hola este es el primer capitulo de la historia espero les guste! :)

El principio de una nueva vida…

Es una linda noche, de las pocas que hay en la ciudad, el cielo esta estrellado, la luna tan hermosa y alumbrante y un refrescante soplido da el viento.

Hoy es mi último día de soltera, se que debería de estar feliz pero no lo estoy, no conozco a mi futuro esposo, no sé si es atento, amable o cariñoso. El aspecto físico nunca me ha importado, ya que siempre he pensado que es lo que sale sobrando, porque de ¿Qué sirve tener un buen físico? Si no tienes sentimientos, si no te importa lastimar a las personas que están a tu alrededor, pero en fin no tengo otra opción o ¿sí?...

-¡Bella! llego el mejor regalo de todos- dijo mi hermana entrando a mi habitación

-¿Quién lo manda?- dije tomando el sobre amarillo que tenía mi hermana en sus manos

-es de parte del Señor Cullen, el abuelo de Edward-

- así que mi esposo tiene un apellido de novela-

-si eso creo, Bella ¿aun sigues llorando?-

-no es fácil saber que de un día a otro estarás casada con un desconocido, no sé como es, no se sus sentimientos, apenas se cómo se apellida, solo sé que se llama Edward-

-y también sabes que es muy rico-

-lo sé, pero no lo quiero, tú sabes que amo con todo mí ser a Jacob-

-Jacob, Jacob ya olvídate de él, déjalo en el pasado y vive tu presente, dicen que Edward no es nada feo, o prefieres que mi madre pise la cárcel, esfuérzate un poco y aprovecha la oportunidad que te da la vida y no seas egoísta- dijo saliendo de la habitación.

Me senté en una orilla de la cama y abrí el sobre…

"Sé que serás una gran mujer para Edward" leí la pequeña nota que venía dentro, saque dos boletos de avión el cual su destino era Paris, uno con su nombre y uno con el mío, una gran luna de miel pensé. Pronto baje de mi habitación y me senté a un lado de mi madre, y me quede mirando aquel cuadro tan inmenso y tan llamativo que ocupaba casi toda la pared, siempre me había parecido un gran gasto inútil, pero como a mi mamá se le antojo a mi padre no le quedo otra opción que cumplirle su capricho, ahora no se creo que es bueno ya que es como recordar cómo era la familia antes, mi padre tan elegante con sus perfectas posturas, mi madre tan linda, tan perfecta, con esos vestidos y joyas tan caras, con su cabello lacio color chocolate y esos ojos tan perfectos, mi hermana tan hermosa con su cabello lacio al igual que mi madre pero su tono era de oro, siempre lo tenía tan cuidado sin que ninguno estuviera fuera de lugar, su facciones tan perfectas y sus ojos azules como el cielo y yo, a veces creía que era adoptada mi piel era un blanco como la nieve , mis ojos chocolates ,al igual que el revelde de mi cabello, nada que ver con mi familia pero mi carácter era igual a mi padre , y mi hermana se parecía a mi madre de todo a todo, por que las dos son tan ambiciosas hasta no más poder, pero aun así son lo único que me quedaba, desde que mi padre murió los problemas económicos crecieron hasta llevarme a esto casarme por interés, si mi padre estuviera aquí el me hubiera dejado seguir con Jacob porque a él no le interesaban las clases sociales, después de cenar no dije nada me pare y me refugié en mi cuarto y llore hasta que me quede dormida…

Me desperté gracias a los gritos de mi mamá, que entro a mi habitación con todo para la boda, y así paso todo el día y parte de la tarde, hasta que me dijo -¡Listo!, te ves hermosa- y salió de la habitación, me acerque a mi grande espejo, no esta tan mal dije, el vestido era hermoso pero yo no quiero esto, me fije la hora que era 4:27pm aún tengo tiempo de correr, escaparme con él, con el amor de mi vida con Jacob, el me dijo que me esperaría hasta las 5:30pm en la cafetería de siempre para huir para vivir nuestro amor, pero qué diablos estaba pensando, si me iba mi madre iría a la cárcel por las deudas que dejo mi padre, las lagrimas aún rodaban por mi rostro así que las limpie con cuidado para que no se me corriera el maquillaje, baje y me estaba esperando una elegante limosina, mi madre y mi hermana -¡toma!- dijo mi hermana dándome el un hermoso ramo con rosas blancas y tres rosas rojas en el centro, sujetado por un elegante moño – gracias – lo tome y me subí a la limosina sabia que desde que diera el sí mi vida cambiaria y no sabía si era para bien o para mal…

En la iglesia todo estaba perfectamente arreglado y los invitados dentro de ella, mi madre fue la quién me entrego, en el altar pude ver al padre y a mi marido, cada vez que me fui acercando a él note que no era feo al contrario podría afirmar que era uno de los hombres más hermosos del mundo, alto muy alto, su tez blanca como la nieve, sus hermosos ojos verdes, su cabello castaño un poco desordenado pero eso lo hacía verse bien, y su perfecta postura con ese smoking negro, sonrió al verme supongo que él tampoco me conocía o ¿sí? -¡cuídala!- dijo mi madre al entregarme –con toda mi vida- contesto para después tomarme -¡comencemos la misa hermanos!- dijo el padre para proseguir con la ceremonia, por un momento mi imaginación vago y creí encontrarme a lado de Jacob, todo sería tan diferente, derramaría lagrimas de alegría y no de tristeza como ahora, notaba que Edward volteaba a verme más demasiado, pronto llegamos al gran momento de dar el sí, yo dude por unos segundos pero dije un rotundo ¡sí! Al igual que él y proseguimos al tradicional Puede besar a la novia, el se acerco y se inclino hacia mí y junto sus labios con los míos y yo no hice más que seguirlo su beso era cálido pero excitante a la vez y al final termino con un pequeño beso, los dos sonreímos y todos aplaudieron, caminamos hacia la entrada y podría jurar que vi a Jacob, pero que podría hacer, ya no podía hacer nada. Media hora más tarde procedimos a la ceremonia civil en la cual mi mente vagaba y firme sin importarme nada y volvimos al beso…

La fiesta fue linda todo era elegante, y todos se divirtieron incluyendo a mi mamá y mi hermana pero yo, yo estaba ida pensando en Jacon, en la cena Edward me miraba pero ninguno se atrevía a sacar platica, y así paso toda la noche bailábamos nos besábamos pero seguía siendo un completo desconocido para mí al igual que yo para él. –Es hora de irnos- dijo besando mi frente, y llevándome a donde estaba su abuelo y su madre, que por lo que note era su única familia, nos despedimos de ellos y de mi familia y de algunos invitados. Un carro negro nos estaba esperando fuera de aquel salón, llegamos antes al hotel donde se hospedaba Pedro y me dijo que me cambiara, por un momento me asuste por lo que pensé, pero me aclaro que nuestro vuelo saldría a las 12:30 pm y teníamos el tiempo ensima, le comente que no tenía nada listo y no me hiso caso solo me apunto a la habitación y ahí se encontraba un vestido rojo que me llegaba un poco arriba de la rodilla, me deje las mismas zapatillas de la boda ya que no encontré algunas otras, cuando salió de mi habitación se encontraba bebiendo y se fue acercando poco a poco hacía mí, -¡Te vez hermosa!- me susurro al oído, el vuelo fue en primera clase pero ninguno dirigió alguna palabra solo cuando me recomendó que durmiera un poco por que la diferencia era de 7 horas, cuando cheque la hora de mi celular marcaban las 4:30am lo que significaba que llevábamos 4 horas de 11 que eran, y vi 1 mensaje de Jacob el cuál decía "te deseó lo mejor hoy y siempre, y aunque esto el destino lo decidió, te amare por todo mi vida", mis lagrimas botaron de nuevo y lo que hice fue borrar todos sus mensajes, sus llamadas, nuestras fotos, todo lo que me lo recordaba por que ahora era "El principio de una nueva vida"…