Bueno, creo que estoy un poco loca. A ver, os explico, tengo dos fics empezados en Harry Potter y hace menos de una semana que empecé uno de Twilight y ahora he empezado este otro…
Podría ser algo completamente normal pero la cuestión es que no tengo tiempo!!! Entre el trabajo, la universidad y dormir apenas encuentro tiempo para escribir un par de líneas cada día pero… ¿qué puedo decir?
Me gusta escribir y adoro escribir para que los demás disfruten.
Os dejo el primer capítulo de este nuevo fic con la esperanza de que os guste o al menos os llame la atención.
Un besito para todos y disfrutad con la lectura!!
______________________________________________________________________
Bella es una chica normal que trabaja para el periódico del instituto de Forks. Un gran artículo que rodea el mundo de los chicos más populares y algo relacionado con carreras de coches es algo que no puede perderse, ¿verdad? (Todos humanos)
______________________________________________________________________
Prefacio
Me obligué a mí misma a permanecer quieta y no retroceder ni un solo paso cuando el coche se detuvo y la puerta del conductor se abrió.
Todo desapareció de mi mente en aquel momento.
No había frío a mi alrededor. Ni ruido. Ni el rugido de los motores. Tampoco había oscuridad atenuada por los bidones metálicos que ardían en llamas. No había nadie. No había nada salvo él.
Apartó de su lado a aquellos que querían detenerle para felicitarle.
Sus ojos se movieron con rapidez buscando algo, buscando a alguien.
Toparon conmigo y vi como su rostro pasaba de la incredulidad a la furia en cuestión de segundos.
Su mirada se desvió levemente a mi izquierda donde la imponente figura masculina que me había acompañado parecía estar disfrutando de aquello mucho más de lo que yo jamás aprendería a disfrutar.
Me paralicé al ver como me miraba y mis pies no quisieron moverse cuando él empezó a caminar hacia donde estábamos.
Venía hacía mí como un ángel negro vengador y sólo sus ojos claros refulgían con ardor, furia tal vez, no me atreví a preguntarle.
Se detuvo a menos de un metro de distancia.
Apreté la chaqueta contra mi cuerpo cruzándome de brazos para intentar encontrar un poco de calor y conservarlo.
Quise desviar mi mirada. Lo juro. Quise hacerlo. Pero me fue imposible. Fue como si sus ojos… como si su mirada… Fue como si me deslumbrase por primera vez.
Mis mejillas se sonrojaron al notar como él seguía manteniendo sus ojos sobre mí.
-¿Qué diablos hace aquí?
Su voz, suave como el terciopelo acarició cada célula de mi cuerpo y di gracias a que la pregunta no estaba dirigida a mí. Sabía con certeza que mi garganta se había secado y que sería imposible decir una palabra en aquellos momentos.
La gran mano de Emmett se posó sobre mi hombro y agradecí el calor que él me transmitió así como el hecho de que me protegiera un poco de las miradas de los curiosos.
-La he traído yo –dijo como si eso fuera suficiente.
Me ruboricé aún más si eso era posible.
-Estoy escribiendo un artículo –dije con tono suave.
Edward me miró y sonrió de aquella forma tan especial que hacía que todas las chicas se volviesen locas por él. Me pregunté a mí misma si sabía lo que esa sonrisa provocaba o si simplemente lo hacía de forma espontánea.
Las sirenas a lo lejos, quizá al otro lado del puente hizo que todos empezaran a mirar a su alrededor.
La mano de Emmett se tensó en mi hombro cuando todos los adolescentes empezaron a correr de un lado a otro buscando un coche que les sacara de allí lo antes posible.
No tuve tiempo de reaccionar. Ni de protestar siquiera cuando Edward me tomó de la muñeca y me alejó de un tirón de Emmett.
-Yo la llevo –le dijo simplemente mientras me arrastraba hacia su coche.
Miré a Emmett presa del pánico pero sólo me encontré con la mirada burlona del gigante, su sonrisa condescendiente y un saludo de despedida con la mano.
Prácticamente Edward me subió a empujones al descapotable y antes de darme cuenta de qué estaba ocurriendo él ya estaba detrás del volante.
¿Cuándo me había puesto el cinturón?
Intenté hablarle pero el rugido de su coche al girar la llave en el contacto ahogó mi intento. Me miró.
-¿Querías un artículo? –movió la palanca de cambios.
Las sirenas sonaban más fuertes.
-Tendrás tu artículo –añadió.
Luego todo lo que pasó fueron las calles a una velocidad vertiginosa.
En aquellos momentos sólo podía pensar en una cosa. Iba a morir con Edward Cullen.
Y por algún motivo la idea no me resultaba tan desagradable como me empeñaba a creer.
______________________________________________________________________
Bueno, pues esto es todo por ahora. Que tal el inicio? Tengo que decir para aquellos que no lo sepan que un "prefacio" no es un prólogo, sino que es como un adelanto de algo que ocurrirá.
Así que en algún capítulo que aún no está escrito esto mismo aparecerá en un contexto que os ayudará a entender qué está pasando.
De momento, espero que os haya gustado.
Por cierto, os propongo un trato. En cada capítulo os diré las páginas de word que me ha ocupado escribirlo y esperaré al menos tantos reviews como páginas escritas para la actualización, ¿os parece bien?
Ahora mismo esto son dos páginas, por lo tanto, espero dos reviews para actualizar (pero si enviais más mucho mejor para mí :D)
Espero leeros pronto, un besito y sed felices!!!
