía con sus cosas. Los ánimos los traía bajo el suelo, ni siquiera había encendido a su amada computadora, y así, sin darse cuenta, llegó la hora de la cena.
- Izzy, ¡Es hora de cenar! - había llamado la madre del joven de cabellos rojos.
Pero no tenía ganas de cenar, ni siquiera quería verle la cara a su padre. ¿Por qué había hecho eso?, el concepto de "Carta bomba", era estúpido, así que no iba a creerlo.
Se levantó por inercia, tal vez no tenía ganas de cenar, pero sí tenía hambre, puesto que hacer ejercicio siempre despertaba el apetito.
- Hice tu platillo favorito - dijo la dama Izumi con voz alterada, su hijo lo notó, pero se hizo el despistado.
- Muchas gracias - dijo Koushirou de la manera más educada que pudo.
- De nada, amorcito - replicó la madre - nos gusta mucho consentirte.
Izzy Izumi, sin embargo, no tenía deseos de ser cortés, comió con rapidez y se retiró de la mesa de forma esporádica, se había dado cuenta que sus padres tramaban algo, y cuando eso pasaba, lo mejor era espiarlos... sabía que no era moral hacerlo, pero no podía evitarlo, era muy curioso.
--
La noche proclamaba con ruidos fugaces la grandeza de su reina, la luna; pocas estrellas figuraban en el firmamento, pero las que estaban, también le daban su tributo al satélite natural de la Tierra. Pasaba de media noche, Koushirou esperaba con ansias esa madrugada, su corazón latía con mucho nerviosismo, tenía la esperanza de enterarse de algo.
Se levantó de su cama y fue hacia la habitación de sus padres, éstos siempre dejaban la puerta entreabierta, y así era mucho más sencillo escuchar sus voces.
- Querido, ¡No es posible que haya llegado esa carta! - había exclamado su "madre"
- Lo sé, pero estamos a salvo, ya la destruí - el Sr. Izumi hizo una leve pausa - Koushirou nunca sabrá lo que es el Digimundo, querida, lo prometo.
- ¡Es que no quiero perderlo!, si se entera de lo que es... ¡nos abandonará!, él es un niño muy curioso, no dudo que logre saberlo..
- Ten confianza... sólo nos queda eso.
- ¡Pero querido!, ¡El Internet!, le pueden mandar la carta por ahí - gritó la señora, muy angustiada.
- Es verdad, mañana mismo haré lo que sea para bloquear la computadora de ese maldito Digimundo.
¿Digimundo?, ¿Abandonarlos?, miles de cuestiones surgían en el cerebro del niño Izumi, sus manos temblaban con angustia, y desde que su madre había mencionado al "Internet", lo único que quería hacer, era encender su máquina.
Corrió con disimulo hasta llegar a su habitación, prendió su laptop y sin perder tiempo abrió su correo; en efecto, había un e-mail dirigido a él que se veía muy misterioso.
El título decía: "Espero aquí puedas leer nuestro mensaje, Koushirou Izumi"
Le dio clic con desesperación, el mensaje decía lo siguiente.
"Estimado Koushirou Izumi:
La escuela para niños Elegidos lo ha elegido como uno de nuestros alumnos; nos dará mucho gusto tenerlo entre nuestros niños, las clases inician este 1 de Agosto y en ellas podrá conocer muchísimas cosas que ignoraba del Digimundo.
Ahora le mencionaré el material que ocupará para su primer curso:
*Libros:
· "Archivos ocultos sobre la Isla File". Para la clase de --Misterios del Digimundo--.
· "Guía para la Digievolución", que le servirá para --Digievolución curso I--.
· "Pasadizos virtuales". Para su clase de --Geografía del Digimundo--.
· "Cuidado de bebés Digimon". Para la asignatura de --Crianza de Digimons--.
· "Libro para diferenciar entre Vacunas, Neutros y Virus" que utilizará en su clase de --Peleas de Digimons--.
· "Libro sobre Emblemas" para la clase de --Obtención de Emblemas--
*Traer su propia computadora portátil.
*Digivice.
*También una actitud positiva.
Su nip de acceso: 1101999KOUIZ
No olvide que nuestro trolebús saldrá de la Sala de Computación de la escuela primaria elemental de Odaiba, computadora 4, a las 10 de la mañana.
Atentamente: Genai
Director de la Escuela del Digimundo de Japón."
Koushirou respiró muy agitado, tenía miles de preguntas qué hacerse, primeramente, ¿Qué demonios era el Digimundo?, ¿Dónde conseguiría ese tipo de cosas que le pendían?, ¿Era esto una broma de mal gusto?... ya no sabía que pensar, pero si sus padres habían sonado tan afectados, eso significaba que esto iba en serio.
No podía con la incertidumbre, ahora más que nunca se sentía extraviado, si bien nunca se sintió en su ambiente, la sensación de vacío que lo acogía en esos momentos era inigualable. Se olvidó de su carácter pacífico en indiferente, ante todo, quería saber qué era lo que estaba pasando, volvió al cuarto de sus padres postizos y tocó con precisión; no esperó respuesta y entró (Seguramente su toquido era un "aviso").
- ¡Izzy!, ¿Qué es lo que te pasa? - preguntó la Sra. Izumi - tú nunca haces cosas como estas.
- ¿Por qué me rompiste la carta? - preguntó el pelirrojo de ojos negros.
- Ya te lo dije - respondió el padre, con rostro serio.
- ¡Eso es mentira! - exclamó muy exaltado - ¿Por qué no quieres que sepa lo que es el Digimundo?, Ya estoy enterado, ¡Exijo que me lo digan!
Koushirou notó que su madre temblaba como si convulsionara, había comenzado a llorar de forma escandalosa, al chico le pareció que su mamá sufría la peor de sus jaquecas, nunca la había visto sin su cándida expresión.
- ¡No queríamos que lo supieras, hijo! - chilló la madre -¡Por favor, no preguntes, no quiero perderte!
- Si no me dicen, los perderé de verdad - pidió un poco más calmado.
- Querida, creo que Izzy debe saberlo -opinó el padre, miró al niño con firmeza, Izzy respondió esa mirada con extraña dignidad - la primera verdad que teníamos que decirte, es que no somos tus verdaderos padres.
El señor Izumi había dicho eso de manera seria, a Koushirou se le remojaron los ojos, pero se mantuvo firme.
- Eso... eso ya lo sabía... fingí no escuchar, pero el peso que sentía era cada vez mayor; quería que llegara el día en que ustedes me lo dijeran... porque creí vivir un infierno, me encerraba en la computadora y me evadía con ella.
- ¡No es malo que te evadas con la computadora!, después de todo, eres un Elegido, como tus verdaderos padres.
- ¿Elegido? - preguntó el pelirrojo con mucha curiosidad
- Sí, Elegido del Digimundo - explicó el padre - el Mundo Digital es un lugar paralelo al nuestro formado por base de datos, en ese lugar habitan los Digimons, que son seres con diversos poderes, muchas veces buenos, otras tantas neutros o malos, Los elegidos deberán aprender a controlar la maldad de ese mundo con el poder de los emblemas, con los que protegerán ese mundo y nivelarán las fuerzas de las tinieblas...
- Ya veo... - replicó Izzy, los ojos tenían un brillo especial, parecía fascinado - No puedo creer que exista tan maravilloso lugar, es como si la magia fuera una verdad... pero, ¿Por qué soy un Elegido?, hace un momento mencionaste que mis verdaderos progenitores eran Elegidos.
- Tu madre y yo no sabemos mucho, Izzy - explicó el padre - pero generalmente para ser un Niño Elegido es necesario ser hijo de Digiestinados, y justamente eso eran tus padres.
- ¿En verdad?
- Tu padre y madre eran Elegidos muy poderosos, pero murieron en manos de un Digimon maligno, no recordamos su nombre - dijo ahora la Sra. Izumi - ellos eran parientes lejanos nuestros, y al ir a su funeral, nos dijeron que te cuidáramos.
- Es ese entonces nosotros teníamos un hermoso bebé, pero éste fue matado por un monstruo que se escapó del Digimundo... Te cuidamos como si fueras nuestro hijo por todos estos años, pero teníamos mucho miedo de que este día llegara, porque sabíamos que te irías de nuestro lado.
- Hijo, ¿Verdad que no irás a ese mundo?
- ¿Por cuánto tiempo sería? - preguntó Izzy - Todo indica que será por un ciclo escolar.
- Así es, deberás regresar en las vacaciones...
- Yo... no puedo evitar sentir interés por ir, es como si de repente hubiera encontrado mi lugar en el mundo, lo siento madre - se disculpó retornando a su tono educado - regresaré en las vacaciones.
- Lamentamos no haberte hablado antes de eso.
- Eso ya no importa - dijo con calma, pero luego su rostro pareció angustiarse - pero, ¿Cómo compraré esas cosas raras?, en la carta mencionan un "Digivice" y una serie de útiles extraños.
- No te preocupes hijo, le hablaremos a Joe Kido, él te ayudará.
- ¿Joe Kido?
- Él es otro Elegido.
- ¡Vaya!
--
Fin del primer capítulo.
--
Notas de la Autora: ¿Qué les pareció?, posiblemente debería ponerme a escribir mis proyectos comenzados, pero la inspiración para esas historias no llega.... espero no haberlos decepcionado.
En el próximo capítulo habrá más apariciones de niños Elegidos, así que espérenlo.
Déjenme Reviews o escríbanme un e-mail a: ziddycm@hotmail.com
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Escuela para niños Elegidos.
Capítulo 1 "¿Qué es el Digimundo?"
Era una día normal en su patética vida, él le llamaba de esa manera porque sentía que vivía una mentira; hacía poco que había descubierto ser adoptado, lo peor era que sus padres no tenían la intención de decirle nada. No era que no le profesaran afecto, al contrario, Koushirouu era un chico muy querido, sólo que su actual realidad lo hacía sentir vacío.
Llegó a su casa con bastante pereza, el día de hoy había iniciado sus prácticas de fútbol que se impartían como curso de verano.
- Buenas tardes - saludó con cortesía, al ver a su padre y madre ver la televisión.
- ¡Hola, hijo! - dijo la Sra. Izumi con efusión.
Antes de entrar decidió revisar el correo, ya que era costumbre suya el hacerlo, aunque no recibía muchas cartas.
Caminó hacia el buzón y sacó la correspondencia, había en total 5 cartas, mientras retornaba al comedor, iba viendo lo que eran.
"El recibo de la luz y del agua, una carta de la abuela, cartas con promociones, y una para....¡Woow!, sí, es para mí"
Koushirouu miró el sobre con mucha emoción, no tenía remitente, pero claramente decía.
"Sr. Koushirou Izumi
Apartamento #553, sección B
Odaiba..." (etc.)
Entonces, con viva emoción, comenzó a abrir el sobre. Pero no pudo finalizar su acción, ya que su supuesto padre, le arrebató la carta.
- ¿Qué se supone que es esto, Izzy? - preguntó el hombre de manera fría y seca, el hijo jamás en su corta vida lo había oído hablar así
- Naturalmente que es una carta - respondió el muchacho con mucho asombro.
Claramente vio el pánico que expresaba la cara del señor Izumi al ver la constitución de la nota, ese pánico se volvió ira, y de forma inesperada, comenzó a romper el sobre con desfachatez.
- ¡¡¿Por qué lo rompes?!!, esa carta me pertenece - rezongó Koushirou.
- Son puras tonterías, ¿Me entiendes?, no debes leer estas fanfarronadas, podría ser una carta bomba - mintió.
- Pareciera que no querías que la leyera - dijo con ironía. Pero sus ojos estaban llenos de ira, lo mejor que pudo hacer fue marchaste iracundo hacia su habitación.
No sabía porqué le había molestado tanto la acción de su padre, probablemente era porque normalmente nadie se metía con sus cosas. Los ánimos los traía bajo el suelo, ni siquiera había encendido a su amada computadora, y así, sin darse cuenta, llegó la hora de la cena.
- Izzy, ¡Es hora de cenar! - había llamado la madre del joven de cabellos rojos.
Pero no tenía ganas de cenar, ni siquiera quería verle la cara a su padre. ¿Por qué había hecho eso?, el concepto de "Carta bomba", era estúpido, así que no iba a creerlo.
Se levantó por inercia, tal vez no tenía ganas de cenar, pero sí tenía hambre, puesto que hacer ejercicio siempre despertaba el apetito.
- Hice tu platillo favorito - dijo la dama Izumi con voz alterada, su hijo lo notó, pero se hizo el despistado.
- Muchas gracias - dijo Koushirou de la manera más educada que pudo.
- De nada, amorcito - replicó la madre - nos gusta mucho consentirte.
Izzy Izumi, sin embargo, no tenía deseos de ser cortés, comió con rapidez y se retiró de la mesa de forma esporádica, se había dado cuenta que sus padres tramaban algo, y cuando eso pasaba, lo mejor era espiarlos... sabía que no era moral hacerlo, pero no podía evitarlo, era muy curioso.
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La noche proclamaba con ruidos fugaces la grandeza de su reina, la luna; pocas estrellas figuraban en el firmamento, pero las que estaban, también le daban su tributo al satélite natural de la Tierra. Pasaba de media noche, Koushirou esperaba con ansias esa madrugada, su corazón latía con mucho nerviosismo, tenía la esperanza de enterarse de algo.
Se levantó de su cama y fue hacia la habitación de sus padres, éstos siempre dejaban la puerta entreabierta, y así era mucho más sencillo escuchar sus voces.
- Querido, ¡No es posible que haya llegado esa carta! - había exclamado su "madre"
- Lo sé, pero estamos a salvo, ya la destruí - el Sr. Izumi hizo una leve pausa - Koushirou nunca sabrá lo que es el Digimundo, querida, lo prometo.
- ¡Es que no quiero perderlo!, si se entera de lo que es... ¡nos abandonará!, él es un niño muy curioso, no dudo que logre saberlo..
- Ten confianza... sólo nos queda eso.
- ¡Pero querido!, ¡El Internet!, le pueden mandar la carta por ahí - gritó la señora, muy angustiada.
- Es verdad, mañana mismo haré lo que sea para bloquear la computadora de ese maldito Digimundo.
¿Digimundo?, ¿Abandonarlos?, miles de cuestiones surgían en el cerebro del niño Izumi, sus manos temblaban con angustia, y desde que su madre había mencionado al "Internet", lo único que quería hacer, era encender su máquina.
Corrió con disimulo hasta llegar a su habitación, prendió su laptop y sin perder tiempo abrió su correo; en efecto, había un e-mail dirigido a él que se veía muy misterioso.
El título decía: "Espero aquí puedas leer nuestro mensaje, Koushirou Izumi"
Le dio clic con desesperación, el mensaje decía lo siguiente.
"Estimado Koushirou Izumi:
La escuela para niños Elegidos lo ha elegido como uno de nuestros alumnos; nos dará mucho gusto tenerlo entre nuestros niños, las clases inician este 1 de Agosto y en ellas podrá conocer muchísimas cosas que ignoraba del Digimundo.
Ahora le mencionaré el material que ocupará para su primer curso:
*Libros:
· "Archivos ocultos sobre la Isla File". Para la clase de --Misterios del Digimundo--.
· "Guía para la Digievolución", que le servirá para --Digievolución curso I--.
· "Pasadizos virtuales". Para su clase de --Geografía del Digimundo--.
· "Cuidado de bebés Digimon". Para la asignatura de --Crianza de Digimons--.
· "Libro para diferenciar entre Vacunas, Neutros y Virus" que utilizará en su clase de --Peleas de Digimons--.
· "Libro sobre Emblemas" para la clase de --Obtención de Emblemas--
*Traer su propia computadora portátil.
*Digivice.
*También una actitud positiva.
Su nip de acceso: 1101999KOUIZ
No olvide que nuestro trolebús saldrá de la Sala de Computación de la escuela primaria elemental de Odaiba, computadora 4, a las 10 de la mañana.
Atentamente: Genai
Director de la Escuela del Digimundo de Japón."
Koushirou respiró muy agitado, tenía miles de preguntas qué hacerse, primeramente, ¿Qué demonios era el Digimundo?, ¿Dónde conseguiría ese tipo de cosas que le pendían?, ¿Era esto una broma de mal gusto?... ya no sabía que pensar, pero si sus padres habían sonado tan afectados, eso significaba que esto iba en serio.
No podía con la incertidumbre, ahora más que nunca se sentía extraviado, si bien nunca se sintió en su ambiente, la sensación de vacío que lo acogía en esos momentos era inigualable. Se olvidó de su carácter pacífico en indiferente, ante todo, quería saber qué era lo que estaba pasando, volvió al cuarto de sus padres postizos y tocó con precisión; no esperó respuesta y entró (Seguramente su toquido era un "aviso").
- ¡Izzy!, ¿Qué es lo que te pasa? - preguntó la Sra. Izumi - tú nunca haces cosas como estas.
- ¿Por qué me rompiste la carta? - preguntó el pelirrojo de ojos negros.
- Ya te lo dije - respondió el padre, con rostro serio.
- ¡Eso es mentira! - exclamó muy exaltado - ¿Por qué no quieres que sepa lo que es el Digimundo?, Ya estoy enterado, ¡Exijo que me lo digan!
Koushirou notó que su madre temblaba como si convulsionara, había comenzado a llorar de forma escandalosa, al chico le pareció que su mamá sufría la peor de sus jaquecas, nunca la había visto sin su cándida expresión.
- ¡No queríamos que lo supieras, hijo! - chilló la madre -¡Por favor, no preguntes, no quiero perderte!
- Si no me dicen, los perderé de verdad - pidió un poco más calmado.
- Querida, creo que Izzy debe saberlo -opinó el padre, miró al niño con firmeza, Izzy respondió esa mirada con extraña dignidad - la primera verdad que teníamos que decirte, es que no somos tus verdaderos padres.
El señor Izumi había dicho eso de manera seria, a Koushirou se le remojaron los ojos, pero se mantuvo firme.
- Eso... eso ya lo sabía... fingí no escuchar, pero el peso que sentía era cada vez mayor; quería que llegara el día en que ustedes me lo dijeran... porque creí vivir un infierno, me encerraba en la computadora y me evadía con ella.
- ¡No es malo que te evadas con la computadora!, después de todo, eres un Elegido, como tus verdaderos padres.
- ¿Elegido? - preguntó el pelirrojo con mucha curiosidad
- Sí, Elegido del Digimundo - explicó el padre - el Mundo Digital es un lugar paralelo al nuestro formado por base de datos, en ese lugar habitan los Digimons, que son seres con diversos poderes, muchas veces buenos, otras tantas neutros o malos, Los elegidos deberán aprender a controlar la maldad de ese mundo con el poder de los emblemas, con los que protegerán ese mundo y nivelarán las fuerzas de las tinieblas...
- Ya veo... - replicó Izzy, los ojos tenían un brillo especial, parecía fascinado - No puedo creer que exista tan maravilloso lugar, es como si la magia fuera una verdad... pero, ¿Por qué soy un Elegido?, hace un momento mencionaste que mis verdaderos progenitores eran Elegidos.
- Tu madre y yo no sabemos mucho, Izzy - explicó el padre - pero generalmente para ser un Niño Elegido es necesario ser hijo de Digiestinados, y justamente eso eran tus padres.
- ¿En verdad?
- Tu padre y madre eran Elegidos muy poderosos, pero murieron en manos de un Digimon maligno, no recordamos su nombre - dijo ahora la Sra. Izumi - ellos eran parientes lejanos nuestros, y al ir a su funeral, nos dijeron que te cuidáramos.
- Es ese entonces nosotros teníamos un hermoso bebé, pero éste fue matado por un monstruo que se escapó del Digimundo... Te cuidamos como si fueras nuestro hijo por todos estos años, pero teníamos mucho miedo de que este día llegara, porque sabíamos que te irías de nuestro lado.
- Hijo, ¿Verdad que no irás a ese mundo?
- ¿Por cuánto tiempo sería? - preguntó Izzy - Todo indica que será por un ciclo escolar.
- Así es, deberás regresar en las vacaciones...
- Yo... no puedo evitar sentir interés por ir, es como si de repente hubiera encontrado mi lugar en el mundo, lo siento madre - se disculpó retornando a su tono educado - regresaré en las vacaciones.
- Lamentamos no haberte hablado antes de eso.
- Eso ya no importa - dijo con calma, pero luego su rostro pareció angustiarse - pero, ¿Cómo compraré esas cosas raras?, en la carta mencionan un "Digivice" y una serie de útiles extraños.
- No te preocupes hijo, le hablaremos a Joe Kido, él te ayudará.
- ¿Joe Kido?
- Él es otro Elegido.
- ¡Vaya!
--
Fin del primer capítulo.
--
Notas de la Autora: ¿Qué les pareció?, posiblemente debería ponerme a escribir mis proyectos comenzados, pero la inspiración para esas historias no llega.... espero no haberlos decepcionado.
En el próximo capítulo habrá más apariciones de niños Elegidos, así que espérenlo.
Déjenme Reviews o escríbanme un e-mail a: ziddycm@hotmail.com