Advertencias: Sin shippeo.
THAT'S HAPPINESS
Capítulo Único
Hay algo como una pregunta en la parte posterior de su cabeza, siempre silenciosa, nunca saliendo a flote. Killua apenas y nota que se cuestiona lo que se cuestiona. Hay otras prioridades, hay otras tareas. No tiene tiempo para dudas cósmicas que sólo le hacen perder el tiempo.
Killua está muy ocupado siendo un asesino.
(«¿Qué es la felicidad?» es una pregunta que ni siquiera sabe que se ha hecho).
Gon aparece en su vida.
Es un niño de su edad, un niño que le cae bien, un niño con el que puede andar, que le mantiene el paso. Es un manojo verde de sonrisas que se le contagian a Killua se resista o no (usualmente no lo hace. No hay motivos para que lo haga). Gon vive con una mente simple y a Killua le dan ganas de ser un poco más como él, poder sonreír tanto como él; ser más libre.
Pero Killua no puede ser de esa manera, así que se conforma con pasar el tiempo a su lado.
(«¿Por qué siempre estás feliz?», Killua se lo pregunta a Gon una y otra vez pero nunca hay una respuesta certera. Todo es inherente a Gon y tal vez él es feliz precisamente porque es Gon. No hay fórmula ni receta que Killua pueda copiar).
Gon siempre está actuando temerariamente con un optimismo que raya en lo ridículo y que va en contra de todas las enseñanzas que le han dado los Zoldyck a Killua.
Él le detiene, le hace razonar y le explica tanto como puede que no puede hacer las cosas de esa manera, que deben buscar otra forma. Y Gon escucha como si él fuera una fuente de infinita sabiduría, le apoya, le formula sus dudas, hace planes donde siempre está invitado y confía en él sin juzgarlo. Y esa confianza burbujea en el estómago de Killua como pompas de jabón que flotan y explotan esparciendo un dulce veneno que lo atonta y le hace una persona nueva, una que se sonroja, que le vuelve toda inocencia; una que sonríe y encuentra alegría en las pequeñas cosas de la vida.
(«¿Eso es felicidad?», no está seguro, pero se le parece mucho).
Killua lo ha aceptado de forma fácil, llana, concisa: todo es a causa de Gon.
Contrario a otras personas, contrario a lo que los ajenos podrían pensar de él, a Killua no le avergüenza que todo gire en torno a Gon. Le avergüenza decirlo en voz alta, pero no le avergüenza sentirlo ni le avergüenza que sea así. Killua, en cambio, prefiere que todo se mantenga tal como está. Que sean inseparables. Que él proteja a Gon tanto como pueda, tanto como su luz no lo enceguezca.
Gon es su mejor amigo, lo mejor que ha tenido. Le provoca sonrisas y le hace aspirar ser diferente, ser mejor y ser otra cosa, una que valga la pena. Una que también pueda ser un manojo de sonrisas, no verdes, pero sí azules.
Y el azul combina con verde.
(«¿Qué es la felicidad?», Killua concluye que Gon no sólo es feliz, sino que Gon es felicidad y él quiere ser felicidad a su lado).
FIN
[Notas finales]
He adoptado a Killua como mi hijo y a Gon como el hijo de la vecina que se la pasa jugando con mi hijo todo el día y al que, por lo mismo, lo quiero y lo cuido como si fuera mi propio hijo.
No sé por qué me complico tanto la vida a la hora de amar personajes xD
¡Hasta otra y que la fuerza de las papas fritas ilumine su camino!
