"Las dudas sentimentales de "Julieta"" : Por Hermi20-Bergdora.
Nota de la Autora: Muy buenas a todos, soy Hermi20, apodada como Bergdora en otros foros y páginas y me puedo considerar ya una escritora habitual de yaoi.
Quizás algunos me recordéis de un antiguo fic( en el que tenía unas faltas de ortografía horribles si cabe decirlo y era muy inexperta) llamado: Amor en luna llena.
Era un Sirius&Remus, y para mi alegría tuvo mucho éxito, la verdad.
Pero bueno, no estoy aquí para hablar de mi viejo fic, sino del nuevo FIC, nunca he hecho un Harry&Draco, pero este va a ser el primero y espero que os guste.
Advertencias:
- Me encanta el realismo así que habrá en ocasiones momentos en que no me contendré a la hora de mencionar escenas "algo" sexuales.
- Será un fic dedicado a un "8º libro", como una continuación a la muerte de Voldy, pero, sin los muertos habituales, jeje, imaginad que Dumbledore y compañía no hayan muerto.
- Simplemente, espero que os guste.
- ¡DEJEN REVIEWS, PORFAVOR!
La invitación- Capítulo 1º
Hacía mucho tiempo que Harry no dormía tan tranquilo como aquella noche.
Todo había acabado, Voldemort había muerto y se disponía a pasar sus vacaciones al completo en la madriguera Weasly.
Soñaba dulcemente con abrazos reconfortantes cuando Ron lo sacudió con fuerza para despertarlo.
-¡Harry!, ¡Buenos días!- Ron chillaba como poseso, molestando al adormilado muchacho de pelo negro, que cumplía ese mismo día 18 años.
- Ron… no me molestes, por favor- se escondió debajo de la almohada el muchacho de ojos verde esmeralda.
- Todos esperan abajo, Harry, levántate- lo destapó totalmente y el chico no tuvo más remedio que despertarse.
- Te espero en el comedor – Ron que ya estaba vestido, una camiseta roja y un pantalón de rayas fluorescentes, bajó veloz por las torcidas escaleras.
Harry se miró al espejito de la habitación, se lavó la cara mientras profería un bostezo sonoro y peinó un poco su pelo.
En pijama aún y sin acordarse de que día era, bajó con parsimonia al comedor.
- ¡Felicidades Harry!- todos aplaudieron allí, rodeando la mesa.
Harry se despertó de sopetón, sus ojos verdes se abrieron con ilusión al ver rodeando la mesa y mirándolo a una veintena de rostros conocidos: Sirius, Remus, Tonks (n/a: Tonks y Remus no están juntos en mi fic, jeje ), los Weasly al completo, Luna, Hermione y Neville.
- Pero… yo… ¡Gracias!- se le iluminaron las irises de tanta emoción.
- No todos los días uno cumple 18 años, eres un hombre Harry - sonrió la señora Weasly mostrándole una silla.
Hubo una especie de pelea cuando todos se abalanzaron contra él intentando besarlo y darle su particular regalo.
Molly puso orden, ante el gesto de Sirius, que quería ser el primero en darle su regalo y felicitación a su ahijado.
- Con orden, con orden…- la mesa estaba llena de vasos, platos, cubiertos y un delicioso desayuno: Tostadas, bocadillos, pastelitos y un grandioso pastel de chocolate y fresa en el que la cara de Harry y un enorme número 18 se movían en la superficie del pastel.
Se sentaron todos a tropel, le cantaron el cumpleaños feliz y antes del desayuno le fueron entregando uno a uno los regalos de cumpleaños.
- Para ti Harry- Sirius lo sonrió, y Harry abrió veloz un pequeño paquete que contenía un lujoso colgante de oro blanco.
- Dios Sirius- se sorprendió el chico- esto es un regalo muy caro- se avergonzó.
- Nada mejor para mi ahijado y el chico que nos salvó de Voldemort, ¿no te parece? James le regaló a tu madre una parecida cuando se hicieron novios.
Harry lo abrazó, pero el abrazo no duró mucho, pues todos querían darle sus regalos.
El enorme pastel echo por Molly peligraba con caer al suelo, cosa que preocupaba a una roja señora Weasly.
- ¡El de Hermione y mío!- Ron luchó para dárselo, Harry rió complacido mientras desenvolvía un regalo cuadriculado que resulto ser un enorme álbum de fotografías.
- ¿es un álbum con nuestras fotos? – sonrió Harry.
- Si- sonrió Hermione- espero que te guste.
Harry se abalanzó contra sus amigos besándolos y abrazándolos.
- sois los mejores…
Ron se puso tan rojo como su pelo, no quería emocionarse delante de todos.
Hermione lloriqueó.
- Es una lástima que el año pasado no pudiéramos disfrutar de Hogwarts,- sollozó- pero bueno, fue por una buena causa.
El moreno entristeció por un instante.
- por culpa de Voldemort, el año anterior no pudo volver a Hogwarts a cursar su 7º y último año, eso lo frustraba pues daría todo el oro del mundo por poder volver una vez más junto a sus amigos.
Ginny lo sacó de sus pensamientos.
La chica pelirroja le dio una postal de corazón y una caja mágica que al abrirla unos labios rojos salían de ella y lo besaban en la mejilla, luego se evaporaban.
La chica lo sonrió y Harry se sonrojó, aún no había hablado con Ginny, no sabía si iban a continuar su relación, en esos momentos no había pensando en eso, ni en aquel momento ni en todo el verano.
Remus le regaló un protector de varita nuevo de piel, los señores Weasly un pantalón vaquero típico muggle muy de moda: desgastado y de pitillo.
Neville, un enorme paquete de golosinas mágicas, Luna un cuerno muy raro que le salían flores y ramitas ( Hermione lo miró escrutadora)Tonks una camiseta de los Chuddley Cannons y los gemelos un lote de sus nuevos productos Weasly.
- Bueno, creo que después de tanto regalo- ayudó a Harry a dejar los paquetes en una silla- ¡comamos!
El hambre se vio reflejada en que todos engulleron con un ansia tremenda.
Harry devoró pastelitos y se puso nervioso al tener que cortar parte de su cara del enorme pastel de chocolate.
Cuando todos hubieron comido y la mesa se fuera recogiendo por arte de magia, Arthur vislumbró que un gran número de lechuzas se acercaban a la ventana.
- Mira Harry, ahí tienes más cartas- le dijo al chico.
Y era verdad, ya que la mayoría de cartas, menos tres que eran para Ron, Hermione y Ginny, fueron depositadas sobre la mesa de madera.
Dejaron que fuera Harry quien las abriera e hicieron un corro tras él para leer a la par.
- Esta es de Dumbledore- sonrió el chico- me manda felicitaciones y…- miró dentro del paquete enviado, sacó una nota color verde y un paquete que parecía contener líquido y cristal – me manda una botella de whisky de fuego ¡Jajá!- rió.
Sirius agarró la botella, de color dorado y plata.
- Joder, pues si que es bueno este whisky, yo también quiero- hizo un puchero.
Remus lo sacudió en la cabeza.
Harry, divertido, miró la nota verde, un simple "Felicidades Potter ", estaba escrito con tinta negra y estaba firmada por Severus Snape.
-¿Snape? –hizo una mueca Ron.
-Vaya…- Sirius rió- parece que Snivellus si que tiene un corazoncito- ju,ju.
-¡Si lo tiene!- lo defendió Harry, que un mes atrás pudo ver el pensadero de Snape (n/a: recuerdo de nuevo que Snape y compañía estarán vivos, es que no quiero que estén muertos, jaja)- él amaba a mi madre y a querido ayudarme.
Sirius ladeó la cabeza molesto, Harry dejó el tema aparte al sacar otra carta del revoltijo.
- Hagrid me envía felicidades y caramelos de sangre de dragón, dice que cura resfriados e infecciones.
Hermione y Neville se mostraron curiosos con ellos.
Cuando leyó la siguiente carta, una que venía también de Hogwarts, pero como orden oficial, Harry pegó un grito.
-¿Qué pasa? – se preguntó Hermione, Harry estaba blanco como el papel.
El chico le mostró a Hermione la carta, que la leyó en voz alta.
- El colegio de magia y hechicería… bla, bla, bla… tras los oscuros acontecimientos…bla, bla, bla… ¡OS DA LA OPORTUNIDAD DE VOLVER ESTE AÑO A HOGWARTS PARA PODER RECUPERAR EL 7º AÑO EN HOGWARTS!
Harry, Ron y Hermione dieron un salto y se abrazaron con fuerza.
Harry no lo podía creer, podían volver a Hogwarts, como si nada hubiera pasado, tener un curso en paz de una vez por toda.
Hermione y Ron comprobaron que en sus cartas decía lo mismo, Neville se puso triste, ¿y si a él no le habían mandado esa carta a casa?
Luna lo consoló, ella cursaría también 7º ese año, y Ginny también.
- Abre la siguiente Harry, también es de Hogwarts- lo animó Fred.
La siguiente carta también tenía sorpresa, ya que dentro de ella había una nota explicativa y un billete de color rojo.
Era un billete de tren, para sorpresa de Harry.
- Expreso Nocturno, a Hogwarts- levantó una ceja-¿pero…?
Hermione le arrebató el papel, aunque ella también tenía que tener una igual.
- Aquí dice que han substituido el Expresso normal por uno de noche- leyó asombrada- que ahora viajaremos de noche para llegar temprano y descansados a Hogwarts y allí pasar un día entero de descanso antes de comenzar el día siguiente las clases- la castaña estaba maravillada, abrió rápido su sobre y cogió su billete.- el mío es rosa.
Ron también lo abrió y contempló un boceto de la distribución del nuevo tren, Los gemelos se quejaron ya que ellos también querrían ir.
- El tren separa a chicos y chicas por arte de magia y mediante departamentos, los departamentos constan de 4 camas, que se invocan mediante un sencillo hechizo, la cena es gratuita en el tren y el desayuno también- Ron iba a ponerse las botas.
Harry acabó de leer.
- Nos esperan en King cross el día 31 de Agosto, dentro de un mes, a las nueve de la noche, a esa hora parte el tren- miró su billete – mi compartimento es el 38, ¿ el tuyo Ron?
- Igual que el tuyo, ¡Menos mal!, ¿el tuyo Hermione?
- El mío es el 11, cama 02.
- Y el mío el 13, cama 04- sonrió Ginny.
- Espero ir con alguna de las dos- sonrió Luna.
Las chicas se sonrieron.
- si es cuatro viajeros, nos faltan dos compis- dijo Ron- espero que nos toque alguien que nos caiga bien.
- Eso espero- suspiró Harry.
Quedaron en silencio, cada uno contemplando sus billetes, Lupin avisó a Harry que le quedaba una última carta por leer.
Harry, sorprendido, no sabía quien más podría haberlo escrito.
La carta era de un color negro elegante y era escrita con una curvada letra en plateado.
Un sello familiar le hizo refrescar la memoria.
- no puede ser…- la abrió rápido y leyó para si.
Estimado señor Potter,
La familia Malfoy, le felicita gratamente el día de su 18º cumpleaños, y se complace en invitar a usted y a todo invitado que desee de su agrado, a una gran fiesta de reconciliación y paz que queremos celebrar.
Mi mujer, Narcisa Malfoy, mi hijo Draco, y yo, cabeza de familia, estamos en deuda con usted por la ayuda mostrada a mi hijo anteriormente en la encarnizada deuda, y como mago, me rindo ante usted para darle las gracias.
El que no debe ser nombrado a desaparecido gracias a usted, me libera de su mandato y mi familia, lo que más amo esta a salvo.
Lo esperamos esta noche, en la que ya conoce, Mansión Malfoy con toda nuestra ilusión.
Atentamente,
Lucius Filius Malfoy.
Se hizo el silencio, todos querían saber que pasaba, pero Harry recapitulaba con bastante lentitud lo que había leído.
Una imagen de la familia de Draco, y el mismo Draco en sí ¿lo iban a recibir en su casa?
La confusión y la desconfianza surcaron en él mientras dejaba la carta a un Sirius nervioso.
Black aulló, y Harry no dejó de cavilar.
- Los Malfoy nos invitan a una fiesta esta misma noche…
CONTINUARÁ.
n/a: Bueno, es el primer capítulo, es normal que no haya mucha acción, más bien es una introducción de lo que se va a cocer, que es mucho … jujuju
Harry en una fiesta de los Malfoys.
Harry se encontrara con Draco.
Un expresso de Hogwarts nocturno, jujuju
Y…
Bueno, creo que ya he dicho mucho, aunque queda mucho más, pero claro, puedo que el título del fic os solucione también más cosas.
El próximo capítulo de "Las dudas sentimentales de "Julieta", pronto en espero REVIEWS ¿ eh? Y opinad todo lo que queráis, que pase en el fic, entre Draco y Harry… ¡Lo que sea!
Me despido solemnemente,
Hermi20-Bergdora.