SS No me pertenece!

HASTA LUEGO

Hoy tuviste un enfrentamiento con Shura, el Caballero de Capricornio. Parece que desde hace tiempo se traen ganas. Y no precisamente para ser más que amigos. Eso me pone de buenas…me pone de malas que alguien como Shura pueda sacarte a ti de tus casillas. Que no puedas controlar tu ira, ni tu enojo siendo quien eres. Yo no puedo hacer eso, a duras penas te arranco una sonrisa, y cada que lo haces….por los Dioses… me pierdo en ella y en esos ojos tan profundos que tienes.

Cuando estamos juntos desahogas esa frustración conmigo, a duras penas logro sacarte unas pocas palabras, si toco el tema te pones a la defensiva y me dices que "no vale la pena, pues te pondrás de su parte" casi con rencor. Si eso sucediera, créeme, sería porque estás obrando mal. Pero yo solo te quiero escuchar, quiero oír tu voz, aunque sea para hablar de alguien más, y no de mí, de ti o de nosotros…

No sé qué ocurrió Camus, pero hoy tu actitud me dejó sin palabras. Entre tú y yo, sabemos quién es el infantil, al que le cuesta poner en perspectiva la situación y el que hace berrinches. Tú siempre te has distinguido por tu elegante comportamiento, por tener ese frío carácter al que no le afecta nada. Y me pone celoso que a alguien como Shura, que no es tu amigo, ni tu enemigo, que solo es tu compañero de armas… le dediques tanto tiempo y tanta energía. Pero me irrita más el creer que él podría acabar con mi ilusión. Mi ilusión de que estés conmigo. Aunque sea como amigo, yo sé que jamás me verás como otra cosa.

Subo a tu casa, pues me he enterado de que estás bastante molesto y que te piensas marchar. ¿A dónde vas? ¿Qué ha pasado? ¿Tienes una misión y Shion te ha mandado? Conociéndote, no bajarás por las doce casas… así que será mejor que me apure.

-Camus.-

-Dime.-

-¿Está todo bien?-

- Sí-

-¿A dónde vas?- pregunto con timidez, algo nada característico en mi.

-No sé.-

-¿Hyoga?- Intuyo que algo grave pasó.

-No.-

-¿Vas a una misión?- Pienso que entonces algo te hizo molestar demasiado… y creo que ha sido Shura.

-No.-

-Cam…-

-¿Qué Milo?-

-¿Regresarás?-

-No sé.-

Tu falta de palabras me hacen pensar que no quieres hablar conmigo. Trato de entender lo que piensas, pero no puedo… no puedo creer que exista una persona que haya podido enfurecerte así. ¡Alguien finalmente tocó tu corazón! No sé si alegrarme de que sea coraje lo que sientes…no estaría bien.

Vas bajando las escaleras… ahora recuerdo que habíamos quedado de salir al día siguiente al pueblo y relajarnos un rato. Pasar un tiempo juntos y platicar. Se nota que no tienes idea de lo mucho que me gusta estar contigo.

-Camus…- Antes de que contestes con otro monosílabo que solo herirá mi corazón prosigo.-Solo… ten cuidado…-

Creo que no entendiste mis palabras, me respondiste solo con un ceño fruncido, y estoy ahí, frente a ti, observándote y analizando tu actitud. Espero que me preguntes algo… "¿Cómo te fue Milo?" o "Te veré mañana en el pueblo." Hoy era un día importante para mí, y lo olvidaste. Pero soy tan idiota que ni siquiera me atrevo a contarte que Shion me dio permiso de salir del Santuario para buscar a mi hermana.

-Cuídate bicho.-

Te veo bajar las escaleras y no miras atrás. ¡Qué daría por tener tu frialdad Camus! Así me evitaría este sufrimiento. ¿Qué acaso no te importo? ¿No somos amigos? ¿No te vas a despedir de mi?

Tu casa está vacía. No sé cuando te vuelva a ver. Ni siquiera me diste tiempo para darte las gracias por siempre ayudarme, ni para decirte lo mucho que te quiero. Me vas a hacer mucha falta Camus. Tu hielo calmaba el fuego de mi corazón. Tu hielo… se convirtió en mi fuego.