Capítulo 1 "El día en que surgió la duda"

Y ahí estaban…

Lavi y Allen, mirándose con sorpresa e incredulidad mientras sus cuerpos sufrían los golpes de la vida

¿Cómo habían acabado así? Uno encima de otro, mientras libros y libros los rodeaban y algunos seguían cayendo de los estantes

Había sido un momento, un segundo en que las hojas llenas de textos les habían demostrado que la sabiduría pesaba… y mucho

Quizá había sido el viento, la gravedad, o una cruel y sádica broma del destino

Estaban en la biblioteca

Allen había ido a buscar a Lavi para almorzar juntos; y en el momento en que se marchaban, un estante sufrió los efectos de la gravedad:

Se vino abajo

Pero claro: no conformándose con eso, el mueble amenazó con caer encima del albino… y a punto de llevárselo consigo a la tumba, Lavi intervino empujando a su amigo

Cayeron un par de metros lejos

Ninguno se había dado cuenta: era más notorio el dolor de la caída que la posición o el modo

Sin embargo, estaban condenados a percatarse tarde o temprano… así que, abriendo sus ojos lentamente, dieron cuenta a la realidad

Lavi… encima de Allen… sus manos colocadas sobre las del menor… las piernas del Walker estaban MUY abiertas… ¡y claro! El pelirrojo terminó acomodado entre ellas…

Esto ya parecía malo… pero bien se dice que las cosas pueden resultar peor

Y éste fue el caso…

Sus labios estaban unidos… fundido en un roce comúnmente llamado "beso"

Pero… ¿eso era realmente un beso?

Allen no tuvo tiempo de pensarlo: era más impactante la situación que cualquier otra cosa…

Esa calidez, la textura… el toque que sentía sobre sus labios era… era…

No tenía palabras para describirlo

Y tampoco era como si lo hubiera pensado demasiado…

Se limitó a sentir esa presión…

Pero claro, no quitaba la cara de incredulidad, y aunque hubiera querido hacer lago, como aventar a Lavi o apartarlo, el cuerpo se le congeló

¿El motivo? Tal vez por el dolor… o el impacto… o la emoción…

Sólo Kami-sama supo

También la respiración se le aceleró… y sus mejillas se tiñeron de un marcado carmín…

Los olores, las sensaciones… la realidad resultó impactante para su cerebro de adolescente…

Y cuando estuvo a punto de hacer algo… aunque no estaba seguro de ese "algo", el pelirrojo rompió el contacto

-¡Lo lamento, Allen! –dijo enseguida - ¡No era mi intención! ¿Estás bien?

No era su intención…

Vaya, esas palabras sí que tenían sentido… y lamentablemente mucha…

De un momento a otro se vio ayudado por su amigo: le tendió la mano y lo levantó

-¿Estás bien? – volvió a preguntar

-Si… si, estoy bien – respondió en un susurro – No te preocupes… -de pronto, sintió una punzada de dolor en la cabeza - ¡Auch! – se llevó la mano a ese lugar

-¡Oh! ¿Te duele? –su mano fue sustituida por la de Lavi -¡Lo lamento! ¡No quise que esto pasara!

Así que no quería…

Suponía que era normal, después de todo, ¿Quién querría caer al suelo y golpearse el cuerpo?

Sin embargo… gracias a esa caída… logró sentir los labios de su amigo…

-¿Allen? Allen, ¿estás escuchándome? –fue devuelto a la realidad por esa palabras

-¡Si! ¡Estoy bien! – sonrió –No es nada… supongo que fue el golpe

-¡Obvio! – se veía preocupado; luego dirigió su vista al estante caído – Por culpa de esa cosa tuve que lastimarte

Por culpa de un mueble…

El destino podía ser sádico a veces…

-Pero bueno… -continuó Allen –Vayamos a desayunar, ¡tengo hambre!

-¿En serio estás bien?

-Ya te dije que si – caminó a la salida – Vámonos antes de que la gravedad haga otra vez de las suyas

-Tienes razón

Y salieron de la biblioteca

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Durante el camino, Lavi no dejó de disculparse: que por la caída, de que lo lastimó, etc. Etc. Etc.

Por supuesto significaba que se arrepentía del beso…

No es que lo hubieran comentado directamente, pero si se arrepentía de la caída, era lógico pensar que también del beso, ¿no?

Beso…

¿Eso había sido un beso?

¿Qué por accidente sus labios se unieran significaba un beso?

¿Qué era un beso?

Cuando pensó en ésta pregunta, ya llegaban al comedor

El pelirrojo corrió rápidamente hacia una mesa y apartó los lugares

-¡Encárgate de la comida! –gritó como si nada -¡Ya sabes lo que me gusta!

Bien… había vuelto a su estado natural: feliz y animado…

Como si nada hubiera pasado…

Pero pasó, ¿no? Se habían besado… accidentalmente, claro, pero besado a fin de cuentas

¿Pero eso fue un beso?

Llegó con Jerry y pidió lo que su "fino" paladar le solicito, y también pidió algo para su amigo

Mientras lo preparaba, dirigió su vista hacia el aprendiz: jugaba distraídamente con uno de sus mechones de cabello mientras recargaba su quijada en la mesa…

Lucía normal…

Demasiado normal…

Suspiró…

¿Es que… acaso ese beso no significó nada para él?

¡¡¡Pero no fue un besoooooooo!!

¿O si?

Bueno, independientemente de que fuera un beso o no, ¿es que no pensaba si quiera un poquito en eso?

Pero no había motivo para que lo hiciera…

Entonces, si Lavi no lo pensaba, ¡¿Por qué él si?! ¡¡¡AAHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!! (grito desesperado) ¡¡ERA PATÉTICO!!

-¡Listo, Allen-kun!- gritó de repente Jerry -¡Aquí tienes tu desayuno y el de Lavi-kun!

-Gracias

Tomó la comida y se dirigió a la mesa

-¡Oh! ¡Déjame ayudarte! –se levantó el pelirrojo

-¡No hay problema! ¡Puedo hacerlo!

-¡Nada de eso! –tomó los platos – Seguramente sigues lastimado, ¡no permitiré que empeores!

Y, por supuesto, al momento de coger la comida, Lavi rozó su mano con la del albino… quien solo pudo estremecerse

¿Pero por que?

Miró dócilmente cómo su amigo llegaba a la mesa y depositaba los platos en el mueble…

Todo esto era… extraño…

Cuando sintió ese toque… se congeló…

Pero no como en la biblioteca

Sólo era un ligero escalofrío, una chispa diferente… un roce que sensibilizó su piel

Eso y nada más

Entonces, ¿Por qué, en la biblioteca, se sintió diferente?

OK, poniéndose un poco más racional, tenía entendido que los labios son piel, es decir, no es como si fuera diferente de la piel de su mano, o de su pierna, u hombro, o cualquier parte de su cuerpo

Sus labios sentían dolor, el aire, la humedad… Era normal la sensación en ellos, ¿no?

Entonces… ¿Por qué…?

¿Era por que había sido un beso?

¡¡¡PERO NO LO FUEEEEEEE!!!!

¿Qué era un beso?

¿Era el toque de los labios contra algún objeto?

¿Era el toque de los labios contra otros por accidente?

¿Qué era un beso?

-¡Allen! –gritó el pelirrojo -¿No piensas venir?

-¡Oh, si! ¡Claro! –corrió a tomar asiento –Lo lamento

-Te quedaste ido

-¿Eh? -¿lo había notado?

-Si… tu mirada estaba perdida – le miró seriamente –Tal vez el golpe de tu cabeza es más serio de lo que creí

-¡No! ¡Claro que no! –sonrió nervioso -¡Ya te dije que estoy bien!

-No lo creo…

De repente, sintió la mano de Lavi sobre su mejilla

Un notorio sonrojo apareció en ella

-No quiero arriesgarte –dijo en un susurro; luego sonrió -Prométeme que, en cuanto acabes de desayunar, irás a la enfermería a que te revisen

-Pero… -sentía su cara arder

-Prométemelo…

Oh Dios…

-De acuerdo –desvió la mirada –Lo prometo

Sonrió, y retirando su mano prosiguió a desayunar

En cuanto a Allen… seguía confundido

Ahora ese toque le hizo sonrojar y estremecerse mucho más

Pero no como en la biblioteca…

¡¡¡¡AAAAAAAAAHHHHHH!!! (otro grito desesperado) ¡¿Por qué seguí recordando eso?! ¡Era patético! ¡Ridículo!

-"No fue un beso" – trataba de convercerse –"¡No fue un beso! ¡No lo fue!"

¿O si…?

¿Qué era un beso?

-Allen…

Tenía que averiguarlo

-Allen…

Tenía que saber qué era un beso

-Allen…

Sólo así podría juzgar si lo que pasó entre Lavi y él había sido… uno…

-¡Allen!

-¿Eh?

De pronto, se vio separado del rostro del pelirrojo por un par de centímetros

-¡Kya! –saltó instintivamente hacia atrás-¿Qué… que pasa?

-Más bien, ¿Qué te pasa a ti? – volvió a mirarle feo -¿En verdad estás bien?

-¡Claro que si! – una gotera cayó por su cabeza -¡Estoy bien! Sólo pensaba…

-¿En que?

No… imposible… era ridículo…

No podía preguntarle al aprendiz qué era un beso…

Eso lo delataría por completo…

¿Delatarlo? ¿Y por que abría de delatarse?

Oh, si, claro: delataría que sólo se la pasaba pensando en ello…

¡Oficial! ¡Era patético!

-¿Y bien? – continuó Lavi -¿En que piensas?

-Yo… - era definitivo: no podía preguntarle –Nada… no es importante… -sonrió –Sólo olvídalo ¿quieres?

-Mmmmm… no me convences… – el menor tragó en seco – Pero dejaré de insistirte: si dices que no es nada, entonces te creeré

-Gracias

Continuaron desayunando

Walker recuperó el apetito y se dedicó a ingerir sus alimentos… si no, lo más probable era que Lavi lo sometiera a un interrogatorio intenso…

Y estaba demasiado preocupado como para soportarle

¿Preocupado? ¡¿Ahora estaba preocupado?!

Suspiró largamente…

Esto asunto no iba a desvanecerse como si nada de su cabeza…

Pero entonces, ¿Qué hacía?

Sólo una cosa: tenía que averiguar qué era un beso… lo que era, lo que significaba, y como se llevaba a cabo

Así sabría si lo que pasó entre ellos fue "un beso"

Aunque esa no era la única duda que tenía…

¿Por qué… le había… gustado esa presión sobre sus labios?

¿Era porque fue un beso? (en caso de que haya sido)

¿Era por la sorpresa?

O…

¿Era porque se lo había dado Lavi?

Esta última cuestión fue la que terminó por llevarlo a la desesperación

No… eso era imposible… ¡No podía ser! ¡Eso no!

El "beso" pudo gustarle por muchas razones (que aún no tenía claras) ¡Pero no podía ser por eso! ¡No! ¡Era ridículo! ¡Era imposible que le haya gustado porque Lavi se lo dio! ¡¡NOOOOOOOOO!!

-¿Allen? –le habló de repente el susodicho -¿Allen?

-¿Eh?

-Otra vez estabas pensativo – sus ojos se volvieron dos estrellitas resplandecientes –Incluso dejaste de comer

-¿Ah, si? – miró la mesa: casi todos los alimentos seguían en sus platos –Bueno…

-¿En que piensas? -seguía mirándolo macabramente – Debe ser ago serio si hasta dejaste de comer

Tenía que admitirlo: estaba preocupado… ¡Pero obviamente no se lo iba a decir! ¡Eso sería suicidio! ¡Todo menos eso!

-Supongo… que sí es serio… -suspiró – Se me quitó el hambre… -se levantó –Mejor me voy…

-¡Entonces voy contigo!

-¡No! –lo detuvo antes de que se pusiera de pie -¡No lo hagas! Que yo no coma, no significa que debas hacer lo mismo –sonrió ampliamente –Tú continua…

-¿Pero que hay de ti?

-No me voy a morir por no desayunar una vez – caminó a la salida –Te veo luego

-¡Recuerda que debes ir a la enfermería! ¡Me lo prometiste!

-¡Si! ¡Si! – movió la mano en señal de despedido -¡Lo haré!

-¡Pasaré con la enfermera a preguntar si fuiste! ¡Te lo advierto!

-Lo que digas

-Si me entero que no… ¡No dudes en que yo mismo te llevaré! ¡Me conoces! +w+

Y así se retiró del comedor…

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Caminaba silenciosamente por los pasillos… y claro que no iba a la enfermería (obvio); el golpe en la cabeza sí le dolía… pero no era para tanto…

Eran más importantes otras cosas

Bien, bien: había huido del comedor… ¿pero con que objetivo?

Mmmmm… básicamente porque estar con Lavi lo ponía nervioso y pensativo de sobremanera…

Cada que lo veía sentía un dolor en el estómago y la cara caliente… las piernas le temblaban y tenía ganas de vomitar…

Estos síntomas los presentaba desde hacía unos meses… y el asunto de la biblioteca los agravaron más… ¿Por qué?

Se detuvo y sentó en el suelo

Estas cosas eran demasiado complicadas…

Llevó los dedos a sus labios y los acarició: pensar que tuvo la oportunidad de sentir los de su amigo… por accidente, claro, pero eso no importaba…

Que rayos estaba diciendo, ¡claro que importaba! ¡Si había sido un accidente no contaba como beso! Porque, si pensaba con lógica, Lavi jamás se lo daría a propósito…

Esto, por alguna extraña razón, lo hizo sentir… miserable

Pero… aún sí fue un accidente, era un beso a final de cuentas

Bajó la cabeza, resignado

No podía seguir dándole vueltas al asunto… terminaría por sufrir una crisis nerviosa y caer en coma permanente

Pero no podía… ¡simplemente no podía olvidarlo!

Es que esa presión había sido tan… maravillosa… con todo lo que la acompañó: las miradas confusas, la mejillas sonrojadas, el calor de sus cuerpos juntos…

-¡¡¡Ahhhh!!! ¡¡NOOOOOOOOO!! – se dijo -¡No pudo seguir así! ¡No! ¡Debo dejar de pensar en eso! ¡Soy un maldito pervertido!

Ninguna clase de regaño mentar iba a hacer que lo olvidara… y por el bien de su salud tenía que obtener una respuesta…

Tenía que hablar con alguien… bueno, "hablar" era un concepto muy comprometedor, asó que sólo iba a preguntar

Preguntaría "¿Qué es un beso?"

Con eso debía ser suficiente

Pero… ¿A quien…?

Pensó con detenimiento: no podía consultarlo a con cualquiera… debía ser a alguien de confianza, y discreta también…

Suspiró… ya sabía a quien… pero…

¡¡¡Arggghhhh!!! ¡Era humillante! ¡Se estaría rebajando completamente! ¡¿Cómo iba a llegar, y de repente, a preguntar eso?! ¡¡NOOOO!!

-¡Ja! –se levantó precipitadamente -¡Ya es tarde para pensar así! –se dio unas palmaditas en las mejillas –Acabemos con esto de una vez…

Y trazó su rumbo hacia la derecha