"Solo otra noche"
N/A: Mis estimados lectores, quisiera informar que hace mucho tiempo que no he escrito nada para Kung Fu Panda, siendo este "drabble" mi primer fic de esta franquicia desde hace más de dos años. Espero que lo disfruten como yo lo he hecho escribiéndolo y si les ha gustado, comenten.
Nunca están demás las críticas constructivas, jajajaja. Sin más que decir, los dejo con la historia.
"Este fic participa en el Reto "San Valentín en Kung Fu Panda" del foro "Kung Fu Panda Unidos"
No era novedad que Tigresa anduviese de malas pulgas por esas fechas. Faltaba tan solo una semana para El Gran Festival del Día del Amor y la Amistad y ya sentía la necesidad de que la tierra se la tragase. Para su suerte, los maestros del Palacio de Jade serían los anfitriones del festival ese año. Todos estaban felices por la fantástica noticia, especialmente el Guerrero Dragón quien bailaba por toda la Sala de los Maestros estrujando a sus compañeros entre sus brazos.
-¡Pon atención, panda! Este Festival es una tradición muy importante y todos aquí queremos que salga lo mejor posible-.
-No tiene por qué decirlo, maestro. Todos aquí estamos listos para que salga de lo más bárbaro ¿Verdad muchachos?-. El resto de los Cinco asintió, todos menos uno ¿Eh… dónde está Tigresa?-. Tigresa se había esfumado de la sala. Shifu vaciló con una mirada frustrada.
-Ese día siempre le trae malos recuerdos, Po- dijo Víbora colocándose a su lado. Po creía entender lo que pasaba con su amiga, por lo que decidió ir en su búsqueda.
-Maestro, chicos… déjenmelo a mí. Tengo una gran idea-. Dicho esto, Po salió corriendo en busca de la felina dejando a todos intrigados ¿Qué estaría tramando?
Tigresa se hallaba sentada bajo el Durazno con la mirada perdida en el horizonte. Tras escuchar los pasos de alguien, cambio completamente su semblante.
-¿Qué quieres, Po?-. Po se descubrió con una sonrisilla forzada. Los ojos de la maestra indicaban de sobra que quería estar a solas. Pero eso no impidió que el panda se sentara a su lado.
-Ya veo que no te gusta esto del Día del amor y la Amistad ¿Por qué?-. Ella lo miró indiferente.
-¡Que va! Solo es un festival… solo otra noche-. Su mirada se tornó lúgubre.
-No creo que solo sea eso ¿Sabes? Siempre quise participar en el baile del gran festival-. Tigresa volvió a mirarle, esta vez curiosa –Pero nunca me fue tan bien con las chicas- terminó diciendo con una pata detrás de la nuca -Pero quisiera que este año fuera diferente... incluso para ti-. Ella volvió a mirarle de pies a cabeza
-¿Por qué siempre logras convencerme de todo?-. Po la tomó del hombro, riendo suavemente.
-Porque somos amigos, Tigresa-. La felina asintió y tomó la pata de su compañero quien le ayudó a levantarse para luego emprender camino hacia el palacio.
Una semana después
Todo se hallaba listo para el festival: los puestos de comida, los juegos para los niños, los fuegos, todo. Los maestros se encontraban reunidos en una gran tarima donde compartían con invitados de otras regiones de China. Frente a ellos, una gran pista de baile. Todos disfrutaban de la fiesta pero Po notó que Tigresa se sentía frustrada. Sin ningún aviso, la tomó del brazo y a la vista de todos, la sacó a bailar.
-¿Po... qué haces?- decía ella anonadada.
-Solo es mi regalo del Día del Amor y la Amistad-. Tigresa estaba más que sonrojada pero aun así se dejó llevar por el momento mientras que los demás miraban boquiabiertos, especialmente Shifu.
No lo hacían nada mal para su primera vez. Tigresa sentía como le revoloteaba el estómago.
-Gracias, Po-.
-¿Por qué? Si tan solo es otra noche- dijo éste sonriendo
-No... no lo es-.