Esta es una historia que se nos ocurrio a Marysuarez, alechan15 y a mi hace unos días y decidi escribirla. la escritora oficial soy yo Dark27angel, pero ellas aportaron ideas. Por favor dejenos reviews para saber que les parece.

También quería avisarles que le corregí los errores que había pasado por alta y gracias a aquellos que me los dijeron. También quería decirles que arregle la manera de escribir la historia porque me pareció que estaba escribiendo de una forma bastante infantil así que le realice unos cambios en la redacción.

Capitulo 1

Nos encontrábamos acampando en un prado cerca de un río ya era muy tarde, según mis cálculos podría ser casi media noche, el pequeño Shippou se encontraba acurrucado en el lomo de Kirara detrás de unos enormes árboles que rodean el claro. Últimamente Shippou prefiere dormir a la intemperie que dormir bajo el acogedor techo de una cabaña, pero es comprensible después de todo es un zorrito supongo que disfruta o se le es más natural la intemperie. El pervertido Monje Miroku y mi buena amiga Sango se había ido juntos a "bañarse" al río desde hace ya varias horas, últimamente su relación ha prosperado bastante hasta podría decir que en cuanto puedan van a casarse. En cambio Inuyasha esta encerrado en esa cabaña, hoy era noche de luna nueva por lo que era un humano, durante estas noches Inuyasha se escondía para proteger su secreto y enviaran que nos atacaran nuestros enemigos mientras estamos vulnerables.

Esta noche yo me encontraba en el peor estado, durante la última batalla mi ropa había quedado completamente asquerosa y tuve que lavarla en el río, lo malo es que en esta época no existen las secadoras así que todavía están mojadas. Tengo que quitármelas, si no lo hago me voy a enfermar, pero no puedo andar por aquí en pantaleta y sostén. Aunque Shippou está durmiendo, Sango y Miroku no van a regresar hasta el amanecer y no creo que Inuyasha salga de esa cabaña. Si la decisión esta tomada voy a poner la falda y la camisa a secar en la fogata y tendré que permanecer un rato en ropa interior, pero supongo que será muy poco tiempo.

Levante mi camisa hasta quitármela, luego desabroche mi falda y la baje por mis piernas hasta sacármela, quedándome así en trapos menores. Coloqué la ropa en un enorme palo que solíamos utilizar para cocinar pero servía para secar la ropa. Senti el frío atravesar mi piel pero no me importo, sólo pensaba en relajarme y tratar de descansar mientras esperaba que la ropa se secara, levante mi rostro al cielo y pude apreciar los astros como jamás los vería en mi época.

Que insoportable este encierro quiero salir, quiero encontrar esa perla, quiero vengarme de Naraku y convertirme en Yukai, ¡acaso es demasiado pedir! Aquí encerrado me siento un cobarde, una sabandija, pero es cierto siendo humano no tengo ni la cuarta parte de mi fuerza. Bueno al menos voy a aprovechar estos momentos para pensar, pero ¿en que pienso?... (Momento de silencio)…. Ya se, a quien elijo, si no decido rápido las dos mujeres me van a odiar, además no puedo seguir con esta frustración, o amo a una o a la otra, no puedo querer a las dos. Aunque… (Pensamiento pervertido)…. Tener dos mujeres es como… podría hacer… No pienses en eso, antes muerto a que una de esas dos aceptara hacer eso…

La cosa esta así Kagome es una mujer dulce que esta conmigo siempre, me quiere, me protege, se preocupa por mi, me apoya y me ayuda… tiene muchos puntos a su favor… pero por el otro lado esta Kykio es mi gran amor del pasado, la primera de la que me enamore, aunque ahora es fría y un poco antipática, y quiere matarme… no tiene muchos puntos a su favor… pero ya va hay un punto que lo define seguro Kykio besa de maravilla, además produce esas sensaciones extrañas en mi cuando me roza o me besa que son inexplicables pero me encantan, aunque Kagome es linda, pero no, ese beso le gana a todo.

Ahora que hago, tengo que decírselo, tengo que decirle a Kagome ya mi decisión, no puede seguir teniendo esperanzas en algo que no va a pasar. Si voy a decírselo ya… me levante y salí por la puerta sin siquiera pensar en mi condición humana. Al cruzar la puerta la imagen al frente mio no me permito avanzar más, me dejo completamente anonadado. Vi el rostro de Kagome alzado al cielo, su hermoso pelo azabache caía hasta el suelo, sus ojos cerrados con un impresionante deleite, su boca rosada estaba entreabierta invitándome a acercarme y besarla. Su cuello hacía un puente entre sus hombros y su cabeza, un puente que mi lengua quería transitar, por la posición de su espalda su pecho estaba alzado e invitándome, observe su pecho tratando de detallarlo bien, definitivamente había crecido desde la primera vez que la vi, pero ¿Qué es ese artefacto sobre su pecho? Seguro es una especie de cosa de su época…. Sus piernas cruzadas al frente de ella ocultaban ese misterioso lugar al que yo quería llegar.

Sin pensarlo mi cuerpo comenzó a avanzar hacía ella, me detuvo y la observe, ella todavía no se había percatado de mi presencia me agache suavemente y pose mis labios sobre los suyos entreabiertos en un suave roce…

Con mi mente en blanco apoyada sobre mis manos y dejando caer mi cabeza hacía atrás permanecí durante un tiempo, disfrutando de la suave brisa que golpeaba mi piel. Senti algo acercarse pero pensé que era mi imaginación, quien estaría por aquí a estas horas. Pero pronto me di cuenta que era real había alguien cerca y estaba rozando sus labios con los míos. Debo averiguar quien es, abrí mis ojos para ver a mi amigo Hanyou agachado a mi lado, su impresionante cabellera que normalmente es plateada pero hoy era negra cayendo por el borde de mi cuerpo, sus ojos cerrados y sus labios contra los míos. Sin pensarlo mucho cerré de nuevo mis ojos y apreté sus labios de vuelta, pronto él comenzó un suave movimiento que hacía mucho más excitante el suave roce que mantenían nuestros labios… ¡No puedo creer esto… acabo de perder la virginidad de mis labios, y con Inuyasha… no puedo creerlo!

-I…un…yasha…susurre suavemente cuando nuestros labios se separaron, el abrió suavemente sus ojos dejando ver una mirada primero confundida, luego sus ojos dorados se suavizaron mostrándose dulces y enamorados, pero por ultimo cambiaron seguían demostrando un intenso amor, pero había algo más… ¿Qué es?... ¡Lujuria!... entonces recordé mi condición, estoy en ropa interior… sentí como me sonrojaba mientras mis manos se movían para cubrir mi cuerpo pero él tomo delicadamente una de mis manos y la detuvo, acerco su cabeza a la mía y me volvió a besar, primero tiernamente pero poco a poco se volvió más insistente, su boca apretaba la mía rozando sus labios con los míos, su mano soltó la mía, y se dirigió a mi espalda, y me apretó más a él. Sentía su cuerpo pegado al mío sus marcados músculos contra mis senos, una de sus manos me mantenía pegada mientras la otra rozaba suavemente mi cabello. No soporte más la lluvia de sensaciones que me estaba produciendo y me entregue, subí las manos y las coloque alrededor de su cuello, uno de mis dedos jugaba suavemente con su cabello.

Su boca aumento la presión en mis labios dejándome confundida, me puse rígida… ¿Qué quiere que haga?... hasta que decidí dejarme llevar, suavice mi cuerpo y abrí más mi boca, Senti su lengua pasar por mis labios y jugar con ellos antes de adentrarse entre ellos, dentro exploro cada rincón, jugo dentro de mi boca, incluso busco mi lengua y se entrelazo en ella, hasta que volvió a su boca y el se separo de mí.

Aparto sus brazos de mi cuerpo, alejándose suavemente, sentí el frío recorrer por donde antes había estado su cuerpo… ¡No quiero que se aleje! Quiero que este conmigo para siempre… pareciera que él había leído mis pensamientos o quizás él lo deseaba también porque sus brazos volvieron a rodearme y su cabeza volvió a acercarme a mi, poso un suave beso en mi barbilla y ajo un poco más para hundirse en el hueco de mi cuello. Senti sus labios besar mi cuello suavemente, empecé a perderme en las sensaciones cuando mi mente reacciono, haciéndome entrar en razón y darme cuenta de lo que estaba haciendo.

-Inuyasha… por favor detente… susurre luchando contra el placer

-¿Estas segura? Me pregunto suavemente con una voz picara, en mi cuello sentí sus labios abrirse y su lengua corriendo por mi piel. Cada movimiento de su lengua opacaba mis pensamientos, y golpeaba mi fuerza de voluntad, pero no lo iba a dejar ganar tan fácil.

-Inu…yasha… detente… por favor… detente… dije susurrando con la respiración cada vez más acelerada.

-¿Por qué? Pregunto levantando su rostro de mi cuello, pero permaneciendo lo suficientemente cerca para que su aliento pudiera producirme escalofríos, pero justo cuando pensé que iba a detener su tortura placentera sentí su labios volver a rozarme, pero esta vez con su boca más abierta me daba pequeños mordiscos mientras su lengua rozaba suavemente mi piel causando estragos en mi mente, mi voluntad comenzó a flaquear pero apareció la imagen que siempre arruinaba todo, aquello que me devolvió a la realidad, Inuyasha amaba a Kykio, era a ella a quien le pertenecía.

-Inuyasha detente, no quiero salir lastimada cuando tu te des cuenta de lo que estas haciendo, de que yo no soy Kykio, y si ya lo sabes, pues no quiero que juegues conmigo, tu la amas a ella y no a mi, y eso ya lo tengo bien claro y lo que menos quiero es salir lastimada. Susurre está vez mucho más firme, esa imagen es la que me mantenía en mi cruda realidad. Al ver que no se movía empuje su cabeza con mis manos, y el se elevo hasta quedar con sus ojos justo en frente de los míos, sentí su aliento golpear mi rostro pero me mantuve inmóvil.

-Kagome escúchame con atención, Te amo, te amo a ti y sólo a ti. Me beso suavemente varias veces, entre cada beso repetía una y otra vez "Te amo"… un calor agradable comenzó a llenar mi pecho mientras mi voluntad se hacía añicos, pase las manos por su cuello y lo bese tiernamente, el respondió suavemente hasta que abrí más mi boca y le permití el paso a su lengua, comencé a sentir la necesidad que tenía él de mi. Libero mi boca para volver a mi cuello, paso su lengua suavemente por él besándolo y rozando sus dientes. Pase mis manos por su pecho y deje caer la chaqueta roja junto con su camisa por sus costados. Pude ver ese fuerte pecho que sólo había visto para curarlo o cuando lo herían en las batallas, ahora era mio y estaba en perfectas condiciones. Inuyasha se había detenido y me observaba con sorpresa sin poder creer que lo estuviera desvistiendo.

-No me parecía justo que sólo yo estuviera desnuda. Dije sonriéndole pícaramente. Él me devolvió la sonrisa picara y coloco una mano justo sobre uno de mis senos aún por encima del sostén, parecía como si estuviera midiendo su tamaño. Sentí como mi pezón se ponía erecto y poco a poco me deleitaba con las enormes oleadas de placer que Inuyasha estaba produciendo en mí. Su otra mano se dirigió a mi espalda… ¿Qué hace?... luego soltó mi seno y dirigió la otra mano por el borde de la tela.

-Inuyasha ¿Qué haces?

-trato de quitarte esta cosa. Dijo frunciendo el seño.

Con una suave carcajada dirigí mi mano a mi espalda pero ya era muy tarde Inuyasha frustrado ya había pasado una de sus uñas por la tela, cortándola y dejándola caer al suelo. Apenas cayo la prenda dirigió una mirada que produjo que me sonrojara, a mi pecho daba la impresión de que los estaba evaluando, tanto fue su mirada que decidí subir una mano para cubrirlos, pero no lo permitió. Antes de que mi mano llegara ya tenía la suya sobre mi seno, moviéndose y jugando con él. Todos estos movimientos me estaban produciendo sensaciones que jamás había tenido, y suavemente solté un gemido. Mi pecho se elevo cuando estire mi cuerpo hacía atrás lo que le permitió una mayor cercanía con mi pecho pero al ver el bosque recordé algo, un pequeño detalle, el pequeño Shippou dormía tras esos árboles.

-Inuyasha Shippou duerme detrás de los árboles en el bosque y sabes que tiene muy buen oído si se despierta va a venir a investigar. Dije cortando completamente el momento.

Inuyasha frunció el ceño se alejo, tomo su ropa y mi sostén, para luego tomarme a mi en brazos y dirigirse a la cabaña. Me deposito en el suelo de madera antes de cerrar la puerta y pasar el pestillo. Volvió a mi sin decir palabra y volvió a donde estaba, pero esta vez no con su mano, fue su lengua la que acerco a mi seno, mientras sus manos que no me dejaban descanso, una se dirigía a otro seno para masajearlo como el anterior mientras que la otra se dirigía a mi espalda y la recorría completa. Mi respiración se volvió cada vez más agitada, y mis gemidos más frecuentes. Él levanto la cabeza a mi rostro para besarme pero mantuvo ambas manos en mis senos, y no detuvo sus masajes, su boca estaba a punto de rozar la mía cuando yo coloque mis manos en su pecho y lo empuje ligeramente. El se sentó confundido viendo como me acercaba a sus labios, mientras lo besaba lo obligaba a caer suavemente sobre el suelo hasta quedar acostada sobre él. Mis labios bajaron por su mandíbula y se dirigieron a su cuello, lo bese suavemente pero no detuve mi recorrido allí, continuo bajando haciendo una línea de besos y suaves mordiscos acompañados de movimientos con mi lengua por el centro de su pecho hasta llegar al borde del Hakama, al llegar allí escuche el gemido de Inuyasha que me motivo a continuar, tome él cinturón que sostenía esos pantalones y lo solté permitiéndoles caer hasta que quedara solo con el interior, ese interior extraño que utilizaban en esta época antigua. Mi mano se poso sobre esa saliente que se veía bajo la ropa antes de pasar mi mano por la cinta que lo sostenía y lo solté, dejando a Inuyasha completamente desnudo. Al ver el tamaño de él no me lo podía creer…. Eso no va a entrar en mí…. Pero él leyendo mi duda o talvez simplemente desesperado porque me había detenido tomo mi mano y la puso sobre su miembro. Pude sentirlo estaba duro y caliente, subí mi mano por él, y Inuyasha soltó un gemido, comencé a mover mi mano de forma rítmica sonriendo al ver su reacción, con la boca abierta soltaba gemidos, y su cuerpo completo se estremecía suavemente. Decidí llegar un poco más lejos y acerque mi lengua, subí desde su borde hasta llegar a la punta y una vez en ella me pregunte cuanto de él podría caber en mi boca por lo que lo introduje, subí y baje por él varias veces disfrutando de los gemidos que hacía que Inuyasha soltara. Luego de un rato el me empujo suavemente por los hombros y yo me retire sentándome justo enfrente de él pero el continuo empujándose quería acostarme completamente en el suelo. Una vez acostado el me beso, con su mano en mi espalda me apretó lo más que pudo contra su cuerpo y froto su miembro contra mi entre pierna. Bajo sus besos hasta mi pecho, rozo ambos senos pero permaneció en el derecho jugando con el pezón con sus dientes y chapándolo, mientras una mano traviesa llego hasta mi pantaleta y la retiro suavemente. Su mano permaneció inmóvil en ese oscuro lugar, su mano era lo único que separaba su miembro de mi vagina. Levanto su cuerpo y me observo, bajo su cabeza justo en mi entrepierna pude sentir su aliento rozándome, y su boca tocándome de vez en cuando, hasta que introdujo se lengua, la movía suavemente haciéndola entrar y salir, sentí como oleadas calientes recorrían mi cuerpo completo pero especialmente en el lugar que Inuyasha rozaba. Luego de un rato bajo una de sus manos que no había soltado mi seno y la introdujo donde antes estaba su lengua, sus dedos llegaron mucho más profundo, los introducía y sacaba suavemente mientras mi cadera se movía al compás de su mano, realizaba movimientos con ellos llevándome a alcanzar varios orgasmos.

-I…nu…ya…sha… Ven necesito que… ¡hazlo Inuyasha! Dije ya no aguanto el frenesí.

Inuyasha subió hasta mi boca y con un beso apasionado dirigió su miembro a mi interior, sentí un dolor en mi interior cuando alcanzo la barrera pero él se detuvo y espero a que mi cuerpo se pudiera acostumbrar a él antes de empujar con fuerza y romperla. Sentí un dolor que fue sustituido por una oleada de placer que dio paso a una serie de movimientos rítmicos, mientras sus manos recorrían mi cuerpo acariciando cada detalle y sus labios pasaban de mi boca a mi cuello y luego volvían a mi boca. Cuando estuvimos a punto de alcanzar el clímax sentí las manos de Inuyasha sobre mis glúteos apretándolos y soltando un gemido, seguido por el mío, sentí como se derramaba en mi interior, llegando con esto al final, lo que quedaban eran suaves oleadas que se iban deteniendo poco a poco. Justo antes de dormirnos escuche como sus labios susurraban en mi oído.

-Kagome te amo.

Continuara...

Otaku-sig: quería agradecerte por tu reviews, gracias por la corrección se me pasó el detalle del humano pero ya lo arregle. También quería decirte que le puso pocos detalles al lemon debido a que hay personas que le asquean y trate de hacerlo lo más todo público posible, además de que no es un one-shot por lo que la historia no gira alrededor del lemon. Y quería decirte también que si voy a explicar más adelante lo de Kykio por eso lo nombre… espero que sigas leyendo y me sigas comentando con tanta sinceridad ya que eso me ayuda a estar más atenta a lo que escribo.

Super Magical Mushrooms: quería agradecerte por tu reviews y si mi mayor problema es la ortografía pero te prometo que voy a hacer lo posible por mejorarla, espero que sigas leyendo el fic y me comentes en otro capitulo.

InuKillua Inuzuka: hola, quería agradecerte por tu review realmente gracias por las correcciones, y alas arregle, si todo lo demás lo explico en el próximo capitulo espero que sigas leyendo y que me comente en otra ocasión.