Disclaimer: Solo Sandrita Stossi y Angelina Katie son mías, el resto (Hogwarts, Pince y James Sirius, principalmente en este fic) es de Jotaká.
De la vez que Sandra se le declaró a James
James se dirigía a paso ligero hacia la Biblioteca. Iba sonriendo pícaramente, ya que estaba seguro (o casi) de que Sandra le había llamado para contarle la nueva trastada que había planeado. James dobló la esquina y entró en la biblioteca. Un olor a libros lo sobresaltó al entrar.
—Vaya...—susurró. Hacía mucho que no olía un libro.
James paseó los ojos por las mesas de la Biblioteca, hasta hallar a la persona a la que buscaba. Sandra tenía sus cabellos marrones recogidos en un moño apretado y sus ojos entre marrón y gris se dirigían a un libro. El chico de cabello negro se acercó y la asustó por detrás.
—¡Ah!—casi chilló Sandra. Madame Pince chitó y Sandra miró con el ceño fruncido a James, que dibujaba una sonrisa de burla en su rostro—Idiota...—susurró, enfadada.
James tomó asiento a su lado.
—¿Un año con el Yeti? ¿En serio?—cuestionó con burla James, leyendo la portada del libro que tenía su amiga.
—Solo lo ojeaba—se defendió ella.
Irma Pince chitó de nuevo. Ambos chicos asintieron, cansados.
—¿Por qué querías verme?—le preguntó James, casi en un susurro, a pesar de que estaba bastante seguro de la respuesta.
Sandra se sonrojó y abrió y cerró la boca varias veces, como si fuese a decir algo, pero sin encontrar las palabras adecuadas para hacerlo.
—¿Qué es, que clase de broma?—presionó el chico, deseoso de hacer alguna trastada.
Entonces, Sandra se decidió. Cogió la cara de James con ambas manos y le besó. James al principio se quedó atónito, pero poco a poco fue cerrando los ojos y dejándose llevar por la situación. El beso fue largo, húmedo y a la vez tierno y lleno de amor. La has traicionado
Pero ninguno de los dos se percató de que Angelina Katie Jordan, la novia de James, había llegado a la Biblioteca en busca de información para su trabajo de Pociones y se había encontrado con la escena.
—¿James? ¡Sandra! ¿Cómo has...?¡Te odio!—gritó Angie al borde de las lágrimas, mientras dejaba caer por la impresión varios libros sobre recetas de Pociones.
Sandra se separó enseguida de James. De repente, una culpa la invadió. Estaba enamorada de Jame desde hace tiempo, pero él estaba con Angelina, su mejor amiga... y ella no se había atrevido a decirle a Jame sus sentimientos hasta ahora, pero había traicionado a su amiga... su mejor amiga. La has traicionado
—¡No, Angie! ¡No es lo que...!—empezó a decir, pero no supo continuar. La has traicionado...
—¡Expulsados los tres de mi Biblioteca!—acabó por chillar Irma Pince.
