Disclaimer: nada me pertenece, puesto que todo es de George Martin.
Esta historia de 155 palabras participa en el reto 63 del foro Alas Negras, Palabras Negras.
...
¿Qué otra cosa identifica mejor a un rey que su corona? El Conquistador tuvo su diadema de rubíes y acero valyrio, el Indigno su grueso anillo de oro rojo y Baelor su patética enredadera de margaritas.
La corona de su madre es elegante, fina, dorada, no es la más espléndida ni tampoco la más enjoyada; pero era de su madre, lo último que le queda de su familia y lo único que lo llama rey.
Su ansioso comprador lo apremia mientras hace cantar las monedas. Viserys cierra los ojos y trata de pensar en la preciosa melodía metálica, de hacer balance y de decidir si un par de zapatos para Dany y algo de pan y pichón en su estómago pesan más que la tradición, el sentimiento y la dignidad que representa la corona.
Las manos le queman cuando la entrega y el orgullo se le atora en la garganta. Por un puñado de monedas.
