Bueno, este es un drabble que escribí porque hacía mucho que no escribía nada y la verdad, me sentí un tanto triste al releerlo, pero no importa, espero y les guste y logren disfrutarlo, porque ese es mi único objetivo.
Nunca acabara.
Después de pensar demasiado, de indagar en emociones, coordinar pensamientos, de mantenerse en un estado neutral, por fin se dio cuenta y al hacerlo, se burlo se sí mismo.
Onodera se burlo de su situación, de todo lo que pasaba y lo que paso; cayó en cuenta después de años, abrió los ojos después de tanto y vaya que el dolor era una sensación agridulce.
El amor era insensato, el amor era un ingrato. Era algo tan raro que no tenia explicaciones y él lo sabía, al menos ahora, ya lo sabía.
Había declarado sus sentimientos por tiempo guardados al único ser que le había hecho sentir especial, al único al que se sentía capaz de amar, a Takano. Pero de nada le sirvió, ahora era Takano el que no sabía si realmente le amaba; se sintió herido, humillado. No era culpa de Takano pero tampoco es como si él fuese el irremediable culpable, porque aunque no se creyera, Onodera de nada tenía culpa. Que se tardo demasiado, la inseguridad era un obstáculo; que si tuvo oportunidades, la confusión le derroto; no era culpable, pero tampoco una víctima.
Ahora lo entendía todo, porque el amor no tiene sentido y lo que él sentía, tampoco. Entonces era un vano sentirlo.
Miro con detenimiento el boleto de avión para después entregarlo para abordar y soltó una última risa.
Si esto nunca va a acabar, da igual regresar.
Como un circulo vicioso, Onodera volvía a huir, tal vez para no regresar. Tal vez... para de una vez olvidar.
¿Les gusto? Espero que sí, bueno, eso es todo por el momento, espero escribir mas ya que estoy de vacaciones pero, ¿quién sabe? Saben que todos los comentarios, sugerencias o criticas son bien recibidos, no se contengan. Con cariño, Wonder, Bye Bye~... ¿reviews?
