ENCERRADOS:
El equipo de Natsu, Lucy y Happy partieron en una misión para pagar el alquiler de la rubia. Caminaban por un sendero cerca de una selva lluviosa, Natsu adelante algo animado junto con Happy sobrevolando a su lado, un poco más atrás la rubia se encontraba dentro de horologium cabreada del viaje, ya que les había tomado más tiempo, por que a Natsu lo habían arrestado por andar prendido en fuego en medio de un festival de primavera, pasando a quemar varios puestos de comida. Lucy al recordarlo movió la cabeza en modo de reproche. Natsu no necesitaba mucho para enojarse pero… enojarse por que un chico le cedió el asiento en un local ya era demasiado y no eran nada aparte de nakama… espera, pensó la rubia. Y si al fin Natsu sentía algo por ella?... no eso era imposible o no?... lo probaría haciendo un pequeño experimento, pensó sonriendo maliciosamente para si misma.
-Natsu?~dice ella-hablo horologium, Lucy en el interior miraba algo nerviosa la espalda del pelirosado, que se había quedado parado y dándose vuelta para saber que pasaba con una de esas sonrisas que la dejaban sin habla-
-Que pasa?-pregunto alegre el muchacho.
-Falta mucho?~dice ella- vamos Lucy tu puedes haci comprobaras si es cierto o no, se dijo a ella misma- es que necesito volver rápido a casa tengo una cita el sábado y no quiero cancelarla de verdad me gusta… el chico-lo dijo decidida, pero el semblante de Natsu cambio repentinamente de alegre a descomunalmente enojado, un aire asesino se apodero de él aciendo que Lucy temblara un poco.
-Ya no falta tanto!-grito colérico, dándose la vuelta-maldita sea…-maldijo por lo bajo, lo cual Lucy alcanzo a escuchar haciendo que una sonrisa brotara en su cara.
Su pequeño experimento había salido intachablemente bien, ahora tendría que averiguar como hacer para que Natsu se lo dijera o ella tuviera valor para confesarse, aunque todavía no tenía muy claro lo que él sentía por ella, quizás solo era amistad. Bajo la cabeza un poco triste pero no le duro mucho ya que a horologium había empezado a hablar.
-Lucy-sama tengo que irme-dicho esto desapareció yéndose al mundo espiritual, dejando a Lucy en medio de un charco profundo.
-Maldita sea!-grito esta, enojada mientras se paraba. Natsu se dio vuelta, colocándose rojo a más no poder, dirigiendo su mirada a la parte baja de la chica. Lucy al notarlo lo miro extrañada pero luego se dio cuenta de que con la caída, el agua había mojado su falda levantándola y pegándola en su ombligo, dejando ver su ropa interior que a la misma vez se traslucía. Pintada en rojo, dio vuelta su cara mientras bajaba rápidamente la falda- mmm… na-na-naaatsu-tartamudeo- quiero cambiarme me puedes dar un poco de privacidad- sin decir nada Natsu corrió a un zona donde no la pudiera ver para así dejarla sola, pero aun rojo por la vergüenza.
Prov Natsu
Escuche el sonido del agua, al darme la vuelta Lucy estaba parada con la falda mojada… pero estaba levantada, dejando ver su hermosa piel y su ropa interior que se traslucía. Al ver esto mil imágenes de la rubia se me pasaron por la cabeza, en donde posaba sexymente, incitándome a hacer cosas con ella que nunca antes había pensado. Por esa razón mi cara se puso de color carmesí, no pude dejar de mirar esas piernas que me llamaban a tocarlas, pero… PARA EL CARRO NATSU!... ella es tu nakama no puedes pensar en eso o si?... no! Eso esta mal en todos los sentidos yo no soy un pervertido como Gray…. La voz de Lucy me saco de mis pensamientos, pero haciéndome sonrojar aun más.
-mmm… na-na-naaatsu…quiero cambiarme me puedes dar un poco de privacidad- su mirada estaba hacia otro lado casi igualmente sonrojada que yo, obedecí inmediatamente pero tenía demasiada vergüenza como para mirarla a la cara o por lo menos responder.
Pare de correr cuando mis pulmones me dijeron que lo hiciera, pero la vergüenza seguía presente en mi cara. Respiraba agitadamente, seguía pensando en Lucy de esa forma ¿que era lo que me estaba pasando?, yo nunca antes había tenido ese tipo de fantasías, con nadie esta era la primera vez y era con mi mejor amiga?... no puedo creer que lo pervertido se pudiera pegar. Levante un puño, maldiciendo mentalmente a Gray por haberme pegado ese mal hábito. Pero me asaltaron las imágenes de Lucy con poca ropa, un pequeño hilo de sangre me saco de estos. En ese momento Lucy y Happy aparecieron, intente limpiarme disimuladamente pero mi compañero se dio cuenta, riendo por lo bajo, doy gracias a dios de que Lucy estuviera viendo hacia otro lado, pero me di cuenta de que todavía estaba un poco sonrojada. Caminamos hasta una ladera o más bien un risco, que tenía una aldea cerca.
-Pero como se les ocurre colocar una aldea tan cerca de un acantilado, ni yo soy tan idiota- apuntando con ambas manos hacia el risco y después a la aldea, dije sin pensar mis palabras y me di cuenta de que me había insultado, pero antes de que pudiera corregirme Happy se estaba burlando de mí.
-Pero si te insultas solo- soltó una carcajada, lo que me hizo enfurecer. Empecé a reclamarle, pero me di cuenta de que Lucy estaba callada y petrificada mirando hacia un lugar a lo lejos, pare de pelear con Happy para mirar hacia donde lo estaba haciendo ella y quede de la misma forma que ella.
Había una imponente montaña en donde se encontraba una escultura de porte real de un dragón, tan grande como Igneel, pero tenía algo diferente, tenía las alas semejantes a las ramas de un árbol, de color verde claro, en la cabeza resaltaba un signo parecido a la de una semilla extraña y su cola estaba adornada por enredaderas que la hacían tener una potente presencia. Sentí una leve esperanza, quizás esas personas podrían decirme acerca de si habían visto a más dragones, podría empezar a buscar a Igneel de nuevo pero esta vez con Lucy.
Mire hacia todas partes pero no había movimiento alguno, Lucy me toco el hombro haciendo que me diera vuelta, su cara estaba asustada y en sus ojos húmedos, lagrimas exigían salir con urgencia, Happy que estaba abrazado a ella lloraba en silencio cerrando sus ojos con fuerza. Me apunto hacía una parte en especifico detrás de la estatua, sintiendo una gran punzada de rabia he impotencia al tiempo que miraba una pila de cadáveres, hombre, mujeres y hasta niños totalmente desangrados, en una especie de circulo, con montones de diferente tipos de arbustos extraños que no habíamos visto en el camino. Me sorprendí a tal grado que no me di cuenta de que Lucy estaba abrazada a mí llorando a mares, se aferraba fuertemente ocultando su rostro en mi pecho. Instintivamente la abrace y acaricie su pelo suavemente. La impotencia me tenia controlado al igual que Lucy apreté mis ojos con fuerza pero yo no lo hacia por que me haya impactado la escena que tenía en frente si no que más por que perdí una oportunidad de encontrar a Igneel.