Saldando Cuentas II:
La Venganza Final
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Parecía muerta ¿no?, pero no, no fue así. De hecho ese balazo me puso en coma. Un coma que me absorbió por 4 años. Desperté, y empecé lo que ustedes llamarían como una sangrienta venganza. Sentí mucha satisfacción cuando mate a toda esa gente sin piedad. Pero falta una sola persona, el ultimo, el único que queda, tengo que matar a…
Capitulo 7.- El Comienzo
El incidente que ocurrió en la masacre de la capilla de Hong Kong, donde inicio toda esta sangrienta historia, se convirtió en una leyenda "La Boda Sangrienta", ese fue el nombre que le pusieron los diarios y televisiones. ¿Qué paso? ¿Quién estuvo? ¿Cuántos murieron? ¿Quién los mato?, varían dependiendo de quien cuente la historia, pero no tienen una respuesta concreta.
Lo curioso es que la masacre no era en una boda, era el ensayo de una boda.
-Cuando diga Puede besar a la novia, usted puede besar a la novia, pero no se atasquen- decía el reverendo haciendo estallar en risas a los jóvenes que se encontraban ahí. – Seria muy vergonzoso para sus padres.
-¿Quieren alguna canción en especial?-decía un hombre sentado en la esquina de la capilla.
-Puede elegir la que sea Sr. Kishi- dijo el novio.
Todo iba bien hasta que la esposa del reverendo menciono a la familia.
-Serena ¿Estas segura de que no quieres invitar a tu familia?
-No se preocupe, Sra. Irasue, pero mi familia viaja constantemente, será algo difícil comunicarse con ellos- decía la joven.
-Sra. Irasue –decía una joven en una silla detrás de la novia –Nosotros seremos la familia que este angelito necesita.
La joven les dio una mirada cómplice y volteo a ver a las 3 jóvenes que estaban atrás –Eri, Ayumi, Yuka ayúdenme a salir de aquí, esta anciana me esta empezando a hostigar y espero que pueda salir a respirar- decía mientras se levantaba y salía hacia la puerta.
-Disculpé Sra. Irasue, pero Serena necesita salir- decía Yuka
-En vista de que esta delicada – decía Ayumi, parándose para poder dejar salir a la novia.
-Usted sabe no, por lo de su embarazo – decía Eri
La novia salía victoriosa hacia la salida, para poder toma un poco de aire. Mañana cambiara su vida y la de su bebe. Pero eso pensó hasta que escucho una canción muy conocida para ella (*)
Se acerco con paso decidido hacia la salida y observo a la persona que estaba sentada en el pórtico y se paro a su lado.
Lo miraba fijamente hasta que el decidió levantar su mirada, y ella lo reconoció de inmediato. Era él, no había duda.
-Pudiste encontrarme, ¿Qué estas haciendo aquí?- intentando sonar lo menos sorprendida.
-Perdón, pues estaba tocando la flauta y de un momento a otro, estos ojos han visto a la novia mas hermosa.
-¿Para que viniste?
-Solo a decirte adiós, Kagome.
-Ya te dije, que tu lado gentil, es el mejor.
-Tal vez, por eso eres la única que sabe que tengo ese lado.- analizo a la joven que se encontraba en frente de él. – ¿Hace cuanto que llevas esperando?
-Unos meses. Tendré una hija. ¿Ya viste a su padre, Hojo?
-Si, que distinguido. ¿Qué profesión tiene tu novio?
-Es dueño de una tienda de discos.
-Fantástico. ¿Cuál es tu trabajo hoy en día?
-Lo ayudo en su tienda.
-¿Y te gusta?
-Es encantador. Ahora oigo música todo el día. Es maravilloso. Es un buen ambiente para un bebe, ¿no crees?
-En vez de viajar por el mundo y matando personas. Pues es tu decisión. No interferiré. Pero quiero conocer al hombre que logro cautivar tu corazón.
-¿Vendrán a mi boda?
-Creo que tú sabes bien quienes vendrán.
-Sera muy poca gente.
-Siempre fuiste algo solitaria, pero estaré siempre de tu lado... Sabes, tuve un sueño…
-Mira- dijo fingiendo alegría –Ahí viene Hojo, llámame Serena- esto ultimo lo dijo en un susurro llevando al joven a presentarle a Hojo.
-Tú debes ser Hojo Nabamura, es un placer conocerlo. Serena me ha contado mucho sobre ti.
-Serena- decía Hojo algo confundido -¿Quién es el?
-No te preocupes, es mi hermano Yue Sakasagami.
-Estoy encantado señor. Serena dijo que no podría venir.
-Es que estuve viajando por el continente, pero llegue hoy mismo. Bien dejemos de hablar de negocios, ¿Cómo van las cosas aquí? Creo que hoy es la boda
-No señor, hoy es solo el ensayo.
-De veras, pues no entiendo como Serena tiene puesto su vestido de novia
-Es que- dijo Kagome –Hojo dijo que para que usarlo solo una vez
-Y usted joven, ¿No cree en la superstición de ver a la novia con el vestido?
-Bueno, yo creo en la adrenalina.
Pero el reverendo los interrumpió, diciendo que era el momento de empezar.
-Porque no se sienta un momento
-Claro que si.- decía mientras pasaba a sentarse y veía como Kagome iba directo al altar, pero vio que se detuvo un momento y regreso.
-Quiero decirte que…
-Tú no debes de decir nada cariño. Si es la vida que deseas, no la dejes escapar.
-Arigato- decía mientras lo besaba por última vez y él le ponía el velo.
Y volvió al altar, y él solo se sentó, esperando el momento en que la acción comenzara.
El ensayo comenzó, pero fue interrumpido cuando 4 personas llegaron al lugar, 3 mujeres y un hombre. Todos voltearon a verlos, pero Kagome puso una expresión pálida cuando sacaron varias armas de sus espaldas.
-¿Sango-ni-san?- dijo Kagome antes de que todos empezaran a disparar y los gritos se escucharan por toda la capilla.
Hubo disparos… luego un silencio… después pasos… y por ultimo… un disparo.
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5 años después.
-Me estas diciendo que termino con los 88 maniacos y después con Sango, a eso le llamo sangre fría- decía un joven sentado en una casa rodante y bebiendo cerveza son la persona que estaba a su lado.
-No, dejo con vida a algunos. Pero si, Kagome liquido a Sango, cortándole su cabeza. Con una katana de Totosai-Sensei.
-Mph, ¿te estas burlando de mi? Hace años que Totosai-Sensei dejo de forjar katanas. Vaya que es cierto lo que dicen de nosotros. Somos muy rencorosos jajaja.
-Tal vez lo que te preguntare sea muy ridícula, pero ¿Aun practicas con tu katana?
-Que tarde llega esa pregunta amigo. La vendí.
-¿Vendiste una katana de Totosai?
-Bueno, necesitaba dinero para mujeres. Además ya no lo necesito. Termine mi deuda contigo, así que ahora trabajo de vigilante en un bar.
-Deberías de dejar de tomar la vida como un juego, y empezar a tenerle mas respeto a Kagome, porque ella viene hacia Osaka a asesinarlos.
El joven se quedo quieto mirando a la persona enfrente de él. –Yo no la evadiré, pagare mi equivocación, como te lo dije antes. Esa chica merece su venganza y nosotros merecemos morir. Así que, veamos que sucede al final.
El atardecer se acercaba y el joven se tuvo que despedir.
-Cuídate mucho primo- decía mientras entraba a la casa rodante.
-Tú también cuídate, Miroku- decía la otra persona antes de subir a su auto e irse.
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Konichiwa aquí les traigo la nueva parte, espero que no los haya dejado decepcionado es que tuve un problema En pocas palabras esta deprimida Bueno, si. Pero si me dejan un review mejorare en un abrir y cerrar de ojos.
Espero luego pasar por sus historia, pero no tengo tiempo asi que pase dentro de poco tiempo.
Sayonara