Disclaimer: Codename: Kids Next Door es propiedad de Tom Warburton por encargo de Cartoon Network Studios. Este fic participa en el reto de apertura del foro KND: "Operación F.O.R.O". Esta basado en la canción "Runaway" de Linkin Park.

Quiero agradecer a mi hermana por todo su apoyo.

Yo soy Fanny Fulbright

Y hoy, desapareceré.

Son las 2:30 A.M. Estoy terminando de armar mi mochila, sólo cosas absolutamente necesarias; cepillo de dientes, una linterna, mis ahorros, algo de ropa, un par de simios arcoiris..

Es inútil pensar porque hago esto, ya está decidido. Después de años de molestias y pretensiones adultas, y de ser elegida la "Sra. Jefa" de la base lunar, al fin podré hacer lo que yo quiera. Y ahora solo quiero correr.

Ya estoy fuera de mi casa. Fue fácil salir, mi papá duerme como tronco, ni hablar de mi tonto hermano. La verdad, no le encuentro sentido. Gasté toda mi infancia en una organización de mocosos niños y no he recibido ningún crédito por ello. Si supieran todo lo que he hecho por ellos, no tendría que irme. Las noches que pasé examinando aburridos papeles y revisando expedientes para poder darle a cada sector una misión que puedan cumplir, y ellos nunca me dan mérito. Ni siquiera las gracias. Solo me ven como una adulta en tamaño pequeño "El miedo y la confianza no pueden nunca marchar de la mano."* Pero no importa, al cabo que dentro de poco me olvidarán.

¿Qué clase de desquiciado le vende un pasaje de tren a una niña? Aunque a decir verdad, ya no soy tan niña. Estoy a una semana de cumplir trece, pero ellos no se enterarán. Es difícil pasar desapercibida con cabello rojo y mi marcado acento, pero nada que una peluca y fingir otra voz no arreglen. Esperaré aqui en la estación, no hay un alma, además de un perro. Siempre he querido uno, pero mi padre creyó que sería irritante. ¿Me estaré convirtiendo en mi padre? Tonto cliché de película, claro que no. A diferencia de él me preocupo por los que están a mi cargo, porque estén a salvo, felices. Pero no puedo evitar gritarles cuando veo que ellos no tienen el mismo ímpetu. Cuando creo que soy la única a la que en realidad la organización le importa. Y ni hablar de cuando me asignaron una "misión especial" ¡Entrar en los archivos de mi padre, buscar los planes de los adultos! ¿Quién podría creer que esa sería buena idea? ¡Traicioné a mi padre! Si se entera nunca me perdonará. Estuve sin probar postre por una semana, creyeron que me había enfermado. Pero ya no importa, porque ya llegó el tren.

Lo que piensen me importa un bledo. Dentro de unas horas ya no estaré y quizás se de cuenta de que me necesitan, pero ya será tarde. Iré donde nadie me pueda encontrar, donde nadie me quiera buscar. Me voy sin despedirme. Espero que ahora si tengan la jefa agradable y cariñosa que les prepare cupcakes que siempre quisieron. Me entristece un poco dejar a Rachel, pero en estos años nos hemos distanciado. Ella es la líder suprema, y yo sólo su asistente personal, y ya me canse de eso. Ya no más.

Desde ahora, seré quien yo quiera. Y nada me detendrá.

* François de Curel (1854-1928), dramaturgo francés