Sus padres la habían obligado a ir a un estúpido campamento de verano porque decían que debía salir de casa, conocer a gente, hacer amigos...porque estaban preocupados por ella, desde aquel incidente, no había vuelto a salir de casa, pero ella había aceptado por contentarles, así que allí estaba ella preparando su maleta para pasar todo el verano en el campamento. Cuando cerraba la cremallera de la maleta llamaron a la puerta
-Se puede,-pregunto su madre desde el otro lado de la habitación
En ese momento, antes de contestar se tapó rápido las muñecas con las mangas de su camiseta para ocultar las cicatrices que ella misma se había echo y luego contesto:
-Si, mama pasa.
-Cariño...-se acerco su madre
-Es tarde para convenceros de no ir?
-Si, vas a ir, debes entender que queremos lo mejor para ti, queremos que disfrutes, debes salir, hacer amigos, hacer lo que hace la gente de tu edad, disfruta, pasalo bien
-Deje de comportarme como una niña de 14 años desde aquel estúpido día.-contesto ella al borde de las lágrimas y se dirigió al baño de su habitación cerrando la puerta tras si, se dejo caer en ella resbalando hasta sentarse en el suelo y luego abrazo sus rodillas u poso su cabeza en ellas y empezó a llorar.
Al cabo de unos minutos se recompuso un poco, se lavo la cara para borrar las marcas de las lágrimas y salio de nuevo, se sentó en la cama y se vistió para ir al campamento.
Llevaba el pelo recogido por dentro de una gorra de visera plana de "Obey" negra con las letras y la visera en azul celeste (sus colores favoritos) una camiseta ancha de Nirvana(era como dos tallas mas grandes) y unos pantalones desgatados y rasgados, además de sus zapatillas favoritas unas All Star negras. Se puso además sus cascos y algún que otro pearcing que tenia en la oreja derecha. Echo un ultimo vistazo a su habitación observando que no se dejaba nada y cogió una de las cuchillas con las que se auto-dañaba y la guardo en la maleta oculta entre sus ropas.
Bajo las escaleras y sus padres ya estaban esperándola, se montaron todos en el coche y pusieron al campamento que estaba al otro lado de la ciudad.
-Katie- le dijo su padre- veras como lo pasas bien
pero ella estaba ausente, no hablo durante todo el trayecto, solo miraba por la ventana,
Cuando por fin llegaron sus padres bajaron la gran maleta que llevaba ya que pasaría en ese campamento todo el verano, en la maleta estaba dibujada la bandera de Londres, le encantaba esa maleta. Su mochila, que inmediatamente se colgó en un solo hombro, se despidió de sus padres prometiéndoles llamarles todos los días y a su madre que intentaría hacer amigos y pasarlo bien aunque ella sabía que no lo intentaría, no quería que le volvieran a hacer daño, si alguien queria hablar con ella y ser su amigo sería amable pero ella no quería hacer el esfuerzo de acercarse a la gente, aunque claro eso a su madre no se lo dijo.
Volvieron a abrazarse entro al recinto donde pasaría su verano, se acerco a los monitores, dijo su nombre y pregunto por cual seria su cabaña, cuando llego había una chica de piel morena, de la misma edad que ella suponía preguntando,
-Hola, Soy Kate,-le dije a uno de los monitores-¿Cual va a ser mi cabaña?
-Hola Kate, yo soy Pablo , monitor, tu cabaña es la número 47 y la compartirás con esta chica, dijo señalando a la morena.
-Hola, soy Lanie, encantada-dijo tendiéndome la mano
-Hola, dije sin levantar mucho la mirada del suelo- Kate.
Y me dirigí a la cabaña numero 47 no sin que antes el monitor nos diera el calendario de lo que haríamos, el primer día lo teníamos libre, Bien, pensé, podre estar todo el día encerrada. Y ahora si me dirigi a la cabaña sin hablar mas con nadie.