Bueno, les presento mi nueva historia :DD yeaaah! puro cerebro.. :D en fin, les comento que no es puro dramatismo.. solo algunos capitulos D: en fin... lean

Inuyasha, Kagome, Sango, Miroku, Shippo, Kirara y toda las demas bola de personajes xD no me pertenecen :D si no a ... a... Rumiko Takashi :D yeeeah! esa mujer es fasinante ;) jaja
xD ya lean... muaaaaaaaaa T.T!

Imperfectamente perfecta

Sumary: ¡Debes ser perfecta como tu hermana! –Se abrazo a si misma mientras las lagrimas bajaban por su mejilla –Te amo –susurro extasiada. Cerro sus ojos con fuerza apretando sus puños -¡Te esta engañando! –grito desesperada. El la ignoro –madre –murmuro -¿Te das cuenta quien es la perfecta ahora?

Cáp. 1: Perfect

La gente pasa y pasa. Rápido. Lento o corriendo, mientras que yo, permanezco en el mismo lugar siempre, observándolos, tratando de averiguar, que es lo que los hace poder moverse con libertad sin ser perseguidos o amenazados. Envidio, envidio sus formas de vivir la vida, su vida… mientras que yo, solamente vivo una vida que no es mía, si no la vida que desean para mí. Y, por más que deseo hacer la contraria no puedo…

Me reprochan…

– ¿¡como eres capaz de avergonzarme así!? ¿Acaso no tienes corazón? –Cerré mis ojos con fuerza, mientras tragaba con dificultad el nudo que estaba en mi garganta -¡Te crié todos estos malditos años ¿para que ahora, vengas y me avergonzaras de esta manera?-siguió gritándome –Me das vergüenza, eres una vergüenza…

Me pegan…

– ¡Con un demonios niña! Es la tercera vez en esta maldita semana que los directivos llaman a esta casa para decirme que mi hija, mi perfecta hija se queda dormida en clases o dibuja tonterías…-me regañaba, sentía su furia, la sentía, su cara estaba roja, sus ojos salidos y las venas de sus cuello se podía notar completamente.

– Los siento, juro que no lo volveré a hacer… -trate de disculparme, en realidad trate, pero ella no entendió. Vi con miedo como levantaba su mano derecha y me golpeaba la mejilla con toda la furia que tenia. Quede con la cabeza ladeada y los ojos cerrados, mientras que mi mejilla estaba la marca de su dura mano.

– Eso te enseñara a no avergonzar a tu familia con tus idioteces…

Tendría que enorgullecer a mi familia como se debe, y también hacerlos feliz con mis avances, pero en vez de eso, lo único que hago siempre es avergonzarlos, cada día me hundo mas yo, junto con ellos. Me siento una inútil, soy una inútil y por mas que piense que esta vida no fue echa para mi, tengo a alguien, y ese alguien es mi madre, que, a pesar de los tratos, ella me da una razón para seguir viviendo la vida que ella me Eligio y como tal, debo aceptarla.

Soy feliz, en realidad si lo soy, tengo amigas, grandes amigas, las cuales quiero ser como ellas algún día. Son como modelos a seguir y yo, soy el aprendiz. Siempre las observo con admiración, por que se lo merecen, aunque, a veces me dejan sola, en realidad, lo comprendo, por que no siempre van a poder estar conmigo y esa es la verdad.

– ¡Higurashi! –grito pegando con una vara sobre la mesa el profesor. Yo pegue un respingo y lo mire asustada –Usted… ¿tiene un problema en el oído o mental? –pregunto fiero. Los que estaban a mi lado comenzaron a reír, a reírse de mí, como siempre -¡Hace una hora que la estoy llamando! –estallo.

– Lo siento, estaba distrai…

Nuevamente pego con la vara sobre la mesa, un golpe en seco, en donde, por centímetros casi me pega en la mano.

– Me canse de sus… Estaba distraída, lo siento profe –imitaba mi voz con burla. Yo baje la mirada avergonzada -¿Sabe que? Llamare a su madre –sentencio.

Cerré mis ojos con fuerza y suspire.

Nuevamente iba a avergonzar a mi madre. Soy una idiota. Me odio.

O.o

Todos pasaban por mi lado, algunos empujándome, con o sin querer, yo simplemente los ignoraba, pero más tiempo los ignoraba, más peso tenia sobre mi espalda. Suspire con fuerza antes de bajar las escaleras, y entonces siento, como si alguien me tironeara de la vena que esta entre el tobillo y las piernas, y, como si no fuera poco, mi pierna dejo de funcionar, haciendo que cayera al suelo de costado, con todos los papeles desparramados por el suelo.

Todos me vieron, pero me ignoraron. Nadie me ayudo. Pisaron mis hojas en las que estaban las tareas obligatorias, pero eso a nadie le importo. A nadie le importo. Sentí un dolor interno en mi pecho y por un momento me sentí cansada, pero no podía tirarme allí y descansar, debía continuar. Me levante con pesar mientras juntaba algunos papeles y finalmente, termine de bajar las escaleras, sintiendo todas las miradas burlonas sobre mí.

Salí lo más rápido que pude al patio, en donde por fin, estaría con mis amigas. Sonreí al verlas sentadas en medio del patio. Me acerque a ellas y me senté aun lado de Kagura.

– Hola –salude animadamente. Todo lo sucedido anteriormente se me borro de la mente y solamente, en ese momento, podía estar feliz de poder estar con ellas.

– Eem… si, Hola Higarushi –me devolvieron el saludo las tres. Kagura, Kanna y Kaguya.

– Higurashi –les corregí sonriendo. Las tres me miraron de reojo y continuaron con la charla que mantenían, aunque hablaban muy bajito y yo no lograba escucharlas. Saque la hoja de matemáticas, que estaba toda doblada y sucia. Suspire comenzando a arreglarla. Kagura, que estaba a mi lado me observo hacerlo y luego sonrió.

– Siempre tan torpe Higarushi… -me reprocho con un suspiro Kagura. Yo hice una mueca y continué con mi trabajo. Escuche una breve risita por parte de Kanna, pero no le di importancia.

– Bueno, por lo menos esta limpia –murmure.

– Ahí, pero creo que ahí… hay una mancha –dijo Kaguya. Yo la mire.

– ¿Dónde? –le pregunte.

– Ahí –respondió Kanna tirando su gaseosa sobre las hojas.

– ¡Que has hecho! –exclame horrorizada salvando a las hojas.

– Lo siento –murmuro con pesar Kanna. Yo la mire derrotada –Fue un accidente y…

– Te perdono –le interrumpí. Las tres sonrieron –Los accidentes pasan –la tranquilice. Aunque me faltaba a mí alguien para tranquilizar los gritos del profesor.

O.o

– ¡Estupida! –grito pegándome la mejilla izquierda. Apreté mis puños con fuerza, no podía mirar a los ojos a mi madre, me sentía apenada. Mordí mi labio inferior al sentir que latía con fuerza, ya que estaba aguantando las ganas inmensas de llorar, pero no lo haría. Nunca lo haría -¡¡Nuevamente me avergüenzas!! –Grito caminando en círculos frente mió -¡Debería de mandarte con tu padre a Europa!, pero nooo… el señor no quiere por que trabaja mucho –echo una maldición por lo bajo, paro en seco y me miro furiosa -¿Qué problema tienes conmigo? –me pregunto mas o menos tranquila. Yo la mire sorprendida.

– Nin-ninguno –balbucee.

Ella pareció no escucharme.

– Claro, como yo no soy una madre perfecta tu te vengas ¿es eso? ¿Me avergüenzas por no ser perfecta? –pregunto acercándose a mi. Yo negué.

– Claro que no madre…

– Eh echo todo lo posible por criarte educadamente, en un ambiente familiar, para que tú seas perfecta y todos te amen –sollozo. Tenía un nudo en mi garganta que me dolía demasiado. Intente acercarme a mi madre, pero ella me pego en la mano y nuevamente me aleje -¿Y como me lo agradeces? ¡Comportándote como una maldita cría! ¡¡Tienes diecisiete malditos años!! –estallo nuevamente furiosa. Yo di un paso hacia atrás asustada –Kagome, debería de echarte de esta casa, ahí veces y esta es una de las tantas, en las que digo… A quien grito y pego no es mi hija, si no una cualquiera –sentí mi sangre congelarse y mis ojos humedecerse -¿Por qué no puedes ser como tu hermana? –me pregunto haciendo un ruido extraño con su nariz.

– Lo intento…

– Con intentarlo no basta… ¡Debes ser como ella! –grito.

– Somos distintas –murmure entre cortado.

– ¡Son iguales! –Contradijo -¡por dios! ¡¡Son gemelas!!

– Tratare de hacer todo lo posible por parecerme mas a ella –susurre. Mi madre pareció no convencerse.

– No debes tratar, debes hacerlo… -dijo ya más tranquila acariciándome la mejilla. Yo la mire melancólicamente –Algún día me lo agradecerás –murmuro dulcemente –Ya veraz –dijo ultimo para darme un beso en la frente e irse hacia la cocina.

Yo suspire y me apoye contra la pared, dejándome caer hasta el suelo, en donde me sujete de las rodillas y apoye mi cabeza entre ellas.

Sentía todo mi cuerpo entumecido, cada día que pasaba menos sentía los golpes de mi madre, pero esos días se sumaban y aunque sentía mi cuerpo entumecido, aun podía sentir el peso que llevaba en mi espalda y el dolor que habitaba en mi pecho… pero nada podía hacer, era mi destino. Si mi madre quería que sea perfecta, entonces…

Perfecta seria…

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¿Es dramatico? A que si... jaja... Kagome amiga de Kagura? ahi deos.. ensima.. Kikio ermana de Kagome? todo un re kilombo es.. jaja :D aguarden el sig. cap!

Por cierto, los demas capis seran aun mas largos...

Sanyo!

'Si pudiera soñar... soñaria contigo' Edward Cullen 'Crepusculo'