CUENTO DE NAVIDAD
Por Kary-chan
Capitulo 1: MAGIA!
Para entenderle un poco más a esta historia es mejor que lean antes "¿somos papás?"
El sonido rítmico del reloj del péndulo es lo que llenaba solamente el ambiente de ese cuarto, la mujer menuda y con aspecto severo que lo acentuaba los lentes de montura gruesa los miraba mientras tenían ambas manos entrelazadas, indicándoles con este gesto que sin duda los analizaba.
-Señores.- habló la mujer. –no es la primera vez que son llamados a esta oficina... si no me equivoco... ya van seis veces que me honran con su presencia.-
El joven de cabello castaño, que le caía sobre la frente tapando un poco sus ojos azules miró a la mujer, como diciéndole que primero dijera todo lo que tenia que decir y luego él hablaría.
-y me temo.. que la conducta de Seiki ya se esta convirtiendo en un problema...- termino de hablar la mujer.
-Me podría decir... ¿qué hizo ahora?- pregunto un chico de ojos violetas y una larga coleta que caía sobre su hombro derecho hacia delante, ya estaba un tanto resignado a escuchar lo peor.
-Golpeo a otro de sus compañeros...-
-¿Les dijo por que?..- pregunto de nueva cuenta Heero. Dudaba que Seiki hubiera hecho eso no mas por que si.
-No señor Yuy, el solo dijo que tenia una buena razón para hacerlo, pero que no la diría...- la mujer lo decía con un tono falsamente paciente. –y creo que su comportamiento se basa sobre todo a su crianza...-
Duo solo suspiro ahí iba de nuevo la misma cantaleta que siempre les daba la mujer, si ya hasta casi se la sabia de memoria "no dudo que Seiki sea un niño muy inteligente para su edad... pero creo que le ha hecho falta crecer en un ambiente familiar mas estable para un niño..."
Y como siempre Heero se levantaría enojado de la silla, y en eso justamente estaba pensando cuando Heero se levanto – hablaremos del asunto con Seiki... además, que tenga una familia distinta no lo hace diferente a los demás niños de su edad, le aseguro recibe la misma educación, y cuidados...-
-Entonces ¿me va a decir que cualquier niño de su edad sabe los métodos de artes marciales para desmayar a sus compañeros nñ?- pregunto la directora acomodándose de nuevo los lentes.
Duo abrió los ojos con sorpresa, eso sí que no se lo esperaba... ¿cuándo demonios le había enseñado eso Heero a SU niño?... lo miro casi fulminándolo.. ya verían los dos cuando llegaran a casa...
-también hablare con el sobre eso en casa.. con su permiso...- dijo Heero abriendo la puerta de la dirección, Duo miro a la directora con una sonrisa de pena.
-perdone, le juro que esto no volverá a pasar-
-dijo eso mismo las otras cinco veces que estuvieron aquí señor Maxwell...- contesto la mujer con no mucha paciencia.
El chico se sonrojo hasta las orejas –esta vez en verdad...- pero la directora lo interrumpió.
-otras cuatro citaciones y lo tendremos que expulsar... lo siento son las reglas...- Duo asintió con la cabeza y también salió de la dirección donde vio como Seiki salía del salón viendo con alegría a Heero que lo esperaba a medio pasillo y el pequeño corría hacia los brazos de él.
El pequeño Seiki llevaba su fino cabello castaño claro hasta la altura del mentón, su pequeño pantalón de mezclilla combinaba con sus zapatos tenis y su chamarra también de mezclilla y su sudadera roja, en verdad parecía una versión pequeña de Duo y Heero, muchos se asombraban de que no fuera hijo biológico de ninguno de los dos pues su parecido era mas que asombroso.
-papá Heero!- rió contento el niño cuando Heero lo abrazo y lo cargo. –hola papá Duo- saludo también el pequeño con una sonrisa, sus mejillas estaban algo rojas debido al frió que se sentía en el ambiente pues estaban a principios de invierno.
-Ay Seiki... – suspiro Duo mientras le acariciaba la cabecita –de nuevo te portaste mal...- le dijo mientras los tres caminaban hacia el coche.
-aah.. yo no me porte mal!- dijo de inmediato el pequeño –Allan se merecía el golpe en la nariz que le di...-
-¿y por que se lo merecía?- pregunto Duo con voz calma, no debía regañar (aun) a Seiki sin saber si realmente se merecía o no el regaño.
Pero el niño apretó fuerte sus labios indicando que no le diría nada. Heero no decía ni una palabra, en parte por que sabia que Duo no estaba muy contento que digamos con esa información dada por la directora... es que.. el como demonios iba a saber que Seiki iba a usar lo que le había enseñado de artes marciales contra sus compañeros?...
-Seiki.. si te portas mal... Santa Claus no vendrá a traerte regalos en esta Navidad- le advirtió Duo mientras el motor del auto se calentaba para empezar la marcha.
-No importa... de todas formas Santa Claus no existe..- contesto el pequeño mirándolo con esos ojos grises que aun les gustaba adoptar diferentes tonos de azul o violeta conforme la luz que les daba.
-¿ah si?...¿ y quien te dijo que no existía?...- contesto Duo con una sonrisa totalmente falsa...
-Pues papá Heero.- contestó de nuevo el niño como si la respuesta fuera mas que evidente, y de hecho lo era pues Duo ya se la había sospechado incluso antes de que le preguntara al pequeño.
A Heero le apareció una gotita en la cabeza, pero no quito su mirada del camino por el que ahora conducía, aunque si podía sentir la mirada penetrante de su querido koi...
-¿Ah si, Heero? nñ...-
Mas Seiki no le dio oportunidad a Heero de contestar –si, y es cierto papá Duo!..., papá Heero me dio razones muy validas, por que un hombre no puede recorrer la tierra en tan solo una noche... aun si usara un mobile suit se tardaría demasiado... además... esa leyenda es incluso antes de la época de las colonias!.. dudo mucho que un hombre pueda vivir tanto... y si lo hace estaría demasiado viejo como para moverse...- el pequeño tenia muy buena memoria, pues estaba recitando todo y tal cual se lo había dicho Heero...
-Pero Santa tiene poderes mágicos...-
-La magia no existe... los que dicen ser magos hacen puros trucos... como el de la moneda! Eso me lo dijo tío Trowa!-
"Creo que no debo de dejar a solas a mi hijo y a ese par... le dan ideas raras!" Se quejaba Duo mentalmente.
-¿Ah si?... la gente antigua creía que solo con magia viajaríamos al espacio.. pero ahora viajamos y hasta podemos vivir ahí ¿no?-
-Pero eso es tecnología, no magia, papá Duo- se rió Seiki mientras agarraba una figura de acción que había tirada en el suelo del coche y comenzaba a jugar con ella. Duo suspiro por enésima vez en ese rato, pese a que Seiki solo tenia cinco años a veces realmente actuaba y razonaba como un adulto... pero se tranquilizaba cuando lo veía jugar así.. como un niño pequeño, que es lo que era...
-Solo te digo Seiki.. no mas peleas... si no te sacaran de esa escuela...-
-Aaaah pero la Miss Verónica dijo que yo era muy listo! Me felicito cuando le demostré que ya sabia restar y sumar..- sonrió de oreja a oreja.
-Bueno, si ya sabes restar y sumar, debes saber que pegarle a tus compañeros le resta puntos a tu disciplina... ¿te portaras bien?- pregunto Duo adoptando un semblante serio.
-Sí, papá Duo...-
-¿Ya no le pegaras a tus compañeros?...-
-Ah... ¿aunque me digan cosas feas?...- pregunto el niño viéndolo con carita de perrito regañado.
-¿Cosas feas?...-
-Me dijeron que mis papás eran raros.. esas son cosas feas! Ustedes no son raros... cuando le dije que no anduviera diciendo mentiras de mis papás dijo que no eran mentiras... y entonces...- se quedo callado un segundo... –le pegue para que se callara la boca...- anuncio como si en verdad hubiera hecho un gran logro.
Duo lo miro enternecido... y lamentablemente entristecido.. es que exactamente por 'defenderlos' es que se había peleado las otras cinco veces... y por eso la directora estaba empeñada que el tener dos papás era la fuente del problema...
-ya te dijimos que no hagas caso a esos niños Seiki..- hablo al fin Heero.
-pero.. no me gustan que digan cosas feas de ustedes..- contesto el niño bajado la cabecita y apretando con sus manitas al muñeco con el que antes jugaba.
-es mejor que los regañe la maestra a que te terminen regañando a ti ¿no crees?.- Heero miraba a Seiki por el retrovisor, el niño asintió con sus ojitos medios llorosos.
-perdón por portarme mal, papitos...- Duo estiro un poco el brazo para acaríciale la cabeza y reconfortarlo.
-Solo... no te vuelvas a pelear en la escuela, ¿vale?...-
-Si..- asintió de nuevo Seiki sonriendo.
Duo creyó suficiente esa platica con el niño, por lo que hasta ahí llegaría el 'regaño' de Seiki, aunque... miro de reojo a Heero, aun tenia a otro 'niño' a quien regañar...
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En cuanto entraron a la casa se notaba que Duo se había esforzado en decorarla con el ambiente navideño a todo lo que daba, desde la puerta que estaba decorada con una corona de adviento, la escalera también estaba adornada con pequeñas botas navideñas y unos cuantos caramelos de bastón, lo único que faltaba de poner era el adorno principal de esas fechas, el árbol.
A Duo esa era una fecha que le gustaba realmente, y el tener un niño en casa le hacia considerar que este espíritu se debería de ver aun más.
Seiki corrió escaleras arribas para ir a jugar inmediatamente a su recamara, mientras Duo sonreía al ver la energía de Seiki, Heero se dejo caer en un sofá cercano a la chimenea de la cual también colgaban unas graciosas botas con los nombres de ellos tres, a lo que le recordó a Duo...-Seiki bajas un poco antes de la cena, iremos a comprar el árbol de navidad hoy!...-
-SIIII!- grito el niño desde su recamara.
- Y Seiki! No te vayas a ensuciar que después iremos con el tío Quatre!.-
-Sí, papá Duo!-
-Lo digo enserio Seiki, si no te meto a bañar!.-
Se escucharon los pasitos de Seiki que corrió hacia el barandal de la escalera –baño no, papá Duo, no me gusta!–-
-Ya tienes cinco años... ¿y aun sigue sin gustarte?- pregunto Duo con una gota en su cabeza mirando la cabecita de Seiki que asomaba por el barandal de la escalera y lo miraba con ojitos suplicantes.
-baño noooo!-
-no te ensucies entonces...-
-Bien...- dijo resignado el pequeño y dispuesto a jugar sin ensuciarse!...
Al escuchar que de nuevo Seiki se metía a su recamara y cerraba la puerta dio la media vuelta para ir a la sala donde encontró a Heero escudado tras el periódico de ese día.
-Heeeerooooooo- escucho Heero que su koi lo llamaba con voz fría... este no bajo el periódico...
–dime...- contesto mientras una gotita aparecía en su nuca.
-Dime que demonios es eso de que le robas las ilusiones a mi niño?- grito tomando por arriba el papel periódico mientras lo partía en dos para mirar a la cara a Duo.
-El me pregunto si ese viejo gordo existía! Y tu me has dicho que nunca le mienta!- contestó para defenderse Heero mientras esa pequeña gotita en su cabeza crecía y crecía.
-TIENE CINCO AÑOS! A esa edad hay una respuesta para todo: MAGIA!- algo que no se le había quitado a Duo en cinco años era actuar como madre histérica cada vez que se trataba algo relacionado con el bienestar de Seiki.
-Oh bueno... cuando me pregunte si existe el hada de dientes le digo que si!- y esa manera de actuar de Duo era algo que no le terminaba de gustar a Heero... era mas impredecible que una mujer en su periodo!... era como tener a una embarazada eterna a su lado!... oh bueno... no era para tanto.. pero cuando se ponía así era lo que pensaba...
-Ah no, Heerito bonito... no creas que te libraras tan fácil de esta...- contestó Duo sonriendo de manera un tanto... maléfica... –Seiki volverá a creer en Papá Noel... créeme que lo hará querido mío..-dijo acercando su rostro al de él sin soltarle la mirada.
Heero solo atinó a pasar saliva... odiaba cuando Duo lo veía de esa manera... por que intuía que no pasaría nada bueno.. o mas bien dicho, que no le pasaría a él nada bueno...
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-En verdad Duo... no creo que Seiki se trague ese cuento...- le dijo Quatre quien mantenía una de sus manos en su barbilla mirando al frente.
-Lo sé... pero tenia que ser él... tu y yo seriamos demasiado evidentes por el color de ojos... Trowa por su estatura... mi Heero es el mas común de los cuatro...- contestó Duo quien imitaba a Quatre en la pose, pero además asentía con la cabeza mientras mantenía los ojos cerrados.
A Heero quien ahora tenia un gorrito de navidad color rojo ladeado, un traje de papá Noel y una barba le apareció una venita en la frente –a quien le dices común?- se jalo la barba para quitársela de la cara con enojo, solo que no contó con que esta tenia resorte incluido y se le regreso para darle un bonito y doloroso golpe justo en la nariz...
-no dije eso, amor...- contesto Duo sonriendo con una gotita en la nuca.
-Y Wufei?- preguntó Trowa quien también tenia una gotita en la frente, de alguna forma debía ayudar a su compadre!...
Duo negó con la cabeza –dijo que ni loco viajaría desde donde estaba hasta aquí solo para vestirse de Santa... que le enseñará a Seiki a madurar de una buena vez...- ahora la venita en la frente la tenia él. -¿qué ustedes tercia de cabezones no saben lo que es mantenerles las ilusiones a un niño?- pregunto enojado a Heero y a Trowa... claro que en la preguntaba había incluido a cierto amigo chino suyo.
Heero lo miró con reproche mientras se seguía sobando la nariz, ya se había quitado el traje por completo y lo había dejado guardado en una bolsa –ya te dije que yo solo le quise contestar con la verdad...-
-Eso ya no importa.. la cosa es que Seiki verá a Santa Claus en noche buena y volverá a creer en el...- sentencio Duo.
-Pero...- iba a refutarle Heero cuando el grito de una niña lo callo, pronto una pequeña de pelo largo sujetado en una coleta entro al a habitación yendo a abrazarse a los pies de Quatre.
-papi! Seiki malo quiere que toque una lombriz!- la niña escondía la cara en las piernas de Quatre.
-ya ya Nat... solo son insectos...-
-Ella odia los insectos..- le dijo Trowa con un tono que no reflejaba que emoción estaba sintiendo, tenia los brazos cruzados y veía a la pequeña.
-Papi...- miro la pequeña con ojos centelleantes a Trowa quien de inmediato se paro, no podía resistir a la mirada de Natasha...
-ya verá ese mocoso por andar enseñándole insectos a mi...- iba a salir de la habitación pero Heero lo detuvo del cuello de la camisa.
-A donde?-
-A castigar a tu hijo por andar asustando a MI hija...- contesto Trowa volviendo a su neutro tono de voz.
-A mi hijo solo lo castigo yo...- respondió Heero con el mismo tono neutro...
Quatre y Duo solo los veían con una gotita en su frente.
-Aquí estas Nat!. Mira! Ahora la lombriz se convirtió en dos! Cómo papá Heero me enseño!- entro Seiki corriendo a enseñarle las dos lombrices que se retorcían en sus dos manos.
-KYYYYYYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!- volvió a gritar Natasha ahora escondiéndose tras Quatre.
Los cuatro adultos tenían una gran gota adornando su nuca...
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Natasha Barton Winner era solo un año menor que Seiki, aunque ella compartía genética con ambos padres (las maravillas modernas...), y era la niña consentida de su papá Trowa.
Al verla podías jurar que veías una pequeña muñequita de porcelana, sus vestidos llenos de encajes, y su cabello adornado de listones. Por lo general se llevaba bien con Seiki, excepto cuando era evidente que a él le gustaba jugar juegos de niños y a Natasha no.. era entonces cuando casi siempre Nat terminaba en los brazos de Quatre o Trowa para consolarla.. si.. estaba mimada.. pero era una buena niña, y casi siempre se llevaba bien con Seiki.
-Adiós Sei...- le dio un besito en la mejilla a Seiki antes de despedirse. –adiós tíos!- beso también a Duo y a Heero.
-Hasta mañana- se despido Duo de los tres ondeando la mano, mañana seria la cena de noche buena y se reunirían en casa de Quatre, por que el había querido cocinar, y por que además él, Trowa y Heero habían decidido que no dejarían cocinar a Duo después de que el año pasado había quemado prácticamente la mitad de la cena.
Seiki se había agarrado de las manos de sus papás que caminaban cada uno a su lado, aunque ya sabia que Santa no existía le seguía gustando la Navidad, por que papá Duo adornaba la casa, compraba galletas y golosinas y lo dejaba comer cuando las apeteciera, y además, iban siempre juntos a comprar el árbol de navidad... bueno.. el año pasado habían ido.. y estaba seguro que el antepasado también... de los otro no recordaba nada.. pero las fotos que había de él como bebé siendo cargado por papá Duo al pie del árbol le decía que si...
Además adoraba eso.. ver las fotos donde papá Duo y papá Heero sonreían mientras lo cargaban... no es que no hubiera muchas fotos de esas.. de echo.. había mas de tres álbum llenos!... pero la Navidad... le gustaba mas...
-Llevemos ese papitos!- dijo mientras soltaba las manos de Heero y Duo y corría por entre la nieve hacia el árbol que le había gustado..
-Seré un pésimo Santa, Duo..- le dijo Heero a Duo en voz baja acercándose a él sin dejar de caminar y tomando su mano.
-Oh vamos Heero.. lo harás por Seiki..- le dijo Duo con voz dulce mientras recargaba la cabeza en el hombro de Heero.
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Notas de la autora: Navidad Navidad, hoy es navidad XDDDD... ¿qué tal?.. ¿cómo les va? ¿cómo os lo trata la vida esta?...
Aquí yo escribiendo un fic para navidad (que hoy oficialmente falta un mes para esta...) como mi otro fic de navidad, este solo tendrá dos capítulos nn, no se apuren, verán la segunda parte publicado antes de Navidad...
DEJEN REVIEWS!
Matta ne!
