¡Antiguas/Nuevas amenazas aparecen!
-¡Salgan con las manos en alto y nadie saldrá herido! —Gritó el oficial de policía en su megáfono.
Ya había pasado una hora desde que el gran banco estaba lleno de hostiles robándose todo el dinero que podían, no sabían de quienes se trataban ni si tenían rehenes con ellos, lo único que tenían confirmado era que no eran sujetos con un Quirk. Simplemente eran ladrones de baja monta usando pasamontañas para esconder su identidad, pero con armas peligrosas para cualquier persona normal.
No se les ocurrió otra hora para atacar mas que en la mitad de la noche, así que la policía simplemente bloqueo sus salidas con autos y helicópteros, al menos hasta que llegaran los héroes que se encargarían del problema. Algunos oficiales hacían lo posible para evitar que los mirones y la prensa se acercara para tomar algunas fotos y declaraciones, por alguna razón habían demasiados mirones reunidos en esta ocasión.
Los ladrones se encontraban dentro del local, apuntando con sus armas al exterior en caso de que a algún policía se le ocurriese entrar y volarle la cabeza, habían calculado que había al menos una docena de involucrados. No decían nada, si tuvieran a algún rehén hubieran pedido un rescate o algún vehículo de escape.
Uno de los oficiales estaba a punto de preguntar por su radio donde demonios estaban los héroes que se encargarían de la situación, cuando sintió un agarre en su hombro.
-Guarden la calma, nosotros nos encargamos. —Era nada más ni menos que uno de los héroes que podía resolver esta situación: Death Arms tranquilizaba al oficial haciéndole saber que estaba ahí, junto al resto de su equipo de héroes, el hombre que parecía una manguera y vestido de bombero, Backdraft, y el sujeto con la piel de corteza de un árbol, Shinrin Kamui— ¿Cual es la situación?
-Robo de banco, unos ladrones de pacotilla que tienen armas... —El policía observó como es que Backdraft creaba cintas pequeñas de agua para evitar que las personas se acercasen más, también miró como es que Shinrin y Death Arms se acercaban sin miedo hacia la entrada.
-Bien, terminaremos rápido aquí, no tienen porque preocuparse. —Shinrin levantó su pulgar positivamente. No obstante, algo comenzó a suceder. Todos escucharon como es que poco a poco gritos de terror de personas se oían a lo lejos e incrementaban lentamente, Shinrin y Death Arms se detuvieron cuando voltearon en dirección hacia donde venía todo ese escándalo. Cuando se dieron cuenta fue demasiado tarde para evitar la furgoneta que atravesó toda la barricada a gran velocidad y los golpeó lo suficientemente fuerte para alejar a ambos héroes a una distancia regular, lastimandolos en el proceso.
Otras dos vinieron de la misma dirección arrollando a todo lo que se les cruzara delante, daba igual si eran civiles o no. Se detuvieron en seco delante de la entrada del banco y varios hombres con pasamontañas bajaron llevando armas de alto calibre y disparando a quemarropa hacia los civiles y la policía. Los oficiales se escondieron detrás de sus patrullas devolviendo el fuego cruzado, incluyendo a Backdraft que no podía hacer mucho frente a armas letales como esa.
Esto era un ataque organizado, estaban esperando a los héroes para acabar con ellos de esta forma, y para rematarlo todo acababan de atropellar a muchas personas, podían ver algo de su liquido vital enfrente de las furgonetas.
Aunque los matones se escondían detrás de las furgonetas tratando de derribar a todos lo que pudiesen, había uno en especifico que no le temía a las balas y parecía ser quien daba las ordenes.
Era un sujeto alto y musculoso, con pantalones camuflados, una camisa sin mangas, un pasamontañas con una calavera de ojos rojos pintada encima, y una extraña mochila sobre su espalda con intravenosas que se conectaban a su cintura y brazos. El sujeto extrañó no paraba de gritarles a los matones del interior del banco que se apresuraran a sacar el dinero, cosa que obedecieron inmediatamente pues salieron con varias bolsas llevando todos los billetes que podían hacia la parte trasera de la furgoneta.
Su voz intimidante no hacía retroceder a los policías en su desesperado intentó por detener el asalto armado.
-¡Alto ahí villano! —Varias ramificaciones le quitaron las armas a muchos de los hostiles. Shinrin se protegía como podía del fuego en respuesta por los atacantes restantes creando una barrera de corteza de árbol que los protegía a él y a Death Arms, quien recién se recuperaba del impacto.
-¡Crea una brecha en tu barrera! ¡Voy a entrar! —Gritó Death Arms listo para pasar a la acción, su compañero asintió con la cabeza dándole la señal de que se preparase para entrar con todo lo que tenía.
-¡Preparen las furgonetas! —Ordenó el matón líder cuando vio a Death Arms abrirse paso por la pequeña apertura— Yo me encargó de este.
Eran casi del mismo tamaño y contextura, Death Arms confiaba en que no fuera tan rápido como para evitar su ataque, así que fue directamente con un golpe en seco en el estomago, esperando que esto le afectase. No conocía su Quirk pero por lo que veía tenía mucho que ver con su resistencia.
No se equivocaba. El sujeto grande se rió un poco ante el ataque del héroe.
-¿Eso es todo lo que puedes hacer? —Algo le sucedió, de repente las intravenosas de sus brazos comenzaron a transportar un liquido verde desde la mochila, haciendo que sus músculos se volvieran un poco más grandes y sus venas brillaran con el color del mismo tono que la sustancia. Realizó la misma acción que el atacante.
El golpe en el estomago del héroe lo mando a volar tan fuerte que se estrello contra la barricada de madera que Shinrin preparó y la derribó por completo, afectando al héroe que se hallaba detrás de esta también. Aunque no estaban del todo bien, ambos héroes parecían poder seguir combatiendo, a duras penas podían ponerse de pie.
-¡Esta todo listo! —Llamó uno de los matones subiéndose a la entrada trasera de una de las furgonetas.
-¡Bien! ¡Nos largamos de aquí! —El jefe de la operación intentó sostenerse a uno de los barrotes traseros de una de las furgonetas, más sus brazos fueron sostenidos por una especie de tentáculos hechos de agua.
-¡No escaparas! —Sentenció Backdraft. No parecía verse muy afectado por más que el héroe hiciese todo lo posible por evitar que se moviese, para él solo era una cuerda delgada y débil. No parecía querer irse sin antes dejar un mensaje claro.
Fue corriendo hacia el héroe que controlaba el agua y con todas sus fuerzas empujó la patrulla con la cual estaba cubierto, aplastandolo a él y varios oficiales más.
-¡Backdraft! —Gritó preocupado su compañero Shinrin.
El hombre con la extraña mascara se montó en la parte trasera de una de las furgonetas y dándole dos golpes ordenó que todos se largaran de ahí. Kamui no pensaba permitir que escapasen con todo ese dinero. Los vehículos intentaron escapar a gran velocidad, Shinrin tuvo la sagacidad suficiente como para amarrar algunas de sus ramas en el techo de una de estas, en la cual se transportaba el hombre que venció sin mucha dificultad a Death Arms.
Observó como es que las furgonetas se separaban en distintas direcciones. Intentó amarrar algunas de sus ramas a las ruedas del vehículo para frenarlo, fue en vano pues el conductor parecía no perder el control. El maldito que atacó a sus compañeros se encontraba detrás tratando de subir al techo e intentar terminar con la molestia de héroe que tenían. Kamui lograba evitar que avanzara dándole algunos golpes con sus brazos convertidos en pequeños látigos de ramas.
Se preguntaba como era posible que existieran criminales tan profesionales como ellos, solamente uno tenía Quirk y les estaban haciendo la noche imposible.
De golpe sintió como es que el auto cambiaba de velocidad a cero en seco, y los separó del suelo. Mt Lady había logrado interrumpir el recorrido del vehículo sosteniéndolo con su gran mano y levantándolo en el aire.
-¡Llegas tarde! —Le reclamó Shinrin.
-Lo sé. —Su expresión mostraba una sonrisa triunfal, creyendo que había salvado el día capturando al líder de la banda criminal. Se equivocaba.
El sujeto musculoso, que aun se hallaba en la parte trasera sostenido de los barrotes, salto hacia una de las ventanas de un edificio cercano entrando abruptamente mientras gritaba.
-¡Ahora! —Por instinto, Lady observó los asientos delanteros del vehículo que tenía en su mano derecha. Notó algo muy raro, los pasajeros delanteros no se movían, y no usaban pasamontañas. Eran maniquís.
Era una trampa.
La furgoneta explotó de la nada, hiriendo a Shinrin que aún se encontraba encima de ella y mandándolo a volar lejos aterrizando violentamente sobre un auto estacionado, y aturdiendo un poco a Mt. Lady.
El ataque sorpresa no terminaba aquí. El sujeto que saltó hacia una de las ventanas del edificio volvió desde el interior y dio un gran saltó con todas las fuerzas que tenía despegando de una gran distancia hacia una descuidada y desprotegida Mt. Lady. La mujer gigante no pudo hacer nada para defenderse del diminuto pero poderoso golpe en seco que recibió en el rostro departe del ladrón musculoso.
El suelo tembló en varias calles cuando Mt. Lady cayó derrotada. Un gran hoyo se formo en el lugar donde se derribo, poco a poco volvía a su tamaño original. El mastodonte que la derribó se acercó a ella en su forma más débil con un tono amenazante. Levantó su débil cuerpo con sus brazos y la elevó por encima de su cabeza como si estuviese exponiendo un trofeo.
Death Arms se acercaba desde lo lejos lo más rápido que podía, temiendo por la vida de su compañera al notar que el sujeto extrañó la sostenía de esa manera y lo veía venir, como si lo desafiara.
-¡Hombres más débiles han dado mejores luchas! ¡No son nada! ¡Han olvidado como enfrentar el peligro tradicional! —El héroe restante corría con todas sus fuerzas, no podía permitir que un villano ganase, no podía fallar. El dolor que sentía en su torso era insoportable, mas tenía que seguir, no importaba como, no iba a dejar que los malos ganasen— ¡Pero recordarán esta noche! ¡Toda la ciudad lo recordara!
-¡Detente! —Gritó, casi suplicante, al ver que el villano la elevaba aun más con sus brazos, preparaba un ataque definitivo ante una desprotegida heroína.
-¡Me recordaran! —Su voz amenazante era una clara muestra de que el atracó al banco no había sido solo para robar dinero, era un mensaje. El matón se había arrodillado sobre su pierna izquierda.
Cuando ya estaba a mitad de camino, sintió un fuerte golpe en su espalda que lo derribó y arrastró varios metros. Una de las furgonetas había salido de la nada y le había atacado por la espalda, derribandolo al instante. Sus piernas apenas respondían, no podía ponerse de pie debido al dolor e intentó arrastrarse. Pero al momento de alzar la vista, una impotencia brutal invadió todo su cuerpo.
-¡COMO EL ÚNICO HOMBRE QUE LOS QUEBRÓ! —Y con un uso abusivo de su fuerza, sin escrúpulos y moral, con más crueldad de la debida, no solo dejó caer a la mujer de espaldas sobre su rodilla derecha, sino que la impulsó con fuerza. Su espalda se arqueó de una manera inhumana, la acababa de romper, el crujido de sus huesos se pudo escuchar por toda la cuadra.
Ella ni siquiera gritó, simplemente abrió los ojos como platos y la boca, probablemente estaba inconsciente. El matón la soltó y dejó su cuerpo en la acera mientras esperaba que la furgoneta pasase a toda velocidad por su lado.
Sin que el vehículo se detuviera un segundo, logró tomar uno de los barrotes traseros y montarse en este, huyendo de la escena lo más rápido que pudo.
Era una escena espantosa. Un héroe inconsciente sobre un auto destrozado, una heroína tumbada en el suelo con los cabellos sobre su rostro sin moverse en absoluto, y un tercero que hacía lo posible por arrastrarse lo más que podía hacia ellos en un intento desesperado por socorrerlos.
-¿Como? ¿Un profesor nuevo? —Preguntó el joven Midoriya desde su asiento rodeado por dos de sus más cercanos compañeros de clase: Iida y Uraraka. Aunque ya se había rumoreado por la escuela y en su propia aula, no creía que otro héroe se ofreciera a enseñar en U.A. desde el incidente con la liga de villanos.
-Sí, según parece, es un héroe que convenció al mismísimo Director para que lo aceptaran. —Respondió una determinada Uraraka. Sabía de que si un nuevo profesor se presentaba, era para dificultar aun más las cosas con sus estudios y esto ocasionaría que se esforzase más. Necesitaba prepararse.
-Aunque solo sean rumores, no me sorprendería de que hayan aceptado a otro profesor. —Iida también se veía determinado en mejorar si alguien nuevo se presentase como tutor— U.A. ganó mucha popularidad tras ese incidente, y creo que tarde o temprano algún héroe valiente se presentaría para darnos algunos consejos de como lidiar con situaciones como estas. Confío en que sea este rumoreado profesor.
-Ya veo... —Midoriya se llevó la mano al mentón, sus demás compañeros también conversaban acerca de esto, pero había algo que nadie mencionaba: Su nombre. —¿Y saben de quien se trata? —Le preguntó a ambos compañeros.
-No creo que alguien lo sepa, ni siquiera sé si la información es del todo cierta. —Respondió Ochako— ¿Que opinas tú, Deku?
Antes de que el mencionado pueda responder, alguien interrumpió su conversación entrando a la clase.
-¿Ya están todos en sus asientos? —Un desalineado y flojo profesor ingresó al aula, Shota Aizawa se presentó como todos los días. Los alumnos inmediatamente lo recibieron con un saludo y tomaron procedieron a sentarse nuevamente. El adulto procedió a acercarse al gran taburete delante de toda la clase y soltar un anuncio— Jóvenes, como sabrán desde el incidente con la liga de villanos, hemos estado intentando prepararlos para situaciones similares en el futuro.
El ambiente se puso algo tensó, sea lo que sea que fuese a anunciar era algo para tomarse en serio.
-Es por eso que el Director decidió que era mejor que alguien experto en el tema les diera unas clases acerca de la situación, no es que la idea me agrade mucho, pero son ordenes directas de él. —Midoriya reflexionó un momento, ¿Quien era aquel que Aizawa no aprobaba? Podría tratarse de alguien muy blando, o peor que él con sus métodos— Bien, para no hacerlos esperar: Les presentó al profesor Harvey Dent.
Dicho esto, la puerta corrediza dio paso a otro hombre adulto y delgado que ingresaba al aula con una vestimenta extraña: Un hombre con un traje elegante dividido por la mitad, por la izquierda era de un color negro y por la derecha de color blanco, se podía visualizar que traía una camisa negra y una corbata blanca, lo más extraño era que llevaba un casco de obrero amarillo con una pequeña cortina que cubría por completo la mitad izquierda de su rostro, la otra mitad estaba despejada y dejaba ver un rostro maduro. El hombre de piel caucásica entró con seguridad, con ambas manos en los bolsillos y tomó el lugar de Aizawa.
Midoriya no podía evitar pensar en All Might, se suponía que ese día tocaban clases con él, pero no lo había visto y Shota no lo había mencionado.
-Buenos días, soy Harvey Dent. Su nuevo profesor. —Su voz seca no inspiraba mucha confianza. La verdad era que generó un gran impacto a casi todos en clase, sobretodo por esa extraña apariencia. Nadie lo reconoció, no era un héroe del que hayan oído antes— Pueden decirme Dent.
-Se los encargo profesor, intente no desgastarlos demasiado. —Dicho esto, y tras recibir una confirmación con la cabeza de Dent asintiendo, Shota se retiró sin decir nada más y de una manera casi seca.
-Bien alumnos. Supongo que tendrán tantas preguntas como yo. —Dent sacó su mano derecha de su bolsillo, mostrando que jugueteaba con una moneda entre sus dedos, paseandola entre ellos— Realizaremos una pequeña actividad. Si sale cara. —Mostró el lado con el rostro de una persona en la moneda a toda la clase— Ustedes realizan una pregunta, la que deseen. Si sale cruz... —Mostró el lado contrario de la moneda, estaba quemada y negra por completo— Las preguntas las hago yo.
Nadie supo ni que responder, ni siquiera Iida quien era el delegado del aula. No sabían ni siquiera que es lo que iba a enseñarles ese sujeto tan extraño. Sin más preámbulo, el nuevo profesor arrojó la moneda al aire y esperó a que cayera sobre su palma derecha, y sin decir nada más les mostró el lado que había salido.
Cara.
-Bien, parece que la fortuna les sonríe este día. Veamos... —Notó como varias manos se elevaban. De hecho, los pocos que no habían levantado las manos ni se inmutaban ante la presencia del nuevo maestro: Bakugo, Todoroki, y Yaoyorozu se mostraban indiferentes ante él.
Dent revisó en la lista de alumnos que tenía en el gran pupitre— Empecemos con Kyoka Jirou, por favor ponte de pie y haz una pregunta si la tienes.
El resto de alumnos bajo sus brazos mientras veían como es que la mencionada se ponía de pie.
-Quisiera preguntar... —Algunos se pusieron nerviosos, sabían que una de las características más destacables del sujeto era lo dividido que estaba, de manera literal, aunque ninguno sabía si podrían preguntar eso u ofenderían al maestro— ¿De donde viene?
El silencio reinó por un segundo, Dent se veía algo sorprendido por esto.
-No esperaba que realizaras esa pregunta, creí que había perfeccionado el idioma. —Sonrió amigablemente, aun jugueteando con esa moneda entre los dedos de su mano derecha— Vengó de Estados Unidos, ¿como averiguaste que no era de aquí?
Al parecer, Jirou se veía algo orgullosa de la pregunta, así que respondió.
-Pude escuchar por su acento que no era de por aquí, aunque su pronunciación es muy buena. —La tensión del ambienta bajaba poco a poco, el profesor no se veía como una mala persona.
-Bien, toma asiento, pasaremos a la siguiente pregunta. —La alumna obedeció, y el profesor repitió el proceso de arrojar la moneda al aire. Cuando mostró la moneda a sus alumnos volvió a salir cara— Tienen más suerte que de costumbre.
Revisó la lista un momento hasta que dio con un nombre.
-Izuku Midoriya. —El mencionado se sorprendió un poco de haber sido nombrado y tener sobre él todas las miradas de la clase. Sin embargo, se puso de pie y realizó su pregunta.
-Podría preguntar... ¿Cual es su Quirk? —Era una buena pregunta, que probablemente estuviese relacionada con su apariencia y su forma de tomar las decisiones respecto a usar una moneda. Dent lo observó un momento, como si estuviese dudando en contestar eso.
-Bueno, estoy seguro de que muchos de ustedes se fijaran en mi apariencia. —Observaba la moneda que traía en la mano— Mi Quirk es la fortuna.
Midoriya hubiese querido sentarse y anotar en su libreta lo que su profesor estaba a punto de decir, como casi siempre hacía cuando conocía a otro héroe.
-Puedo determinar cual es la mejor o peor decisión ante una situación gracias a la moneda. —Continuó Dent— Usualmente acierto, cada problema o pregunta que se presenta lo puedo solucionar con el poder de la decisión, arrojando la moneda al aire, y solucionando la situación. Y supongo que se preguntaran que tengo detrás de esta pequeña cortina, es solo un constante recordatorio de una ocasión a la cual no le hice caso al destino. —Esto ultimo lo dijo casi con orgullo, como si fuera una marca de guerra que quisiera mostrar— Puedes tomar asiento joven Midoriya.
El resto de la clase había escuchado atentamente estas palabras, un héroe que literalmente tenía el destino de su lado, era totalmente increíble.
El chico de pelo verde asintió con la cabeza y tomó asiento, inmediatamente después sacó una pequeña libreta y anotó todo lo que dijo el nuevo profesor.
-Continuemos. —Repitió el proceso y arrojó la moneda al aire, finalmente salió cruz. Dent repasó la lista de alumnos nuevamente antes de realizar su pregunta— ¿Quien es el delegado del aula?
Inmediatamente Iida se puso de pie con total seguridad y atención hablando por todos.
-¡Soy yo! ¡El delegado de la Clase 1-A: Tenya Iida! ¡Descendiente de una familia de héroes de varias generaciones y elegido presidente de la clase por democracia! ¡Será un honor tener clases con usted! —Como siempre se veía muy serio con todo lo que decía, aunque a algunos esto le causaba gracia, entre ellos estaba Ochako que apenas pudo soportar la risa.
-Bien, creo que ya entiendo porque te eligieron como representante del aula. —Rió de forma amistosa el profesor— Creo que me llevare bien con ustedes. Bueno, basta de presentaciones...
—Parecía que finalmente empezarían las verdaderas clases— Pónganse sus trajes, vamos a uno de los campos de entrenamiento.
-¡Sí! —Dijeron todos al unisono.
Esperaban que el profesor fuera algo más extravagante como todos lo que habían tenido hasta el momento, pero para su sorpresa era mucho más normal, como los profesores que tenían antes de ingresar a UA. Y también llamaba mucho la atención este Quirk que mencionó.
Los alumnos se dirigían a pie a uno de los campos de entrenamiento, durante el camino algunos intercambiaban palabras acerca del nuevo maestro, otros simplemente perdían el tiempo conversando de otras cosas, y había solo uno que anotaba todo en una libreta.
-Si tiene la habilidad de controlar su propio destino entonces prácticamente es imposible de vencer, a menos que sea el propio destino que indique que él sea vencido, en ese caso eso alteraría su destino porque sabe que sera vencido... —No podía dejar de murmurar y llamar la atención de Iida y Ochako.
-¡Oye Deku! —Su amiga lo hizo despertar de su extraño trance, y se vio un poco avergonzado al ver que no podía dejar de murmurar— ¿Que opinas del Quirk del nuevo profesor?
Le expresión de vergüenza de Midoriya desapareció por un instante cuando respondió a la pregunta realizada por su amiga.
-Es algo interesante. Aunque me sorprende el hecho de que nunca haya oído hablar de él antes, y me parece extraño que un héroe con una capacidad así pasase desapercibido.
-Debe ser por el hecho de ser extranjero. —Asui Tsuyu, la muchacha rana, se acababa de unir a la conversación al oír a sus compañeros hablar acerca del nuevo profesor— Y quizás no le guste mucho la popularidad o no haya recibido mucha demanda en su país de origen.
-O quizás ese estilo no le favorecía para nada. —El presuntuoso Yuga Aoyama también dio su opinión respecto al tema.
-Pero si el Director dio ordenes especificas debe ser por algo ¿no? —El muchacho con poder de endurecimiento, Eijiro Kirishima, que oyó de lo que hablaban, se unió a la charla— Aunque no tengo entendido muy bien para que sirven estas clases.
-Te dije que hablarían a tus espaldas. —Era la voz de Dent, quien solo estaba a unos pasos delante de ellos, jugueteando con su moneda en la mano derecha, esta vez sonaba más serio. De inmediato, el profesor se dio la vuelta, parecía algo preocupado— Disculpen, disculpen, no era mi intención.—Su voz amigable volvió, por un instante los alumnos notaron que algo lo había hecho enfadar un segundo.
Midoriya sabía que cualquiera se enojaría que hablasen a sus espaldas, sobretodo Bakugo con quien ya había tenido experiencias similares antes.
-Llegamos. —Indicó el profesor.
La gran puerta delante de ellos era fácil de reconocer, era el acceso al escenario de un bosque, ya habían estado ahí un par de ocasiones en su entrenamiento básico de héroe.
El grupo se detuvo ante la señal de su maestro, quien se puso delante de la puerta.
-Creo que se preguntaran que tipo de lecciones les enseñare... —Dent se rascaba la barbilla mientras observaba a todos sus alumnos, en sus pensamientos intentaba recordar sus nombres y habilidades, era algo primordial para su primera lección— Básicamente, serán ejercicios de confianza.
"¿Confianza?" Pensaron muchos de los alumnos ahí presentes.
-Como sabrán, los villanos se esconden en las sombras, no les gusta llamar demasiado la atención para no ser atrapados tan fácilmente.—Continuó hablando Dent— Aunque algunos, más listos, se pueden ocultar a plena vista de todos. Ahí es donde debemos enfocarnos, el enemigo podría estar en medio de nosotros, estudiándonos para atacar en el momento preciso.
Dicho esto, y en un tono casi humorístico, el resto de alumnos voltearon a ver a Midoriya recordando como es que el joven era muy minucioso cuando se trataba de estudiar el Quirk de los héroes que veía. Se separaron de él a una distancia regular, el joven se quedó sorprendido de una manera cómica por su actitud.
-Vamos a dividir el grupo en cinco equipos: Cuatro grupos tendrán cinco miembros, los dividiré tomando en cuenta sus Quirks y habilidades de combate.—Continuó hablando Dent.
-¡Disculpe, maestro! —Iida levantó su brazo para hablar, con un tono de respeto— ¡Si tenemos cuatro grupos de cinco miembros el quinto grupo no tendría ninguno!
-Gracias por la observación joven Iida. El quinto grupo sera conformado por "traidores" —Los alumnos pusieron atención a sus palabras— En cada uno de los grupos habrá un traidor, el objetivo es encontrar este traidor y derrotarlo. Por supuesto, nadie sabrá quien es el traidor más que ellos mismos.
-¡Muchas gracias por la aclaración! —Terminó diciendo Iida.
-Los grupos estarán en el campo de entrenamiento al mismo tiempo, cada uno tiene la opción de hacer rendir a sus propios compañeros de equipo si creen que se trata de los traidores. Cuando atrapen al traidor de cada equipo se los indicare. Los traidores tienen la misión de acabar con todos los miembros del equipo al que pertenecen. Todos obtendrán sus calificaciones según como actúen ante las situaciones que se les presenten. Los grupos ganadores tendrán una sorpresa especial.
Dent sacó pequeños papeles con su mano derecha de su bolsillo en el mismo lado.
-Acérquense a recoger los nombres del grupo al que pertenecerán, los traidores no podrán compartir su información con nadie más que ellos mismos. ¿Entendido?
-¡Sí! —Dijeron todos al unisono.
Los alumnos hicieron una fila delante de su nuevo profesor. Midoriya, quien quedó detrás de un Bakugo eufórico por la lección, no pudo evitar oír a su conocido de la infancia hablar de ello.
-¡Un ejercicio donde puedo atacar a quien quiera simplemente con excusas! —No era muy callado al respecto. Midoriya sintió un cosquilleo recorriendo su espalda, no quería imaginar en las excusas que usaría para golpear a otros.
-Deku, ¿Estas nervioso? —Había retrocedido un poco sin querer, empujando de manera suave a Ochako quien estaba detrás. Izuku se puso un poco nervioso por haberse acercado tanto sin querer.
-¡N-no! —Sacudía sus brazos y su cabeza negando, como si se tratara de una situación desesperada— ¡Y-yo solo estoy algo preocupado!
-No tienes porque preocuparte. Siempre que te juntes con gente que confías no puede salir nada mal, ¿no? —Ochako intentó animarlo un poco con una sonrisa, Deku intentó tranquilizarse al oír esto, no solo por lo que dijo, sino para corregirla.
-Bueno, eso es precisamente lo que me preocupa. —Su amiga no entendía a lo que se refería— El profesor dijo que es un ejercicio de confianza. No podremos saber quien es el traidor, y solamente tendríamos que mirar conductas sospechosas. Los traidores podrían usar justamente el sentido de la confianza para aprovecharse y acabar con los otros, aprobando la lección.
Esto hizo pensar un rato a Uraraka, lo que decía no sonaba descabellado, un traidor podría aprovecharse de eso, sería una buena estrategia. Cuando Midoriya se dio cuenta, era su turno para sacar su papel de la mano del profesor, y descubrir si se trataba de un traidor.
Al final los grupos fueron anunciados por Dent, indicando que no se debían separar, él estaría observando todo de cerca y se aseguraría de que nadie se saliera de control.
Los grupos fueron los siguientes:
El Grupo A estuvo conformado por Midoriya, Mineta, Kaminari, Rikido, y Mina; el Grupo B por Ochako, Tokoyami, Koda, Iida, y Asui; el Grupo C se formó por Toru, Todoroki, Eijiro, Bakugo, y Yaoyorozu; y finalmente, el Grupo D por Jirou, Sero, Ojiro, Aoyama y Shouji.
Dent mencionó que tenían una hora para descubrir a los traidores o que estos acabaran con ellos. El ejercicio de confianza dio su inicio cuando los grupos se perdieron los suficientemente dentro del bosque como para no encontrarse los unos a los otros tan fácilmente.
Dent confiaba en que sus cálculos y su moneda hayan sido suficientes para conocer los resultados.
El Grupo C se adentró por un sendero entre los arboles, siendo dirigidos por Todoroki, ninguno de sus miembros se opuso pero había uno que no paraba de refunfuñar entre diente por no haberle tocado hacer equipo con uno de los que más odiaba.
-Sugiero que no nos separemos. Uno de nosotros es un traidor, si le damos oportunidad de que acabe con uno de nosotros podría ser muy arriesgado. Tarde o temprano tendrá que intentar atacarnos, solo es cuestión de esperar. —El muchacho con la cicatriz en su rostro se giró y miro a sus compañeros, estaban separados del otro, no los podía culpar, no podían confiar en nadie. También noto como es que un enojado Bakugo no estaba de acuerdo del todo.
-¿Eh? ¿Y quien te nombró el líder aquí? —Exclamó el muchacho orgulloso, acercándose a él en tono amenazante, como si sospechara demasiado de él.
-¿Tienes una idea mejor? —Todoroki permaneció sereno sin dejarse intimidar por el rubio. Toru, Yaoyorozu y Kirishima podían sentir la tensión creciente entre ellos, mas no se atrevían a intervenir por miedo a que podrían explotar en cualquier segundo.
-Quizás. Yo sugiero que acabemos con los más peligrosos. —No bromeaba, pequeñas explosiones comenzaba a salir de las palmas de sus manos, y aunque se viera muy amenazante en ese momento, no podían negar que tenía algo de razón.
-Vamos, vamos, cálmense. —Momo trató de tranquilizarlos— Iniciar una pelea sin sentido en este momento solo le dará ventaja al traidor. Debemos pensar mejor las cosas.
-Hagan lo que quieran. —Bakugo parecía estar dispuesto a atacar a Todoroki si este realizaba algún movimiento sospechoso, y a cualquiera que se le acercara en cualquier momento.
-Kirishima... —La chica invisible llamó al mencionado, quien se volteó a verla, o al menos eso creía, pues en la dirección en que dirigió su mirada podía solo notar un par de guantes flotantes y unas zapatillas— ¿Crees que Bakugo es el traidor? —Se oía algo nerviosa.
-Es muy difícil decirlo. Si lo es, no actúa muy diferente a como se comporta normalmente. —Apretaba su puños en caso de tener que endurecerse en algún momento, no era una idea absurda pensar en que ambos pelearían porque sí.
-¿¡Que quieres decir con eso!? —Bakugo los había escuchado, y se había volteado contra ellos amenazándolos con hacerlos explotar. Odiaba que lo considerasen un traidor.
-Aléjate, no dejemos que el traidor aproveche esta situación. —Todoroki le dio la espalda e hizo el ademán de continuar su camino, sin prestarle mucha atención a su advertencia. Esto hizo enojar aun más a Bakugo, quien finalmente explotó.
-¡No te des la vuelta! ¡Cobarde! —Saltó contra él dispuesto a atacarlo con todo lo que tenía.
Yaoyorozu nada pudo hacer para detenerlo así que su única opción fue alejarse antes de que sucediera lo que temía.
-¡Atrás! —Atinó a gritar mientras se ponía a cubierto, y una gran explosión se produjo levantando una cantidad enorme de tierra y polvo la cual se podía ver desde la distancia. Yaoyorozu tuvo la sagacidad de poder crear un pequeño escudo acoplado a su brazo izquierdo que la protegería de las pequeñas rocas que saltaron debido al impacto.
El polvo fue esparciéndose poco a poco hasta casi desaparecer. Momo dirigió su vista hacia la zona donde se produjo todo, se sorprendió de lo que vio. Al parecer, Todoroki había podido crear una muralla de hielo que pudo soportar la explosión de uno de los brazos de Bakugo, este ultimo ni siquiera pudo ver en que momento lo hizo.
-¡Maldito! —Gritó desesperado antes de lanzar una explosión debajo de él con su derecha que lo elevó por encima del muro y colocó detrás de Todoroki lo suficientemente rápido como para lanzar otro ataque. El semi pelirrojo arqueó su espalda con velocidad hacia atrás cuando el rubio intentó liberar una explosión con su palma izquierda sobre él, fallando e impactando contra la muralla de hielo, generando otro impacto y terminando de destruirla.
Todoroki retrocedió velozmente creando más murallas de hielo, protegiéndose del muchacho y sabiendo que de esta forma podría agotarlo. No obstante, por más temperamental que pareciese Bakugo no era alguien tonto, sabia cual era el plan de Todoroki, así que solamente tenía que buscar un punto ciego contra él.
-Tenemos que detenerlos. —Sugirió una preocupada Momo junto al par de miembros restantes en su equipo, acababa de crear una espada que la podría ayudar a atacar en caso de que la situación se diera— Solo van a conseguir que estemos en desventaja contra el traidor.
Kirishima ya tenía ambos brazos endurecidos en caso de que tuviera que usarlos, se veía estupefacto ante la muestra de poder de ambos contrincantes enfrentándose mutuamente.
-Para ser honesto, preferiría no intervenir. Creo que no dudarían en encargarse de nosotros si interfiriéramos. No podemos hacer mucho. —Aunque sus palabras tuvieran algo de sentido, también levantaron cierta sospecha.
-¿Quieres dejarlos pelear? —Yaoyorozu lo veía con algo de inconformidad.
-Sé que no es una idea agradable, pero es la única que... —Ni siquiera pudo terminar su frase, tuvo que defenderse del ataque que estaba a punto de recibir por la hoja de una espada a manos de Yaoyorozu con ambos brazos.
Toru retrocedió al ver como es que estos dos se enfrascaban en un nuevo combate.
-¿¡Pero que te ocurre!? —Kirishima seguía defendiéndose de los ataques con la espada de Momo, endureciendo las partes de su cuerpo que se veían afectadas.
-¡Tienes la mentalidad de un traidor! ¡Solo alguien como traicionero esperaría a que nos atacásemos entre nosotros!—Un puñetazo endurecido casi impacta en su rostro, tuvo la velocidad suficiente como para interponer su escudo en el medio y evitarlo.
-¡Claro que no! ¡Solamente intentaba pensar lo mejor para el resto de nosotros! —No detuvo su contraataque, intentaba golpearla en el torso mas Yaoyorozu era más veloz y podía esquivar sus ataques fácilmente— ¡Eres tú quien usa una excusa para atacarme! ¡Tú eres el traidor!
-Deberíamos tranquilizarnos... —La chica invisible no esperaba de que todo se saliera de control tan rápido, cuatro de sus compañeros se enfrentaban mutuamente, y el traidor podría estar entre ellos. Solo que aun no sabían quien era.
-¡Muere! ¡Muere! ¡Muere! —Esto era malo, si Bakugo seguía atacando de una forma tan rápida sin dudar ni un momento al final lo acorralaría contra la pequeña colina de roca que tenía detrás de él, su única opción ahora era usar su lado izquierdo, solamente necesitaba esperar el momento adecuado para contraatacar y acabar con la ofensiva.
Seguir creando muros de hielo cada vez más grandes no detenía al rubio en su ataque, mas sabía de que si dejaba de hacerlo este podría hallar una oportunidad para terminar con lo que empezó. Solo quedaba una opción que quizás le daría de terminar con toda esta desgracia.
-¡MUERE! —Tras uno de los ataques de Bakugo destruyendo otra de las murallas de hielo Todoroki aprovecho la oportunidad para lanzar un ataque alterno: En lugar de crear una gran muralla uso el hielo como grandes púas en dirección de Bakugo para hacerlo retroceder, cometió un error. El rubio pudo ver a través de su ataque y apuntó ambas palmas al suelo, dejando liberar una gran explosión que lo impulso en el aire.
Se elevó por encima de Todoroki en dirección hacia la colina detrás suya, y justo cuando estaba a punto de estrellarse, colocó las manos delante y creó una explosión masiva; durante todo el proceso Bakugo mostraba una sonrisa desafiante. La explosión generada lo impulso hacia atrás nuevamente e hizo que se desprendieran grandes y numerosas rocas desde la colina. Todoroki se dio cuenta del peligro en el que se encontraba, tenía que pensar rápido si no quería ser enterrado debajo de todos esos escombros.
Otra nube de polvo cubrió gran parte del terreno donde el Grupo C se encontraba, cosa que afecto un poco a la vista de Momo y Kirishima quienes seguían peleando.
La muchacha no había conseguido hacerle daño al joven, básicamente porque atacar con armas puntiagudas y filosas no servían mucho contra alguien que podía endurecerse tanto como quisiera. No obstante, esto también requería un esfuerzo del pelirrojo, tarde o temprano se cansaría y ella podría aprovechar ese momento al máximo.
Cuando el polvo dejo de nublar la vista de ambos contrincantes, reanudaron su pelea. Esta vez la ofensiva la inició Kirishima lanzando un derechazo contra el rostro de Yaoyorozu, para la fortuna de la chica, pudo interceptar el ataque con su escudo metálico. Kirishima arqueó su espalda hacia atrás evitando la filosa hoja de la espada en un tajada de Yaoyorozu que apenas y le rozó el pecho, sin embargo, el ataque de Momo no terminó ahí. La alumna intentó atacar con un puñetazo con el escudo en su mano dándole un impacto en seco al rostro del pelirrojo, quien tuvo tiempo de endurecer la zona afectada evitando el daño. El atacado levantó su pierna derecha con toda la fuerza que tenía, y endureciéndola, trató de darle una patada en el rostro de la muchacha, no falló.
La chica trató de reincorporarse nuevamente.
-¡No te levantes! —Gritó Kirishima, creía que no era necesario seguir peleando entre ellos, esta batalla ya estaba ganada, no había probabilidad alguna de que Yaoyorozu lo derrotara con una habilidad como esa. Por supuesto, Momo sabía que había otra formas de ganar además de usar la fuerza bruta.
Haciendo caso omiso a la amenaza de su oponente, se puso de pie, con el escudo en su brazo derecho en posición defensiva, colocando con su brazo izquierdo la hoja de su espada por encima de este como si lo estuviera desafiando para que atacara, y así era en parte. Si no podía ganarle en un combate cuerpo a cuerpo sola, tendría que hacerlo con algo de ayuda.
Bakugo sabía bien que no era suficiente enterrar debajo de grandes rocas a Todoroki para detenerlo, admiraba de pie desde una distancia segura el escenario de destrucción que había creado. La ira aun residía en su interior, pensaba que ese muchacho lo subestimaba por no usar su lado izquierdo, nada lo retenía para liberar su máximo potencial.
Necesitaba planear su próximo ataque.
-Déjame darte un consejo, joven Bakugo. —Desde los arboles, a una distancia segura del combate, salia el nuevo profesor que los había traído ahí, aun jugueteando con esa moneda en su mano derecha, se veía muy satisfecho con los resultados de su lección. Bakugo giró su cabeza hacia él, con una expresión indiferente ante sus palabras— No juzgare tu pronto ataque hacia tu compañero, no puedo decir que no lo haría si supiera que entre nosotros hay un traidor. No obstante, centrarse en un solo objetivo no siempre puede ser bueno.
Había logrado crear un pequeño domo de hielo antes de ser enterrado debajo de las grandes rocas, producto de un ataque bien pensado departe de Katsuki. Sabía que quería que usara su lado izquierdo contra él, que liberara toda su energía para poder derrotarlo como él deseaba. Lo había pensado, y sabía que probablemente lo tendría que usar de todos modos, su pelea no los llevaba a ningún lado.
Las grandes y pesadas rocas comenzaron a quebrajar poco a poco la capa de hielo que protegía a Todoroki, si iba a ejecutar un plan tenía que hacerlo rápido.
-Actuar de manera tan agresiva casi siempre asusta a los demás, a algunos les agrada, mas usualmente te hace ver como una amenaza o una carga. Personas que consideramos aliados podrían volverse enemigos en un santiamén. —Chasqueó los dedos al decir esto ultimo.
Su lado izquierdo podía aumentar las temperaturas de casi lo que sea, hasta extinguir el objeto que deseaba, aunque esto requeriría un esfuerzo extra, lo valdría con tal de terminar con todo el lió en que los estaba metiendo Bakugo, y si resultaba ser él el traidor sería mucho mejor. Poco a poco pequeños trozos se desprendían de la capa de hielo cediendo ante el peso de las pesadas rocas.
-Por eso no sugiero que realices un ataque rápido, sino que busques algún motivo o razón para atacar de ese modo. O si no puedes, inventa algo para no darle oportunidades al supuesto traidor de defenderse.
Se podía escuchar el ruido de hielo romperse y quebrajándose, poco a poco pedazos más grandes comenzaban a ceder, un ruido estremecedor indicaba que el lugar sería enterrado debajo de todos los escombros en cualquier momento, aplastando todo lo que estuviera dentro de la capa de hielo.
-No sé que asunto pendiente tengas con el joven Todoroki, no pienso entrometerme, pero siempre recuerda una regla, una regla que te ayudara en cualquier situación que te encuentres... —Bakugo no quería seguir oyéndolo, tenía asuntos más importantes que atender que oír a su nuevo profesor dándole consejos sobre como debería haber actuado— Nunca descuides tu espalda.
Acto seguido, sintió como es que alguien apoyaba su espalda contra la suya, cuando quiso voltear la cabeza para ver de quien se trataba, recibió un puñetazo en su rostro tan fuerte que lo derribó y arrojó varios metros.
Yaoyorozu había ejecutado su plan con éxito. Logró atraer poco a poco a Kirishima defendiéndose de sus ataques hacia Katsuki, agachándose en el ultimo momento para que su ultimo ataque impactase contra el rubio, generando una pelea entre los tres, esto aumentaba sus probabilidades de salir victoriosa.
-¡Kirishima! ¡Idiota! —Bakugo no dudó en usar las explosiones de las palmas para impulsarse contra el muchacho de cabello rojo, elevándose en el aire. Kirishima vio en el peligro en el cual se encontraba, no quedaba más alternativa para él que luchar para defenderse.
Momo estaba entre los dos, iba a quedar entre el fuego cruzado, no podría salir de la linea de impacto a tiempo, solo quedaba defenderse con su escudo y esperar a que lo peor sucediese. No obstante, algo inesperado se aproximaba, podía sentirlo debajo de sus pies. La tierra comenzaba a calentarse poco a poco, pequeñas quebraduras se formaban sobre el lugar que pisaba, podía ver algo de vapor salir de ahí. Algo andaba mal.
-¡No! ¡Esperen! —Su advertencia sirvió en vano, Kirishima y Bakugo estrellaron su puños encima de una desprotegida Yaoyorozu, justo en el instante en que se generaba una gran explosión desde la tierra debajo de ellos y los escombros donde supuesta mente se hallaba Todoroki se venían abajo.
El lugar se lleno de humo nuevamente. Dent lo observaba todo desde la misma posición, una distancia segura en la cual no le podría pasar algo malo y tenía una perfecta vista de la situación. Ver de cerca a estudiantes con tal poder era algo asombroso para él, jamás se imaginó el gran potencial que tenían dentro, aunque por otro lado debería ser algo obvio, no por nada lograron sobrevivir a la Liga de Villanos.
En el lugar del impacto masivo ahora yacía un gran cráter, y alrededor de este se hallaban tres exhaustos y derrotados alumnos del Grupo C: Katsuki, Momo, y Kirishima estaban tendidos en el suelo boca arriba, parecía que no tenían ganas de seguir combatiendo. Desde el cráter, un sereno y sucio Todoroki salia escalandolo con facilidad.
El responsable de tal destrucción masiva salia del hoyo, limpiandose toda la tierra que tenía encima.
-¿Usaste tú lado izquierdo? Extraño, sospechaba que te contendrías en esta ocasión. —Al parecer, Dent estaba satisfecho ante la muestra de poder de la cual había sido testigo.
-No quise usarlo a menos que fuera como ultimo recurso —El muchacho con heterocromia observaba su mano izquierda, pensaba en que quizás pudo contenerse un poco más al usarla.
-Pues, creo que pudiste haberla usada un poco antes y así ahorrarte muchos problemas. —Ambos observaron de reojo a los demás miembros del grupo, aun se encontraban tendidos en el suelo mientras el polvo de dispersaba— Se esforzaron, pero olvidaron que esto era un ejercicio de confianza. No puedes confiar ni en tú propia sombra.
Todoroki sintió como es que una punta afilada era apoyada en su nuca, cuando volteó un poco la cabeza, lo suficiente para ver quien era el que lo amenazaba, se dio con la sorpresa de ver un par de guantes flotantes sosteniendo temerosamente la espada que Momo había creado con la cual lo amenazaba.
-Felicidades Toru, eres una excelente traidora. No solo aprovechaste tú Quirk para ocultarte ante la vista de tus compañeros, sino que pasaste desapercibida entre ellos por el simple hecho de no verte demasiado sospechosa. —La mencionada bajó el arma, Todoroki pudo escuchar como es que suspiraba— En cuanto al resto, espero que hayan aprendido algo. La próxima vez podría tratarse de una situación real, nunca olviden lo que aprendieron aquí.
Ahora, vuelvan a la entrada, y si necesitan ir con Recovery Girl háganlo, aun les falta terminar a los demás.
-Solo han pasado 15 minutos... —Mencionó Ochako, observando una gran nube de polvo que se elevaba desde la distancia.
-Sí... Quizás deberíamos alejarnos más, no queremos acabar en fuego cruzado. —Dijo Asui, sus demás compañeros asintieron, aunque ya estaban muy dentro en el bosque, no hacía mucho daño adentrarse aun más.
-Han pasado 15 minutos y el traidor aun no se ha atrevido a actuar. Si seguimos así el tiempo se terminara y habremos fallado. —Tokoyami era quien andaba frente al grupo, y quien más se separaba, no parecía confiar mucho en sus compañeros.
-No creo que sea buena idea sugerir que el traidor realice su primer movimiento. —Iida iba detrás de él, tenía una ligera sospecha sobre quien se trataba el que se supone debía terminar con todos ellos.
-No es eso lo que estoy sugiriendo. —El joven se detuvo en seco y se volteó hacia ellos, quienes no pudieron evitarse sentirse algo asediados por esa mirada frívola, sobretodo Koda quien se ocultó detrás de Ochako y Asui— Sugiero que escojamos a alguien como traidor.
Los miembros se miraron unos a otros, reflexionando y preguntándose si era necesario llegar a tal extremo.
-No creo que sea necesario. —Ochako tomó la palabra— Si el traidor quiere aprobar, necesitara actuar tarde o temprano. ¿Cierto? Entonces, no hay necesidad que nos ataquemos justo ahora. —La muchacha mostraba una sonrisa nerviosa, al parecer hacia todo lo posible por evitar la confrontación.
-Así es, no es necesario recurrir a la violencia en estos momentos. Y Tokoyami, esa actitud es muy sospechosa a mi parecer. —Iida apoyaba lo que su amiga acababa de decir y le hacía frente al muchacho con cabeza de pájaro, quien solo inclinó hacia delante la cabeza al oír lo que el presidente de la clase dijo.
-Si yo fuera el traidor hubiera mandado a Dark Shadow a que se deshiciera uno por uno aprovechando la espesura del bosque. —No se veía para nada nervioso al decir esto.
-Lamentablemente sigo sospechando que eres el traidor, y que solo dices eso para tratar de despistarnos. Tendré un ojo en ti, Tokoyami. —Lo dijo como si de una sentencia se tratase, la tensión aumentaba y se podía sentir entre todos los presentes, su intercambio de palabras solo servía para ponerlos más nerviosos.
-No tengo problema con eso, Dark Shadow me protegerá en caso de que alguno de ustedes sea el traidor. —Tokoyami no se dejaba intimidar por Iida. Este ejercicio de confianza los estaba poniendo demasiado paranoicos.
-¿Y que tal si nos separamos? —Preguntó la rana al grupo, inclinando su cabeza hacia un costado y poniendo su dedo indice por debajo de su mentón— Así podríamos evitar una pelea.
-¡De ninguna manera! Esto también podría darle una oportunidad al traidor de atacarnos si estamos desprevenidos.—Iida se opuso ante la idea.
-No parece una mala idea de hecho. Si nos dividimos en grupos de dos y uno en solitario, quizás tengamos una oportunidad de averiguar quien es el traidor. —Tokoyami no estaba en desacuerdo con Asui— Esta sería una buena oportunidad para que el traidor actuase, y al dividirnos en grupos sería mucho más sencillo cuidarnos las espaldas.
-¿No estarás tratando de separarte, Tokoyami?
-Puedes venir conmigo si lo deseas, Iida, así podrás vigilarme tanto como desees. —No solamente lo decía para ganarse su confianza, sino porque sabía que Iida era una de las amenazas potenciales si se tratara de un traidor.
Se quedó en silencio por un momento, pensando acerca de sus posibilidades. Y aunque no estaba del todo seguro en que separarse era una buena idea al parecer era la mejor opción para hacer que el traidor actuase.
-Esta bien, no creo que sea lo correcto, pero parece que nos quedamos sin opciones. —Uraraka se sorprendió un poco al escuchar que Iida aceptó.
-Bien, en ese caso yo iré con Koda. —Asui apuntó por sobre su hombro a quien había mencionado detrás de ella, el joven no pudo evitar sorprenderse al haber escuchado su nombre.
-¿Que? ¿Con Koda? —Ochako no entendía porque su amiga deseaba ir con el más callado del grupo— ¿Estas segura?
-Sí. Creo que se defenderme muy bien en caso de que sea el traidor, y si resulto ser yo, estoy seguro que él puede usar su habilidad de hablar con los animales contra mí. Si alguno de los dos falta cuando nos reencontremos, ya saben de quien se trata. —Koda se veía algo nervioso, mas no puso ni una objeción.
-Eso quiere decir... ¿Que tendré que ir sola? —Iida asintió ante la pregunta de Uraraka.
-Tu habilidad necesita tocar para tener algún efecto, si vas sola es mejor, pues así no tendrías más opción que actuar si fueras la traidora.
-¿Crees que soy la traidora?
-No puedo confiar en nadie, Ochako, es la mejor oportunidad.
No pudo objetar nada, podía comprender su preocupación. Lo único a lo que tenía que temerle ahora era a ser la primera victima del traidor. Y sin decir nada más, el grupo se separó, Iida y Tokoyami se fueron juntos, al igual que Koda y Asui, adentrándose aun más en diferentes direcciones en el bosque, perdiéndose al poco tiempo. Ochako no podía evitar pensar de que acababa de ser engañada.
Koda no se sentía muy cómodo junto a Asui, y no porque no estuviera cómodo con su compañía, sino por el hecho de que ella podría ser la traidora, y si ese fuera el caso no tendría muchas opciones para defenderse. Por otro lado, supuso que debía sentirse agradecido de no haber ido con los más peligrosos como Iida y Tokoyami.
Quizás lo que más compartían en común Asui y Koda era su conexión con el mundo animal.
-¿Que crees que suceda Koda? ¿Sospechas de alguien? —Le preguntó la rana mientras ambos andaban. Koda simplemente agitó la cabeza de un lado hacia otro, clara señal de que había dado una respuesta negativa. Asui inclinó su cabeza hacia un lado, reflexionando un poco— Ahora que lo pienso, ¿los otros grupos ya habrán descubierto a sus traidores? El profesor Dent dijo que recibirían una sorpresa especial...
Koda no dejaba de voltear hacia atrás, no podía evitar sentirse en peligro y vigilado, como si alguien los estuviera acechando desde las sombras. No se equivocaba.
En un momento dado, después de que Koda girara su cabeza por onceava vez, escuchó el gritó desesperado de su compañera, y para cuando se dio vuelta para ver que sucedía, ella había desaparecido. Miró en todas las direcciones posibles, no había ni un rastro que le diera una pista de donde se encontraba. Acababan de ser atacados.
Al pobre Koda no se le ocurrió mejor idea que huir, si alguien estaba acechando iría por él también.
Mientras tanto, Iida y Tokoyami seguían su propio camino, separados a una distancia regular. Iida iba detrás, vigilando que al muchacho pájaro no se le ocurriera usar su Dark Shadow y atacarlo.
-¿De verdad crees que yo soy el traidor? —Preguntó de repente y de manera seria Tokoyami, sin detenerse.
-Así es. —No dudó en contestar.
-Yo tampoco confiaría en nadie, pero no creo que sea necesario que solo me vigiles a mí. Si yo fuera tú, le prestaría más atención a lo que me rodea, así estarías mejor protegido. —Quizás el casco que llevaba Iida no lo dejaba notar, pero él entrecerraba los ojos, analizando lo que acababa de decir.
Por un lado, ¿Por que habría de ayudarlo con técnicas para defenderse del traidor si este fuera él? La únicas razones serían porque o se sentía tan seguro de sí mismo, o solamente deseaba ganarse su confianza para que bajara la guardia.
De la nada, escucharon el sonido de un montón de hojas y arbustos siendo empujados con fuerza en medio del bosque, señal de que alguien estaba corriendo entre los arboles sin cuidado, como si estuviese huyendo de algo.
Enfrente de unos arbustos, vieron emerger a un preocupado y asustado Koda, quien no dudó en acercarse a ellos para pedirles ayuda. Iida y Tokoyami pudieron entender por su expresión de que no fingía tener miedo.
-¿Koda? ¿Que sucede? ¿Donde esta Tsuyu? —Tenya había notado que no venía con él, lo que podía significar que ella era la atacante, o alguien la atacó primero.
Koda les explicó por medio de señas y mímicas que alguien se había llevado a Asui mientras no observaba, no había logrado mirar de quien se trataba y creía que podría haber sido obra del traidor.
-Si lo que dices es verdad, solamente podría ser una persona. —Tokoyami no se había separado de Iida en ni un momento y que Koda no tendría la capacidad de vencer por su cuenta a Asui, lo que solo dejaba a un sospechoso— Ochako es la única que se separó del grupo, la única que no estaba siendo vigilada. Espero que estés de acuerdo conmigo, Iida.
Odiaba admitirlo, pero lo estaba.
-Sí... estuve vigilandote en todo momento. U Ochako es la traidora, o ataco solo en caso de que Asui lo fuera. Tenemos que ir por ella. —Esto ultimo lo dijo con determinación.
Uraraka Ochako caminaba lentamente por un sendero en el bosque, viendo sus alrededores en caso de que alguien quisiera hacerle algún daño. Se preguntaba quien de ellos podría ser el traidor, ni uno había dado una pista de quien se podía tratar, todos parecían querer atrapar al traidor, nadie se comportaba de una manera sospechosa. Entonces se le ocurrió una idea: Pensar como Midoriya.
Ese muchacho era sumamente inteligente, y seguramente ya tenía trazado su propio plan para capturar al traidor de su respectivo grupo. Necesitaba pensar como él. Lo primero que haría sería buscar una pista de quien se podía tratar, y si nadie mostraba algún indicio, su única opción sería actuar en contra de quien sospechaba más.
Claro que esto la dejaría en el punto de mira de los demás, cosa preocupante. ¿Valdría la pena arriesgarse tanto solo para capturar al traidor? Suponía que el profesor Dent detendría el ejercicio una vez que el traidor fuese descubierto y detenido.
Así que eso es lo haría, intentaría deshacerse del traidor, no importaba si levantaba sospechas, si al menos consiguiera encontrar a algunos de sus compañeros separado del resto. Aunque sería algo difícil acercarse sin ser detectada.
Todas esas ideas fueron rápidamente derribadas cuando una sombra extraña se estrelló brutalmente delante de ella levantando una gran nube de polvo. Ochako retrocedió rapidamente y se cubrió los ojos para que su vista no se viera afectada.
Cuando el polvo se disperso, la chica pudo ver delante de ella una gran sombra de la silueta de un pájaro con los ojos amarillos: Dark Shadow. Podía ver a Tokoyami salir de entre unos arboles, seguido por Iida y Koda.
No entendía a que se debía este repentino ataque, no había hecho nada para provocarlos, al menos no aun.
-Solo admite que eres el traidor. —Dijo Tokoyami, mientras que Dark Shadow rodeaba a Ochako de forma amenazante— Esto no tiene porque escalar más, nadie tiene que salir lastimado.
-¿Eh? ¿A que se refieren? —Se veía intimidada por los jóvenes delante de ella, su instinto le decía que era mejor retirarse lo más pronto posible.
-Koda dijo que alguien había atacado a Asui.—Señaló Iida— Estuve vigilando a Tokoyami todo el tiempo, no había nadie más que pudiera realizar un ataque contra Asui mas que tú. Creemos de verdad que eres la traidora.
Retrocedia lentamente a medida que los demás avanzaban, exceptuando a Koda quien parecía querer quedarse detrás de Iida y Tokoyami.
-¿Creen que yo...? ¿¡Que!? ¡No! ¡No pude ser yo! ¡Estuve sola todo el tiempo! ¡No pude acercarme a ella!
-No haga esto más difícil. —Sin previo aviso, Dark Shadow se abalanzó contra ella, intentando atacarla. Ochako reaccionó los suficiente mente rápido como para hacer que sus manos se tocaran y activar su Quirk con rapidez, logró elevarse momentos antes del impacto. Dark Shadow se estrelló contra el asfalto, pero su ataque no termino ahí, la sombra se volvió a levantar y siguió a la chica quien se elevaba en el aire.
-¿¡Que estas haciendo!? ¡Tenemos que detenerla! ¡No es necesario lastimarla! —Le reclamó Iida, preocupado por la seguridad de su amiga.
-Es precisamente lo que intento. —Contestó Tokoyami sin dejar de prestarle atención a Dark Shadow— Es alguien lista y muy escurridiza, no caerá fácilmente. —Ahora miraba directamente a Iida— Es por eso que Dark Shadow la distraerá mientras tú la capturas por la espalda.
Tenya tardó un poco en contestar, este movimiento le parecía increíblemente sutil, mas confió en su palabra y asintió con la cabeza sin objetar.
Acto seguido, corrió los más rápido que pudo usando su Quirk a toda velocidad contra el tronco de uno de los arboles más altos y se subió usando solo las piernas, tenía que llegar lo más alto posible antes de que Uraraka se elevara tanto que le fuera imposible alcanzarla.
Ochako notaba como es que Dark Shadow la acechaba, pero no se acercaba para hacerle daño, de hecho, cada vez que parecía querer atacarla, ella podía esquivar a la sombra fácilmente. Estaba segura de que no sería capaz de hacer eso si Tokoyami actuara en serio, tramaba algo.
Iida saltó con ambos pies justo antes de llegar al limite de la copa del árbol sobre el cual corría. Se abalanzó por la espalda de Ochako, sin que la viera llegar, justo en el momento en que esta estaba distraída con Dark Shadow. No obstante, algo sucedió. Segundo antes de que consiguiera alcanzarla por detrás y finalmente capturarla, ella dejó de flotar y cayó desde una gran altura.
Se había dado cuenta del engaño, aun cuando no volteo para ver si Tenya iba por ella, sabía que estaban tramando algo, así que se dejó caer desde la altura, por más que le doliese la caída. Iida había tomado demasiado impulso, sin nadie con quien impactar en el aire, siguió de largo y se estrelló con Dark Shadow. El golpe no termino ahí, Dark Shadow y Tenya siguieron su camino y terminaron encima de Tokoyami, quien no pudo esquivar a tiempo el golpe de ambos sujetos al caer sobre él.
Ochako había caído sobre su espalda, y aunque esta le dio un dolor terrible, logró ponerse de pie lo suficientemente rápido y huir a pie de aquellos quienes la creían la traidora. Se adentró aun más en la espesura del bosque, creyendo que tendría alguna oportunidad de perderlos. Para ella esto no tenía ni un sentido, ella no había sido quien se atacó a Asui, y si Tokoyami y Tenya decían la verdad, no podía haber otra sospechosa más que ella.
A menos que...
Sus pensamientos se vieron nuevamente interrumpidos cuando Dark Shadow intentó atacarla por la espalda, ella saltó hacia un lado a tiempo para evitar a su atacante. Tokoyami, E Iida se dirigían corriendo hacia ella, menos Koda quien prefería mantener su distancia.
-¡No! ¡Esperen! —Ochako intentó hablar con ellos, trataba de decirles algo, mas Iida no se lo permitió. El muchacho se acercó a ella haciendo uso del motor que tenía en sus piernas, a punto de alcanzarla y finalmente terminar con el ejercicio. Uraraka no lo iba a permitir, volvió a juntar sus manos y activar su Quirk para elevarse en el aire.
No fue lo suficientemente rápida, Iida logró sujetarla del tobillo antes de que se alejara de su alcance. Intentó patalear para liberarse de su agarre, pero el muchacho era mucho más fuerte.
-¡No lo intentes más! ¡Nadie tiene que salir lastimado! —Iida intentó traerla hacia el suelo, Ochako no podía permitirlo, si se dejaba vencer, el verdadero traidor se saldría con la suya. Flexionando su espalda con velocidad, logró alcanzar con las puntas de sus dedos la mano que sujetaba su tobillo, usando su Quirk para elevara a Tenya también.
El afectado comenzó a separarse del suelo. Por instinto trató de sujetarse a algo que tuviera cerca, sin dejar de tomar el tobillo de Uraraka, mientras ambos se elevaban en el aire.
-¡Tokoyami! —Iida estaba muy alejado de los arboles, y no había nada del suelo en lo cual pudiera apoyarse, la única manera de detener su despegue era usar el Dark Shadow. El mencionado entendió a la perfección de el porque de la llamada de Iida, y no dudó en enviar a Dark Shadow a que lo sujetara de una de sus manos libre cuando ya estaba a una gran altura del suelo.
Iida no pensaba en soltarse ni del agarre del Dark Shadow o liberar a Ochako, esto tenía que terminar de una buena vez, ya sabían que era la traidora, no tenía sentido luchar.
-¡No voy a dejar que escapes! ¡Solo rindete! ¡Esto no tiene porque escalar más lejos! —Le exigió Iida, Dark Shadow los acercaba fácilmente hacia el suelo para terminar con esto de una vez.
-¡Escúchame, Iida! ¡No soy la traidora! —Aun intentaba librarse del agarre, no dejaba de patalear para que la soltase— ¡Escucha! ¡No pude ser yo! ¡Koda hubiera notado mi presencia! ¡Si yo hubiera atacado podría haber tenido tiempo de contraatacar!
Iida se dio cuenta de que lo que decía tenia algo de sentido. Koda podría haber tenido tiempo de darse cuenta de que era Ochako quien atacó, Asui no se podría dejar capturar de una manera tan sencilla o desaparecería de la vista de su compañero tan rápido. Lo que solo podía dejar a una sola persona como el traidor.
-¡Tokoyami! ¡Ella no es... ! —Intentó advertirle, era demasiado tarde. Tokoyami sintió como es que algo pegajoso y largo rodeaba todo su torso y lo apretujaba, trayendolo hacia atrás y obligando a Dark Shadow a venir con él, creando un efecto en cadena que tuvo como consecuencia a Ochako e Iida cayendo contra el suelo de manera brusca.
El pájaro nada pudo hacer para defenderse del gran lengüetazo de Asui que lo atrajo hacia un par de patadas tele-dirigidas contra su espalda, terminó boca abajo en el suelo y con los manos y pies de Froppy sobre su espalda en una posición encorvada imitando a una rana.
Iida ayudó a Ochako a ponerse de pie, Koda se alejaba de lo que parecía iba a ser una pelea entre héroes.
-Esperaba que el engaño durara más tiempo. Pero supongo que era muy difícil que Iida dejara de confiar en Uraraka. —Rascaba su cabeza de forma despreocupada.
-¡Alto! —La voz autoritaria del nuevo profesor detuvo el encuentro que estaba por darse, todos los alumnos voltearon a ver como es que el profesor salia de entre los arboles con su moneda en mano, y con una sonrisa en el rostro— No es necesario que recurran a más pelea, he visto suficiente, Asui ha demostrado ser una excelente traidora.
Tsuyu se quitaba de encima de Tokoyami al momento en que Dent hablaba, ayudándolo a levantarse.
-Iida y Tokoyami mantuvieron su distancia y a su vez hicieron lo posible por colaborar, buscando incongruencias entre sus acciones para buscar motivos para considerar traidor al otro, aunque fue algo bueno, también excesivo. No debieron separarse, esto le dio una oportunidad a Asui para fingir su propio ataque. Koda debió haber prestado atención a quienes podía ver más que a los que no podía ver, y debió haber considerado la posibilidad de un falso ataque al no ver a su compañera. Ochako intento hablar con ustedes y acudir a la diplomacia al mismo tiempo en que huía, fue un movimiento sensato. —Hizo una pequeña pausa para posar su vista en cada uno de los alumnos— Fue un buen inicio. Vuelvan a la entrada, si necesitan ir con Recovery Girl háganlo. Felicidades, Asui.
Y sin decir más, regresó por donde vino. Un suspiro de derrota se escuchó cuando cuatro de los alumnos supieron que habían fracasado, a excepción de uno que solo atinó a croar de forma divertida.
Dent avanzaba entre el bosque, prestando atención a los sonidos que lo rodeaban, intentando ubicar al próximo grupo, y guardando su moneda en el bolsillo derecho de su traje. No escuchó como es que alguien se acercaba por detrás y tomaba su hombro derecho con la intención de llamar su atención. Era una mano muy grande.
-¡JAJA! —Cuando se giró, pudo ver a un hombre extremadamente alto y musculoso delante de él, de cabello rubio con dos grandes puntas paradas en el centro de este, una gran sonrisa, y un uniforme elegante amarillo. Lo reconocía, ¿Quien no habría de reconocer al símbolo de la Paz?— ¡Vengo a saludar al nuevo maestro! —Dicho esto, el hombre estiró su mano izquierda en señal de saludo, esperando el apretón de manos de Dent.
Dent estaba impresionado y pasmado, casi abría la boca de lo sorprendido que estaba al ver a All Might justo delante de él con sus propios ojos. Sin responder y cambiar de expresión, respondió el saludo de All Might tomando su mano.
-All Might... es un placer conocerlo al fin.
-¡Por favor! ¡El placer es mio! Me entere de su inclusión a UA esta mañana, la verdad es que no podía esperar para conocerlo. He visto lo que ha estado haciendo con los alumnos, la verdad es que me ha sorprendido su método de enseñanza. ¡Pero quien soy yo para juzgarlo! —Volvió a soltar una carcajada larga y estruendosa mientras palmeaba la espalda del nuevo profesor de forma amigable. Dent aun no podía salir de su asombro.
-Es solo un método que teníamos en Estados Unidos. Usualmente funcionaba para entrenar a las fuerzas de la policía. —Hacia lo posible por no tartamudear.
-Ya veo. —All Might llevó su mano a la mandíbula, pensando— Entonces, ¿fuiste parte de las fuerzas policiales en tu país?
-No exactamente. —Parecía que iba a seguir hablando, mas algo lo detuvo, como si acabase de ver algo en el rostro de All Might que lo hubiera asustado o amenazado para que se callase— Disculpe mi rudeza, pero tengo que continuar observando a los alumnos.
-¡Comprendo totalmente! ¿Le importaría si lo acompaño? —All Might notó ese cambio brusco en Dent, pero no quiso recalcarlo.
-Sería un honor.—Ambos avanzaron por el bosque, Dent siendo el guía, y All Might revisándose el aliento en caso de que haya comido algo tan malo que pudo haber desagradado al profesor.
En una colina cercana, y muy alta, se encontraba otro grupo que aun no había descubierto al traidor. Habían estado caminando una gran distancia, siempre vigilándose mutuamente, y a su vez, estaban cansados de esperar a que el traidor actuase. Habían pasado 30 minutos y se habían detenido a descansar un momento.
-¿Vamos a seguir así durante toda la prueba? —Se quejó Sero; quien estaba sentado en el suelo, al igual que el resto de sus compañeros, todos formando un circulo.
-Dudó mucho que el traidor tenga intención de atacar, sabe que nos vigilamos mutuamente, no se atreverá a actuar. —Respondió Shouji usando uno de sus tentáculos como boca.
-Por cierto, ¿de quien creen que hayan sido esas grandes explosiones de haya atrás? —Jirou preguntaba mientras apuntaba con su dedo por encima de su hombro, señalando un lugar donde aun se podía ver salir algo de humo en la lejanía.
-Probablemente haya sido Bakugo, seguro que el profesor le dejó el papel de traidor. La verdad es que le quedaría muy bien.—Bromeó Ojiro.
-Ese lugar debe ser un desastre por completo. —Mencionó Aoyama, siempre con una sonrisa en su rostro— Si me acerco ahí mi traje se llenara de polvo. No sería algo bonito.
-No quiero seguir esperando más... —Suspiró Jirou, recostándose por completo en el suelo y usando una de sus manos para proteger su vista del sol— Quiero terminar esto lo más pronto posible. ¿Por que el traidor no se muestra simplemente? Así esto sería más fácil para todos y no tendríamos que estar bajo este maldito sol.
-Este ejercicio también pone a prueba nuestra paciencia, Jirou. Si actuamos precipitadamente el traidor podría encontrar una oportunidad para acabar con todos nosotros de un momento a otro. —Shouji comenzaba a ponerse de pie— Sugiero que sigamos actuando de esta manera, el traidor cometerá algún error tarde o temprano.
-Sí, estoy de acuerdo con Shouji. No hay razón para desesperarse aún. El traidor cometerá un error tarde o temprano y lo descubriremos, no hace falta acelerar las cosas. —Ojiro se puso de pie, siguiendo el ejemplo de Shouji— ¿Continuamos?
-Supongo que tienen razón. —Jirou hizo el ademán de ponerse de pie, doblando una de sus piernas para hacerlo, sin embargo, se detuvo y quedó en esa posición por algún motivo— Eh, ¿Que es eso? —La expresión de sorpresa en el rostro de su compañera fue suficiente para el resto para voltear hacia la dirección en que ella veía.
En ese mínimo momento de distracción, y de la nada, una onda expansiva impulso a gran parte del grupo y casi los obliga a caer de la colina, se sujetaron a tiempo de pequeñas rocas en el suelo para evitar salir despedidos. No obstante, esa extraña onda seguía insistiendo en impulsarlos lejos.
-¿Que demonios haces? —Preguntó un desesperado Sero al notar a la autora del ataque, quien era la misma Jirou.
Ella no respondió y siguió usando su Quirk, obligandole a soltarse y a salir despedido, el muchacho cayó por el borde de lo alto de la colina. Afortunadamente, consiguió despedir algo de cinta de su codo derecho la cual fue atrapada por uno de los brazos de Shouji, el joven quedó colgando e intentando subir nuevamente.
Después de varios segundos, el ataque injustificado de Jirou se detuvo, ya no podía usar su Quirk por más tiempo. Era el momento de contraatacar.
Ojiro saltó contra ella rápidamente, esperando atacar de frente, esta completamente seguro de que ella era la traidora, no había razón o motivo alguno para que los haya atacado a todos. Giró en medio del aire para intentar impactar con su cola, Jirou fue lo suficientemente veloz para hacerse a un lado y evitar el ataque del joven.
Tras esquivarlo, Jiro volvió a usar su Quirk para intentar expulsar lejos a Ojiro, cosa que consiguió con éxito. El muchacho salio disparado gracias a la onda expansiva, cayendo desde la colina hasta el bosque, era una gran altura, pero todos sabían que estaría bien, los arboles amortiguarían su caída.
-¡No podrás esquivar esto! —Aoyama lanzó un rayo de su cinturón, intentando acabar con Jirou. Al mismo tiempo, Shouji uso toda la fuerza que tenía para volver a levantar a Sero y lanzarlo contra la traidora. Jirou hizo un esfuerzo sobrehumano y uso su Quirk lo máximo que pudo, haciendo que las ondas consiguiesen desviar el rayo de Aoyama en la dirección que deseaba. La onda fue tan fuerte que no solo cambio el destino del rayo, sino que impulso al mismo Aoyama muy lejos.
El rayo del chico francés se redirigió hacia Sero, justo en el instante en que caía al suelo intentando acercarse a Jirou, el rayó lo volvió a empujar esta vez contra Shouji que pudo resistir el impacto.
-¿Porque realizar un ataque frontal tan desesperado, Jirou? —Preguntó el chico de seis brazos, haciendo a un lado a Sero, ahora corriendo hacia ella dispuesto a terminar con esto.
-Esperaba acabar con todos de una vez, no creía que fueran capaces de resistir un ataque sorpresa.—Dijo esto mientras se preparaba para recibir el fuerte golpe de tres brazos derechos.
Jirou logró hacerse a un lado en el momento en que Shouji abalanzaba sus brazos atacantes contra ella, impactando en el suelo de roca. Ella aprovechó la situación y tuvo tiempo de conectar uno de sus cables a él, ocasionándole un profundo dolor. Esperaba dejarlo inconsciente o que se rindiera.
No obstante, algo la enredó sus brazos, inmovilizándolos. Sero volvía a atacar arrojando cintas de sus codos contra ella y acercándose con velocidad por detrás, y por el lado contrario se dirigía Shouji volviendo a la ofensiva.
Quizás aun tenía una oportunidad para escapar de esta, simplemente tenía que esperar el momento preciso. Básicamente había tentado a la suerte.
Jirou logró hacerse a un lado cuando Shouji intentó golpearla nuevamente, esquivando el fuerte ataque y dejando que Sero recibiera todo el impacto de sus puñetazo, mandándolo lejos. La chica tropezó y cayó sobre su coxis, se descuidó.
El muchacho de seis brazos intentó nuevamente darle un golpe para acabar con Jirou, algo lo detuvo en ese instante.
-¡Suficiente alumnos! —Gritó el profesor Dent haciéndose presente junto al musculoso y alto All Might, ambos se acercaban a ellos con pasos lentos. Se veía satisfecho con lo que acababa de presenciar— No hay necesidad de que siga este enfrentamiento.
Tras escuchar lo que Dent dijo, la actitud de Shouji cambió a una más tranquila, pues extendió uno de sus brazos para ayudar a Jirou a ponerse de pie.
-Jirou uso un ataque sorpresa, quiso acabar con todos en un santiamén, exponiéndose como la traidora. Aunque fue algo inteligente, tardo demasiado en deshacerse de todos. Si esto fuera una situación real ella ya habría sido detenida. Muy arriesgado. Si no hubiera detenido a Shouji, ella acabaría muy mal. Así que, felicitaciones, ustedes son el primer grupo que detuvo al traidor.
Una expresión de disgusto se dibujo en el rostro de Jirou, se había confiado en que podría superar esta prueba sin problemas.
-Hicieron un buen trabajo alumnos, por favor, si tuvieran la amabilidad de ayudar a sus compañeros y llevarlos con Recovery Girl si es necesario se los agradecería mucho. —Agregó el poderoso All Might, los alumnos no cuestionaron en que momento se había unido como espectador en la prueba.
-¿Ganamos?
Shouji y Jirou giraron sus cabezas al escuchar la débil voz de Sero tendido en el suelo, y enterrado por algunas rocas pequeñas, parecía ser quien se llevó la parte más fea de toda la practica.
-Oye, Midoriya, ¿Como crees que lo estén haciendo los otros? —Preguntó Mineta quien andaba detrás del mencionado. Estuvieron avanzando en fila desde que había empezado la prueba en medio del bosque, habían pasado 45 minutos y pronto terminaría la prueba, el traidor aun no actuaba.
-A juzgar por la explosiones que escuchamos al principio, sospecho de que ya hayan descubierto a algún traidor, todo ha estado muy tranquilo en estos últimos minutos. Aunque no sabría decir si el traidor venció al grupo, o fue al revés. —Respondió el muchacho de pelo verde, pensando acerca de la situación e la cual se encontraban.
-El tiempo esta por terminar. ¿Cuando pensara en actuar el traidor?—Comentó Rikido, era quien estaba delante de ambos muchachos y logró oír de lo que hablaban— Si seguimos así ninguno de nosotros tendrá calificación.
-¡No digas eso! ¿¡Es que acaso quieres que el traidor ataque!? —Mineta se mordía sus uñas a través de los guantes producto del nerviosismo. En un principio le parecía una buena excusa como para inspeccionar a Mina de cerca, pero con el paso del tiempo y gracias a los sonidos de batalla que escuchaba a su alrededor todo se veía mucho más peligroso que antes.
-No creó que sea mala idea. —Kaminari apoyó lo que Rikido acababa de decir— Si de todas formas vamos a pelear contra el traidor, sería mejor hacerlo rápido.
-¡Sí! ¡Estoy de acuerdo! ¡Es muy aburrido tener que esperar!—Mina también se unió a la conversación— ¡Sugiero que votemos porque alguien se declare el traidor!
-¡Esperen! ¡Esperen! ¡Así no es como funciona! —Exclamó Midoriya, un poco desconcertado por la actitud de la muchacha rosada— ¿No prestaste atención a lo que dijo el maestro Dent? No podemos votar por elegir a alguien como traidor.
-¡Pero es demasiado aburrido esperar!—Bajo los brazos, de verdad que estaba cansada de esperar.
-¡Tengo una idea! —Exclamó de repente Kaminari al mismo tiempo en que chocaba su puño con la palma de su mano— ¿Que tal si nos enfrentamos entre nosotros?
-¿¡QUE!?—Mineta sentía la necesidad de correr de esos despreocupados héroes.
-¿A que te refieres?—Preguntó Rikido.
-¡Sí! ¡Para asegurarnos de acabar con él traidor nos enfrentaremos entre nosotros! ¡Así el traidor no tendrá oportunidad alguna de sobrevivir a menos que sea el ganador de los enfrentamientos!
-¡Genial! —Mina se emocionó ante la propuesta.
-Pues como están las cosas, el tiempo se terminara pronto. Creo que es una de las pocas opciones que nos quedan. —Incluso Midoriya sabía que era una de las dos alternativas que restaban, la otra era atacarse sin justificación.
-¿¡Que están diciendo!?—Mineta no podía creer lo que oía, si luchaban uno contra el otro era definitivo que él no saldría victorioso.
-Oh, no te preocupes Mineta, tú puedes ser uno de los últimos en luchar.—El comentario de Midoriya no lo hacía sentir mejor para nada.
Rikido y Midoriya decidieron enfrentarse primero, pues ambos tenían un Quirk que tenía que ver con la fuerza de cada uno. Los siguientes en enfrentarse serían Mina y Kaminari, y el que saliera como vencedor entre ellos pelearía con quien haya ganado en el anterior encuentro. Todo quedaba en las manos del destino ahora.
Izuku y Rikido se separaron un poco para realizar su enfrentamiento en un pequeño campo despejado rodeado de arboles, listos para combatir entre ellos. Midoriya había estudiado a su compañero, sabía que era probable que fuera con todo en el primer instante al conocer la intensidad de su poder, no obstante, también sabía que no era necesario que usara todo su poder para combatir.
Solo necesitaba cansarlo. Observó como es que Rikido llevaba una de sus manos a su cintura y sacaba dos pequeños frascos que contenían un polvo blanco, era azúcar. Si iba a atacar, lo haría con todo lo que tuviera, pues conocía el potencial de Midoriya. Deku se centró en usar el One For All Full Cowl solo al 5% de su poder, si conseguía cansarlo sería suficiente.
El combate inició.
Rikido fue corriendo contra el muchacho de pelo verde, Midoriya retrocedió unos pasos mientras ese se acercaba levantando sus puños en posición defensiva, esperando al inminente ataque de su rival. Izuku se detuvo cuando sintió un árbol a sus espaldas, solo necesitaba esperar al ataque de Rikido.
Justo antes de que el puño impactara en Deku, este saltó en el ultimo instante y logró evadir el puñetazo. El golpe impactó contra el tronco, y Deku tras el salto rápidamente se colocó a un par de metros de distancia de Rikido, dándole la espalda. No escuchó cuando su contrincante uso la fuerza bruta que tenía para arrancar el árbol al cual golpeó, y lo uso como un bate para intentar impactar contra Midoriya. Cuando el muchacho pudo reaccionar a tiempo y agacharse, evitando el golpe del tronco.
Era más rápido de lo que pensó, quizás Rikido ya se había dado cuenta de su plan. Así que tendría que recurrir a uno de respaldo.
Esta vez, el hombre azucarado elevó el tronco que tenía entre sus manos con esfuerzo en el aire, y lo bajo con violencia intentando estamparlo contra Midoriya, casi como si estuviera usándolo como un martillo. Logró esquivarlo haciéndose a un lado rápidamente, y en el lugar del impacto se levantó una gran nube de polvo. Deku aprovechó el momento y se impulso con gran velocidad hacia Rikido, concentro toda la energía en sus piernas para ganar velocidad, si su contrincante seguía intentando usar el tronco, podía realizar un ataque limpio.
-¡Smash! —Gritó un segundo antes de concentrar su fuerza en el su puño derecho y lanzarlo contra un desprotegido Rikido, fue interceptado por un puñetazo de la misma intensidad.
El atacado había previsto esa posibilidad, si hubiera tardado un solo milisegundo más el impacto no habría dado contra su puño, el choque no afectó a ninguno de los dos. Quedaron unos segundos más en esa posición, con los nudillos juntos de ambos puños derechos, como si quisiesen adivinar el próximo movimiento del otro.
De la nada, Rikido uso su puño izquierdo y quiso darle un golpe directo en todo el rostro. Midoriya pudo ser más veloz y simplemente movió un poco la cabeza y el cuello hacia la izquierda para evitarlo, ahora era su turno de contraatacar. Aprovechando el ataque fallido, Izuku paso su brazo derecho por debajo de la axila izquierda y su zurda la paso por encima del hombro derecho, encadenando ambas manos por la espalda de Rikido y dejándolo en una posición con el brazo izquierdo apuntando hacia arriba y sin poder moverlo. El atrapado no sabía que es lo que estaba haciendo Midoriya, no podía liberar su brazo por el fuerte agarre, era un movimiento que no lo había visto usar antes.
Deku tenía que actuar rápido antes de que al otro se le ocurriese utilizar su brazo libre para atacarlo, no era necesario pegarle un fuerte puñetazo para acabarlo rápidamente. Concentró parte de su fuerza en su pierna izquierda, la elevó en el aire y luego la trajo con fuerza hacia atrás del talón derecho de Rikido. Dejó que la fuerza, la inercia, y parte del peso de su cuerpo hicieran el resto y derribaran al oponente.
Rikido sintió un fuerte golpe en la espalda tras el impacto, y como es que Midoriya colocaba sus dos manos encima de su torso, evitando que se volviera a levantar. No podía intentarlo siquiera, sabía que una vez que estaba en el suelo ya no podía hacer nada más, además de que el efecto del azúcar ya había pasado.
Ambos rivales recuperaron el aire, y Midoriya ayudó a Rikido a levantarse tomando su mano.
-Esperaba durar más, Midoriya. Supongo que tengo que seguir mejorando para conseguir que el efecto del azúcar dure más tiempo. —Tenía una sonrisa en su rostro aunque no se veía muy animado.
-Estuviste genial, Rikido. Usaste un tronco para intentar atacar, no esperaba algo como eso, aprendiste a usar el entorno a tu favor aprovechando la habilidad de tu Quirk. —El muchacho intentaba animarlo con estas palabras y esbozó una sonrisa.
-Supongo que tienes razón. Tú también haz mejorado, no sabía que conocías una técnica como esa. Lograste derribarme casi sin problema. —Ambos estudiantes comenzaron su caminata juntos hacía el lugar donde se supone debería haber un enfrentamiento entre Kaminari y Mina.
-Estuve estudiando acerca de técnicas que no involucren usar tanto el daño físico, es para aprender a no hacerle tanto daño al entorno. —Midoriya ya podía escuchar algunos sonidos de pelea mientras se acercaban a otra zona despejada entre los arboles, y algunos gritos.
Cuando llegaron al lugar, pudieron ver a los dos contrincantes aun peleando, Kaminari lanzaba pequeñas descargas eléctricas hacia una Mina que podía esquivar fácilmente los ataques usando el ácido que desprendía de sus pies y patinando alrededor del rubio, Mineta estaba sentado sobre un tronco hueco a una distancia segura lanzando gritos de animo a su amigo incitándolo a que acertara con alguno de sus ataques con la esperanza de que la chica perdiera algo de ropa. Era en vano, todos los ataques erraban.
-¡Vamos Kaminari! ¡Puede hacerlo! —Gritaba el pequeño desde el sitio en el que estaba. Midoriya y Rikido se sentaron en el mismo tronco, observando el combate entre ambos aspirantes a héroe, pues solo era cuestión de tiempo para que Kaminari se cansase y que Mina atacara si es que seguían así.
Deku pensó en que era mejor para Kaminari cambiar de estrategia, lo único que conseguía de esa forma era agotarse y cansarse. No era el único con esa idea.
Mina se veía alegre y tranquila, casi burlona, esquivando todos los ataques de un Kaminari que poco a poco se desesperaba. No importa cuando predijera sus movimientos, ella era mucho más rápida y conseguía evadirlos. ¿Como vencer a alguien que eres incapaz de tocar?
-¡Quédate quieta! —Gritaba al verla acercarse hacia él, si no conseguía aunque sea golpearla una sola vez, el acabado sería él.
-¡Lo siento Kaminari! ¡Pero no voy a perder! —Ya estaba solo a un par de metros de él, acercándose a gran velocidad, lista para darle un golpe en seco. El chico sabía que lo que estaba a punto de hacer le daría una desventaja en su próximo enfrentamiento, pero si quería ganar esta pelea debía arriesgarse.
-¡Toma esto! —El puñetazo de Mina estaba apunto de impactar en todo el rostro de Kaminari, pero este realizó un movimiento riesgoso que lo expondría al peligro, valdría la pena con tal de terminar con esto. Mina sintió una descarga eléctrica recorrer todo su cuerpo justo en el momento en que su puño rozó a Kaminari, el muchacho había desprendido una gran energía de su interior para encargarse de ella, se confió demasiado al creer que él no se atrevería a hacer algo como eso.
Mina fue expulsada hacia una distancia regular, con un dolor en todo el cuerpo, sin poder moverse mucho y quejándose del dolor. El resto del grupo se sorprendió al ver el repentino destello que lo cegó por un instante, cuando pudieron notarlo, Mina se hallaba tendida en el suelo a una distancia regular de un Kaminari con una mirada perdida y con ambas manos en forma de puños y mostrando su pulgar, su cerebro había hecho corto circuito.
-¡Maldición Kaminari! ¡Pudiste sacarle algo de ropa! —Se quejaba Mineta con el desconcertado ganador de la contienda, Rikido se acercó a una maltrecha Mina que intentaba reincorporarse para ayudarle, Deku se acercó a Kaminari para asegurarse que no sufrió algún daño.
-¿Te encuentras bien, Mina? —Le preguntó su amigo mientras la ayudaba a levantarse.
-Duele un poco, pero creo que estoy bien. —Después dirigió su vista hacía el aturdido Denki, no pudo evitar soltar una carcajada.
-Kaminari no puede volver a pelear, no esta en condiciones. —Dijo Deku, guiando a Denki hacia el tronco y ayudándolo a sentarse.
-Eso quiere decir que pasaras a un enfrentamiento directo contra Mineta. —Tras el comentario de Rikido, Mineta comenzó a temblar y mirar a Izuku con ojos suplicantes. Midoriya entendió la preocupación de su pequeño amigo.
-Tranquilo, Mineta. Si no quieres no es necesario que peleemos. Todo esto fue demasiado improvisado. —Intentó tranquilizarlo con estas palabras, que parecían funcionar pues Mineta suspiró aliviado.
-Entonces, ¿eres el único que queda? —Preguntó Mina.
-Supongo que sí.
-No estaría tan seguro. —Era la voz de Denki. Midoriya sintió como es que alguien tocaba su hombro y una descarga eléctrica se liberaba en todo su cuerpo. Mientras se desplomaba en el suelo, un pensamiento se cruzó por su cabeza: Kaminari había fingido el corto circuito o ese estado había reducido su tiempo y era capaz de recuperarse más rápido. De cualquier forma, quizás podría contraatacar.
-¡Suficiente! —Era la voz del nuevo profesor, quien salía de entre unos arboles junto a la gran figura imponente del sonriente All Might. El grupo entero salió de la sorpresa del ataque al ver a ambos maestros— No es necesario recurrir a más estrategias riesgosas e improvisadas. Kaminari aprobó, el resto reúnanse con el grupo en la salida.
-No debí haber bajado la guardia, ni haber creído que este plan funcionaría del todo. —Dijo Izuku al mismo tiempo en que Denki le ayudaba a levantarse— Haz mejorado mucho, Kaminari.
-Supongo que es un talento natural. —Dijo riendo este ultimo.
Una vez que el grupo estuvo lo suficientemente alejado para que no oyeran a ambos profesores intercambiar algunas palabras.
-Había escuchado historias acerca de estos alumnos, todos tienen un gran potencial a decir verdad. —Dent se rasco la cabeza con su mano derecha— Ya veo como es que consiguieron sobrevivir al ataque departe de la liga de villanos.
-Son jóvenes muy prometedores, profesor Dent, estoy seguro de que lograran grandes cosas en el futuro. —El héroe numero uno se escuchaba muy orgulloso.
-¿Por que esperar? —Dent sonrió de manera amistosa, All Might no entendió a lo que se refería, mas su expresión de alegría no cambió.
Una vez que todos los alumnos estuvieron reunidos en la entrada, uno más maltrechos que otros, escucharon un ultimo anuncio del profesor junto a All Might, quien se veía muy satisfecho al ver los resultados de la prueba que les dio. Midoriya notó un enojo contenido en el rostro de Bakugo, vio como es que Tenya, Ochako, Koda y Tokoyami con un aura desanimado junto a una alegre Asui, y a unos sucios Sero, Ojiro, y Aoyama quienes se veían algo alegres a pesar de estar sucios, estaban junto a Shouji quien parecía estar charlando con una malhumorada Jirou, también notó a una cabizbaja Momo. Supuso que a la mayoría no el había ido muy bien.
-He de admitir que estoy gratamente sorprendido. Cada uno de ustedes demostró reaccionar de maneras diferentes a la situación, claro que hay que seguir trabajando en eso. Ahora, como bien dije, estoy seguro de que algunos desearan saber cual es esa sorpresa especial de la cual les comente al principio de la lección. —Los alumnos notaron como es que el profesor sacaba su mano izquierda de su bosillo, revelando graves marcas de quemadura en esta, prácticamente tenía la piel negra. Llevó la mano lentamente hacía el extraño casco que tenía en la cabeza— La verdad es que esto fue una idea improvisada, no quería asustarlos —Se la retiro de encima, mostrando por completo el lado izquierdo de su rostro.
-De donde vengo me conocen con un solo nombre... —Ya entendían porque ocultaba esa mitad, era repulsivo ver algo como eso. Su piel estaba quemada de ese lado, completamente seca por encima de sus huesos, su gran globo ocular quedaba totalmente expuesto, no tenía labios y gran parte de sus dientes izquierdos y su mandíbula quedaban expuestos, le faltaba cabello en ese lado de la cara. Absolutamente todos los jóvenes no pudieron evitar sentir algo pesado en el estomago al ver la imagen de una persona demacrada de tal manera, esa mitad del rostro parecía querer reflejar no solamente lastima, sino odio.
-Dos caras.
Próximo capitulo:
Las Dos Caras de una partida sin final
