NI OUAT NI SUS PERSONAJES ME PERTENECEN, ESTA HISTORIA ES MIA Y LA PUBLICO SIN ALGUN FIN DE LUCRO.

Era un día común y corriente en Storybrook, desde hace un año habían destruido la maldición de Ingrid y desde ese entonces los problemas en el pequeño pueblo estaban extintos.

Emma seguía siendo la sheriff y Snow después de varias pláticas con su familia y con los ciudadanos decidió regresarle el puesto de Alcalde a Regina. No había nuevas aventuras, ni nuevos villanos, la vida empezaba a ser demasiado tranquila, incluso resultaba ser un poco aburrida sobre todo para la salvadora.

-De acuerdo Leroy- Dijo Emma mientras habría la celda que estaba en la estación- Que sea la última vez que manejas ebrios ¿Quedo claro?

El enano solo gruño y después de regalarle una sonrisa sarcástica a la rubia salió de la comisaría.

Y de eso se trataba la nueva vida de Emma Swan, capturaba ebrios, detenía jóvenes rebeldes, hacía papeleo y el resto del día la pasaba con sus encantadores padres, su berrinchudo hermano y su hijo adolescente.

-Hola Ma- Dijo Henry con su voz más grave- Te traje el desayuno.

-Pensé que estarías con Regina hasta tarde chico- Contesto Emma revisando la bolsa y vaciando su contenido- No sueles desperdiciar un minuto de los días que te tocan con ella.

El chico sonrió como si lo hubieran descubierto y después de sacar un periódico se sentó frente al escritorio de su madre biológica.

-Estaba pensando que podríamos aprovechar este rato para buscar un piso nuevo… solo para nosotros dos- Comento el muchacho.

-¿No te sientes cómodo con los abuelos?- Pregunto Emma con la boca llena de Sándwich.

-Claro que me siento cómodo… pero me sentiría más cómodo si solo vivimos tú y yo solos, como en Nueva York- Dijo Henry con su mejor sonrisa.

La rubia asintió y siguió desayunando mientras su hijo le mencionaba las opciones de departamentos nuevos.

-Ese me agrada- Soltó Emma cuando Henry termino de leer un anuncio- Suena bien aunque un poco caro.

El chico tomo el teléfono que estaba sobre el escritorio y marco el número que estaba anunciado, sonó un par de veces y al otro lado de la línea contesto una voz demasiado familiar.

-¿Abuelo Gold, eres tú?

-Hola Henry, ¿necesitas algo?- Pregunto Rumple

-No lo entiendo, marque el numero de un departamento no el tuyo- Soltó el muchacho con notable confusión- En serio lo siento, volveré a intentarlo.

Gold sonrió en el teléfono, no podía evitar comparar la voz de su nieto con la de su difunto hijo y antes de que Henry colgara se apresuró a hablar.

-Ese departamento es mío ¿Te interesa verlo?

-Claro, mamá y yo iremos a verlo justo ahorita.

-Ahí los veo Henry- Dijo Gold y colgó.

Emma y Henry se pusieron sus abrigos y se subieron en el coche patrulla, la rubia encendió el auto y arranco hasta la dirección publicada, el viaje fue demasiado corto y llegaron apenas pasados diez minutos.

-¡Hey abuelo!- Grito Henry mientras bajaba del auto.

-Gold ¿Por qué no me sorprende que esto te pertenezca?- Agrego Emma uniéndose a los dos hombres.

Rumple sonrió sin comentar nada y con un gesto de mano los invito a pasar al edificio, entraron al elevador y subieron hasta el último piso.

Revisaron cada rincón del inmueble y después de darse una rápida mirada Emma y Henry decidieron que ese sería su nuevo hogar.

-¿El cheque va a tu nombre?- Pregunto la salvadora sacando su chequera.

-Nada de cheques Sheriff- Dijo Rumple.

-¿Prefieres Efectivo?- Volvió a preguntar Emma.

-Nada de efectivo- Respondió- Este departamento es un regalo de mí para ustedes.

-¿Hablas en serio abuelo?

-Muy en serio Henry- Dijo Gold- Me alegra que vayan a vivir solos.

El muchacho abrazo a su abuelo y Emma solo se limitó a darle una sonrisa y decirle un sincero Gracias.

Gold se separó y después de darles las escrituras del departamento se retiró a su casa de empeño.

-Debemos contarle a mis padres- Susurro Emma.

-Y a mi mamá también- Agrego Henry- Yo propongo una cena en Granny´s.

-Buena idea chico, si tenemos más gente alrededor será más difícil que Mary Margaret nos asesine.

Los dos soltaron una gran carcajada y pasaron varios minutos riendo y haciendo bromas sobre la posible reacción de Snow. Luego salieron hacia la patrulla y dieron un pequeño viaje por los límites del pueblo y cuando la hora de patrullar termino aparcaron frente a la casa Charming.

-Dile a los abuelos sobre la cena y márcale a tu mamá también- Pidió Emma.

-Como ordene Sheriff Swan- Dijo Henry con un saludo militar y bajo del auto.

Emma regreso a la estación y se enfrasco en ordenar el papeleo de la semana, se perdió entre tantos aburridos archivos y fue el sonido de su celular lo que la regreso a la realidad.

-Emma Swan- Contesto.

-Espero que este en camino Sheriff- Dijo Regina al otro lado de la línea- Sus padres, su hermano, Henry y yo la estamos esperando.

-Claro la cena- Susurro Emma- Llego en un minuto, adiós.

Salió a toda prisa de la comisaría y arranco su escarabajo hasta el restaurante de la abuelita, se estaciono donde pudo y entro disimulando su respiración agitada.

-Hermana- Grito el pequeño Neal desde los brazos de Regina.

La rubia sonrió y se unió a la mesa donde estaba toda su familia.

-Ahora si ¿Podrían decirnos el motivo de esta reunión familiar?- Pregunto David.

-Propongo que cenemos primero y luego les contamos- Dijo la Salvadora.

Todos aceptaron y después de ordenar entraron en una plática sobre él bebe Neal.

-Si no lo dejas que aprenda por sí mismo lo volverás un inútil como tú- Gruño Regina hacia Snow- Debes dejar que él solito descubra nuevas cosas.

-¿Y si se lastima?- Reprocho Blancanieves.

-Pues lo curas y listo- Volvió a decir la Alcaldesa.

Emma rodo los ojos al escuchar a su madre discutir con Regina, ya estaba acostumbrada y sabía que no iban a detenerse hasta que alguna cediera.

-Basta-Dijo Henry logrando que todos le prestaran atención- Mamá y yo queremos darles una buena noticia.

La rubia suspiro y soltó rápidamente a novedad.

-No mudaremos.

Todos se quedaron callados, incluso Neal se quedó en silencio mirando a su hermana mayor.

-Pues ya era hora Emma- Dijo Regina rompiendo el incómodo silencio.

-¿Por qué se van? ¿Hicimos algo mal?- Pregunto Snow al borde del llanto.

-No es eso abuela- Comento Henry cuando noto que Emma no respondía nada- Mamá y yo queremos nuestro propio espacio y ya no queremos invadir más el suyo.

Mientras la discusión entre los Charming, Henry, Regina y Emma transcurría en la cafetería un gran trueno lleno de luz cayó sobre los límites del pueblo trayendo consigo a una Emma más madura y a una Regina con un ligero aumento de edad.

-Bienvenida a Storybrook- Dijo Emma.

-Diez años atrás cariño- Agrego Regina tomando de la mano a la rubia y caminando hacia el centro del pequeño pueblo.

¿Les gusta esta nueva idea? Un viaje al pasado.

Si les interesa seguir la historia dejen un review, si hay buena respuesta seguire escribiendo este Fic, si no pues solo quedara como un One-Shot.

Para las chicas que siguen mis demas historias les comento que estoy por actualizar "Seduciendote" y "Donde Hubo Fuego" espero me ayuden a decidir cual subir primero.

En fin, espero tengan bonita noche.

No olviden los comentarios, siempre es una delicia leerlas.