Nota: ¡¡Siiiiiii!! Yo soy la dueña de Naruto (H). ¿No me creen? ... Tsk! Pregúntenselo a Masashi Kishimoto, vereís como dice que digo la verdad... (la envidia es mala, demasiado. u.ú)
I NEED YOU
Capítulo I
La fresca brisa agitaba levemente sus castaños cabellos, dándole un toque divino a su impasible y serio rostro. Mientras frente a él, una tímida chica reunía todo su valor posible por decirle lo que sus labios impedían soltar. Él podía apreciar claramente su nerviosismo, ver como apretaba con fuerza la manija de su maletín era una clara señal de su situación, solo que le era totalmente indiferente.
Exasperado, estuvo a punto de darse media vuelta y marcharse, pero el débil murmullo de una voz a sus espaldas le hizo detenerse.
- Ne… ¡Neji-kun! – Gritó en un bajo chillido – me…me gustas mucho – se giró solo para ver su expresión de vergüenza con los ojos cerrados. Suspiró mientras avanzaba un par de pasos hacia ella.
- Lo siento mucho, pero no puedo corresponderte -. ¿Cuántas veces ya había dicho la misma frase? Infinidad de veces. ¿El número de aquellas situaciones en las que se había visto envuelto? Innumerables… Sin más dio media vuelta para marcharse, peor nuevamente aquella voz se lo impidió.
- ¡¿Por qué?! – Preguntó aun con la cabeza gacha – A todas les dices lo mismo. ¿Por qué no me das una oportunidad?
- Es algo que no entenderías – dijo de espaldas a ella. – Agradezco tu sinceridad. Nos vemos -. Dicho esto, desapareció con aquella brisa fresca por compañía.
-
¡¿Por qué?!
Es extraño, esa pregunta no dejaba de resonar en su cabeza. Valiente chica. Pensó. No entendía que podían ver en él. Le desagradaba enfrentarse a semejantes situaciones.
Claro.
Sonrió amargamente. ¿Tal vez sería por ser el hijo de un padre que poseía una multimillonaria empresa de telecomunicaciones?
No, en absoluto.
Siguió su camino hasta aquella mansión a la que se supone debería de considerar hogar. Miró aquella imponente edificación. Solo mirarla le bastaba para recordar su posición. Solo con observarla, le devolvía a la realidad. Con solo verla, a su mente acudían todos aquellos pensamientos de lo que tiene y tendría que hacer.
Neji Hyuuga, futuro sucesor de su padre como presidente de su compañía. Lo tenía todo.
Y vaya que si.
Casa, ropa, comodidades, los mejores estudios, la futura carrera que tendría que estudiar, la universidad en que lo haría, el trabajo que en un futuro tendría que desempeñar. Toda una vida planificada.
Todo un destino trazado.
¿Qué tenía que hacer él?
Limitarse a hacer lo que se espera de él. Seguir por aquel camino que se le ha trazado. No podía cometer errores. Ni uno solo. Al dirigirse hacia la enorme puerta de la entrada, se hacía la misma pregunta de todos los días.
¿No es todo esto demasiado para un joven de apenas dieciséis años? Cualquier otro joven en su misma situación se habría vuelto loco. Si es que no lo estuviese de antemano.
Con cansancio tocó el timbre, esperando a que el mayordomo le abriese la puerta, ya que él siendo quien es no debería hacer 'semejantes esfuerzos inútiles', según las palabras textuales de su padre.
- Bienvenido a casa joven Neji – saludó monótonamente aquel viejo hombre. Si neji tenía una expresión seria, la de él podía calificarse como de piedra. Siempre se preguntó si aquel hombre habría tenido infancia. A juzgar por su expresión pareciese que no. Una imperceptible mueca en sus labios hizo que se diese cuenta de en las tonterías en que estaba pensando. – Recuerde que dentro de una hora tiene una reunión con su padre.
- Gracias – dijo a la vez que se quitaba sus zapatos. Se dirigió hacia el comedor. Se preguntaba por qué habiendo otras habitaciones más pequeñas, tenía que comer él solo en una inmensa habitación, con una inmensa mesa de comedor, y únicamente estaba él. Bueno él y tres sirvientes que se asemejaban a tres estatuas. Acostumbrado a aquello, comió lo más rápido pero educadamente que pudo.
Al terminar se fue a su habitación, un poco de tranquilidad no le vendría nada mal. Pesadamente se dejó caer sobre su mullida cama, una de las pocas cosas que agradecía tener, aún le quedaban veinte minutos antes de hablar con su padre seguramente de lo mismo, negocios y porcentajes.
¿Es que no podía ser como todos los padres? No, él no podía, como presidente tenía deberes y obligaciones que cumplir. Debido a ello, Neji durante sus dieciséis años de existencia solo recordaba haber visto a su padre en contadas ocasiones. Pero todas claro, eran solo para hablar de su futuro y las expectativas que tendría para él.
¿Su madre?
Fallecida, cuando él apenas contaba con menos de un año. Después de eso lo único que recuerda era la guardería a la que le llevaban. Solo recuerda vagamente el rostro de sus diferentes cuidadoras que tuvo. ¿Cariño? No sabría decir que era aquello exactamente.
Claro si puede considerarse cariño, a regalos costosos que le obsequiaban.
Definitivamente hoy estaba algo tonto.
Sus ojos puestos sobre un reloj de pared, vieron como una larga y fina manecilla se posaba sobre el 3.
-
Tocó levemente la puerta de roble. Un bajo 'pasa' obtuvo por contestación.
- Buenas tardes, padre – saludó formalmente inclinando la cabeza. Para luego encaminarse hasta la silla que se hallaba frente a él.
- Buenas tardes Neji – le respondió aquel hombre, que poseía el mismo cabello y los mismos ojos blanquecinos que su hijo. - ¿Qué tal las clases?
Le costó aparentar la sorpresa que le produjo aquella extraña pregunta.
- Todo bien, no hay de qué preocuparse – su padre asintió y se puso en pie para aproximarse a la ventana que tenía tras él.
- Como bien sabes Neji, como heredero de la compañía Tsukiya tienes ciertas normas y obligaciones que cumplir – ya había perdido la cuenta de las veces que había oído aquella frase. – Y entre estas obligaciones está por supuesto el de mantener asegurado el futuro de la compañía – esto si que era novedoso. El silencio que obtuvo por respuesta hizo que el hombre siguiera hablando - ¿Sabes lo que eso significa? – Apartó la vista de la ventana para posarla sobre su hijo, quien enarcó una ceja.
- Si no concretas, no sabré a que te refieres, padre. – No sabía por qué pero esto no iba ir a nada bueno.
- Es decir, que tienes que asegurar un heredero, para cuando te toque desertar del puesto que pronto ocuparás. - ¿Tenía dieciséis años, cierto? – Ya sabes, a lo que me refiero.
- ¿Un compromiso? – No por nada, era conocido como el genio Hyuuga. – ¿Me estás diciendo que debo de tener un compromiso, padre? – este era uno de los tantos momentos en que agradecía tener aquella expresión de pocker.
- Exactamente. – Respondió sin miramientos. Conociendo a su padre, de seguro… - y esta reunión es precisamente para presentarte a tu futura…esposa o tu prometida como quieras llamarla. – Sin más pulsó un botón en su escritorio para dar una serie de instrucciones.
Por otro lado Neji estaba un tanto aturdido. Bueno, no es que la idea no se le hubiese pasado por la cabeza; es más, estaba casi seguro de que esto ocurriría tarde o temprano.
Pero no demasiado pronto.
- Neji quiero que conozcas a… - al decir estas palabras la puerta se abrió para dejar paso a una esbelta figura que caminaba con pasos decididos y quedar de pie frente al señor Hiashi Hyuuga.
- Encantada, soy Haruno Sakura… - saludó cortésmente la joven a la vez que inclinaba la cabeza.
Neji aún estaba cuestionándose de si lo que acababa de oír y ver no eran parte de su tontera provocado por un mal sueño, quisá si se peñizcara el hombro...
Continuará...
Siii... ¡Lo he terminado! . ¡Lo he terminado! (bailando la macarena XD).
Esto, ejem... bueno. ¡Hola a los que estén leyendo esto! n.n como veis este es mi primer fic de Naruto, y como no podía ser si no de mi queridísimo, guapísimo, divino, atractivo...etc, etc, etc (L) Neji (L).
Bueno, la chica del principio, toménlo como un personaje de relleno xD (¿dije relleno? X$). Bueno como os habéis dado cuenta es un universo alterno, aun no me siento preparada para escribir una historia para seguir la trama, ideas no faltan pero...en fin.
¿A que escritora no le gustaría saber de lo que piensan sobre su primer fic?
¡A mi por supuesto que sí! Asi que, espero poder saber vuestras opiniones para saber si continuar con el fic o no. Gracuas una vez más por leer este intento de fic.
Yume no Koneko
