Todos los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, unicamente la trama es mia
Los hombres no lloran
Cap. 1
Inicia la competencia
Era un día soleado en la gran ciudad de Seattle. Me encontraba sentado en l escritorio de mi oficina, yo trabajaba en uno de los mayores laboratorios de investigación medica del país, estaba revisando una de mis más recientes investigaciones sobre el genoma humano, intentaba buscar la manera de evitar las enfermedades hereditarias, pero por más que buscaba, aun no encontraba la clave de todo esto.
Frustrado, avente la pluma que tenia entre mis dedos y levante la mirada del papel a mi alrededor, inhale y exhale un par de veces hasta calmarme, necesitaba distraerme con algo, lo que fuera. Recorrí mi oficina con la mirada lentamente, buscando alguna distracción. Mis ojos se toparon con los retratos de mi familia, tenía uno de mí con mis hermanos, una con mi padre y uno con todos. Tome el que tenía con mi padre, examine esa vieja fotografía que mi madre había tomado hace ya veinte años atrás, sonreí, en la foto no tenia mas de siete, en ella mi padre me tenia sobre sus hombros, ambos sonreíamos, mientras que mi viejo perro, estaba echado a los pies de mi papá.
Recuerdo perfectamente ese día, mi pequeño cachorro Seth había escapado y yo estaba destrozado, temía tanto que algo pudiera haberle pasado, que me encontraba sumergido en un mar de lágrimas. Mi padre me encontró llorando desconsoladamente debajo de mi cama, me abrazo, e intentando infundirme valor y consuelo, me dijo la típica frase que todos los padres les dicen a sus hijos alguna vez. "Los hombres no lloran" es la frase que logro que me calmara, en ese entonces tenia tan metida en la cabeza la idea de convertirme en hombre, que mientras me limpiaba la nariz con la manga de mi playera, decidí no llorar jamás y buscar soluciones en lugar de lamentarme. La foto había sido tomada después de que encontrara a Seth debajo del árbol de mis vecinos, los Weber.
- Cullen – llamo el director desde el umbral de mi puerta interrumpiendo mis recuerdos.
Deje el retrato en la mesa, me levante del asiento de mi escritorio y lo voltee a ver.
-¿Sucede algo señor? –pregunte
-Si, es necesario que se presente a una junta del consejo a las 3 en punto –respondió seriamente
- Ahí estaré –conteste -gracias señor.
El asintió y salió de mi oficina. ¿Para que me querrán? Pensé preocupado, hace ya un tiempo que se estaba corriendo un rumor en los laboratorios de que iban a renovar el personal, ¿y si me pedían la renuncia? No, no pueden hacer eso, desde que comencé a trabajar aquí no he sido mas que de ayuda al laboratorio, que yo supiera trabajaba bien, incluso podría presumir que era uno de los mejores científicos de Twilabs. No podía ser eso, pero si no era eso ¿Qué era?
Sacudí mi cabeza en un vano intento de quitarme mis poco optimistas pensamientos de la mente, al no funcionar, decidí que era mejor seguir recordando viejos momentos, así por lo menos podría sonreír un poco antes de cualquier noticia, ya sea mala o buena. Aun faltaba media hora para la junta, podía sumergirme en mis recuerdos por un rato.
Esta vez tome la foto con mis hermanos, sonreí ante la coincidencia, ese día también había escuchado la típica frasecita. Mi hermano Emmett había reprobado el examen de matemáticas de 2º grado, el pobre se había quedado despierto toda la noche porque habíamos visto una vieja película de terror, El Exorcista. Mis padres no sabían, de lo contrario jamás habríamos llegado a siquiera tocar la caja del VHS. Al día siguiente Emmett bajo a desayunar con unas enormes ojeras, y se espantaba con cualquier ruido, lógicamente el cansancio termino por vencerlo, lo único malo fue que se quedo dormido en pleno examen.
Cuando recibió las calificaciones, Emmett, entre lagrimas e hipidos, le confeso a papá todo, desde como burlamos a la niñera para ver la película, hasta lo que soñó cuando se durmió en el examen. Mi padre solo soltó una carcajada. "Tranquilo, no pasa nada, ya habrá otros exámenes, además, los hombres no lloran ¿recuerdas?"Eso fue lo que dijo cuando por fin pudo controlar su risa, luego de eso, fuimos a comprar un helado para calmar a Em. En la foto estábamos Alice, Emmett y yo, enseñando su examen orgullosamente manchado de helado de fresa, cortesía de mi hermana pequeña.
Mire mi reloj y me levante de golpe, faltaban dos minutos para las tres, mis jefes eran sumamente puntuales y si no estaba ahí a la hora indicada, definitivamente no dudarían en despedirme, claro, siempre y cuando esa fuera la misión de la junta. Prácticamente corrí al elevador, una vez adentro presione el botón del piso y espere impacientemente a que llegara. El elevador se detuvo y estuve a punto de salir corriendo, pero una persona que entro a éste por poco choca conmigo, por lo que tuve que hacerme para atrás, fue cuando me di cuenta de que todavía faltaban dos pisos más. Me muy sentí tonto por estar tan nervioso, solté una pequeña risa, que se corto de golpe en cuanto vi a la persona que se hallaba junto a mi. Un hombre alto, de tez morena, musculoso y con unos ojos mas negros que el carbón.
-Black –lo salude
-Cullen –respondió
Jacob Black, el era la persona que se hallaba junto a mí. Sencillamente no nos soportábamos, desde que estábamos en la universidad éramos rivales. Por algún azar o mala broma del destino, siempre acabamos los dos compitiendo por algo. Desde chicas hasta premios, algunas veces ganaba yo, algunas veces ganaba el, esto solo hacia que nos odiáramos cada vez mas.
El elevador paro en mi piso, y me adelante a él, pero en cuanto las puertas del elevador se abrieron, ambos salimos corriendo, haciendo que nos atoráramos en las puertas del elevador.
-¿Quieres quitar tu asqueroso trasero de aquí Cullen? –exigió Jacob
-¿Por qué no te quitas tu Black? –sugerí –¿No ves que estorbas? No deberías tomar esteroides, ¡eso solo te hace mas ancho!
Jacob bufo y se hizo para atrás. Lo que me sorprendió fue que en cuanto pudimos movernos, ambos salimos corriendo, y lo peor, hacia el mismo lugar.
-¿Qué paso Cullen? –preguntó Black -¿acaso me estas siguiendo?
-¿A tanto llega tu complejo de grandeza Black? –le conteste
Seguimos corriendo por el pasillo hasta que entramos a la sala de juntas, los directivos ya nos estaban esperando.
-¡Buenas tardes chicos! –dijo el director Aro Volturi desde su lugar, tan jovial como siempre –¡pero no se queden ahí muchachos! ¡Vamos, tomen asiento!
Ambos nos sentamos en una de las sillas de atrás, nos miramos desconfiados un momento, antes de prestar atención al director.
-Bueno muchachos –dijo Aro –esta junta es para informarles que hemos decidido mudar las oficinas centrales a Italia. Pero primero tengo que arreglar unas cosas ahí, por lo cual viajare ahí unos meses, en mi ausencia, Marco se quedara a cargo.
¿Mudarse? Pensé desconcertado ¿eso que tenia que ver con nosotros? ¿Nos pedirían que nos fuéramos con ellos?
-Disculpe señor ¿pero eso que tiene que ver con nosotros? –pregunto Black robándome la duda.
Aro sonrió ligeramente antes de responder
-Paciencia mi joven amigo –dijo –como ustedes podrán suponer, a mi regreso nos iremos toda la junta directiva a Italia, ósea, Marco, Cayo, Demetri, Jane, Alec, Félix y yo. Ahí es donde entran ustedes. Quiero que uno de ustedes dos se encargue de la sucursal de Twilabs en este país, se que ambos son excelentes científicos, son jóvenes e inteligentes, ambos no solo estudiaron su carrera científica, si no que también administración de empresas, además de todo hábiles, esto los convierte en empresarios en potencia, por lo cual yo pienso que dejaría en muy buenas manos los laboratorios.
Sonreí y contuve mis ganas de gritar, al fin todo mi trabajo había dado frutos, todas esas horas trabajando asta altas horas de la noche, por fin habían funcionado de algo. "Director Cullen", pensé con entusiasmo, no podía evitar imaginarme mis tarjetas de presentación, todo era tan maravilloso.
-Sin embargo…-dijo Aro
¿Sin embargo? ¿Por que sin embargo? ¿Sin embargo que? Me pregunte ansioso, no podía arrepentirse ahora ¿O si?
-Como ustedes saben, ambos no pueden ser directores -continuo tranquilamente –uno de ustedes dos tiene que quedar fuera.
¡Maldición! Otra vez compitiendo contra él. ¡No me puede ganar el puesto Black! pensé temeroso.
-Es por eso que ustedes dos están aquí –dijo con una sonrisa –Tengo entendido que ambos están trabajando en una investigación sobre la manera de erradicar las enfermedades hereditarias por medio del genoma humano ¿cierto?
Ambos asentimos
-Bien
Aro acentuó su sonrisa aun más.
-El trato es sencillo, el primero en terminar el trabajo y descubrir con éxito la clave de esto… Sera quien ganara el puesto de Director de Twilabs- finalizo el director –pueden retirarse caballeros.
Hola chicas,
Este es el primer capitulo de mi nueva historia
Realmente estoy muy emocionada con este fic
La idea originalmente era para un one-shot para el Saness Story Contest, pero luego vi que le podia sacar mucho partido a la idea, asi que lo alarge y decidi ponerle un happy end
como se habran dado cuenta el raiting es M, lo cual significa que habra LEMMONS mas adelante
espero que les guste.
Un lindo y hermoso review es mucho pedir?
saben que no me importa lo corto que sea
solo saber que hay alguien por ahi que me lee
prometo subir maximo en una semana
nos leemos
besitos
*Bliss*
P.D.
por si se lo preguntan subire del otro fic mañana, osea domingo